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Pequeña estrella. por DNA

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Notas del capitulo:

Hola preciosas :3

Van a matarme pero aquí les dejo los siguientes capítulos.

Disfruten o tal vez no~

Luego de que se hubo terminado de cambiar y salió de su habitación-si así podía llamar a eso-se encontró totalmente solo, se sentó en el sofá de antes y miró a todos lados sin saber que esperar, sus nerviosas manos sostenían y estrujaban su pequeña estrella de felpa, había sido una suerte que ese tipo no hubiera decidido quitársela mientras estaba inconsciente.

Comenzó a mover sus pies nerviosamente y comenzó a morderse las uñas de la mano izquierda ya que con la derecha seguía apretando fuertemente su estrella, la puerta principal se abrió y tras ellas apareció Killer que lo revisó con la mirada de pies a cabeza antes de asentir.

Su brazo fue apresado por la mano más grande de ese hombre que comenzó a arrastrarlo como si fuese un simple bulto, Luhan apenas tuvo unos segundos para poder mirar a su alrededor descubriendo que estaban en un edificio y que la pintura se veía igual de vieja que en el pequeño apartamento donde ambos estaban.

Al salir al exterior se sorprendió al ver la fachada de aquel lugar, era increíble que ese sitio siguiera de pie, apenas pudo darle una mirada antes de ser empujado al interior de esa auto que ya conocía, Killer subió segundos después y puso en marcha el vehículo lanzándole su mirada de advertencia un par de veces por el espejo retrovisor.

No distinguió nada a su alrededor hasta que finalmente estuvieron cerca del hospital, su carcelero se detuvo una cuadra lejos del hospital, bajó y con la misma hostilidad que Luhan ya conocía lo hizo bajar también para luego pasar uno de sus brazos por sus hombros y comenzar a andar.

Fueron así todo el camino hasta el interior del hospital y antes de que se marchara él le dio un fuerte apretón en uno de sus hombros para detenerlo, Luhan lo miró nerviosamente sin saber que pasaba, que no se arrepienta, era lo único que pedía.

-Mucho cuidado con lo que haces o dices, intenta escaparte y te matare sin importar las órdenes que el señor Oh haya dado, tienes veinte minutos-dijo antes de darle un ligero empujón para dejarlo ir-Te espero aquí.

-N-no tardo-murmuró.

Recorrió tan rápido como pudo ese caminó que conocía a la perfección, se detuvo frente a la puerta sin atreverse a entrar y miró a todos lados hasta que una puerta a la derecha captó su atención, una enfermera salió de ahí escribiendo sobre un portapapeles y Luhan se apresuró a caminar hacia ella.

-Disculpe-llamó apresurado al verla empezara a alejarse.

-¿En que puedo ayudarlo?-habló educadamente la enfermera.

-Podría permitirme una hoja de papel y su bolígrafo-pidió, ella lo miró de forma extraña y Luhan se apresuró a hablar nuevamente antes de recibir un no por respuesta-Es importante, lo juro-insistió.

La joven enfermera pareció apiadarse de él,  extrajo una hoja del portapapeles y se la entregó junto con el bolígrafo, Luhan sonrió agradecido y se apresuro a escribir lo que necesitaba antes de doblar la hoja y guardarla en unos de sus bolsillos, le devolvió a la enfermera su bolígrafo y le sonrió antes de volver a pararse frente a la habitación de Baekhyun y abrir la puerta por fin.

La risa de su amigo llenaba la habitación, estaba conversando con la enfermera que estaba cambiando su cama, la risa se fue en cuanto los ojos de Baekhyun se posaron en él, Luhan se forzó a sonreír y lo único que obtuvo como respuesta fue una mirada llena de rencor.

-¿Cómo te atreves a venir aquí?-preguntó Baekhyun con enojo.

-Lo sé pero…-no, ya no podía seguir llorando, había tenido tiempo para eso y lo hizo, era hora de mostrase firme-¿Cómo está?-preguntó en un murmullo.

-¿De verdad te importa o sólo es el remordimiento de saber que lo abandonaste cuando más te necesita?-inquirió.

-Sé lo que hice pero necesito saber cómo está-suplicó

-¿Y por qué no vas y le preguntas?-bufó.

-N-no, yo…no puedo…es imposible-susurró apretando los puños.

-Realmente eres increíble-resopló-Te vas como si nada y ahora vienes aquí preguntando por él como si de verdad te interesara.

-Sé la clase de persona que soy y siempre supe que no lo merecía pero necesito saber-musitó débilmente con la cabeza agachada.

-Tienes razón, debí escucharte cuando me dijiste que eras malo para él y no dejar que te le acercaras.

-Baekhyun por favor-suplicó.

-Entonces sí sabes todo eso no vegas aquí, él no te importa así que deja de fingir que sí lo hace, déjalo en paz de una vez por todas-exigió.

-Necesito saber-repitió apretando fuertemente los puños.

-Destrozado, la persona que amaba no es más que basura y ahora la única familia que tenía murió, tú ya deberías saber que te necesita más que nunca pero eres un imbécil y no harás nada, ahora vete-ordenó.

-Yo...

-Jade-llamó a la enfermera-Necesito salir a tomar aire, ¿me ayudas?-pidió.

La enfermera que hasta ese momento no había dicho nada y se había limitado a mirarlos, se acercó rápidamente a Baekhyun, él ya estaba en una silla de ruedas así que ella solo tuvo que empujarlo hasta la puerta.

-No quiero verte al volver aquí-advirtió y finalmente abandonó la habitación completamente.

Luhan permaneció inmóvil en su lugar luego de que la puerta se hubo cerrado, cerró los ojos con fuerza y luego caminó hasta la cama de Baekhyun, sacó del bolsillo de su pantalón la hoja que antes había guardado y la colocó bajo la almohada de su amigo.

Fue hasta la puerta y dio una última mirada a la habitación antes de salir, una vez en el pasillo miró en todas direcciones tratando de recordar la ubicación de aquella habitación hasta finalmente conseguirlo y caminó hacia ella rápidamente, estaba en esa ala del hospital y eso era una suerte para él.

Se aseguró de que no hubiese nadie cerca antes de ingresar a la habitación y bloquear la puerta, corrió hacia los lockers maldiciendo por lo bajo al darse cuenta que no tenía nada con que abrir los candados.

Miró en todas direcciones hasta que para su buena fortuna se encontró con un pasador en el suelo y sin perder ni un segundo más se puso manos a la obra, tenía que darse prisa o de lo contrario estaría perdido.

Sus primeros tres intentos fueron en vano hasta que finalmente halló lo que buscaba, se cambió de ropa tan rápido como podía, escondió su rostro con un cubre bocas y finalmente se puso la camperaroja ocultando su cabello con el gorro de esta.

Había un reloj en la habitación y al verlo se dio cuenta que su tiempo se agotaba, metió su estrella al bolsillo de los pantalones blancos y desbloqueó la puerta para salir de ahí rápidamente, no le quedaba mucho tiempo y no podía perderlo así que decidió arriesgarse usando la entrada principal.

Sudor frío comenzó a recorrerlo cuando a lo lejos distinguió la figura de Killer, su corazón latía tan rápido que iba a salirse de su pecho, sus pasos eran lentos para no parecer sospechoso aún cuando quería salir corriendo, pasó a un costado de Killer pero este no lo reconoció y por eso ni siquiera lo miró.

Se mantuvo tranquilo hasta estar dos cuadras lejos del hospital y entonces comenzó a correr con todas sus fuerzas, era su única oportunidad, no podía atraparlo, todo lo que había hecho hasta entonces dependía de eso y aunque sabía que lo más difícil sería lo que vendría después lo afrontaría sin miedo, ya que lo había perdido todo no había espacio para temer.

Tardó demasiado en llegar a su destino pero lo hizo, aún con lo mucho que le dolía el cuerpo por su maratón y las diez veces que se había perdido en el camino, entró sin perder ni un segundo y se quitó su improvisado disfraz mientras miraba a todos lados con nerviosismo.

Tenía que encontrar a la persona adecuada pero no tenía ni idea de cómo la reconocería, no había pensado en eso antes y ya que había llegado así de lejos quería golpearse por haberse olvidado de un detalle tan importante.

-Oh, realmente eres tú-dijo la persona que había tocado su espalda haciendo que se girara para verla-Me alegra verte, ¿cómo has estado?-preguntó con una amable sonrisa.

¿Qué tan desesperado se tenía que estar para confiar en una persona solo por su sonrisa?

Luhan no sabía pero la sonrisa que ese hombre le daba le parecía tan sincera que Luhan no lo pensó dos veces para decidir pedirle ayuda y confiar en él, lo conocía de antes cuando había chocado su auto, ese oficial había sido muy bueno con Luhan que simplemente había sabido mentirle y manipularlo a su antojo, Luhan estaba arriesgándolo todo al decidir aferrarse a ese sentimiento de seguridad que el joven hombre le transmitía pero no sentía arrepentimiento al tomar esa decisión.

-¿Ya no me recuerdas?-inquirió al verlo con esa mueca que a él le parecía de confusión-Soy el oficial LeeJong Jin-le dijo en un intento porque recordará.

-Ayúdame por favor-suplicó desesperadamente mientras sujetaba con fuerza la camisa del joven oficial.

-Hey, tranquilo-habló tomando sus manos-¿Qué pasa?-preguntó.

-Necesito que me ayudes, necesito que jures que no vas a traicionarme-imploró.

-Tienes que explicarme que sucede-indicó.

-Esto-dijo mostrándole la pequeña estrella de felpa.

El oficial lo miró confuso hasta que Luhan rompió el pequeño objeto y sacó de entre los restos de lo que antes era la pequeña estrella amarilla una memoria USB que puso en la palma de su mano para luego cerrar su mano sobre la USB.

-Entrégasela a una persona confiable, alguien que pueda proteger lo que amo-pidió.

-¿Qué es esto?-inquirió mirándolo con desconfianza.

-No importa, haz lo que te pido y apresúrate-ordenó.

El desconcertado hombre vio como el castaño daba la media vuelta y comenzaba a alejarse, no lo detuvo y sólo miró lo que él le había entregado sintiéndose demasiado confundido, apretó la USB en su mano y asintió, sabía a la perfección quién podría ayudarlo con eso.

*****

Una sonrisa deprimente se dibujó en sus labios cuando finalmente estuvo ahí, se las arregló para saltar el portón y tener acceso a la vieja residencia, abrió la puerta de una patada y se tomó un minuto para mirar a su alrededor.

Había pasado toda la tarde corriendo por todos lados dejado pistas falsas para retrasar tanto como fuera posible lo que vendría para finalmente terminar en ese lugar, había corrido ahí como se lo había prometido a Sehun cuando eran un par de adolescentes y estaba cumpliéndolo igual que antes, suspiró y comenzó  a caminar hacia la sala de estar, se quito con mucha pereza la campera roja y la arrojó al viejo sofá frente a la chimenea dejándose caer sobre él totalmente exhausto, el cuadro de la madre de Sehun seguía sobre está y Luhan se quedó ahí mirándolo fijamente.

-Está hecho.

Se dijo a sí mismo y a la vez también se lo decía al cuadro de aquella hermosa mujer, Sehyung ya debería estar buscándolo como un loco pero ya era tarde y él no iba a huir, tenía que dejarse atrapar porque de esa forma Sehyung estaría tan ocupado encargándose de él como para poder escapar o pensar en nadie más, sería la carnada, haría lo mismo que Suho había hecho, sacrificarse para volver intocables a las personas que amaba, tan sólo tenía que esperar y nada más.

Algo llamó su atención en el cuadro y tal vez estaba loco pero juraría haberla visto sonreír, a esas alturas ya de verdad no le importaba haber perdido la razón y por esa razón también sonrió, se acomodó sobre el sofá para poder abrazar sus piernas sin dejar de sonreír, era una locura pero en verdad se sentía feliz.

*****

-¡Señor tiene que ver esto!-exclamó el agitado oficial.

Eran las primeras horas del día cuando el joven oficial entró intempestivamente a la oficina de su superior que lo miró sobresaltado ante tan brusca irrupción, su ceño se frunció al instante al ver al más joven avanzar rápidamente hasta él sin decirle nada más.

-Jong Jin, ¿qué significa esto?-preguntó un tanto molesto.

-Tiene que ver esto-insistió y sin pedir permiso conectó la USB al ordenador de su superior.

-¿Qué es eso?-cuestionó desconcertado.

-Ayer por la tarde un joven llamado Luhan vino aquí y me pidió ayuda, me entregó esta USB y me suplicó que se la entregara a alguien de mi entera confianza, al principio no entendía nada así que no le dije nada ayer y me llevé la USB para revisarla y no va a creer esto-aseguró.

El mayor miró fijamente el monitor una vez que la USB fue reconocida, una sola carpeta con el nombre de PRUEBAS era todo lo que había, miró al hombre más joven a su lado que se hizo a un lado dejándolo revisar por sí mismo.

Su expresión de confusión fue cambiada por una de completo asombro cuando accedió al contenido real de la USB, miró rápidamente al joven oficial esperando una explicación a lo que todavía no podía creer.

-Ese chico nos entregó ayer las pruebas que hemos buscando por años para hundir a Kang Byung Sun y a su socio Oh Sehyung-corroboró el más joven a los que sus incrédulos ojos veían.

-¿Dónde está Luhan?-preguntó alarmado.

-No lo sé, se fue tan rápido como me entregó la USB-respondió seriamente, estaba preocupado por él, se veía muy nervioso cuando lo había visto y era entonces que se recriminaba no haberlo detenido.

-Ve, arma un equipo y búscalo, tráelo aquí a como dé lugar, ese chico necesita protección o lo mataran, encuéntralo rápido-ordenó.

-Sí señor-dijo y salió a toda prisa.

El mayor lo miró nuevamente su computadora sin poder creérselo aún, se puso de pie a toda prisa y tomó la USB, no sabía como lo había hecho pero ese chico había conseguido lo que él había buscado por años, finalmente y gracias a él por fin era hora de ver a esos bastardos caer para siempre.

*****

-Volveré a New York-le susurró a la fotografía de su hermano mayor que llevaba contemplado desde hacía horas.

Lo había estado pensando por mucho tiempo, los días de Sehyung estaban contados al fin y al cabo, no tenía ya nada que lo atara a esa ciudad y siempre le había gustado más su vida en el extranjero, una vez que todo acabara planeaba irse y no volver porque ya nada iba a esperarlo ahí.

-¡Sehun!-llamó Kai casi a gritos.

Sehun elevó la mirada dejando de lado sus deprimentes pensamientos para ver a su alterado amigo, el moreno parecía estar listo para darle la peor de las noticias pero ya nada peor de todo lo que le había pasado podría suceder.

-Mis informantes acaban llamarme para decirme que la policía está buscando a Sehyung-informó.

-¿Qué?-musitó incrédulo.

-Lo que oyes-dijo nervioso.

-¡Eso es imposible, ese no era el plan, no puede terminar así!-exclamó furioso, no podía terminar así, no luego de todo lo que Sehyung le había quitado, el merecía algo peor que solo la cárcel.

-Lo sé, lo sé-soltó exasperado-Y eso no es todo-suspiró fuertemente antes de mirar a su rabioso amigo a los ojos-Al parecer alguien le entregó ayer a la policía una USB con pruebas para hundirlo-respondió mirándolo con preocupación y temor.

Sehun hizo una expresión idéntica a la del moreno, no daba crédito a lo que escuchaba no solo porque arruinaba sus planes para finalmente acabar con Sehyung sino porque aquello era imposible, nadie más que él poseía algo así, repentinamente el recuerdo de Luhan ahí en su despacho el día que perdió las llaves del cajón de su escritorio acudió a él.

Vine a buscar un abrecartas pero hice un desastre al buscarlo y algunas cosas terminaron en el suelo así que estaba levantándolas…

Sentimientos asfixiantes de angustia y el peor de los miedos se instalaron en su pecho mientras se apresuraba a abrir el cajón y sacaba la pequeña caja que debería tener la USB, la abrió y al ver su contenido su corazón se detuvo.

«Lo siento, te amo»

Ponía una nota que estaba en el interior junto con Hun y Han además del anillo y collar que le había dado a Luhan.

-No-murmuró incrédulo para luego sentir una corriente de puro pánico viajando directamente a su corazón-¡Joder, ¿qué rayos has hecho?!-soltó angustiado antes de salir corriendo de ahí, debía encontrarlo cuanto antes.

*****

«Perdón por todo y gracias por ser mi amigo todo este tiempo, cumpliré la promesa»

Miedo fue lo único que pudo sentir luego de haber leído la nota que había hallado bajo su almohada, trató de ponerse de pie pero su enfermera lo impidió regresándolo a la cama sin importar cuánto pataleó por liberarse.

-No puede moverse aún-le recordó.

-¡Déjeme ir, tengo que ir con él!-exclamó histérico.

-No puede salir-sentenció.

-¡Déjeme ir!-ordenó luchando inútilmente con su enfermera y las demás que habían ido a ayudarla-¿Qué hiciste Luhan?-sollozó Baekhyun apretando con fuerza la hoja de papel que su amigo le había dejado.

Notas finales:

TT~TT malditos todos


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