Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

MI DESTINO SIEMPRE FUISTE TÚ por Taoris4ever

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

La historia se me ocurrió cuando una de mis lectoras que ahora también es escritora me mando una imagen de una frase que le gusto y a mí también, y decidí hacerle un fic a esta frase y esta historia es resultado de eso.

La frase en la que me inspira es la única que no me pertenece, todo lo demás es de mi completa autoría, y tome los nombres de BTS porque me pareció que quedaría mejor con ellos.

FRASE: 

“Hace algún tiempo vi a mi hermano llegar enojado y diciendo que quería practicar box.

Le pregunte la razón y dijo: Hay un chico en la escuela que lo molestan por ser gay.

Hoy estoy sosteniendo los anillos de bodas de mi hermano y aquel chico”

Notas del capitulo:

HOLA...Mi primer fic de BTS, ya que los demás son de EXO kekeke....La verdad si les confieso algo lo iba hacer un TAORIS esta historia pero estoy tratando de dejar de hacer que Tao parezca débil, quiero que Tao se vea más independiente, valiente, menos indefenso y en mis próximos fics espero reflejar eso.

A LEER :3

MI DESTINO SIEMPRE FUISTE TÚ

Mi nombre es Kim Sun Hee y les voy a contar una historia muy interesante, puede que sea la típica historia de amor, o puede que sea una historia fuera de lo común, empezaré  por lo primero, para entender esta historia deben conocer parte de nuestra vida, soy la hermana menor de Kim Tae Hyung, nuestros días desde que nacimos siempre fueron normales y tranquilos.

Mis padres tuvieron en total tres hijos, yo, TaeHyung y mi pequeño hermanito fastidioso Kim Hyo Yoon, los tres nos llevamos bien ya que yo y mi hermano mayor solo tenemos dos años de diferencia, mientras que mi pequeño hermano Hyo tiene diez años de diferencia conmigo, sin embargo es el consentido de la casa.

TaeHyung es mi hermano favorito y siempre he estado con él en las buenas y malas, mientras fui creciendo junto a él no vi absolutamente nada que me dijera que mi hermano mayor haría una elección diferente cuando él fuera un adolescente todavía, cuando mi hermano llegó a los catorce años empezó a salir con chicas como cualquier persona de su edad y sexo, yo nunca note nada fuera de lo “normal” en él.

Crecimos en un hogar armonioso con sus problemas de veces en cuando pero nada que no se pueda superar, mis padres dos personas amorosas, libres de prejuicios y con mentes liberales nos enseñaron que nunca debemos juzgar a una persona sin importar lo diferentes que sean a nosotros y bueno crecimos de esa manera, nos ha ido bien en la vida por eso, y por esa misma razón cuando mi hermano tomo una decisión radical todos lo apoyamos.

A mis quince años tuvimos que mudarnos de ciudad por el trabajo de mis padres, fue difícil para mí y mi hermano mayor ya que significaba dejar toda nuestra vida armada atrás para comenzar en un lugar desconocido desde cero, pero no tuvimos otra opción, mi hermano menor al ser aun tan pequeño no le costó mucho adaptarse pero el caso de mi hermano mayor y el mío es diferente.

A ambos nos tomó dos meses adaptarnos y hacer amigos, con los cuales podíamos contar siempre, bueno eso parecía en ese momento, creímos que todo marcharía bien, hasta que un día vi llegar a mi hermano muy enojado del instituto, diciendo que quería practicar box.

Le pregunte la razón y dijo: “Hay un chico que lo molestan por ser gay”, quien hubiera pensado que con solo esa frase toda su historia hubiera empezado.

Hoy estoy sosteniendo el anillo de bodas de mi hermano y aquel chico, y estoy muy feliz por ellos.

Y hoy que es el día más especial para sus dos corazones profundamente enamorados, se me hizo inevitable recordar cómo comenzó todo. Así que les contaré su historia, les aseguro que les encantara.

.

.

.

.

.

.

POV TAEHYUNG

Suspiro cuando el profesor por fin ha salido del aula, es tan tedioso tener dos horas seguidas de matemática que ya todos estábamos rezando para que se acabara el mundo, creo, bueno exagero, pero yo si lo hacía, con tal de no seguir soportando a ese viejo cascarrabias.

Me desplomo sobre mi pupitre, con mi mejilla pegada a él y veo hacia la ventana de mi curso, es un día tan bonito, pero por alguna razón yo me siento desanimado.

De repente siento un pequeño golpe en mi cabeza, que no ha dolido pero finjo que sí, porque se perfectamente quien me lo ha dado, levanto mi cabeza del pupitre sosteniendo la parte golpeada.

– ¡Ya!, Jin-Ah ¿Por qué haces eso? –pregunto haciendo un puchero.

Él me sonríe –No te quejes, que no te di tan duro –Me quedó por un momento observando fijamente a Seok Jin, en específico sus dientes, trato de contener mi risa, muy mal disimulada por cierto,  ya que tiene una espinaca pegada en los dientes.

–Déjalo Jin, ya sabes que es una niñita quejumbrosa –dice Kim Nam Joon mientras pasa su brazo por los hombros de Jin, o mejor conocido como Rap Monster por nosotros, sus mejores amigos, bueno, yo solo he sido mejor amigo de este par de bobos desde hace dos meses atrás desde que me mude desde Anyang-Gwangcheon hasta la hermosa capital de Seúl.

Han sido dos meses difíciles llenos de adaptaciones, pero me alegra haber encontrado a dos tontos amigos que sé que a pesar de nuestras diferencias estarán ahí para mi si los necesito.

–Deja de estar volando pequeño TaeTae, o nos perderemos el receso –Me dice Jin desde la puerta del aula, llamándome con el apodo que él me puso desde el primer día que nos empezamos a llevar, según él porque es más fácil que mi nombre original.

–Está bien ya voy, ya voy. –digo levantándome de mi asiento y yendo con mis amigos, al llegar a lado de Jin le sonrió travieso–. Jin por cierto, me gusta el color del que te pintaste el diente, el verde te queda espectacular.

Jin me mira confundido hasta que yo me echó a reír –Bobo, tienes una espinaca entre los dientes, quítatela sino quieres ser la burla de algunos. –La diversión en mi voz no puede ser más evidente.

Jin rápidamente se tapa la boca y restriega sus dientes frenéticamente para sacar esa pequeña cosilla, mientras tanto Rap Monster, empieza a reír junto a mí por el pequeño descuido de nuestro amigo, luego de que Jin terminara, los tres nos dirigimos a la cafetería del instituto, todavía conmigo y Rap Monster haciéndole bullying a Jin, mientras este nos regaña ruborizado por estarnos burlando de él.

La hora del receso fue como todos los días, compramos lo que nos gustaba y después nos fuimos al jardín trasero del instituto a comer, debajo de nuestro árbol preferido, era el que daba mejor sombra y el más hermoso del lugar.

–Y dime TaeTae, ya decidiste que carrera vas a escoger, recuerda que este es nuestro último año para decir toda esa mierda de nuestro futuro –dijo Rap Monster con su típico lenguaje.

–Mmm…, la verdad no, ni siquiera he pensado en eso, supongo que más tarde que temprano lo decidiré –Me recosté en el pasto–. Y conociéndolos tampoco ustedes saben lo que quieren ser en el futuro.

Los dos me responden al unísono –Naaa… –dicen divertidos, se recuestan a mi lado y simplemente nos quedamos en silencio viendo las nubes, a pesar que los conozco desde hace poco tiempo ya siento a estas dos personas como mis mejores amigos, casi mis hermanos, los quiero mucho.

Después de unos pocos segundos toca la campana y es nuestra señal para regresar a clase, los tres nos levantamos, entre bromas y empujones juguetones nos dirigimos al edificio principal.

En medio del camino me detengo en seco al ver como cuatro chicos llevaban atado a otro, a uno de los baños más viejos y alejados del instituto, ese casi no se utiliza, por lo que si van hacer lo que creo, pues nadie los detendrá y ese pobre chico la pasara mal. Este chico es mucho más bajito que todos esos estúpidos que lo están molestando, además que teniendo las manos atadas a su espalda no creo que tenga posibilidad de defenderse de esos imbéciles abusadores; algo que siempre he odiado es que se aprovechen de los débiles, por como fui criado, me enseñaron que jamás debo intimidar a alguien y no puedo evitar actuar cuando veo cosas así.

Empiezo a caminar en la dirección del chico decidido a ayudarlo aunque no se pelear muy bien, al menos debo hacer algo o sino mi conciencia no me dejará tranquilo, pero antes de siquiera dar tres pasos las manos de Rap Monster y de Jin me detiene, los regresó a ver y ellos se ven preocupados.

–No te metas –dice Jin.

– ¿Por qué?, ¿acaso no vieron que eran cuatro contra uno? –Ahora mismo me siento demasiado indignado.

–Esto es lo habitual para ese pobre chico, se llama JungKook, y suele ser siempre así para él, todos los del instituto lo saben y se hacen los ciegos.

– ¿Incluso ustedes? –pregunto con incredulidad, pero ambos agachan la mirada–.Y saben al menos la razón por la que lo molestan.

–El chico es gay –Jin me responde en un susurro, como si fuera malo decirlo.

–Y supongo que solo por eso nunca nadie lo ha ayudado, ¿verdad? –Mis amigos vuelven a bajar la cabeza.

–No puedo creer que sean ustedes parte de ese montón de gente estúpida que no ayuda a ese chico solo por ser gay, creí que eran diferentes, que no juzgaban –Frunzo el ceño, realmente me siento mal porque mis amigos solo son uno más del montón. 

–Y no lo hacemos, solo que… es complicado –dice Rap Monster, frotando la parte trasera de su cuello.

Me sacudo las manos que me detienen y no sé porque, pero no puedo evitar mirarlos con enojo –Está bien, si ustedes no quieren ayudarlo, yo sí –Decidido me alejó de ellos.

–Serás la burla de todo el instituto por ayudar al gay –Me grita Jin. 

–No lo hagas, todo el instituto se apartará de ti –Rap Monster se une a los gritos de Jin.

–Pues adelante, si esos imbéciles se quieren apartar de mi por malditos prejuiciosos que lo hagan, si ustedes quieren hacer lo mismo que esos malditos arrogantes adelante, los creía más humanos y menos idiotas –digo con rabia en mi voz, no sé porque estoy arriesgando mi amistad con dos personas maravillosas, solo por un chico que ni siquiera conozco, no sé si vale la pena ayudarlo, pero no puedo contra mis instintos.

Corro rápidamente cuando escucho un sonido sordo provenir del interior de eso viejos baños y unos pequeños gemidos de dolor son escuchados.

Entro velozmente a los baños esos, y me quedo helado al ver lo que están haciendo, uno de los tipos está hundiendo la cabeza del pobre chico en el retrete y cuando lo saca de ahí golpea su cabeza contra el mismo retrete diciéndole palabras ofensivas como: “Maldito puto”, “Te gusta que te den por el trasero, ¿verdad?”, “Que tal si le metemos un palo por ahí para que lo disfrute”.

Antes de que pase a mayores me acerco a esos tipos y los aparto a los cuatro con golpes, patadas y una fuerza que ni yo mismo sabía que tenía, levanto al chico del piso –Salgamos de aquí –Le digo, mientras lo ayudo a pararse bien para comenzar a dirigirnos a la puerta, pero antes de siquiera alcanzar la salida uno de los tipos que se ha levantado ya del piso me toma de la parte trasera de la camisa y me arrastra hacia atrás, provocando que suelte al débil chico y que lo deje caer al suelo.

Por pura suerte logro liberarme del agarre de ese pendejo, y cuando volteo le arremeto con un golpe en la cara, pronto estoy peleando con los cuatro, tratando de esquivar todos los golpes y teniendo éxito hasta el momento, lanzo golpes a diestra y siniestra para defenderme, pero en un momento determinado no logró esquivar un golpe que me deja en el suelo, como estos desgraciados son tan canallas, no dejan que me levante y arremeten patadas contra mí, por todo mi cuerpo.

Me cubro la cabeza lo más que puedo y cierro los ojos, porque el dolor que me provocan está siendo demasiado intenso.

De repente dejo de sentir golpes y personas a mi alrededor, cuando abro los ojos encuentro a Rap Monster tendiéndome la mano –No somos como el resto –dice mientras me ayuda a pararme–, jamás hemos estado de acuerdo con lo que le hacen al chico, solo no nos queríamos meter en problemas, porque ya tenemos bastantes por el año pasado, pero como tú eres nuestro amigo, no podíamos dejar que te lastimaran así como si nada, sin importar en los problemas que nos metamos siempre estaremos ahí para ti mocoso –Me da una sonrisa ligera y despeina mis cabellos.

Veo atrás de él una vez que ya estoy de pie y veo que hay tres personas que no conozco y a Jin, golpeando a los tipos contra la pared, y ellos están ganando.

Cuando ya no pueden más esos rufianes, Rap Monster da la orden de que los suelten con una voz muy gruesa y escalofriante, todos le obedecen y los tipos caen como peso muerto al suelo, pero siguen conscientes.

–Ahora escúchenme bien –Su voz es amenazante, no la había oído antes y da miedo–, tanto ustedes como nosotros tenemos un historial muy feo en cuanto a problemas en esta institución, uno más y todos salimos expulsados, eso creo que a ustedes les importa más que a nosotros; así que abriremos nuestra boquita si de esta manera logramos que dejen en paz a ese chico de ahí –dice señalando al pálido hombrecito que ahora se encuentra sentado en el suelo–. A nosotros no nos va importar delatarlos y contar todo lo que han estado haciendo, incluso si con eso nos arrastran a nosotros. –Sus ojos dan miedo, está viendo con tanta frialdad y crueldad a los chicos, ahora realmente dudo que yo haya conocido al verdadero Rap Monster.

Uno de los tipos, que se ve como el más imbécil de los cuatro pregunta titubeando –Y…Tú…quien… ¿quién eres para decirnos esto?

Rap Monster muestra una sonrisa torcida al chico y se inclina hasta su altura en el suelo y con voz gélida dice –Soy Kim Nam Joon el líder de la pandilla de los Bangtan Boys, y ellos son todos sus integrantes –Señala a los chicos que antes les dieron una paliza–, supongo que tu insignificante pandilla nos debe conocer, o al menos haber escuchado de nosotros, ¿verdad?, o  ¿me equivoco? –El chico niega asustado.

–No, no lo haremos más, lo prometemos –habló de nuevo el chico impertinente, y rápidamente ayudó a sus amigos a levantarse y los cuatro salieron corriendo despavoridos de ahí.

–Bien, creo que hay muchas cosas que me tienen que explicar –digo algo consternado, Rap Monster suspira.

–Verás por ahora te puedo decir que un juramento nos impidió ayudarlo antes, que de no ser por eso hace mucho hubiéramos hecho algo en favor de ese chico –dice señalándolo, ahora el pequeño solo está llorando en silencio–. Creo que es mejor que  después te cuente todo, por ahora debemos ver como esta él –Me da una pequeña palmada en la espalda como incitándome a acercarme al tembloroso pequeño.

Me acerco despacio hasta él y le pongo mi chaqueta sobre sus hombros ya que su uniforme está completamente mojado y no por la sustancia más agradable del mundo, él chico se sobresalta por mi acción.

–Tranquilo, nosotros no te haremos daño.

–Eso… –Su voz es apenas un susurro–, eso lo dicen todos.

–Somos diferentes –Uno de los chicos que no conozco se acerca a él también, acuclillándose a su lado–. Yo soy Jimin y soy gay igual que tú. No se metían conmigo por mi historial, tenemos gustos iguales, solo que antes no nos metimos por una promesa que hicimos, perdónanos por no defenderte hasta ahora. –dice con algo de culpa.

–De ahora en adelante puedes recurrir a nosotros si alguien te molesta –dice otro de los tipos, dulcemente–. Soy Jung Ho Seok o J-Hope si prefieres.

–Creo que los que estamos aquí somos los únicos que no te juzgamos en toda esta maldita escuela. Nosotros si respetamos a todas las personas por igual, sin importar sus gustos, raza o religión. Si desde ahora estas bajo nuestro cuidado, te aseguramos que todo lo que has tenido que vivir hasta este día se acabara, confía en nosotros. –dice el último chico que no conozco, sonriéndole tranquilizadoramente al pequeño–. Soy Min Yoon Gi, pero mejor llámame SUGA odio mi verdadero nombre.

El chico nos ve con desconfianza, como si no creyera todo lo que hemos dicho hasta ahora.

– ¿Cómo puedo creer en ustedes?, muchos solo han tratado de ser lindos conmigo porque quieren obtener algo de mí, o para después lastimarme mucho más, cuando cree lazos sentimentales con ellos –Su voz ahora es más clara que antes, pero refleja mucho dolor en ella.

–Niño, la mayoría de aquí es gay, excepto yo y Jin que somos Bisexuales y Taehyung que es heterosexual –dice Rap Monster señalándome, para después señalar a J-Hope y Suga–. Es más, esos dos que ves ahí son pareja –A lo que los mencionados asienten.

El chico se ve dudoso todavía, así que le brindo una cálida sonrisa y una pequeña caricia en su cabello –Eres JungKook, ¿verdad? –El chico asiente–. Te aseguro que no somos malas personas y desde ahora seremos tus amigos, eso implica que te protegeremos en todo momento, nadie más te dañará, nunca.

Los ojos del chico derraman nuevas lágrimas, pero esta vez no parecen de tristeza, una sonrisa débil aparece en su rostro y sin previo aviso se lanza abrazarme, yo por la repentina acción término medio sentado sobre el suelo, con el chico encima de mío.

–Gracias –dice, yo simplemente le acaricio su espalda dándole pequeñas palmaditas, porque ahora está llorando nuevamente, supongo que paso por mucho, veo a los chicos y entre todos nos sonreímos satisfechos, porque hemos hecho lo correcto.

.

.

.

Como perdimos las dos primeras horas después del receso por ese acontecimiento, solo nos quedó entrar a la última clase, pero antes pasamos a dejar al chico a su aula, quien estaba en un curso inferior al de nosotros.

La hora pasó realmente rápido, casi ni me di cuenta de su transcurso, cuando el timbre de salida sonó; Rap Monster, Jin y yo, fuimos velozmente al aula del chico para recogerlo como le prometimos, cuando llegamos ahí, nos topamos con una escena desagradable.

JungKook estaba atrapado en medio de un círculo hecho por los que parecían sus compañeros de clase, quienes le habían quitado la mochila, y la lanzaban de uno a otro mientras él trataba de quitárselas, sus ojos ya estaban cristalizados por las lágrimas retenidas, los chicos empezaron a insultarle diciendo cosas hirientes.

 “Mariquita, alcanza tus cosas”, “El gay quiere llorar”, “Adefesio”, “Mal parido”, “Chupapollas”, “Culo suelto”.

Di un paso al frente para hacer algo, y mandar a volar a esos chicos, pero entonces Rap Monster se me adelantó, con la misma voz que uso con los tipos del baño habló fuerte y claro.

–Será mejor que le devuelvan al chico sus cosas, se disculpen y que de ahora en adelante no lo molesten si no quieren meterse conmigo y todo Bangtan Boys.

Los chicos inmediatamente detuvieron sus burlas y su jueguito, para ahora empezar a temblar, regresaron su vista hacia nosotros y sus caras palidecieron. Le devolvieron sus cosas a JungKook, se disculparon con él haciendo reverencias y como balas recogieron sus pertenencias y salieron corriendo bajó la mirada de un ceñudo Rap Monster.

JungKook suspiro aliviado, se restregó los ojos limpiándose las lágrimas. Cuando estuvo en frente de nosotros, nos hizo una reverencia de 180º.  –Gracias, por salvarme, otra vez. –Levanto el rostro, tenía una linda sonrisa plasmada en sus labios. Todos correspondimos ese gesto.

Jin le puso una mano en el hombro y le sonrió. –Ya no debes agradecer más, te dijimos que de ahora en adelante te protegeríamos y eso haremos, pero no como un favor que dabas agradecer, sino como algo que nosotros hacemos por nuestra propia voluntad, sin esperar nada a cambio, además nos caes bien. –dice revolviéndole el cabello–. Por cierto, creo que necesitas llegar a casa rápido, tú ropa no te la cambiaste y ya empieza a oler un poco feo.

El chico automáticamente se apartó de Jin y se ruborizo fuertemente, bajando la mirada –Tienes razón, debo llegar rápido a casa.

–De ahora en adelante uno de nuestro grupo siempre te acompañara a tu casa, para evitar cualquier problema –dice Rap Monster sonriendo–, así que vamos niños, los demás ya están afuera esperándonos –El chico asiente feliz,  creo que prefiero ver felicidad en su cara antes que lágrimas, se ve más bonito si sonríe.

Al salir del aula, nos dirigimos a la puerta principal, donde Rap Monster me dijo que los demás chicos esperaban, y así fue, ahí estaban todos los que ayudaron hoy al niño.

Antes de tomar cualquier rumbo, todos dijeron que había que decidir quién iría hoy con JungKook para lo cual yo me ofrecí gustoso, ellos asintieron.

–Está bien, como TaeTae se ofreció a acompañar a JungKook, pues creo que nosotros nos iremos a nuestra casa –dice Jin sonriéndome.

–Sí, que les parece si jugamos una partida de PlayStation en el cuarto de Rap Monster y Jimin cuando lleguemos chicos –dice un emocionado J-Hope, sino me equivoco. 

–Esperen, ¿ustedes viven en la misma casa? –pregunto desconcertado.

Rap Monster me palmea el hombro. –Sí amigo, vivimos en la misma casa.

–Pero, ¿cómo?, ninguno de ustedes son hermanos, al menos que eso no me lo hayan contado.

–Efectivamente no somos hermanos, pero en la tarde cuando te llame te cuento todo y te explico tus dudas –Me dice Rap Monster, yo asiento.

–Bueno pues creo que nos vamos –dice Suga, despidiéndose con un gesto de la mano, los demás lo imitan y tómanos caminos diferentes.

Camino tranquilamente con el chico al lado mío, por unos minutos nos mantenemos en silencio, hasta que él se anima a romperlo –Sabes, no es necesario que me acompañes a casa…, tal vez es una molestia para ti, puede que tu casa este muy lejos de la mía.

Yo le sonrió –No es molestia, además mi casa también es en esta dirección, así que no hay problema con eso, y esta es una perfecta oportunidad para conocernos un poco más, si vamos a ser amigos al menos debemos saber las cosas básicas del otro.

– ¿Cómo qué? –dice JungKook.

–Primero que todo, ¿cuántos años tienes Kookie? –Lo veo ruborizarse por el nombre que le di, así que rápidamente me disculpo–. Perdón si no te gusta el apodo, es solo que suena tierno así, puedo seguir llamándote de ese modo, ¿por favor? –digo mientras pongo la cara más tierna que tengo.

El chico aún ruborizado me sonríe –Claro me puedes llamar así, es bonito, solo que no estoy acostumbrado a motes cariñosos, solo se me hizo un poco raro, así que no hace falta disculparse –dice mientras acomoda con sus dedos el flequillo de su frente.

–Oh, qué bien. Entonces Kookie, respóndeme, ¿cuántos años tienes?

–Tengo 16 pero en tres meses, para ser exactos, el uno de Septiembre cumpliré ya 17 y ¿tú?

–Eres menor que yo, tengo 17, y me falta mucho para cumplir los 18, cumplo en Diciembre.

–Te daré un regalo para tu cumpleaños –dice sonriendo Kookie, y por un momento me quedo toralmente bobo por su sonrisa angelical.

Ese día comenzó una bonita amistad, que con el tiempo se convirtió en algo más, en algo muy especial.

.

.

.

Esa noche, por medio de una llamada, Rap Monster me contó todo acerca de las dudas que tenía sobre ellos.   

Resulta que antes los cinco eran una famosa pandilla, muy temida por cierto, se dedicaban a robar, a vender drogas, entre otras cosas ilícitas y siempre se estaban metiendo en problemas en el instituto. Me dijo que cuando tenían esa vida, vivían en una bodega abandonada, que no tenían muchas comodidades, hasta que por azares del destino se toparon con alguien que les dio la oportunidad de cambiar.

Suho, ese es el nombre de su actual tutor, y prácticamente padre, él uso mucho dinero para sacarlos a los cinco de ese mundo, ahora viven con él y su pareja en su linda mansión, todos juntos como una familia, y eso es lo que muy en el fondo siempre desearon todos.

Cuando Suho prácticamente los acogió como sus hijos les hizo prometer que no habría más peleas, que no habría más reportes del instituto y que sobre todo estudiaran bastante, para que en el futuro lleguen a ser unas excelentes personas, que se superen día a día.  

–Le debemos tanto TaeTae –Me dijo Rap Monster, después de que me contó todo–. Ninguno de nosotros lo quiere decepcionar, así que hacemos todo lo posible para hacerlo feliz, es como un padre para todos y Lay su pareja, es tan bueno como él. Los amamos a los dos demasiado, por eso cumplimos a cabalidad la promesa que le hicimos, ese motivo fue el principal por el que no ayudábamos al chico.

Escuché un suspiro a través de la línea. –Hoy, al llegar a casa todos le contamos lo que pasó en el instituto. Antes de que le llegué el chisme por otras bocas, nosotros preferimos decírselo, al principio se enojó un poco; pero cuando le dijimos la razón por la que nos peleamos, él nos miró con orgullo y con amor, nos dijo que por esta vez al ser la razón de nuestros actos algo tan bueno, lo dejaba pasar, es más habló con el director del colegio y lo regañó fuertemente por no controlar mejor los problemas del alumnado.

– ¿Cómo puede hacer eso él, sin alguna represaría?

–Pues digamos que mi padre es benefactor de la institución, así que sus donaciones son importantes para el rector, por lo que si mi padre le regaña, él solo debe escuchar callado y buscar una solución a lo que le pida –Escuche la leve risa de Rap Monster del otro lado–. No sabes lo divertido que es ver cuando eso pasa.

–Es bueno que tengan a alguien como él en sus vidas.

–Sip, mucho –dice Rap Monster suspirando–. Sabes su pareja es un hacker, él nos acaba de conseguir el número de absolutamente todos en la escuela y hemos envidado un mensaje a cada celular para que se enteren que de ahora en adelante, JungKook está bajo la protección de los Bangtan Boys. Hemos dado el primer paso para que dejen de molestar y maltratar al chico, aunque al principio va a costar que todos entiendan el mensaje en poco tiempo lograremos que la estancia de Kook en el instituto sea más tranquila.

–Eso espero Rap Monster. La verdad, quiero que el chico pase sus días tranquilo, cuando lo acompañe a casa me di cuenta que es una gran persona, que conserva mucha inocencia, a pesar de todo lo que le ha pasado, y realmente no merece sufrir así.

–Lo sé TaeTae, créeme lograremos que cada uno de los chicos del instituto lo dejé de molestar.

–Me alegra –Le digo, seguimos conversando por un rato más hasta que finalmente el sueño nos venció.

.

.

.

UN MES DESPUÉS.

Azoto la puerta apenas al entrar en mi casa, estoy tan enojado y colérico que no puedo evitar desquitarme con los objetos a mí alrededor.

Al entrar en la sala veo a mi hermana menor recostada en el sofá viendo televisión, ella me mira preocupada y yo suspiro, inhalo una y otra vez para calmarme, cuando lo logro me siento en un sillón individual al lado de ella.

Ella se reincorpora en el sofá quedando bien sentada y finalmente suelta la pregunta que yo estaba esperando.

– ¿Qué paso?, ¿por qué vienes tan enojado?

Inhalo profundo antes de empezar mi explicación –Hay un chico en el instituto, al que todos molestan por ser gay.

–Entiendo, y tú quieres aprender box para defenderlo. –Yo la quedo viendo extrañado porque adivinó lo que quería hacer sin habérselo dicho antes, ella sonríe entendiendo mi confusión–. Entraste mascullando, mejor dicho casi gritando colérico: “Voy aprender box”, “Quiero aprender box” –Imita mi voz–. Cuando estás enojado sueles hablar sin que te des cuenta.

–¡Oh! –digo comprendiendo todo–, creo que es un hábito que tengo que cambiar –Respiro profundamente antes de continuar–, pero volviendo al tema, sí, quiero aprender box por ese motivo, pero no al mismo tiempo. Ash, es complicado, no lo sé, ni yo mismo me entiendo.

–Pues cuéntame toda la historia para que yo pueda entender, para ver si es complicado o no –Me dice tan tranquila y serena como siempre.

–Sabes a veces creo que tú eres la mayor –Ella se encoge de hombros sonriendo–. Bueno lo que pasa es que hace un mes conocí a este chico, lo salvamos de unos imbéciles que lo estaban golpeando, al principio solo fui yo el que le ayudo, pero después llegaron los amigos de mis amigos, justo cuando yo no pude más contra esos cuatro tipos, en ese momento no me sentí tan inútil, porque al menos trate de defenderlo, aunque yo también me haya llevado una paliza al menos serví de algo.

Me muerdo el labio recordando todo lo que hemos pasado en este tiempo –Desde ese momento Rap Monster y los demás chicos de los que te he contado lo han defendido y protegido. Ha estado dando buenos resultados sus amenazas y advertencias para que dejen en paz a Kookie, pero hay unos pocos que todavía no entienden y lo siguen haciendo, con ellos ya nos hemos enfrentado varias veces a golpes, y en todas esas veces yo no fui de mucha ayuda; solo me quede cuidando y tranquilizando a Kookie, mientras los demás se encargaban de esa escoria.

Mi hermana alza una de sus cejas, mientras me mira analizándome –Pero hoy fui del todo inútil, ni siquiera fui capaz de defenderme a mí mismo cuando estos tipos nos buscaron pleito, es más ni siquiera pude parar las lágrimas de JungKook después de que me golpearan. –Suspiro fuertemente–. Y eso no es todo, quiero también aprender box, para darle su merecido a su padre, hace dos semanas atrás me entere que el desgraciado  lo golpea cuando llega borracho a la casa, o cuando según él, Kook se ha portado mal. Lo descubrí cuando fui a recogerlo a su casa una mañana y vi como lo golpeaba en la puerta de salida, esa vez él me impidió enfrentar a su padre, pero de haberlo hecho igual hubiera perdido porque no soy tan bueno en peleas.

–Me siento muy mal al no poder proteger adecuadamente a Kookie –Apoyo mi cabeza sobre el espaldar del sofá y miro al cielo raso de la sala–, también mi frustración hermanita se debe a que estoy muy confundido, siento cosas extrañas cuando estoy con Kookie. Cuando lo conocí solo lo quería ayudar a salir del infierno que vivía, me parecía lindo y tierno, pero mientras más cosas sabia de él más me interesaba, más me gustaba estar a su lado. Incluso ahora ni siquiera soporto que Suga o Jin sean demasiado cariñosos con él, me da un sentimiento de enfado como nunca antes, no sé porque siento todo esto.

El silencio se instala en la sala, asumo al principio que mi hermana está buscando las palabras adecuadas para decirme lo que piensa, pero cuando el silencio se prolonga demasiado, levanto la cabeza para ver directamente a la enana, quien me está viendo con una sonrisa y ternura en su rostro.

–Hermanito, estás enamorado de ese hermoso chico –Mi hermana suspira–. Te sientes tan mal por no poder defenderlo “como se debe”, porque es una persona especial para ti, siempre solemos querer mantener a salvo a la persona que amamos, así que es razonable tu frustración.

Ella medita sus palabras por un corto tiempo antes de volver hablar –Sabes hermano tú no estás siendo inútil cuando se trata de defenderlo, me dices que te quedas con él consolándolo, pues tal vez eso es muy importante para él, incluso más  valioso a que lo defiendas con golpes –Trato de replicar, pero mi hermana me chita, haciéndome callar de nuevo.

–Eres un apoyo emocional para su corazón herido y asustado, y tal vez, solo tal vez,  hoy no lo pudiste calmar, porque esas lágrimas no eran por el miedo de que algo le ocurriera a él, fue porque hoy saliste herido en el proceso de defenderlo. Probablemente se sintió culpable o preocupado por tu bienestar. En cuanto a lo que no quieres que sean demasiado cariñosos con él otras personas, eso se llama celos, querido hermano.

Cada palabra de mi enana la escucho con la mayor atención posible y suspiro, porque me doy cuenta que cada cosa es verdad –Sabes, no sé porque no me di cuenta antes por mí mismo.

Mi hermana se ríe un poco –Porque simplemente hermanito eres malo identificando tus propios sentimientos.

–Y ahora que se todo esto, ¿qué es lo que debo hacer?

–Simple, descubrir que es lo que él siente por ti, y declararte, enamorarlo si no te ama, o empezar a salir con él en caso de que te corresponda, y sobre todo dejar de sentirte inútil por no pelear bien; lo defiendes de otra manera, de una manera sentimental, que creo yo, es más importante que defenderlo en una manera física, pero si tanto es tu deseo de protegerlo “bien”, pues inscríbete a cursos de defensa personal, de box, o de karate.

–Tienes razón, eres muy madura para tu edad –Ella asiente con la cabeza en afirmación, mientras sonríe algo orgullosa–. Pero ahora que se esto, me da miedo como podrán reaccionar nuestros padres ante la idea de que yo salga con un chico.

Mi hermana hace un movimiento relajado con la mano, en forma de negación. –Por ellos no te preocupes, siempre nos han enseñado a no juzgar y a no ser racistas con nadie, son de mente liberal, así que no creo que se opongan, tal vez se sorprendan, pero no te repudiaran hermano eso es imposible.

–Tienes razón, no sé ni porque me aflijo por ello.

Ese día en la noche les confesé a mis padres mis nuevos descubrimientos acerca de mis sentimientos, entre más rápido mejor.  

Mi hermana tuvo razón, actuaron sorprendidos al principio ya que yo había tenido novias antes y no se esperaban eso de mí, pero dijeron que si esa era mi decisión y mis sentimientos ellos los respetarían y me ayudarían en lo que pudieran.

.

.

.

AL DÍA SIGUIENTE:

Con las manos temblorosas subo a la terraza de la escuela donde cite a Kookie, para hablar con él, ayer después de conversar con mi hermana y mis padres, pase meditando toda la noche lo que debía hacer acerca de Kook, y decidí declarármele. Después de todo si ya tengo claro lo que siento por él, para que seguir retrasando las cosas, así que apenas lo vi hoy en la mañana lo cite aquí en la hora del receso, y él sin sospechar nada acepto gustoso.

A medida que voy llegando mi corazón empieza a latir con mayor fuerza por la anticipación, abro la puerta con cuidado y cuando salgo finalmente a ese espacio, me doy cuenta que él ya ha llegado, me da la espalda, pero cuando me escucha caminar hacia él se gira sonriéndome, y juro que es la sonrisa más hermosa que he visto en mi vida.

Decidido empiezo –Kookie –Él me mira expectante–. Yo… –Trago duro, justo ahora me estoy acobardando, pero ya que estoy aquí intentare que la declaración salga lo mejor posible, no es la más original, ni la más romántica, pero si la más especial, al menos para mí, porque esta es la única declaración que he hecho desde lo más profundo de mi corazón.

–Tú me gustas Kookie, no sé cómo paso, simplemente no te quiero como un simple amigo –Estoy infernalmente nervioso y cuando eso pasa me quedo paralizado en todo sentido, pero su expresión de sorpresa solo me alienta a hablar más–. Te quiero como algo más, como mi novio, mi amante y es extraño, porque se supone que solo me gustaban las mujeres pero contigo fue diferente. Desde que te vi, no pude apartarme de ti, y sabes, sé que podrías rechazarme, por no sentir lo mismo que yo, pero en realidad me gustaría que tú…

Y él me calla de una manera inesperada, pero hermosa, me ha besado, al principio mis ojos están abiertos de sobre manera por la impresión, pero después lo empiezo a disfrutar, cierro los ojos y me apodero de su cintura, él hace su agarre más fuerte sobre mi cuello, el contacto no dura mucho y es tierno, cuando se separa de mi me ha dejado con ganas de más, me da un leve beso en la punta de la nariz sin deshacer su agarre sobre mi cuello, al separarse, me sonríe.

–Estabas hablando mucho, no me dejabas contestarte, así que decidí callarte con algo que te diera la respuesta.

– ¿Eso significa que también te gusto? –pregunto ilusionado, él ríe levemente y asiente, lo abrazo con fuerza–. Te aseguro que no te arrepentirás de haberme aceptado.

–Sé que no me arrepentiré –Él me susurra, ese día nos quedamos abrazados hasta el final de las clase, ese día marco el inicio de nuestro camino juntos.

.

.

.

TRES MESES DESPUÉS.

Corro lo más rápido que puedo, mientras arrastro conmigo a Kookie, quién todavía está en estado de shock, pero tanto él como yo sabemos que ahora mismo no es buena idea parar, que debemos llegar a un lugar seguro.

A lo lejos veo la entrada de mi casa y mi velocidad aumenta porque pronto estoy alcanzando la puerta de mi hogar, la abro lo más rápido posible, cuando los dos estamos adentro cerramos la puerta con seguro y recargamos nuestras espaldas sobre la misma, por fin podemos respirar algo tranquilos, hasta que la voz de mi padre y mi madre nos espanta.

–Pero hijo que te pasó a ti y tú novio –dice mi madre horrorizada, nuestros rostros están golpeados, el mío sobre todo, mi labio y ceja se encuentran partidos. Ella se acerca rápido a mí a inspeccionar mi cara y luego la de Kookie.

Mi madre nos jala a ambos de la mano adentrándonos en la sala y sentándonos en el sillón –Voy por botiquín –dice rápidamente saliendo de  ahí.

Mi padre que hasta el momento se ha mantenido callado se para enfrente de nosotros y me mira serio. –Será mejor que expliques lo que pasa, nosotros ya te hemos dicho que no es bueno pelear, sí otra vez esos chicos en tu escuela molestaron a tu novio solo debías decírselo al director, él ya está informado de todo.

–Lo sé papá, pero esta vez no es mi culpa, después de la escuela pase a dejar a Kookie a su casa, como siempre me despedí con un beso de él, no sabíamos que su padre nos había estado viendo desde la ventana, no creímos que estaba ahí; resulto ser que también es un puto homofóbico, y al ver a su hijo siendo besado por otro hombre reacciono mal, primero en medio de la calle empezó a pegar a Kookie, yo me metí a defenderlo y terminamos así. Se volvió por completo loco, a penas y si pudimos escapar, después de eso venimos corriendo aquí papá, no sé ni a qué hora perdimos nuestras mochilas en nuestra desesperación.

– ¿Por qué no llamaste a la policía? –Me replica mi padre.

–Porque estaba asustado por mi seguridad y la de Kookie,  lo único que podía pensar es en llegar a un lugar seguro, solo podía pensar que la casa era el lugar más cercano. –Mi padre finalmente me mira compresivo.

–Tranquilo hijo, estas seguro aquí, tú y tu novio –En eso mi madre regresa acompañada de mi hermana, quien tiene a nuestro hermano menor entre sus brazos y un botiquín.

Mi hermana se acerca preocupada a mí, pero al ver que no es nada grave solo me acaricia mi mejilla algo hinchada con su mano libre y me sonríe.

–Al menos no te dejo más feo de lo que eres.

Yo negué sonriendo –Boba.

–Menso –Mi hermana se acerca hasta Kookie y le acaricia la mejilla–. Eres muy lindo para ser novio de mi hermano –dice divertida.

–Oye –Le digo fingiendo haberme ofendido, pero esa escena logra sacar una sonrisa de los labios de Kookie, y eso me tiene feliz, hasta que la calma termina por unos fuertes golpes en la puerta y la voz estruendosa del papá de Kookie.

Su padre grita que lo quiere ver ahora mismo y que no sabemos lo que es capaz de hacer si no cumplimos con los que nos exige, mi padre frunce el ceño, algo enojado, porque por culpa de ese hombre ha espantado a mi pequeño hermano quien esta abrazado fuertemente a mi hermana, y no solo a él, Kook está temblando de miedo.

–Papá –digo tratando de llamar su atención, él me mira tranquilo–. ¿Qué vamos hacer con él?

–Esperar a que llegue la policía, mientras discutías con tu hermana, tu mamá llamo, llegarán pronto, por ahora nos tocara aguantar los gritos de ese loco, pero todos tranquilos no logrará entrar aquí. Sun Hee sube a tu hermano a su habitación, enciérrense ahí, pon la música que le gusta, para que se calme.

Mi hermana asiente y acata lo que mi padre le ordeno –Ustedes quédense aquí, debemos denunciar a tu padre Kook, por lo que mi hijo nos ha dicho no es la primera vez que te pega, es mejor que lo denuncies y termines con todo esto –Mi novio asiente algo triste.

Mi madre se acerca hasta él y lo abraza –Muchacho, sé que a pesar de todo es tu padre, pero es mejor que dejes de vivir una vida llena de maltratos –Su boca muestra una sonrisa cálida y sus ojos una ternura inigualable, amo realmente a esta mujer.

Kook no dice nada solo se deja abrazar por mi mamá, en menos de diez minutos escuchamos como una patrulla llega y somete a ese hombre histérico afuera, salimos cuando creemos que no hay peligro y vemos a dos policías adentrando a la patrulla al padre de Kook, él nos ve rabioso desde dentro del carro.

Un policía se acerca a nosotros. – ¿Pondrán la denuncia? –Nos pregunta y todos regresamos a ver a Kookie, porque esta es decisión de él.

–Sí –dice claro–, no quiero seguir sufriendo al lado de mi padre –Le aprieto fuertemente la mano que tiene entrelazada con la mía.

–Bien, por lo que tengo entendido eres menor de edad, ¿verdad? –Él asiente–. Tendremos que ver una familiar que se haga cargo de ti hasta tu mayoría de edad.

Mi novio niega frenéticamente –Mi única tía, vive en otro país, no me quiero ir con ella.

El policía niega. –Lo siento chico, esa es la ley, debemos buscar a alguien que se haga cargo de ti –Yo abrazo a mi novio triste, desesperado, porque lo voy a perder, se va ir lejos, veo a mis padres suplicándoles con la mirada que hagan algo.

Mi madre codea a mi padre y él suspira – ¿Nosotros podemos hacernos cargo de él? –Le pregunta al policía.

El policía duda por un momento, pero a la final asiente después de vernos aferrados el uno al otro. –Supongo que sí, si llenan todas las formas adecuadas.

–Mi vida te quedaras con nosotros de ahora en adelante –digo emocionado y él asiente sonriendo.

–Sí, ahora nada nos separará –Me suelta y se gira hacia mis padres, les hace una reverencia –Gracias señores Kim, por esta oportunidad, les juro que ayudaré en casa, tendré buenas notas, trabajaré si así lo desean y no seré una molestia.

Mis padres se sonríe entre sí, y cuando mi novio levanta la cabeza mi padre le revuelve el cabello con una sonrisa radiante, típicas de él.

–Bienvenido a la familia chico.

Kookie siendo tan efusivo como siempre se lanza abrazar a mi padre y luego a mi madre, ellos complacidos corresponden el abrazo. 

Después de que ellos se separaran, el policía dice que nos espera en la comisaria para poner la denuncia, finalmente ese día nos libramos del papá de Kook.

.

.

.

UN AÑO DESPUÉS.

Hoy es el día más especial de mi vida, y mientras veo caminar hacia mí por ese largo camino de rosas al amor de mi vida, pienso que fui muy afortunado de haberlo encontrado.

Bajo esta hermosa noche estrellada rodeados de cientos de farolas, finalmente uniremos nuestros caminos para siempre, tuvimos que viajar al extranjero para hacer esto realidad, pero me alegra tener una familia tan maravillosa que me ayudó a cumplir este sueño a pesar de ser tan jóvenes, y nos sigan ayudando a ambos a ser unas personas de bien.

Cuando mi Kookie llegó hasta mí, tome su mano tersa y suave entre las mías, dándole un beso en ellas, ambos nos sonreímos, el que oficia la ceremonia empieza con el típico discurso, y realmente no lo tomo en cuenta porque me lo sé de memoria, en cambio mi atención está centrada en los hermosos ojos de mi Kookie. El brillo en sus ojos, me demuestra todo el amor que siente por mí y eso me hace tan feliz que podría saltar en un pie en este momento.

Cuando llega la parte importante de la ceremonia digo la simple y maravillosa palabra que me unirá a él para siempre.

–Sí, acepto.

Cuando llega su turno, él me sonríe, sus dulces labios dicen la palabra que tanto anhelo. –Sí, acepto –Ambos tomamos los anillos que mi hermana nos entrega con una radiante sonrisa, cada uno pone el anillo al contrario, con la felicidad plasmada en cada uno de nuestros rostros.

El juez da sus últimas palabras y me dice que lo puedo besar, yo no tardo en acatar lo que me dijo, es un beso dulce y tierno donde sellamos finalmente nuestro destino.

–Los novios me han expresado que querían dar sus votos al final de la ceremonia, así que los invito a escuchar –dice el juez.  

–Mi Kookie, el conocerte nunca estuvo en mis planes, pero me alegro que así haya sido, cuando me enteré que nos mudábamos de mi ciudad natal renegué mucho, sin embargo a la final me alegra que haya pasado, gracias a que me mude pude conocer a hermosas personas como tú y nuestros amigos –digo viendo hacia el público donde están todos los chicos presentes junto con su tutor y la pareja de este.

–Eres mi ángel Kookie, y me alegra haberte defendido ese día, arriesgándome incluso a perder a mis amigos, pero desde ese momento nuestros caminos se juntaron y nació el amor entre nosotros. Diversos sucesos pasaron antes de declararte mi amor, y viendo hacia el pasado hoy puedo decirte con certeza que a pesar de las difíciles pruebas que hemos pasado estoy muy seguro que mi destino siempre fuiste tú, que eras la persona predestinada para mí, y que de no haberte encontrado, probablemente nunca hubiera conocido el verdadero amor, gracias Kookie por amarme, por hacerme el hombre más feliz y te prometo amarte por el resto de mis días –Culmino con un tierno beso en su frente y todos los invitados aplauden emocionados.

–Mi Taehyung, fuiste mi salvación en medio de mi miserable vida, tú y tu familia han sido lo mejor que me ha pasado, me liberaste de muchas ataduras y me protegiste desde el primer día que te conocí. Cualquiera persona que hubiera pasado por lo que yo viví  por años en ese instituto, no confiaría en seis extraños que le ofrecían protección, muchos se hubieran cerrado más, pero tu sonrisa fue la que me hizo confiar en ti y en los demás desde un principio.

Su voz es tenue, y me doy cuenta que se le está empezando a dificultar las palabras en su boca, sin embargo se repone.

–Esa amabilidad tuya, tu apoyo y comprensión hicieron que me enamore de ti, y aunque al principio creía que eras heterosexual eso no impidió que te amara con cada fibra de mi ser y agradezco esos sentimientos que nacieron en mí, agradezco tu amor, el de tu familia hacia mí, quienes me aceptaron rápidamente, agradezco a quien sea que te puso en mi camino, porque desde que apareciste en mi vida, esta dejo de ser blanco y negro, tomo color, colores cálidos y alegres, y hoy también te puedo decir que mi destino siempre fuiste tú, mi vida, espero hacerte feliz y que nuestro matrimonio dure años y años, porque quiero envejecer a tu lado mi amor. –Pequeñas lágrimas de emoción recorren sus mejillas y yo las limpio mismas tiernamente con mis pulgares.

FIN POV TAEHYUNG

 

 

Cuando mi hermano y cuñado terminaron de dar sus votos nos dirigimos a la recepción de la boda, y aunque somos pocos los invitados, hoy están los más importantes en las vidas de ambos.

Fue difícil el año entero para ellos, y me alegra que hoy sean felices, al principio cuando Kook vino a vivir con nosotros hubo mucha gente estúpida que creyó que tenía derecho a opinar sobre la vida de nuestra familia.

Los vecinos y familiares lejanos se atrevieron a decir que ellos eran una abominación, que no era natural que dos hombres se amaran y que serían muy mala influencia para mi pequeño hermano de ahora 6 años,  Hyo Yoon.

Mis padres hicieron algo de lo que estoy muy orgullosa, los mandaron a callar a todos los que se atrevieron a juzgarlos, ellos dijeron desde un principio que no serían mala influencia para Hyo Yoon, que él al conocer la tolerancia a diversas parejas podría ser una persona excelente y sin prejuicios cuando creciera, porque él crecería viendo que sin importar el género el amor verdadero se daba y que no era anormal, también entendería que a pesar de todo siempre contaría con su familia y siempre apoyaríamos  sus decisiones.

Viendo a mi hermano y cuñado sentados en esa mesa central siendo felices, tomados de la mano, viendo el amor en sus ojos, puedo decir que me alegra que mi hermano lo haya conocido, lo haya querido proteger, me alegra ser testigo de su gran amor, de haber entregado los anillos en su boda, me alegra que lo salvara de los prejuiciosos chicos de su instituto.

Sé que ambos serán felices, algo me dice que sí, su unión es para siempre, estarán hasta la eternidad juntos, y yo seré parte de sus vidas mientras pueda, estoy de acuerdo con mi hermano con lo que dijo en sus votos: “Mi destino siempre fuiste tú”, es cursi sí, pero esa frase para mi le queda bien a su historia de amor, que empezó de una manera particular.

¿Les gusto la historia de mi hermano?, puede que a ustedes les haya aburrido, pero para mí siempre será única, porque es la historia que hizo feliz a una persona especial para mí, para la cual deseo lo mejor por el resto de sus días.

Su historia comenzó con una mudanza, con una enfrentamiento, con altos y bajos, con amistades, con confianza, con sinceridad, sin prejuicios y con un amor que nació poco a poco, venciendo los prejuicios de una sociedad y las adversidades de la vida. Hoy  finalmente tuvieron su final feliz o tal vez es un inicio feliz, quien sabe, pero de lo que estoy segura, es que mi querido Taehyung y JungKook compartirán sus vidas para siempre, por el resto de sus días, amándose y protegiéndose como desde la primera vez que se vieron.

FIN

Notas finales:

PERDÓN CUALQUIER ERROR…. Lo revise pero siempre se me pasado algo, díganme si hay uno muy feo y en que parte para corregirlo.

No conozco mucho las parejas de BTS y aunque me gustan no soy por completo su fan, solo espero que les guste y sobre todo a Mariana que es la que me pidió el fic, dedicado a ti linda.

BYBYE

COMETEN SI LES GUSTO.

GRACIAS POR LEER :3

MI PÁGINA>>THE TRAGIC LOVE EXO YAOI


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).