Era increíble como todo podía cambiar en un día.
El día anterior, ChanYeol despertó sintiéndose horrible debido a su monótona rutina. Hoy todavía se sentía horrible, pero por una razón distinta; completamente distinta, pero no mejor.
Se había dormido la noche anterior rogando que todo hubiera sido sólo un sueño, pero, ¿a quién quería engañar? El universo era cruel de todas formas.
Como si su mañana no pudiera ponerse aún peor, su hermana irrumpió gritando en su habitación. “¡Levántate y brilla, nuevo novio!”
ChanYeol gruñó. No necesitaba que alguien se lo recordara. “Noona, por favor detente.” Dijo con voz plana y sin emoción.
“Hoy es el primer día de tu último año, no puedes llegar tarde.” Avanzó hacia la cama de ChanYeol y tiró del chico para que se levantara. “Ve a ducharte, desayuno es huevos con tocino, tu favorito.” Dijo con una mueca.
ChanYeol sólo asintió y entró al baño. Era como el día anterior, la mayor parte del tiempo no sabía qué estaba haciendo, era casi como si estuviera en modo piloto automático; se duchó, se vistió, tomó desayuno, se despidió de su hermana, y caminó a la escuela sin estar realmente consciente de lo que hacía.
Fue sacado de la profundidad de sus pensamientos por la ruidosa voz de JongIn en sus oídos. “¡Hey, ChanYeol hyung!”
El nombrado se detuvo sorprendido cubriéndose la oreja izquierda, víctima de JongIn y sus gritos. “¡JongIn, ¿qué demonios?!”
El menor se rio mientras tiraba de KyungSoo para que estuviera más cerca, y sólo entonces el más alto notó que el chico también estaba ahí. Los tres estaban en la entrada principal de la escuela, otros estudiantes pasaban con sonrisas en sus rostros, algunos estaban nerviosos quizá por ser de primer año; pero todos se veían realmente emocionados.
“Estás un poco ido, hyung, ¿estás bien?” Preguntó JongIn mientras ponía su brazo alrededor de su novio, quien tenía una sonrisa en forma de corazón en sus labios.
“Quizá sólo está pensando en su futuro es-”
“¡Kyungie!” Lo interrumpió JongIn.
“¡¿Le dijiste?!” ChanYeol los miró sorprendido.
“Hyung, no es como tú piensas. Kyungie, ¿por qué dijiste eso? ¡Hyung! ¡Hyung!” JongIn comenzó a correr tras ChanYeol, quién ya los había dejado atrás con extraña rapidez. Ya estaba harto de toda esa porquería de su futuro esposo, no necesitaba algo así en su vida.
O quizá sí.
“Hyung, realmente lo siento.” JongIn había logrado alcanzar a ChanYeol y comenzó a balbucear sus explicaciones, pero al alto no podría importarle menos. Dependía de su amigo si quería hablar sobre él con su novio a sus espaldas.
Continuó caminando hacia el edificio, creyendo que JongIn y KyungSoo lo estaban siguiendo; pero luego notó que JongIn ya no estaba gritando, ni siquiera hablando. ChanYeol giró para ver por qué el silencio, pero sólo vio a su mejor amigo parado sin hacer nada.
JongIn tenía la boca abierta, sus ojos estaban muy abiertos y competían contra los de KyungSoo. Su novio fue hacia él tocando su hombro. “JongIn-ah, ¿qué sucede?” Le preguntó.
En ese momento, ChanYeol estaba regresando hacia el par, curioso respecto al comportamiento del chico. “Hey, ¿estás poseído o algo?” Le preguntó en tono burlón mientras picaba la mejilla de JongIn con su dedo.
“H-hyung…” JongIn tartamudeó mientras levantaba una mano temblorosa y apuntaba a algo detrás de ChanYeol. “Él es-está detrás de ti.”
El mayor giró la cabeza alrededor, buscando a quien fuera que JongIn estuviera señalando. “¿De quién estás hablando?” Y un segundo después, el mundo de ChanYeol se detuvo cuando sus ojos captaron al chico que había aparecido en sus sueños la noche anterior. “Qué mierda…”
Era el chico futuro esposo.
¿Quién más podría quitarle el aliento a ChanYeol en ese momento que no fuera él? El chico estaba de pie en la entrada tan perfecto como la primera vez que lo vio; todavía con aquel hermoso, corto y suave cabello magenta, todavía con esa piel perfecta, y demonios, esa sonrisa era tan resplandeciente que sentía la necesidad de desviar la mirada. Pero, ¿qué estaba haciendo en la escuela de ChanYeol? Esperen, ¿estaba usando el uniforme de la escuela?
“¡Santa mierda! ¡Hyung!” JongIn golpeó el brazo de ChanYeol. “¿Está en nuestra escuela también?”
El nombrado seguía sin poder hablar.
“¡Demonios! ¿Es esto alguna clase de obras del destino o fortuna? Hyung, esto es de locos, en serio creo que me podría desmayar en este momento.”
“Chicos, ¿de quién están hablando? En serio, estoy en blanco.” KyungSoo avanzó hasta quedar en medio de los dos chicos altos. “JongIn, ¿qué está mal con él?” Preguntó luego de notar el extraño comportamiento de ChanYeol.
JongIn miró a KyungSoo con corazones y brillos en sus ojos. “¡Es el futuro esposo de ChanYeol hyung!”
ChanYeol se estremeció ante las palabras del chico.
“¡¿Qué?! ¿En dónde?” Preguntó KyungSoo más emocionado que su novio.
JongIn volvió a señalar al chico en cuestión. “Ahí, frente al edificio, el pequeño, el de cabello magenta.”
KyungSoo dejó que su vista recorriera por todas partes, buscando la figura que JongIn describió. Cuando vio a alguien similar a la descripción, frunció el ceño y volvió a dirigirse a su novio. “JongIn-ah, ¿te refieres a aquel que está sujetando un papel?”
“¡Sí, sí! Ese.”
KyungSoo regresó su atención a los dos chicos junto a él. “JongIn-ah, ChanYeol-ah, él es presidente del consejo estudiantil.”
Ambos miraron a KyungSoo y gritaron al mismo tiempo. “¡¿Qué?!”
Un poco asustado por el grito de los chicos, KyungSoo respondió dudoso. “Sí, es el presidente del consejo estudiantil, BaekHyun, Byun BaekHyun.”
ChanYeol y JongIn estaban en algún tipo de estado de shock, pero el más alto de los tres tenía una sensación rara en el estómago cuando KyungSoo dijo aquel nombre. Finalmente sabía cómo se llamaba, y rayos, incluso su nombre era perfecto.
“¿Él es el presidente?” Volvió a preguntar JongIn, ignorando el hecho de que ChanYeol estaba ocupado pensando en cómo quedarían sus nombres si se casaban: Park BaekHyun o Byun ChanYeol. Ambos nombres sonaban increíbles.
KyungSoo asintió con certeza. “Sí, estoy seguro, fue elegido poco antes de las vacaciones, creo. Chicos, ¿en serio no sabían de él?” Los otros dos se mantuvieron en silencio, por lo que KyungSoo se dirigió a ChanYeol. “¿Él es tu esposo?
La pregunta del menor sacó a ChanYeol de sus pensamientos estúpidos, no era el momento de imaginar cosas bobas como esas. No podía ni debía imaginar cosas así, nada, porque no creía o no quería creer.
Pero al mirar la silueta del chico frente a él, todas las incertidumbres del día anterior, de anoche, e incluso las de esta mañana desaparecían, siendo reemplazadas por confusión y pánico.
“JongIn-ah…” Dijo débilmente ChanYeol.
Notando el estado de su amigo, JongIn inmediatamente se giró para verlo. “Hyung, no entres en pánico.”
“No lo estoy, es sólo que…” Sí, estoy en pánico. “Oh dios, quiero vomitar.”
“¡No!” JongIn sujetó a ChanYeol por los hombros e hizo que se mantuviera erguido. “No es necesario el pánico, sólo ve hacia él y preséntate.”
En medio de sus intentos por recuperar el aliento, ChanYeol se las arregló para contradecir las ideas de su mejor amigo. “¿Por qué debería presentarme? ¿De verdad crees que es mi esposo?”
“Sí, lo creo en un 100% y más.”
“Es imposible.” Volvió a responder ChanYeol.
“¿Qué pasa si es verdad?”
“Esas absurdas cosas no son siempre verdaderas, JongIn.”
“¿Qué pasa si es verdad?”
“No puedo creer que es mi futuro esposo sólo porque una adivina lo dijo.”
“¿Qué pasa si es verdad?”
“Mi alma gemela no puede ser elegida por una adivina.”
“¿Qué pasa si es verdad?”
“¿Qué pasa si está mal?” Gruñó ChanYeol.
“ChanYeol-hyung…” JongIn le dio una mirada seria. “¿Qué pasa si es verdad?”
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ChanYeol sentía su mente llena de niebla. Niebla que se llamaba BaekHyun.
Posterior a su pequeño debate con JongIn, trató de abrir su mente a distintas posibilidades; su mejor amigo tenía razón, ¿qué pasaba si BaekHyun se convertía en su futuro esposo? Pero, ¿qué pasaba si era un error? Qué pasaba si la vidente simplemente le jugó una mala pasada, aun cuando parecía imposible que ella hiciera algo así. Un sinfín de qué pasaba si aparecían en la mente de ChanYeol, evitando que se pudiera concentrar en lo que el director de la escuela había estado diciendo al resto de los estudiantes en el auditorio todo ese tiempo.
ChanYeol tomó asiento junto con JongIn, KyungSoo, Kris y el resto de los demás estudiantes de Yeolshin reunidos en el lugar para la ceremonia anual de bienvenida luego de las vacaciones de verano. No era algo tan especial, siempre era lo mismo; primero abría el coro de la escuela, cantaban el himno de la secundaria Yeolshin, luego el director decía “bienvenidos” a los nuevos y “esfuércense” a los de segundo y tercer año, finalmente la ceremonia finalizaba con el… el… el presidente del consejo estudiantil.
Oh, rayos.
Antes de que ChanYeol pudiera reaccionar a su reciente descubrimiento, pudo ver al director descender del escenario luego de finalizar su discurso, dando paso al maestro de ceremonia, cuya voz se escuchó fuerte por el micrófono.
“Gracias, Director Lee por el cálido discurso. Y ahora, es turno del presidente del Consejo Estudiantil de decir unas cuantas palabras, por favor, denle la bienvenida a Byun BaekHyun.”
Aun cuando ChanYeol estaba en estado catatónico, pudo sentir a JongIn golpeando su hombro. “¡Hyung!”
No necesitaba que JongIn hiciera eso para notar con sus propios ojos que BaekHyun estaba caminando hacia el escenario. Demonios, BaekHyun se veía súper sexy con uniforme, pero adorable a la vez. Cómo podía alguien ser tan perfecto.
BaekHyun golpeó el micrófono dos veces antes de mostrar una enorme sonrisa al público que tenía en frente.
ChanYeol se ahogó con su propia saliva.
“Hola, buenos días a todos, soy Byun BaekHyun.”
ChanYeol dejó de respirar.
Era la primera vez que escuchaba su voz, y era como beber Bubble Tea en un día caluroso, era dulce y refrescante. Le gustó tanto su voz, que no le importaba escuchar un discurso de todo un día con tal de que fuera BaekHyun el que hablase.
“Nos encontramos de nuevo luego de un maravilloso verano, ¿la pasaron bien en los dos meses de vacaciones?” Esperó por la respuesta de los estudiantes, y cuando el salón se llenó de gritos y exclamaciones de alegría, volvió a sonreír. “No tengo algo en particular qué decir, no soy muy bueno con las palabras, así que sólo me queda decir que realmente espero que este espíritu veraniego siga con nosotros hasta final de año, vamos a estudiar y esforzarnos mucho, todos juntos hasta el final de este año. ¡Muchas gracias a todos!”
El discurso de BaekHyun fue lo más destacado de la ceremonia a pesar de su duración, todos estaban emocionados por él y ChanYeol podía ver por qué BaekHyun se volvió presidente. Tenía un aura amigable y encantadora, era imposible no quererlo.
ChanYeol no perdía de vista ni un segundo al presidente, adorando cada uno de sus movimientos. No sabía si era obra del destino o fortuna, pero había desarrollado algo realmente intenso hacia el chico que sonreía felizmente al público. No le importaba si aquello tenía sentido o no, lógico o no, sólo quería seguir a su corazón e instinto en ese mismo instante. Un día lleno de incertidumbre era suficiente, y no sería capaz de soportar por más tiempo.
Mientras BaekHyun descendía del escenario con la sonrisa todavía grabada en el rostro, algo en ChanYeol le dijo que debía actuar ya.
Debía confesarse.
Antes de que supiera lo que estaba haciendo, sus piernas lo llevaron lejos de donde estaba, guiándolo hacia el lugar en el que BaekHyun estaba de pie.
“ChanYeol, ¿a dónde estás-?” Kris trató de detenerlo sujetándolo por la muñeca, pero falló.
El alto continuó caminando a través de la masa de estudiantes que comenzaban a salir del auditorio, chocó contra algunos, ganándose algunos insultos y miradas que lo juzgaban, pero lo único que le importaba era el pequeño chico. Algo bueno era que ChanYeol era un gigante, de modo que podía ver a BaekHyun claramente en la parte delantera del salón mientras que él seguía en algún lugar a mitad de camino. Se reprochó el haber elegido asientos en la parte de atrás.
Comenzaba a frustrarse debido a que la multitud parecía haber aumentado, lo cual aumentaba la dificultad aún más tomando en cuenta que estaba caminando en dirección contraria a la que los demás estudiantes avanzaban. Gruñó comenzando a desesperarse, pasó sus dedos a través de su cabello y antes de que su cerebro pudiera procesarlo, estaba gritando.
“¡BaekHyun!” Su voz se mezclaba con las otras y no alcanzaba a llegar al objetivo. Volvió a intentar. “¡Byun BaekHyun!” Todavía no alcanzaba a escucharse. Un último intento. “¡Byun! ¡BaekHyun!”
ChanYeol no estaba realmente consciente de que seguía en medio del auditorio con gran parte de los estudiantes aún dentro, y que BaekHyun seguía estando lejos. Lo olvidó. Pero al menos, obtuvo lo que quería. BaekHyun lo había oído, así como también el resto de los estudiantes, todos ellos.
Pero el chico estaba demasiado distraído e ido como para notar que todos los presentes lo estaban mirando en ese momento. Su vista estaba fija en BaekHyun, quien ahora también lo estaba mirando de vuelta; ChanYeol hizo caso omiso de su nerviosismo, apretó los puños, y comenzó a caminar hacia BaekHyun sin darse cuenta de que los estudiantes frente a él, literalmente, formaron un camino para él.
Todo el auditorio estaba en silencio, el único sonido audible era el de los pasos de ChanYeol sobre el piso, pero el chico seguía enfocado en la figura de BaekHyun y que cada vez estaba más cerca. De pronto, respirar se hizo difícil al estar justo frente al chico de cabello magenta; podía ver que el presidente lo estaba mirando con confusión pero seguía viéndose adorable y le costó a ChanYeol todas sus fuerzas para no abrazarlo.
Pero no fue suficiente para evitar que su boca dijera tonterías. “Hola… eh… soy Park ChanYeol.”
BaekHyun parpadeó un par de veces con la boca ligeramente abierta, luego sólo asintió.
ChanYeol tomó un respiro profundo porque las palabras que iba a decir podrían ser tomadas de buena manera o de muy, realmente muy, mala manera. “BaekHyun, sé que esto es bastante repentino y tú podrías no conocerme en absoluto, pero… soy tu futuro esposo.”
Sobre el salón cayó un silencio de muerte.
La boca de BaekHyun se abrió en sorpresa. “¿Q-qué?”
Y de esa manera ChanYeol simplemente perdió el manual sobre cómo cerrar la boca. “Sí, soy tu esposo, o sea… tu futuro esposo. Una adivina me lo dijo.”
“¿Qué?”
“No es que te lo esté proponiendo ahora, no, pero quizá podríamos salir primero y luego…”
“Espera, espera…”
“…Podríamos casarnos después de que nos graduemos de la universidad, así que…”
“… No entiendo…”
“¿…Saldrías conmigo?”
ChanYeol sintió el shock en cada uno de los presentes.
Mientras tanto, BaekHyun seguía profundamente confundido. Sus labios se abrían y cerraban, tenía el ceño fruncido, y ChanYeol realmente quería salir corriendo del auditorio y esconderse del resto del mundo por el resto de su vida. Pero lo que lo mantuvo de pie ahí fue que pudo ver como el rostro de BaekHyun gradualmente se relajaba y volvía a enseñar esa sonrisa a ChanYeol.
“Esta es la más loca, rara y única cosa que alguien jamás me haya dicho.” BaekHyun rio un poco y luego volvió a sonreír todavía con sorpresa en el rostro. “Pero supongo, que por ahora, mi respuesta es sí.”
Ahora era ChanYeol el sorprendido.
“¿En serio?”
BaekHyun tiró de la corbata de ChanYeol haciendo que estuvieran más cerca, y así poder hablarle al oído. “No quiero avergonzarte frente a toda la escuela, hablaremos de esto después, ¿de acuerdo?” Luego de que susurró aquello, soltó la corbata del más alto y se alejó no sin antes darle un guiño a ChanYeol.
Un segundo después, pudo oír a todo el auditorio rendirse al caos debido a los estudiantes murmurando, hablando y gritando sobre lo que acababa de pasar. “Eso fue tan dulce.”, “Oh, no, el presidente ya está tomado.”, “¡Felicitaciones, ChanYeol-ah!”, “De hecho, lucen bien juntos.”, “Esto será el encabezado en el periódico escolar mañana”, “Gran manera de empezar un semestre”, “¡Bien hecho, ChanYeol!” y muchos otros comentarios que ChanYeol ya no oía debido a la enorme sonrisa que BaekHyun le estaba mostrando.
Poco sabía ChanYeol de que sus acciones pasaría a ser la mejor declaración de la historia en la secundaria Yeolshin.
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