cap 7
El sonido de los tacones se dejaba escuchar por el desolado pasillo al igual que el típico rechinar del cuero al rozarse entre si. Los pasos eran largos y firmes, el suave movimiento de las manos que acompañaban su andar le daba elegancia, hasta que simplemente se detuvo frente a la única fuente de luz del lugar, una ventana, se pudo apreciar su blanca piel, unos fríos ojos grises mas una sonrisa que daba miedo de admirar. Abrió la ventana de par en para, para ,luego reírse y saltar de ella.
-^-^-
-¡ME DEJASTE SOLO!- grito Furihata mientras golpeaba una de las grandes raíces con ambas manos.
-Oye, esta bien ya, lo siento.- susurro lo suficiente mente fuerte para que el de cabellos castaños escuchara.
-¿¡Y TÚ CREES QUE TE PERDONARE!?- pregunto mientras pateaba una raíz.- ¡Auch!- dijo para si mientras agarraba su pie.
-Si lo aras, ademas, ni que te aya mordido o comido o violado o algo por el estilo.-
-¡CLARO QUE NO, PERO SU MIRADA DECÍA “AJA, SI, QUITATE LA ROPA”!-
-Eres un exagerado, no creo que se pueda mirar de esa forma.-
-¿Exagerado?… Y si, se puede mirar de esa forma. Osea, cuando mantienes relaciones sexuales, la persona con la que lo haces y tu se miran así...-
-Soy Virgen…-
-Oh… Yo también-
-¿Entonces?-
-Lo leí en una revista cuando era joven.-
-Si, Ahora siéntate te tengo que contar algo.-
14 minutos después…
-Lo diré otra vez.- dijo para levantarse, sacudir su traje y pararse en frente de su interlocutor.- ¡TE LO DIJE!.-
-Si, si, como digas… y por cierto , ¿que sucedió después de que me valla?.-
-Oh, pues veras…-
Flash Back.
-Creo que… estamos solos…-
-Amm, si... ¿Que deseaba?- pregunto ansioso el castaño.
-Ya lo dije, hablar contigo.- respondió con una tenue sonrisa.
-Si quería hablar conmigo, ¿Por qué no le hizo ante?-
-Era divertido observarte.-
-Oh, si amm...- dijo mientras cerraba los ojos y con pasos lentos se dirigía hasta la cama del cejas partidas, para luego sentarse.- ¿De qué desea hablar?.- empezo a temblar
-Solo quería decirte que dentro de una semana te vendré a buscar, prepara tus cosas.- respondió mientras se sentaba en la cama del castaño y con las manos apretaba de apoco el colchón.- ¿No te duele la espalda adormir aquí Kouki?.- pregunto frunciendo el ceño y la nariz.
-Espere ¿Qué? ¿Para qué me vendrá a buscar?- pregunto levantándose de su lugar para fruncir el ceño en son de frustración.- Y si abecés me duele.- respondió
-Oh lastima, te vendré a buscar por que seras mi futura esposa.- respondió mientras miraba el lugar sin interés para terminar mirando al castaño y sonreír de manera coqueta.
- Oye creo que estas algo mal, jeje, soy hombre no te serviría como esposa.- respondió mientras arqueaba perfectamente la ceja izquierda
-No estoy mal, y seras mi esposa quieras o no porque mis ordenes son absolutas.- dijo para luego levantarse elegantemente, borrar la pequeña sonrisa que habitaba su rostro y caminar hacia el castaño.- No me hagas esperar, ademas, por quejarte, ahora tienes en total 4 días para empacar, despedirte y otras estupideces mas que desees hacer.- continuo mientras agarraba fuertemente la mandíbula del otro acercándose de apoco a los finos y apetecible labios color cereza que su interlocutor poseía.- y créeme, no me querrás hacer enojar.- termino mientras soltaba bruscamente el lugar que había sostenido entre sus dedos para luego girar, y caminar con pasos firmes hacia las rejas, abrirlas y salir sin despedirse…
Fin del flash back
-….-
-¿No vas a decir nada?…- pregunto mientras movía la cabeza a los costados pausadamente.
-¿Te vas a ir?- pregunto Kagami haciendo pucheros, mientras sus ojos se cristalizaban.
-Si… ”yeme, ¡NO! No me iré, ¿Cómo crees que te dejare a ti y al bebe solos?.- pregunto mientras juntaba las cejas en son de frustración.
-Si te vas… ¡Llevame contigo!.- sollozo mientras las lagrimas rodaban por sus coloradas mejillas.
-¿Por qué aseguras que me iré?.- pregunto mientras estiraba sus brazos hacia el pelirrojo.
-Si no vas, haras enojar al enano, así que mejor ve.- respondió mientras aceptaba el abrazo del castaño e hipaba en su hombro.
-El Kagami Taiga que conocí era uno que le importaba un reverendo comino lo que pensaran, digan o murmuraran los demás…- dijo mientras se soltaba del abrazo.- Era rebelde y sus ojos aunque vacíos, cuando se enojaba eran fieros, con un orgullo de los mil demonios…- continuo mientras sonreía.- ¿Que cambio?.- pregunto
-No se, puede que.. si me llevas contigo, ese Kagami vuelva…- dijo mientras sonreía, secaba sus lagrimas y movía los hombros con ritmo.
-No me iré…-
-Si lo harás..-
-Que no.- Furihata
-Que si…- Kagami
-Que no.- Furihata
-Que si…- Kagami
-¡QUE NO!- Furihata
-¡Que no…!- Kagami
-¡QUE SI..! mierda…- Furihata
-Kagami 1, Chihuahua 0…- dijo mientras levantaba los brazos y movía las caderas
-¿Chihuahua?.-
-Es que… ayer no te diste cuenta pero.. comenzaste a temblar al ver al enano y me dije mientras iba de camino a mi habitación “Furi parecía un Chihuahua...” y me quedo.- respondió con simpleza
-¿Sabes que? Muérete..- dijo Furihata mientras sonreía
- Gracias, yo también te amo.- dijo el pelirrojo mientras levantaba ambas cejas y llevaba una de sus manos al pecho.
-Lo se cariño.- le siguió el castaño mientras juntaba sus manos en su regazo.
-¿Vamos a comer?- pregunto Kagami levantándose con trabajo de la raíz.
-Claro y… ¿Por qué no me pediste ayuda?- pregunto el castaño levantándose también de su lugar.-
-No se, preguntale al “Que Pesado...” o algo así que dijiste el primer día que me viste.-
-Oh… eso.. ah, jaja., lo puedo explicar..-
-No importa, Ya, vamos.-
-Si…-
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