POV MinSeok.
Desperté pronto, debido a los constantes quejidos de LuHan… De nuevo estaba soñando, y era algo malo. Le estuve acariciando la cabecita un rato, recordando todo lo que sucedió anoche. Creo que quizás sí le hice bastante daño. Sin duda habría que comprar lubricante y pastillas para el dolor. Me pareció monísimo verle tranquilizarse y soltar muchos “Baozii” Así que ahora soñaba conmigo? Pero por qué me despertó a estas horas… Eran las 6, y podría haber dormido una hora y media más…
Como sea.
Al salir de la cama le arropé con cuidado. LuHan era precioso y no le quería dañar por nada del mundo, pero quizás me dejé llevar un poco anoche. Ese día, fue el día en el que perdí mis dos virginidades, con LuHan. No sé si él era virgen de algo, no creo… Bueno quizás de atrás sí, pero algo me dice que no. Algo me dice que solo por su orgullo dice que nadie le ha hecho nada, pero prefiero pensar que es así y que al menos, tuvo su primera experiencia en eso conmigo.
Mierda.
Recordar que hoy tengo que ir con SuHo y Baek a comprar ropa de mujer, peluca… Mierda.
No sé si deba aceptar eso. Me humillarán y a mí no me apetece. A LuHan le di una lección, pero al resto que les diré.
Mientras estaba perdido en mis pensamientos me asee y arreglé un poco el pelo. Algo de maquillaje, solo un poco, y un poco de gomina, solo un poco, para mantener bien el pelo…
Mierda.
Quizás de nuevo lo hacía. Yo nunca tuve complejo de diva, pero últimamente me cuido demasiado. Creo que es por LuHan, no estoy seguro. Yo antes nunca me ponía maquillaje, y desde que Baek me dijo que quizás el delineador no me quedaría mal… Le empecé a pedir consejos… Y aquí estoy, maquillándome. Al menos yo soy sutil, no como la diva esa, que se ponía 90 kg de maquillaje. Bueno quizás exagero…
Fui a la cocina, para hacer el desayuno. Tampoco es que hubiese muchas cosas en la nevera, porque en la calle, bajando un poco, había una tienda, y siempre que necesitásemos algo, podíamos ir ahí a comprar. Era otra de mis manías. Por qué comprar algo si no lo necesitas? Y ya que teníamos una tienda de alimentos al lado… Qué sentido tiene?
Sí, le tuve que arrancar ese hábito a LuHan. El hábito de llenar toda la nevera de salsas y carne y más carne… En serio, creo que ese chico se alimentaba a base de carne y salsas teriyaki y cosas así. Claro que de vez en cuando no está mal, comer carne, pero no todos los días y a todas horas…! Y las verduras y frutas? Ese maldito ciervo…
Claro que después de varios “Luu, por favoor” Y cara de Baozi, él accedió y reordenamos toda la nevera y empezó su dieta, su dieta sana.
Ahora que empezamos con el bar, y volvíamos sobre la 1 de la noche, quizás convenía cocinar antes, para así volver, comer e irse a dormir.
Sería buena idea.
A veces pienso que sin mí la vida de Lulu hubiese sido un desastre. No es por creerme mucho, pero a saber desde cuando no había limpiado antes de que llegara. A saber desde cuando no limpiaba las ventanas, que pareciera que tenían una capa de suciedad que filtraba la luz solar…De verdad. A saber si le daba alguna enfermedad, porque flaco, LuHan, flaco era.
Pero no sanamente delgado, sino flaco. Comía mal y se le notaba, y a pesar de mis gustos por su perfecto cuerpo delgado y frágil, blanco y suave… Bonito y palpable…Ejem, sí. A pesar de eso, le había decidido engordar. Al menos unos kg…Unos pocos kg… Y ya iba bien, notaba sus mejillas más infladas, pero no era suficiente.
Cuando me terminé de beber el café fui al cuarto. Me vestiría e iría a comprar productos de aquella tienda, para hacerle un desayuno americano a Lulu. Tortitas, huevos fritos, salchichas… En mi casa una vez a la semana comíamos eso.
En mi casa, ¿eh?
¿Qué estarían haciendo mis padres?
¿Se preocuparían por mí? Conociéndoles, seguro no tardaron en soltar el rumor de que he desaparecido y probablemente esté muerto, para así justificar el hecho de que la herencia pasase al nombre de Woo.. Y no, no me interesa la maldita herencia. Creo que soy suficientemente feliz al lado de los chicos, con EXO y con LuHan a mi lado, como para interesarme mi podrida vida. No les echo de menos… ni un poco…
No…
Me puse también la máscara para que nadie me pudiese reconocer, que dime tú quién me va a reconocer si no me conocen, pero por si acaso.
Cogí mi monedero, acariciando por última vez la cabecita de LuHan, sonriendo y despidiéndome.
Operación Engorda al Ciervo, comienza!
Compré lo necesario para engordar al ciervo. Pasando por la casa de SuHo y el resto, decidí vengarme. Llamé unas 20 veces al telefonillo, para despertarles a todos… Malditos desgraciados… Vestir a su Hyung de chica? A la mierda…
Seguí pinchando, ya no pulsando, sino apretando con todo el odio del mundo.
Oí gritos de “Quién mierda es a estas horas!!?” Por parte de Baek. Y un “Hyung matales!!” Por parte de Kai… Y un “Que no sé quien mierda es!” Por parte de un Chen cabreado… Sí, en el telefonillo se escuchó alguien.
-Quien es? – Era el sonámbulo de SeHun. Me puse nerviosisimo, salí corriendo, escuchando antes un. – Hyung, puedo verte, hay cámaras.
Eso sí que me hizo correr como nunca, para meterme en mi piso y empezar a subir las escaleras… Me reía, me reía como nunca. Mi adrenalina estaba por los aires, y más al pensar qué me harían si SeHun les dijera que fui yo…
Abrí la puerta del piso, acelerado y aún tenso. Llevé la bolsa a la cocina, sacando los productos… Me puse mi delantal de ardillas tan mono, comenzando a prteparar el desayuno… De fondo me había puesto TVXQ, siempre fue de mis grupos favoritos. Cantaba en bajo, bailando también, moviéndome, divertido. Hoy presentía que sería un buen día.
*Pov Normal*
LuHan había despertado hacía un rato al escuchar música de fondo, muy baja, pero aun así se escuchaba. Su Baozi la estaba montando… Y mierda, ahora que se fijaba, le dolía el trasero demasiado.
Dio un suspiro de molestia, levantándose con cuidado y yendo al baño…Se miró al espejo, analizando su cuerpo.
Los músculos que tuvo hace varios años cuando era Ming los había perdido, ahora era solo un palillo blanco y sensible. En cambio MinSeok estaba cada vez con más masa muscular…
LuHan se tranquilizó, se tranquilizó con un “Yo puedo ganar músculos si quiero, pero él no crecerá más de altura” Y se rio de forma malvada. Además a él le gustaba ser tan flaco, prefería eso ante los músculos. No le pegaban, a LuHan no. No se quería ver parecido a Ming. Ming nunca volvería.
Cuando se alistó, después de casi 20 minutos, salió. Iba con una toalla atada a la cintura, dejando ver su bonito pecho… Su pelo pelirrojo mojado por su frente, las gotas de agua cayendo…
Caminó a la cocina, y ver a su Baozi bailar así, escucharle cantar… No supo cuánto se quedó detrás de él, espiando. Lo que llegó a concluir fue una cosa: A MinSeok se le daría bien ser idol.
Su Baozi se movía de forma sexy, su voz era dulce y melodiosa, sabía cantar muy bien y además, quieras o no, MinSeok era precioso, en todos los sentidos. Pero LuHan no estaría dispuesto a perder a su Baozi, o compartirlo con fans.
Se acercó, abrazándole por la espalda… Pegó su nariz en el cuello de su chico, aspirando… - Te eché de menos, mi Baozi. Por qué no me despertaste cuando tú despertaste? Me sentí muy solo en la cama.. – El chico miró de reojo lo que XiuMin cocinaba, desayuno americano? Wow…
MinSeok se sorprendió por ese abrazo. Pudo sentir gotas de agua caer por su hombro. Al girarse vio a LuHan, recién salido de la ducha. Se coloró como nunca, tapando sus ojos… - Lu..ge..yo es que te quise preparar un desayuno sorpresa y… por eso…
Una de las razones por las que LuHan quería tanto a su Baozi era esa. Lo tierno que era, como si jamás le hubiese visto el pecho desnudo. Como si anoche no fuese él el que le embestía el culo y le daba azotadas mientras le susurraba guarradas…
Oh no, LuHan, no recuerdes eso… Oh…No…
Miró hacia abajo, su erección había despertado.
Baozi también bajó su mirada a donde miraba LuHan, poniéndose más rojo que antes, sintiendo calor, necesidad… A él también le pasó por la mente aquella escena, y sí, sin evitarlo, a él también le despertó algo.
Ambos se miraron, primero Baozi se rio, luego LuHan, los dos avergonzados.
-Creo que verte así me afecta. – Con su voz tierna habló MinSeok, acercándose a su LuGe y dándole un beso suave en los labios…
LuHan hubiese dicho un “Creo que verte sin más me afecta” Pero no pudo, ni quiso. Prefería comerle los labios a su Baozi que hablar.
Sí, los dos lo sabían. Después de lo que pasó ayer, nada entre los dos volvería a ser igual. Y ambos no podían estar más a gusto.
Porque aún no se habían confesado el uno al otro, pero tampoco tenían prisas para hacerlo. LuHan quería que fuese especial, quería darle a entender a su Baozi que era el único… El único ser humano que había marcado un antes y después en el ciervo, porque los otros, estaban muertos.
Después de un rato de besos y caricias, los dos consiguieron separarse. Era toda una preparación mental para LuHan, todo un sufrimiento. Alejar sus manos del trasero de Baozi era cruel. Pero Min no dejaba de susurrar entre besos que “Los huevos se queman…” Y LuHan no le podía dar más la razón, sus huevos estaban hirviendo, sí.
El desayuno fue uno de los mejores que le había preparado XiuMin desde su llegada. LuHan comió y comió, acabándose todo, mientras hablaba de temas cotidianos con su Baozi, como si ya había venido la señora para dar las facturas de la luz… Si era muy caro ir a un Gym… Que si LuHan amenazando a un pobre MinSeok diciendo que si se ponía a ligar en el Gym, quemaría al edificio… Cosas típicas.
Como Lunes que era, la rutina volvía. A las 7 abría la pastelería, pero eran Lay, SuHo, Baek y Chen los encargados de abrirla. A las 7:30 les tocaba ir a Min y a Lu. Solo que hoy recibieron un poco extraños a MinSeok.
-Maldita escoria del demonio! – Se escuchó un BaekHyun acelerado, ignorando los clientes que querían beber su café tranquilamente…
-Que ha pasado? – Lay preguntó, confuso, pero como a veces era normal, fue ignorado.
MinSeok se escondió detrás de su LuGe, abrazándole… - Protégeme… la diva me matará…
LuHan asintió, abriéndose de brazos para impedir a BaekHyun el ataque con la bandeja que le tenía preparado a MinSeok…
-Cómo te atreves a llamar como loco a las 6 de la mañana! El susto que me diste! – Chen se paró detrás de Baek, agarrándole de la cintura y atrayéndole..
-Tranquilo, Baekie.. Igual debíamos despertar pronto, no? – Preguntó, acariciando un poco las caderas de su amigo, que le apartó.
El que se llevó el tablazo en la cabeza fue otro. Un querido Chen.
LuHan no pudo evitar reír, luego girarse hacia su Baozi. – Es cierto lo que dijo? Les despertaste? – Cuando vio que Min asentía de forma tan dulce e inocente, LuHan le abrazó… Casi le besa ahí delante de todos, pero se contuvo, y además, MinSeok le apartó.
-Aprovechando que no hay mucha gente a estas horas, Xiumin Hyung, vamos a comprar eso. – SuHo vino como siempre en el momento indicado, en el momento de ver como Baek le golpeaba con la tabla de metal a Chen en la cabeza, y MinSeok apartaba a LuHan bruscamente… Solo pensó un “Pasivas….”
-Se lo diré a Chanyeol! – Baek amenazó a Baozi. Señaló con un dedo. Eso sí le hizo a XiuMin temblar… Chanyeol siempre le dio miedo, porque imponía. Aunque si tuviera que compararlo con el miedo de las compras que le esperaban hoy… Chanyeol no era nada.
LuHan le dio un empujoncito a su Baozi. Sonrió. – Vamos, espero elijas cosas bonitas y te conviertas en la mejor Baozi del mundo. – Dijo, sonriendo.
MinSeok soltó un gruñido, saliendo del edificio. SuHo le siguió, divertido por la situación. Sí, hoy sería un día inolvidable para MinSeokka.
Ambos ya en el coche, SuHo conduciendo, Min en el asiento del copiloto, empezaron una conversación que quizás SuHo nunca tendría que haber empezado.
-No sabía si tenía que…decírtelo. – SuHo miró nervioso de reojo a su amigo. Le había cogido mucho cariño en este mes, como todos. Era verdaderamente un buen Hyung, que había cambiado a LuHan para bien. SuHo antes nunca aprobó la facilidad con la que su amigo cambiaba de mujeres, y era consicente que desde que conoció a Baozi, ya no sentía necesidad de llenar ese agujero.
Lo que le preocupaba a SuHo era qué pasaría cuando el hijo de la famosa familia multimillonaria Kim fuese descubierto y se tuviese que ir a su casa. Eso le preocupaba a SuHo, porque MinSeok vivía en un mundo de arcoíris junto con su LuHan, ambos tan contentos, pero la realidad era otra. La realidad les podría golpear en cualquier momento y ellos no sabrían cómo actuar, porque ni LuHan conocía el pasado de MinSeok, ni MinSeok el de LuHan, y SuHo era el único consciente, quizás, junto con JongDae. JongDae porque estaba muy metido en la vida de la telecomunicación, y justo, había visto una noticia que a continuación le contaría SuHo a su Hyung.
-Dilo, SuHo, qué ocurre? – Min le miró curioso, con una expresión tierna que quizás no era consciente de que usaba.
SuHo tragó en seco, no quería ser muy directo, pero la situación lo pedía. – Llevan ya varios días publicando que “El hijo de la famosa empresa de coches Kim ha desaparecido” – Miró hacia su amigo, para ver su reacción, y se sorprendió al no esperarse eso precisamente.
-Y qué pasa? – MinSeok se cruzó de brazos, mirando al frente. – Tengo mayoría de edad. Lo que haga o deje de hacer, no les debe importar. No he desaparecido, es una tontería. Que no les haya avisado de a dónde iba, no significa que haya desaparecido. Solo están haciendo eso para que la gente se fije en mí y puedan encontrar mi ubicación. – Su tono de voz era serio, serio y con mucha confianza en sí mismo. SuHo a veces pensaba que con D.O eran muy parecidos, por muy callados que fuesen, eran muy maduros y sobre todo, inteligentes. Lo que tenía miedo es de ver a su amigo dejarse llevar por los sentimientos.
-Eres consciente de lo que podrías ocasionar? – Fue la pregunta que le debía hacer, para que Min abriese los ojos y se diese cuenta al fin de todo.
Sí, Min era consciente de lo que podría ocasionar. Desastre. Sus padres eran una mierda de padres, eran manipuladores, interesados y sobre todo, orgullosos. Que se les haya escapado su pájaro del jaula, eso, de seguro les estaba matando.
-Buscaré otro trabajo. – Dijo, a lo que SuHo no pudo más que asentir. Era lo mejor. No podía hacer que se arriesgasen todos, y sobre todo LuHan. Porque SuHo sabía, que si MinSeok atraía las cámaras al local, las cámaras verían a LuHan, y si LuHan era pillado, LuHan se iría.
MinSeok no estaba nada a gusto ahora mismo. Se culpaba, porque sabía que tarde o temprano tendría que irse y abandonar a LuHan si quisiera mantener seguro a EXO, pero MinSeok lo estaba intentando alargar, no quería irse, no ahora. No después de que pasase…eso…
-Eso o vestirte de mujer todo el rato. – SuHo le miró con una muequilla divertida. Era consciente, sí.
Baozi abrió sus ojos, sorprendido. Miró hacia SuHo, que reía en bajo… Se encogió un poco, asintiendo. – Nadie me reconocería si me visto como…mujer… todo el rato. No? – Preguntó, y vio como SuHo asentía. Quizás para mantenerse al lado de LuHan, al menos un poco más, MinSeok cambiaría… El amor requiere sacrificios, no? MinSeok sacrificaría su orgullo. Siempre se podría calmar por las noches violando a LuHan.
Después de esa conversación hablaron sobre el tema del gimnasio. Sí, MinSeok quería ir al gimnasio con SuHo, y SuHo le dijo todo lo necesario y las horas a las que solía ir. De 8 y media a 10, entre duchas y todo, de la noche, claro.
Al llegar a la calle de las tiendas, ambos bajaron. Min se colocó la mascarilla y el gorro y salió, SuHo fue tan tranquilo.
XiuMin se preguntaba de qué forma preguntarle sobre el lubricante y las pastillas…y quizás algún que otro juguete…Si se lo preguntaba...oh si se lo preguntaba…Confirmaría que entre LuHan y él había algo.
Caminando de tienda en tienda en búsqueda de pelucas adecuadas, el mayor al fin tomó valor.
-Su..Suho. Tengo una pregunta. – La cara roja del rubio sorprendió a SuHo, prestando así atención a lo que diría… - Yo… me preguntaba si sabías… - Hizo una pausa, para tomar aire. – Alguna tienda donde vendan…Ya sabes. – Se tapó los ojos, demasiado avergonzado, encogiéndose…
-Condones? – SuHo a veces era directo. Hoy era uno de esos días.
-No… No hacen falta… Ehm… - De nuevo se tapó la cara. El pobre Min hoy tendría un día de esos en los que te quieres simplemente meter en tu cama y no salir y llorar de la vergüenza…
-Lubricante y pastillas para el dolor. Vibrador para el ano… - SuHo miraba al frente mientras hablaba. Creó haber tenido esa conversación con otra persona. Quizás un BaekHyung avergonzado.
-Si! Exacto! SuHo, tú eres homosexual? – Ahora Min miraba con alivio. Nadie que no fuese gay diría lo del vibrador para el ano. Además, sospechaba y mucho que había algo entre Kris y él.
-Soy homosexual, sí. – Y lo dijo tan tranquilo, como si no fuese un tabú en Corea… -Después de comprar la peluca y todas las cosas, te llevaré a una tienda que suelo visitar.
-Su..SuHo… otra cosa… Kris y t..
MinSeok fue interrumpido, SuHo puso su mano en la boca del mayor, mirándole de forma amenazante, avergonzada, en los ojos de MinSeok, enamorada.
-No, no y no. Él nunca me conseguirá. – Este se separó de Min, dando suspiritos para tranquilizar su vergüenza, aunque no funcionó mucho.
-Él se te ha confesado? – MinSeok no parecía querer parar con el tema.
-Algo así. Simplemente desde que le conozco me tira fichas… Y yo a veces no sé si es en serio o si solo bromea conmigo. –
XiuMin vio la inseguridad en los ojos de SuHo, le dio algo de pena, pero una cosa tenía clara. – Yo creo que definitivamente él siente algo por ti. A nadie le trata como a ti. Cierto es que es muy cercano a ZiTao, pero no de la misma forma que contigo. –
Quizás estuvieron hablando de ese tema toda la mañana, entre que probaban pelucas y ropa…Hasta MinSeok le hizo a SuHo probarse ropa.
Resultaba que SuHo y Kris se conocían desde la secundaria, cuando un chino gigante había llegado nuevo al colegio y un JunMyeon aplicado y responsable se había tenido que hacer cargo del algo maleducado y rebelde YiFan. SuHo tenía otros amigos, entre ellos Chen, o JongDae. Con el paso de los meses, mientras YiFan cada vez hablaba mejor coreano, se fueron haciendo amigos, pero no fue cuando cumplieron más o menos 16 años, cuando se empezó a integrar YiXing en el grupo, que empezó a ligar Kris con SuHo. Al principio lo hacía en forma de broma. Un travieso “Hoy te ves más guapa de lo normal” Y era respondido con una risa falsa por parte de SuHo y simplemente silencio. Luego creció a algo más, con el paso de los meses. Fueron frases como “El que te consiga algún día, será muy feliz” o halagos como “Si tú fueses el hijo en mi familia y no yo, creo que mis padres te amarían” Para MinSeok todo eso eran indirectas que quizás SuHo no sabía pillar. Con la unión de BaekHyun y Chanyeol al grupo, todos decidieron mudarse a un piso para al fin poder vivir juntos. Para SuHo y Kris, o solo para SuHo, las cosas empeoraron, porque ver a un gigante acosador todos los días en clase era una cosa, pero compartir la misma habitación con él, era otra cosa. Lo curioso en la historia de ellos dos, para MinSeok era el autocontrol de Kris, como nunca se había pasado de la raya y siempre soltaba solo indirectas y ligues disimulados.
Entonces, ya de paso, SuHo le continuó explicando, aunque ahora con más detalle, la verdadera y completa historia de EXO.