Apenas hacia tres minutos, que Nico se había enterado que aquel lugar tan misterioso en donde estaba era el Valhalla, y mientras terminaba de procesar aquella información, Hunding ya se estaba encargando de llevarlo a su suite, pero Nico no prestaba atención a lo que veía y mucho menos a los corredores del hotel por los que habían pasado para subir a un ascensor, ya que en lo único en lo que podía pensar era en cómo había terminado en aquel lugar, el un hijo de hades en el Valhalla, todo aquello era tan surrealista, y él ya había vivido cosas demasiado surrealistas toda su vida, pero está en particular se llevaba las palmas.
Cuando salieron del ascensor Hunding le dijo— oye chaval quita esa cara de preocupación, te ha tocado estar en el piso diecinueve, aquí la gente es muy agradable así que tendrás buenos compañeros, ya verás que la muerte nos es tan mala, al menos aquí en el Valhalla no.
Nico suspiro y después asintió con su cabeza a lo que le había dicho Hunding, todavía tenía la esperanza de que le informaran que toda aquella situación era un terrible error.
Mientras caminaban por el piso diecinueve hacia su suite, Nico se permitió prestar atención a el pasillo que recorrían, que sin lugar a dudas gritaba nórdico, al igual que el campamento mestizo gritaba griego o el campamento Júpiter romano.
Las puertas de las habitaciones eran de roble toscamente tallado y revestido de hierro, no tenían cerradura y en el centro de cada puerta había un círculo de hierro del tamaño de un plato con un nombre grabado rodeado de runas vikingas.
Nico había prestado detenida atención en los nombres de aquellos círculos de hierro, pero solo uno había logrado llamar su atención, cuando leyó Magnus Chase en la habitación que estaba frente a la suya, sus ojos se abrieron enormemente ya que el apellido Chase le recordaba a Annabeth, y recordar a Annabeth inevitablemente lo hacía también recordar a Percy.
—Adelante— le dijo Hunding llamando su atención, sacándolo de sus pensamientos ya que se había quedado viendo muy fijamente a la puerta de Magnus. Le enseño una piedra rúnica que tenía en la mano, que a Nico le pareció un reloj de arena.
Así que le dijo a Hunding— ¿qué es esa piedra?— hasta ese momento se había limitado a no preguntar mucho, puesto que albergaba en el la remota idea de que todo aquello fuera un error.
—Es dagaz— le explicó Hunding —no tienes nada que temer chaval, simboliza los nuevos comienzos, las transformaciones y también abre tu puerta, solo tú tendrás acceso a ella—
Nico tomo con un poco de desconfianza, la piedra rúnica y con ella abrió la puerta, dejando ver una gran habitación, que provoco un dolor punzante en su pecho, aquella habitación era como la casa en la que Nico había vivido en Italia con su mama y hermana.
Hunding noto la cara de tristeza y dolor que había puesto Nico al ver su habitación y le dijo— la habitación es mágica se decora conforme tus gustos, pero eso no quiere decir que no puedas modificarla, si algo te incomoda puedes cambiarla después de todo es una suite mágica—
Nico solo asintió con su cabeza a lo que Hunding le dijo, mientras seguía recorriendo con su mirada aquella habitación.
Si tienes preguntas siéntete seguro de llamar a recepción, por otra parte estoy deseando oír tus valientes hazañas esta noche en la cena chaval, bienvenido al hotel Valhalla— le dijo Hunding extendiendo su mano para que Nico le diera propina.
Nico metió su mano a su bolsillo, en la espera de encontrar dinero antes de que muriera recordaba llevar consigo dinero y esperaba que ese dinero siguiera con él, ya que de no ser así, no tendría nada para darle a Hunding.
Afortunadamente, su dinero seguía consigo así que le dio un billete de 20 dólares a Hunding, ya que solo llevaba billetes de 20.
— ¡Dioses de Asgard!, ¡Gracias, muchacho!, ¡Caramba! Si necesitas algo, avísame, tu valquiria vendrá a buscarte antes de la cena.
— ¿Mi valquiria? — le pregunto Nico
Pero Hunding ya había salido de la habitación de Nico muy feliz con su billete de 20 dólares.
Nico dio una última mirada a la grande habitación en donde estaba antes de irse a acostar en la cama que estaba justo en medio de esta, toda aquella habitación le traía recuerdos de cuando era un niño pequeño y vivía en Italia con su mama y Bianca provocando en él un sentimiento de tristeza pero también de calidez ya que en aquella habitación se sentía como si estuviera en su antiguo hogar, un lugar que ya no existía.
Mientras seguía acostado en la cama vio que en el buro que estaba al lado de la cama, había varias fotos de su familia, pero la que más llamo su atención fue una foto que nunca fue tomada ya que en esta aparecían Bianca y Hazel juntas con una alegre sonrisa.
Nico tomo la foto y la vio por un largo tiempo, mientras se preguntaba que estaría haciendo la rencarnación de Bianca o Hazel en ese momento, también se preguntaba si Hazel había sentido su muerte, todavía no quería creer que de verdad estuviera muerto, pero todo apuntaba a que sí que había muerto, y no solo eso sino que los dioses se habían equivocado al momento de mandarlo al más allá.
Mientras esperaba a que su valquiria fuera por él, Nico no pudo evitar pensar en cómo había terminado en toda aquella situación, el ni siquiera había tenido planeado ir a Boston.
Él había estado en el inframundo ayudando un poco a su papa a clasificar las almas de las personas, cuando recordó que Hazel, Reyna y Frank irían al campamento mestizo de visita, por lo que se disculpó con su papa por no poder seguir ayudándolo y viajo por las sombras, para llegar al campamento mestizo, pero algo había salido mal en su viaje vía sombras ya que no había llegado al campamento mestizo sino que había llegado a Boston.
Cuando estaba a punto de volver a viajar vía sombras, vio como no muy lejos de él una joven era perseguida por un monstruo, así que no lo pensó mucho y corrió en dirección hacia donde corría aquella joven.
La joven había corrido hacia un callejón sin salida, pero afortunadamente él había llegado justo a tiempo para impedir que el monstruo la atacara, atacando el primero al monstruo con su espada de Hierro Estigio, pero el monstruo tenía buenos reflejos y esquivo el ataque con mucha facilidad.
Por lo que Nico se dio cuenta de que aquel monstruo no iba a ser tan sencillo de matar, así que llamo a esqueletos de la tierra, pero no conto con que sus esqueletos no acudieran a su llamado. Eso preocupo y distrajo un poco a Nico ya que los esqueletos siempre acudían a su llamado.
Y aquel momento de distracción para Nico fue fatal ya que el monstruo lo ataco atravesándole el pecho con su mano, lo único que Nico fue capaz de hacer fue el también atravesar a aquel monstruo con su espada de Hierro estigio.
Después de eso Nico solo recuerda la sensación de estar muriendo y una penumbra absoluta, antes de abrir los ojos y ver una gran puerta de dos hojas frente a él.
Y ahora se encontraba acostado en la cama de otro hotel mágico en la espera de su valquiria para ir a cenar.