Jinki caminó rápido por la calle, su casa estando a un par de cuadras de la de Jonghyun, a quién había conocido hace un tiempo en la última exposición que su mentora y amiga, Soonkyu (también la mamá de Jonghyun) había hecho el verano pasado.
Jonghyun era un hombre joven adorable (recientemente había cumplido 20) y a pesar de que había correspondido sus sentimientos, el hecho de que tenían diez años de diferencia los incomodaba aquí y allí. Nunca fue un problema para ellos, pero el problema era lo que otros decían. Jinki con mucho gusto se volvía sordo ante tales impropiedades, pero Jonghyun era del tipo sensible, siempre tomando cada cosa en su corazón. No había sacado el tema de su diferencia de edad desde que Jinki le había pedido salir y dijo que estaba bien, pero la manera en la que Jonghyun parecía un poco deprimido de vez en cuando, había tenido a Jinki pensando.
Había jurado que estaría ahí para Jonghyun sin importar que, y por eso esta noche, estaba corriendo desde su vecindario hacia el de Jonghyun, dejando de lado el auto porque no podía encontrar las malditas llaves en su apresuro, todo porque Taeyeon (la hermana mayor de Jonghyun; tenía dos más, Sodam, la del medio y Gwiboon la mayor de todos que tenía la misma edad que Jinki) había llamado y dicho que algo malo pasaba con Jonghyun esa noche.
Los ojos de Jinki se agrandaron tan pronto como Soonkyu abrió la puerta de su casa. El olor de queso horneado flotando en el aire, pero no fue el olor lo que lo hizo asombrarse sino la música que estaba a todo volumen en la sala de estar. La lenta música de karaoke estaba siendo eclipsada por una rica y profunda voz que cantaba a todo pulmón unas dolorosas letras sobre un corazón roto y el dolor. Estaba seguro de haber escuchado unos hipidos y sollozos.
Siguió a Soonkyu hacía la sala donde vio a sus tres hijas sentadas alrededor de la mesa de centro y Jonghyun parado frente al televisor, un micrófono en su mano, mientras cantaba junto a las letras que se mostraban en la pantalla.
“Jonghyunnie” escuchó a Soonkyu llamar a Jonghyun. “En serio, ¿Qué está pasando aquí?” preguntó a sus hijas cuando su llamado terminó en unos oídos sordos.
“Él es tierno, ¿No es así?” Taeyeon rió mientras tomaba otra foto de Jonghyun.
Jinki no pudo evitar sonreír. Sí, Jonghyun era alguien adorable a la vista.
“¿Gwiboon?” preguntó Soonkyu a la mayor, su ceño frunciéndose.
Gwiboon suspiró mientras vio a Jonghyun seleccionar otra canción triste. “El hámster de Minho escapó” gruñó mientras la música empezaba a sonar.
“Ha estado llorando desde que volvió. Minho también llamó, pero se rehúsa a hablar a en su estado de llanto empezó a bebe” dijo Sodam señalando las numerosas latas de cerveza acumuladas en la mesa de centro.
“Por favor detenlo” lloriqueó Gwiboon. “Él no escucha a nadie”
“No puedes detenerme” dijo finalmente volteando. Sus ojos agrandándose cuando vio a Jinki parado junto a su madree. Lentamente caminó hacia Jinki, es alcohol en su sistema haciendo su caminata torpe.
“¿Estoy soñando?” preguntó mientras recorría con sus dedos la mandíbula de Jinki.
Jinki se inclinó al toque de Jonghyun.
“Noona, ¿Estoy soñando?” preguntó a sus hermanas.
“No lo estás Jonghyun” dijo Sodam encaminándose a la cocina cuando el horno hizo un ruido de haber culminado. Su madre también la siguió, negando por lo torpe que era su hijo.
Jinki veía curiosamente a las dos que quedaban en el cuarto.
“Estaba hablando de cuan insensibles somos porque las noticias del hámster de Minho no nos entristeció” Taeyeon decidió responder, viendo las fotos tomadas por su cámara, “Dijo que su Jinki lo entendería, sabría cómo se sentía. Diablos, yo también hablé con Minho, no parece triste, siendo su enamorada y la cuidadora del hámster durante sus exámenes, ni si quiera yo estoy tan triste. Además, Hammie escapó hace una semana”
“Íbamos a llamarte para que te lo llevaras, pero no nos dejó, dijo que estarías ocupado con tu exposición” dijo Gwiboon. “Por favor llévatelo, no lo puedo soportar más” y se fue a la cocina.
Jinki jaló al hombre delante suyo envolviéndolo en un abrazo, envolviendo sus brazos fuertemente a su alrededor. “Estará bien” susurró.
Taeyeon tomó una última foto de la pareja que tenía delante y se unió a sus hermanas y madre en la cocina.
“Shh” dijo Jinki mientras se separaba. Secó las frescas lágrimas que empezaban a caer. Besó a Jonghyun en la frente cuando los dedos de este se apretaron alrededor de su camisa. Besó sus ojos y lentamente lo besó en los labios. “¿Qué pasó?” preguntó mientras peinaba las suaves hebras fuera de su rostro.
Jonghyun elevó la vista, su labio inferior temblando bajo la mirada de Jinki y lágrimas silenciosas empezando a caer nuevamente.
Jinki besó la nariz de Jonghyun y entrelazó sus dedos mientras lo dirigía a la cocina. “Voy a llevarlo a la cama” informó Jinki, yéndose cuando obtuvo un asentimiento de todas en la cocina.
Ellos subieron las escaleras lentamente, con Jonghyun inclinándose completamente en Jinki como soporte. Jinki hizo que Jonghyun se sentara en la cama mientras reducía la iluminación y ayudaba al menor a ponerse los pijamas. Se quitó su propia chaqueta y zapatos para acostarse junto a Jonghyun. Dejó que este se acurrucara a su lado, sobó su espalda esperando que el otro hablara cuando estuviera listo.
“Hoy” empezó Jonghyun suavemente cuando sus sollozos habían desistidos, “Se estaban burlando de ti en la universidad”
Jinki se quedó en silencio; su silencio invitando a Jonghyun a seguir.
“Todos dijeron que era muy viejo, que no sabrías como hacerme feliz, que solo era una fase temporal. Yo les respondí, les dije que eras el mejor, que me conoces mejor. Le dije ¿Qué si tenemos diez años de diferencia? No importaba siempre y cuando no amaramos” sollozó, “Ellos dijeron que tú definitivamente me dejarías una vez que tuvieras suficiente de mí, me dejarías cuando encuentres a alguien de tu edad, que me dejarías cuando encuentres a alguien mejor que yo”
“Oh Jonghyun” susurró Jinki, envolviéndolo entre sus brazos, “Todo eso son cosas sin sentido, ¿Bien?”
Jonghyun negó, “Ellos dijeron que nuestra diferencia de edad será un problema que nunca podremos evitar”
Jinki suspiró. Su mente estaba corriendo un maratón. Jonghyun finalmente le había dicho claramente todas su inseguridades, sus ojos húmedos estaban llenos de sus miedos, miedos que Jinki tuvo una vez, pero ahora no porque había visto lo que había sentido en los ojos de Jonghyun y su sonrisa. Y fue en ese momento cuando Jinki supo cómo deshacerse de esos pensamientos innecesarios en Jonghyun.
“Por favor no me dejes” susurró Jonghyun contra la oreja de Jinki, haciéndolo salir de sus pensamientos. Jonghyun envolvió sus brazos alrededor de Jinki con desesperación y Jinki también envolvió sus brazos alrededor del menor, sintiendo su calidez, sintiendo su palpitante corazón contra el suyo.
Deshizo su abrazos para poder ver el rostro del menor, “Hey, mírame” Jonghyun parpadeó, viendo a los ojos de Jinki. “¿Crees que alguna vez te dejaré? No soy una persona de la que te puedas deshacer tan fácilmente, como verás” sonrió brillantemente, “Hay mucho que dijimos y prometimos hacer con el otro, soy un hombre de palabra y-”
Jonghyun había jalado a Jinki para darle un beso, rompiéndolo suavemente con una sonrisa, “Te amo, Jinki”
Jinki sonrió, sacudiendo su cabello, “También te amo”
FIN