Mi vida es un desastre; aun intento llegar a la sima y triunfar en lo unico que soy buena, escribir historias; para tener tres años publicando libros es frustrante ser de las autoras menos conocidas. Y ni hablar de mis relaciones personales: Mis padres descepsionados de mi, ellos querian que estudiara una carrera con más potencial hablando economicamente, para ser precisos querian que estudiara derecho o administración empresarial. Mi hermana mayor escogio la primera graduandose con honores y todo el numerito ¿y yo? Yo me fui por el camino artistico y estudie filosofia y letras...cosa que no fue muy bien resivida por mi familia.
Asi que decidi mudarme a un departamento lejos de ellos apenas cumplida la mayoria de edad.
A decir verdad esperaba alegria y felicidad una vez lejos de mi familia...en eso tambien me equivoque. Mis padres me insistieron que regresara, !!incluso me demandaron para que volviera!!; y claro la concentida de mi hermana les ayudo en eso. No fue hasta que les dije de todo incluydo de lo que se iban a morir si me seguian molestando.
Me mude 5 veces y 2 veces quede en la quiebra, obvio segui adelante no dejaria que arruinaran más mi vida.
Y la cosa empeoro cuando se enteraron que soy gay. !!Pegaron el grito en el cielo!! Llegue al punto de no tener telefono o resivir correo por 3 meses, hasta pense en finjir mi muerte e irme a algun pais lejano, no lo hice por falta de dinero.
El punto es :
!!MI VIDA ES UNA MIERDAAA!!!
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Se escucho el timbre de mi departamento, con pereza y pesimo humor habri la puerta.
-!!Sam!!-exclamo una chica rubia, llevaba un vestido azul y zapatos de tacón.
-¿Qué carajos quieres Marian?-pregunte de mala gana.
-oh vamos, no trates mal a tu unica y mejor amiga -
-No estoy de humor- dije caminando al sofa y tumbandome en el.
-te tengo buenas noticias-Dijo Marian cerrando la puerta y caminando a dondé yo estaba.-Puede que tu ultimo libro llegue a vender más de lo acostumbrado-
-!enserio!-me levante al instante con un poco de felicidad.
Mirian es esposa de mi editor en jefe y somos amigas desde hace 2 años y medio.
-Sip, eso me lo dijo Raúl, ya sabes él siempre me platica todo en cuanto a su trabajo-
-Espero ser la número uno en ventas-mencione cerrando mi mano derecha
-jeje ya somos dos-me dijo Mirian sentandose a mi lado- ¿y comó te va? ¿tus padres siguen llamandote?-
-Son un fastidio-respondi poniendo mi mano en mi frente.-Me enviaron un folleto de una iglesia para que dejara mi lesbianismo-
-Son algo extremos ¿no?-
-No tienes ni idea-me levante y camine a la cosina-¿Quieres almorzar algo?-le pregunte
-No gracias, no me gustan tus comidas instantaneas-me respondio caminando detras de mi.-Mejor te invito, conosco una cafeteria estupenda- me propuso con felicidad.
-Bueno, acepto-No le podia negar un buen almuerzo-dejame cambiarme y vamos-
-Sip, aqui te espero-
Fui a mi habitación, me puse unos jeans algo ajustados, una camisa de tirantes negra, tenis rojos y me sujete el cabello en media coleta ya que detesto tenerlo completamente sujetado. Le avice que estaba lista y nos fuimos al dichoso café.
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El lugar no era tan grande y tampoco tenia muchos clientes asi que estaba bien para mi. Nos sentamos junto a la ventana, momentos despues llego un mesero.
-Bienvenidas ¿Que van a ordenar?- nos pregunto.
-Un capuchino y una rebanada de pie de manzana-Pidio Mirian
-Un café americano, con pie de franbuesas-dije en voz baja, que bueno que si me escho el mesero.
-en un momento se lo traemos- dicho esto se retiro.
-Esta guapo ¿no crees?-me cuestiono Mirian en un susurro con una sonrisa
-¿y yo que voy a saber? a mi no me gustan los pitos-respondi- además tu estas casada- le recorde algo enojada.
-si si, no estoy diciendo que soy infiel a Raúl con solo ver algo de "carne fresca-
-pues ni tan fresca, ya no debe ser virgen-le dije con burla.
-jajaja, se ve que te mueres por perder tu virginidad-
-!!no estoy urgida pendeja!!-reclame enojada.
-ok ok calmate- me pidio- Pero-
-¿Pero que?-
-y si la pierdes con el mesero- me propuso
-!¿que carajos te pasa?!- pregunte irritada.
-oh vamos Samantha, no puedes derperdiciar esos pechos y ese culo que tienes-me dijo señalandome- por lo menos aprovechalos ahora que eres joven, no tendras 23 años siempre cariño-
-¿Lo dice la urgida de 28?-cuestione con molestia-¿acaso tu esposo ya te da pacer?-
-Raúl me da cada que quiero asi que no estoy urgida- me dijo sin vergüenza- Eres tu la que nescesita amor-
-Yo no nescesito nada-respondi-estoy bie si eso de la pareja y el placer carnal-
-¿Tantos que quieren contigo y tu los rechazas? eso no es bueno, hasta rechazas a las chicas que quieren algo contigo-
-Ya te lo dije, no creo en el amor y nunca más en mi vida lo hare-
-¿Todavia no lo olvidas?- me pregunto sorprendida
No respondi a su pregunta, solo mire la mesa para evitar encararla, odio cuando me habla de "él". En eso el mesero llego con las ordenes y nos deseo que lo disfrutaramos.
-deacuardo linda, ya no hablemos de eso-me dijo Mirian tomando un sorbo de su café.
-Gracias-susurre, ella parecio escucharlo ya que me sonrio.
-Oh diculpa-menciono contestando su movil y levantandose de la mesa.
No le di importancia, mejor jugue con la rebanada de pie destasandola y comiendo solo el relleno de frambuesas.
-Sam-me llamo Marian sentandose nuevamente-Raúl me dice que en una hora le hables-
-Si-respondi-debe ser sobre mi libro-
-si eso debe ser-me dijo alegre.
Hablamos de un monton de tonterias en el tiempo que consumiamos los alimentos; Mirian es la unica amiga que tengo ya que solo ella soporta mi temperamento; soy muy irritable y suelo ser descortes si me colman la paciensia. además de eso soy muy muy timida, si es una persona nueva no puedo entablar una conversación u tartamudeo de vez en cuando, esos son los factores que afectan el relacionarme con las personas.
Despues de pagar la cuenta Mirian se retiro no sin antes darme un abrazo y desearme un feliz día. Faltaban 20 minutos para hablarle a mi editor en jefe asi que decidi pasar por una tienda de materiales de dibujo y pintura, en mis libros tambien soy la ilustradora aunque uso un seunonimó para eso.
Compré varias cosas y le marcé a Raúl.
-¿Diga?-pregunto una voz varonil; Raúl tiene 30 años asi que es normal que su voz sea de macho peludo.
-Soy Sam ¿que querias hablar conmigo?-
-ah Sam..este ...¿estas en casa?-
-No estoy en la calle-respondi-Ya dimelo-
-Esta bien-hiso una pausa antes de continuar-Los del departamento de ventas me han dicho que tu ultima obra tiene muchas menos ventas que las anteriores y dijeron que no podiamos seguir a un autor mediocre asi que, ya no quieren que sigamos publicando obras tuyas-
-...-
-Sam..¿estas ahi? ¿Sam?-
-S-si aqui estoy-
-Lo lamento pero, ya no puedo hacer nada por ti-dijo con un poco de tristeza-tu carrera como escritora acabo aqui-
Colgé la llamada, no podia creerlo; tanto esfuerzo, tanto trabajo ¿solo para que asi como asi me tiraran a la basura? ¿Todo lo que hice es nada? ¿Me aleje de mi familia para perseguir un sueño inutil?. No se en que momento comenzé a llorar, me deje caer al suelo y abrazé mis piernas ocultando mi rostro en mis rodillas; llore en silencio preguntandome el porque mi vida era tan mala; no importara que era lo que intentaba hacer todo salia mal.
Poco me importaba si alguien me veia llorar, lo unici que queria es que por una vez en la vida algo sea bueno para mi; por escojer seguir mis sueños fue que termine arruinada tanto económicamente como sentimentalmente. Queria gritar hasta quedarme sin voz.
Senti como me tocaron la cabeza y alze la vista para gritarle a quien fuera pestes para que me dejara en paz. No lo hice, me quede en silencio, ademirando a una chica castaña de ojos verdes, traje gris, de bonito rostro. Esa chica tenia una sonrisa calida en sus labios y acariciaba mi cabeza con delicadesa.
-¿Que es eso que tanto te lastima?- cuestiono la castaña acunando su mano libre en mi mejilla izquierda.
-..y-yo..y-yo-No me salian las palabras, tenia ganas de llorar aún más.
-Me llamo Eva Blackwood-menciono con una leve sonrisa.