Cuando Kuroko llego a su lugar jamás espero encontrarse con aquella caja de chocolates de aspecto lujoso y finamente arreglada, contenía una tarjeta que solo decía un par de palabras pero no de quien los mandaba.
“te veo el 14 de febrero en aquel parque…”
Aun faltaba una semana para el 14 y el mensaje no decía mucho, Kagami había leído desde el hombro del más bajo y había fruncido el seño sin entender gran cosa de lo que decía el mensaje. Tetsuya por su parte como siempre no parecía sorprendido contemplaba la tarjeta como si en cualquier momento fuera a parecer algún otro mensaje, cosa que por supuesto no paso.
-y bien, ¿sabes de qué se trata o mejor dicho de quien se trata?
-la verdad no –Kagami le quito la caja y la examino según él con ojo critico
-pues se ven fino, es ese tipo de cosas que compra Kise o ¿me equivoco?
-podría ser pero olvidas que Kise no es para nada sutil, si él quisiera dar un mensaje como este habría hecho todo un escándalo y no solo una caja de chocolates finos
-mmm si supongo que tienes un punto, ¿y entonces? ¿Alguna otra idea? –Kuroko volvió a contemplar la caja, por más que la veía no podía evitar sentir que había algo que le resultaba familiar pero que no lograba definir en su cabeza
-pues no, no se me ocurre quien más pueda ser
Al no llegar a ninguna conclusión ambos dejaron el tema y aun cuando su rostro no expresaba nada como de costumbre la duda no lo dejaba en paz. Por más que lo pensaba no entendía a que podía referirse, ni de quien procedían. Por un instante pensó en Momoi pero según recordaba ya tenía novio y entre ellos ya habían quedado claras las cosas además estaba el detalle de los chocolates, no había manera que ella gastara en chocolates de ese tipo a menos que fueran para ella.
Al final del día lo único que consiguió fue que le doliera la cabeza y que terminara aun mas confundido. Ese día no tenía entrenamiento y decidió caminar solo de regreso a casa, Kagami ni siquiera lo detuvo, se imaginaba que estaba intentando encontrar una respuesta. Mientras caminaba pensó que tal vez después de todo si se trataba de Kise, era el único que podía ser. Aun cuando no estaba del todo convencido aquello ayudo a que dejara de darle vueltas al asunto... Sin embargo su telefono rompió toda la ilusión
-Kurokochiii por fin me contestas, te tengo una super noticia. No lo vas a creer
-hola Kise-kun me da gusto escucharte ¿qué pasa?
-pues que estoy empezando a creer en los milagros -Kuroko cada vez entendía menos
-kise...
-si lo sé, lo sé, sé que estoy dando muchas vueltas pero es que estoy emocionado pero haber deja me calmo -se podía escuchar como Kise tomaba aire al otro lado de la línea -listo, resulta que Kasamatsu-senpai me envió un mensaje diciendo que va a venir a Tokio, ya sabes que está estudiando en Kioto, pero no solo va a venir, me dijo que va a poder pasar el 14 de febrero conmigo...
Su única teoría de quien podía haberle dado aquellos chocolates acababa de irse por la borda, una vez mas estaba en cero. Los siguientes dos días fueron de exactamente lo mismo; repasar mentalmente quien podía ser. Había un nombre que bailaba en su cabeza pero nunca terminaba de concretarse. En ratos hasta se pregunta si era una broma pero una vez más la idea de gastar en una fina caja de chocolates no encajaba. Aomine y Kagami daban sus aportaciones pero tampoco tenía mucho sentido incluso rayaban en lo absurdo sacando nombres como Imayoshi o Nebuya. Con tanta tontería que decían a Kuroko le daban ganas de golpearlos.
Tres días antes del 14 sentados en las hamburguesas que siempre acostumbraban visitar por fin Taiga dijo algo que tenía sentido, salió como sin querer pero hizo que los otros dos voltearon a verlo
-hemos estado intentando averiguar de quien se trata pero ¿no tendríamos que pensar primero de qué parque habla el mensaje? No hay una sola dirección
-es cierto, la persona que te los mando asume que sabes de qué parque se pero ¿realmente lo sabes Tetsu? -los dos voltearon a ver al menor, que los veía con su siempre tranquila expresión mientras bebía de su malteada
-me temo que no
-entonces ¿cómo se supone que vas a verlo si ni siquiera sabes donde es el lugar de la cita? -los dos más altos hablaron a la vez
-yo no había pensado en eso
-evidentemente no, tal vez si descubres eso, el nombre venga por sí solo. Ahora ¿tienes algún recuerdo significativo que involucre un parque?
Tetsuya se le quedo mirando a Kagami, en realidad si y se trataba de dos recuerdos pero ambos los había guardado en lo más profundo de su mente y no deseaba sacarlos a la luz. Ni siquiera Aomine sabia de ellos a pesar de que sucedieron cuando eran compañeros en Teiko
-nop, lo mas reciente que me ha pasado en un parque fue cuando hable contigo y está claro que no eres tú, a menos que estés engañando a Aomine
-claro que no soy yo, si serás tonto
Tanto Aomine como Taiga se sonrojaron aun no estaban tan acostumbrados a que otras personas hablaran de su relación aun cuando este fuera su mejor amigo. Gracias a ese comentario hicieron un cambio de tema dejando a Kuroko solo con sus pensamientos y el remolino de recuerdos que clamaban por salir. No tardaron mucho para dejar el establecimiento y con una excusa a la que Aomine y Kagami no le dieron mucha importancia, Kuroko se fue por otro lado.
Sintiéndose ligeramente sofocado, camino hasta llegar al parque que había tenido en su mente todo ese tiempo desde que Kagami saco a colación el tema. Se detuvo junto a un árbol y contemplo el lugar, estaba casi vació y seguía siendo tan tranquilo como la última vez que había estado ahí. Permitiendo que los recuerdos volvieran se dejo caer y recargo la espalda contra el tronco mientras sentía la fresca hierba entre sus dedos...
...
Kuroko de estar a punto de renunciar había visto sus esperanzas regresar y sentir que por fin tenía una forma de pelear. Akashi no se lo había dejado tan fácil pero de algún nodo había encontrado la respuesta, entendía como podía ayudarle al equipo y como ser justo eso que le hacía falta a un grupo de prodigios. Akashi le había dicho que no se tardara demasiado en contestarle y era por eso que en cuanto lo descubrió había dejado hablando solo a Aomine para salir en busca del vice capitán del equipo. Cuando llego a la primera cancha no lo encontró pero Midorima intuyo porque lo buscaba.
-si tanto te interesa hablar con él, debe estar en el parque cercano al colegio. Le gusta pasear a su perro en ese lugar mientras le da orden a sus ideas.
Kuroko agradeció con una reverencia y salió en su busca. Tal como le habían dicho el parque no quedaba lejos de la escuela y en efecto Akashi paseaba a un hermoso perro Alaska que caminaba a su lado con la misma elegancia que su dueño, por unos instantes Kuroko solo parpadeo y contemplo la imagen, era imponente, de eso no había duda pero había algo mas, un aire solitario, como si nadie pudiera realmente lograr alcanzarlos.
Al final fue Akashi quien diviso a Kuroko, haciendo que este regresara su atención a lo que lo había traído en primer lugar.
-me imagino que ya tienes una respuesta
-si
-parece que entonces no me equivoque contigo, no tardaste tanto en llegar a la respuesta. La pregunta es ¿podrás hacerlo? ¿Dedicarte única y exclusivamente a esa tarea?
-lo hare, seré justo eso que necesitas que sea
Por una fracción de segundos las miradas de ambos se cruzaron y aquellas palabras poseían una carga que ninguno de los dos había comprendido del todo, incluso Kuroko no sabía muy bien de donde había salido todo aquello. Recuperado de la ligera sorpresa Akashi le sonrió con amabilidad y añadió
-es bueno saberlo
Aquellas palabras eran como un compromiso no dicho y sin más que agregar Kuroko comenzó a darse la vuelta para retirarse pero fue detenido por el pelirrojo.
-ya que estas aquí acompañarme un rato mientras Aone da su paseo y podemos hablar de lo que piensas hacer para conseguir la tarea que te encargue.
Un poco dudoso Kuroko acepto la oferta dándose cuenta que no le resultaba tan difícil estar con Akashi y mucho menos hablar con él. Definitivamente era un líder nato que sabia como manejarse entre las personas. A pesar de la actitud distante, cerca de Kuroko, Seijuuro parecía mucho más relajado. Con el paso del tiempo Kuroko se dio cuenta que ese rasgo de Akashi era un privilegio exclusivo para Tetsuya, ante nadie más se comportaba así. Sin embargo fue un gesto que no duro mucho tiempo.
...
Kuroko se dio cuenta que de una forma u otra aquel recuerdo ahora le resultaba menos doloroso, ahora existía una ligera mezcla de melancolía acompañada de añoranza. Había evitado ese parque temiendo encontrarlo y ver que había todo un abismo entre la persona que era ahora y la que había sido. El viento soplo provocándole un pequeño estremecimiento pero aun había más que recordar... Un recuerdo tan frio como el viento que comenzaba a soplar
...
Si tenía que describir el paso del tiempo en Teiko, Kuroko bien podía decir que se trataba de una serie de eventos desafortunados, empezando por la enfermedad del entrenador, la decepción de Aomine y el paulatino distanciamiento entre los miembros del equipo. Sin embargo la peor parte fue enfrentar el cambio de Akashi, toparse con el sin entender lo que había pasado y ver a una persona completamente distinta, el impacto lo había obligado a no creer que estuviera pasando, que tal vez solo fuera su imaginación... Pero no era así…
Dos días después de aquel cambio, decidió que necesitaba saber que estaba pasando. Camino en silencio hasta el parque y se sentó cerca del lago a esperar, su expresión reflejada en aquel lugar era como siempre: inexpresiva pero en sus ojos había un pequeño brillo nerviosos. Aun veía el agua cuando se reflejo Aone, incluso el perro parecía percibir el cambio. No se movió de su lugar hasta que lo tuvo relativamente cerca y camino despacio hasta el. El capitán de Teiko tenía un semblante serio y también ligeramente sorprendido de ver a Tetsuya en ese lugar, lo cual era extraño: no era la primera vez que ellos dos se veían ahí sin embargo esa era la sensación que Akashi proyectaba.
-¿qué haces aquí Tetsuya? -incluso su voz era distante
-¿quiero saber que está pasando?
-no sé de que hablas, si es por los recientes cambios en el equipo, no es novedad que terminara pasando. No hay manera que podamos seguir entrenando de la misma manera cuando nunca hemos sido iguales. En este nivel no hay nadie que nos sobrepase
-pero y...
-¿el equipo? Nuestra fuerza individual es lo suficientemente abrumadora como para necesitar de "el equipo" -la expresión de Kuroko debió mostrar un profundo dolor porque Akashi parpadeo y levanto una ceja. - ya te lo dije no se qué te sorprende, tu mejor que nadie sabe quién es cada uno de ellos
-por eso mismo, porque se quienes son no creo que debas permitir que se alejen, no ahora -la mirada de Akashi se estrecho
-jamás vas a entenderlo, eres una sombra Kuroko, solo puedes volverte más oscura pero nunca más brillante. Si estas aun en este... equipo, es porque sigues siendo necesario. No olvides lo que tu mismo dijiste, que serias lo que hiciera falta. Eres se elemento que puede alterar el ritmo del juego pero si la fuerza de ellos sigue creciendo...
Kuroko no quiso terminar de escuchar aquello. Todo lo que había creído no era más que una ilusión, nunca había pertenecido a un equipo y lo que era aun peor jamás había sido un verdadero amigo para Akashi y eso dolía de una manera distinta que no lograba darle un nombre.
...
Tetsuya parpadeo tratando de evitar que las lagrimas salieran, dejo escapar un largo suspiro y volvió a pasar la mirada por todo el parque imaginando que tal vez Akashi apareciera pero él no lo iba a hacer, hacía mucho tiempo que él y Aone ya no paseaban juntos por ese parque y menos ahora que estaban lejos
...
Y por fin llego el 14 de febrero, el ambiente en la escuela era tal como lo imaginaban: las chicas se pasaban de salón en salón repartiendo chocolates. Esta vez Kuroko había sido más afortunado y había recibido chocolates, claro no le ganaba a Kagami que no bien había terminado las clases cuando ya se había acabado la mitad pero un asunto debía ser resuelto
-¿y bien? ¿vas a ir? -Kuroko hizo una pausa como pensando que contestar para finalmente responder
-no
-¿qué? Pero...
-no sé de quien se trata y tampoco sé que parque es. ¿a dónde quieres que vaya? -Kagami lo examino con el seño fruncido y al final resoplo
-si supongo que tienes razón, si quería verte debió ser menos misterioso
El día termino sin más novedad que la de seguir recibiendo uno que otro chocolate. Cuando salieron de clases, Aomine ya los esperaba en la puerta y Kuroko llevaba una bolsa llena de cajitas multicolores. Se despidió de ellos y se fue con Nigou mientras les dedicaba una suave sonrisa, no tenía la intensión de arruinarles el día. Podía sentir sus miradas mientras se alejaba pero no se detuvo.
Aun cuando le había dicho a Taiga que no sabía de quien se trataba, termino caminando hasta el parque. Se acomodo en el mismo lugar que la ultima vez y comenzó a ver los distintos paquetitos mientras Nigou estaba acomodado a su lado. Aun si era o no el parque correcto era un lugar ideal para pasar el rato y disfrutar del clima. Tan absorto estaba en sus cosas que no escucho que alguien se acercaba hasta que lo tuvo enfrente y la sombra le oculto la luz, extrañado levanto la vista y se limito a parpadear
-sabía que terminarías recordando
Akashi y Aone estaban frente a él. Sin decir una sola palabra se puso de pie y contemplo al perro y después a Akashi, tenía tiempo sin verlo y era una suerte saber que aquel tirano de su primer año en Rakuzan ya no existía
-estuve a punto de no venir pero es un buen lugar para dar un paseo
Nigou también contemplaba a los recién llegados, eran casi del mismo tamaño él y Aone pero Nigou era un niño y no se mostraba tan digno como el alaska. Había mencionado la palabra paseo pero en realidad terminaron sentados en una banca cercana mientras Nigou molestaba a Aone debajo del árbol. Kuroko no sabía que decir, había concluido que era Akashi pero no se planteo realmente la posibilidad de verlo.
-creo que no te trate muy bien la última vez que nos vimos aquí pero creo que es el único lugar que nos conectaba a los dos
-¿por qué me querías ver? -Akashi se encogió de hombros
-porque quería hacerlo
-pero no necesitabas todo el misterio, no parece propio de ti
-no, tienes razón no parece propio de mi pero siempre que se trataba de ti nada era como debía ser -Kuroko no sabía que responder ante aquello, siempre había creído que era al revés, nunca sabia que esperar de Akashi -lo he estado pensando desde que nos enfrentamos en la Winter Cup de primero, de una u otra manera te las has arreglado para alterar mi vida, para cambiarla y siempre me negué a ver lo que era obvio
El corazón de Kuroko comenzó a latir frenético ¿acaso Akashi estaba hablando de lo mismo que el sentía? Empezaba a tener sentido en su mente el porqué habían dolido tanto sus palabras y su distanciamiento. Cuando estaba en Teiko había creído que era de las pocas personas cercanas a Akashi con quien no necesitaba poner una máscara pero las cosas habían cambiado y el más afectado y dejado atrás había sido él. Entonces ¿por qué Akashi le decía que era él, el que le alteraba su vida?
-¿no lo entiendes? Tetsuya llamaste mi atención cuando eras invisible y te aleje cuando creí que podías ser una debilidad para mí. Las cosas se torcieron demasiado pero volviste a ser tu quien marco el cambio.
Le dedico una suave sonrisa antes de acercarse y tomar a Kuroko del cuello y besarlo. Aun con la sorpresa Kuroko correspondió el beso, disfrutando del tacto de uno en los labios del otro. No había prisa, en realidad nunca la tenían. Cuando se separaron ambos tenían un leve sonrojo y sus ojos se encontraron queriendo descifrar que estaba sintiendo el otro pero por una vez ninguno de los dos sabia que decir. Tetsuya no podía decir que había estado esperando por ese momento porque no había entendido lo que Akashi le provocaba y Seijuuro había aprendido a no asumir nada cuando se trataba de Kuroko
-¿desde cúando?
-¿qué? ¿me di cuenta qué te quería? Yo creo que siempre lo supe. Lo acepte desde que te vi tan feliz con Seirin, algo había dolido porque creía que solo cuando paseábamos aquí ponías esa cara y ver que ya no era exclusivamente mía hizo que lo entendiera por completo. ¿qué me tarde en decírtelo? Si, lo hice, porque primero tenía que arreglar el desastre que había provocado. Además ahora hay una nueva oportunidad -Kuroko inclino la cabeza sin entender -las ofertas de Universidad están comenzando a llegar y quisiera volver a recibir esos pases
-¿así que por eso esperaste hasta ahora? ¿por la universidad?
-estaba muy lejos y lo último que necesitaba era que algo saliera mal por la distancia
-eso significa ¿qué vas a volver a Tokio?
-exacto
Las reacciones espontaneas en Kuroko no eran algo común pero nada en ese día estaba resultando común, sin previo aviso esta vez fue Tetsuya quien le robo un beso a Akashi, que sonrió sobre los labios ajenos y llevo su mano a la cintura para acercarlo un poco más. El beso fue más intenso, cargado de esos sentimientos no dichos y que ahora se desbordaban. Se habían callado un afecto por años sin darse cuenta y como el viento que sopla en febrero esas palabras calladas volvían para por fin ser oídas
-es bueno saber que estas de vuelta
-y es bueno saber que tu nunca te fuiste... Te amo Tetsuya.