Lo primero que hizo el rubio ante la desconcertante ausencia de su compañero fue salir a buscarlo, topándose de lleno con su segundo mejor amigo, el Falcon.
_ ¡Sam!
_ Cap, justo venía a ver cómo estabas ¿Qué te pasa?
_ ¿No viste a Bucky?
_ ¿Qué?
_ A Bucky, estaba conmigo hasta hace unas horas. No lo viste salir ¿Verdad? –el estado de paranoia que mostraba el rubio ya era en extremo preocupante-
_ Steve, sigues con eso…
_ ¡Es real! Te lo juro, Sam, no son alucinaciones. Estoy seguro de que Bucky viene, pero se va cuando tú llegas.
_ Cap, vamos adentro –insistió para que nadie viera al héroe americano en ese estado- Lo más grave que puede pasarte es no distinguir la realidad de la fantasía… Creo que será bueno que veas a un médico.
_ Eres mi amigo ¿Por qué no me crees?
_ Porque eres mi amigo es que me preocupo por ti –se sentó- Tenemos una misión importante, detectaron una señal alienígena que parece ser algún tipo de mensaje, y creen que puede tratarse de una amenaza. Te necesitamos despierto, cap.
_ ¿Ya llamaron a Thor?
_ Según Jane viene mañana, ella detectó la señal y lo comunicó de inmediato –al moreno le alivió que, pese a la inestabilidad mental del amigo, pudiera concentrarse un momento en la situación actual-
_ ¿Banner?
_ Aún no se sabe nada de él.
_ ¿Stark?
_ Está ayudando con el descifrado de los mensajes.
_ Entonces esperaré aquí a que me necesiten, ahora mismo no puedo hacer mucho. –era la primera vez que Sam oía algo semejante dicho por Steve-
_ ¿No vendrás?
_ Ya lo dije, no puedo hacer mucho… Además no quiero que Bucky vuelva y no me encuentre aquí.
_ Steve… -Sam se pasó la mano por la cara- De acuerdo… Pero no te vayas de aquí ¿Está bien?
_ Y tú no te preocupes que estoy bien.
_ Te llamaré pronto, considera lo del médico, por favor. –Steve no respondió- Hasta luego. –lo saludó con un apretón de manos y se fue nuevamente, dejando a Steve al borde de un colapso nervioso por la falta de su desaparecido amigo. Sólo había una forma de ayudarlo, o encontraban a Bucky, o el Capitán América terminaría encerrado en un loquero-
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El día estaba llegando a su fin y no habían señales de Bucky, ni para el rubio ni para el moreno, que iba anotando los posibles lugares donde un ex soldado con el cerebro lavado podría refugiarse.
Steve no dejaba de pensar en cuál había sido su error para verse abandonado por el castaño.
¿Debió haberle mentido? Quizá si le decía que en el pasado sí habían sido pareja, Bucky se quedaba…
Quizá se había enterado que se mostró interesado en Sharon y estaba molesto por eso…
Quizá Sam le desagradaba y no le gustaba que llegara al departamento a cualquier hora…
Quizá…
Un sonido lo apartó de sus pensamientos. Una pesada mochila cayó al piso, Bucky acababa de llegar.
_ ¡Bucky! –casi lo tira al piso cuando se arrojó a abrazarlo y besarlo, como si en lugar de un día, hubiera pasado otros dos años sin verlo- ¿¿Dónde estabas??
_ C-cálmate, fui a buscar mis cosas… -nuevamente se vio apresado por los brazos del capitán-
_ ¿O sea que te vas a quedar aquí?
_ Si no es molestia… Y nadie se entera que estoy aquí…
_ Claro que no es moles… -Steve se paralizó al oír lo último- ¿Por qué nadie puede saberlo?
_ Porque Hydra podría intentar manipularme nuevamente y no quiero lastimarte. –el rubio sonrió, pero internamente quería golpear su propia frente, ya estaban prácticamente todos avisados y buscándolo-
_ N-no te preocupes, eso no pasará…-pretendió asegurar mientras, a pocos kilómetros de allí, Thor era calurosamente recibido por el nuevo grupo de vengadores-
_ ¿Qué pasó con el Capitán? Tony mencionó que está algo distraído –Thor curioseaba con el nuevo equipo mientras continuaban con las tareas de descifrado. Gracias al del martillo, al menos ahora sabían de qué mundo provenía la señal-
_ El cap está teniendo algunos problemas personales –Clint abarcó la conversación-
_ Oh, que mal… La tierra le debe mucho. ¿Hay algo en lo que pueda ayudarlo?
_ Lo dudo, su problema es que no encuentra a su amigo de la infancia –sacó de su bolsillo las fotos y pocos datos que tenía del ex soldado- Éste es… Lo que ocurre es que se criaron juntos, pero a él lo capturaron y le borraron la memoria, cometió cientos de crímenes, algo así como lo que tu hermano me hizo a mi, pero por décadas. –lo último había sonado acusador. Estaba por guardar las fotos, cuando el dios del trueno lo detuvo-
_ Creo que puedo ayudarlo y… Devolver un poco del daño que mi hermano hizo… -se sonrojó ligeramente al pronunciar esas palabras- Préstame las fotografías, conozco a alguien que puede encontrarlo.
_ ¿Quién? –con dudas, le entregó las fotos al rubio-
_ Mi amigo Heimdall. Puede ver todo en el universo. Su vista es tan privilegiada que podría encontrar al amigo del Capitán en minutos.
_ Ajá… -el arquero se puso celoso del moreno y su vista superior a la suya- Suerte con eso… -se despidió el fastidiado ojo de halcón mientras Thor no perdía el tiempo y se iba a cumplir su nueva tarea. Hasta que no descifraran el mensaje, eso podía esperar-
_ Thor…
_ Heimdall ¿Cómo estás, amigo? –el rubio siempre trataba amablemente a quien le ayudaba a trasladarse entre los mundos, pero este día el moreno no parecía estar de muy buen humor-
_ Cada vez que vas a la Tierra, Loki intenta escapar de tu habitación, no entiende que sigue preso. –al de ojos naranjas siempre le tocaba soportar los insultos de Loki por facilitarle a Thor viajar a la Tierra-
_ Tampoco entiende que con Jane ya se terminó… -suspiró- Luego iré a hablar con él, primero necesito tu ayuda, querido amigo. –sacó las fotografías de su ropa y se las enseñó, el moreno las miró con atención- Él es James Barnes, amigo del Capitán América, un miembro del equipo de los Vengadores en la Tierra. –en una de las fotos, los amigos estaban juntos- Al parecer se le perdió –explicó como pudo- y le afecta tanto que no puede pelear ¿Crees poder encontrarlo?
_ Thor, sabes lo que pienso de hacerle favores a los midgardianos…
_ El favor es para mi, se lo debo a Steve y a los humanos.
_ Ahora me lo deberás a mi. –de mala gana tomó las fotografías y comenzó a buscar, pero al cabo de unos minutos, su ceño se frunció-
_ ¿Ocurre algo, Heimdall?
_ ¿De quién dijiste que era amigo el midgardiano de la fotografía?
_ De Steve Rogers, el Capitán América… -Thor respondió preocupado-
_ No lo perdió, o si lo hizo ya lo encontró, están juntos ahora mismo.
_ ¿Qué? –al rubio le costó asimilar las palabras de su amigo-
_ Que están juntos y yo perdiendo el tiempo.
_ ¿Puedes enviarme de regreso para avisarle? –el moreno estaba a punto de cumplir la petición, cuando los interrumpieron-
_ Thor, debes venir, Loki no deja de amenazar con hacerse daño si no regresas de una vez. –Fandral llamó preocupado, no por Loki, sino porque ocurriera una desgracia que amenazara la paz del palacio-
_ Iré en seguida, luego me ocuparé de mis amigos de Midgard. –se apresuró a encontrarse con su hermano-
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Mientras, en La Tierra, Steve acariciaba con suavidad el cabello de su mejor amigo. Descansaban en la cama luego de hacerlo (Steve siempre terminaba cayendo ante sus propias tentaciones, y a Bucky poco le molestaba eso), no tenían preocupación alguna, el mundo seguiría girando con o sin ellos.
_ No vuelvas a irte sin avisar, Buck. –el rubio lo abrazaba como si, cuanto más aferrado a él estuviera, menos posibilidades hubiera de volver a perderlo-
_ Tampoco necesito permiso para salir, Steve... –un teléfono sonó sobre la mesita de noche que estaba justo al lado del castaño- ¿Qué es ese ruido?
_ Es el teléfono celular que me compré, aprendí a usarlo –respondió orgulloso mientras aflojaba el agarre para que Bucky se estirara a agarrarlo, pero éste en lugar de entregárselo, leyó el mensaje que vio en la pantalla-
_ “Steve, estoy libre el sábado ¿Crees que podamos salir? Sharon” –leyó en voz alta antes de mirar acusadoramente al rubio- ¿Y esto?
_ E-eso… eso es… -Steve sintió que el mundo lo aplastaba, exactamente la misma sensación de cuando Peggy lo vio besándose con una secretaria- Sharon es… Una amiga, con la que iba a salir antes de que aparecieras tú.
_ ¿Y no has terminado con ella?
_ Nunca salimos, estaba pendiente hacerlo…
_ ¿Lo harás? –Steve no supo definir qué pasaba por la cabeza de Bucky en ese momento, pero estaba listo para rogarle que no se vaya si era necesario-
_ Claro que no, Bucky, no me interesa estar con nadie más que contigo. –tomó el celular- Si quieres ahora mismo le envío un mensaje diciéndoselo… -estaba dispuesto a hacer llorar a una mujer por su amigo, aunque eso significara convertirse en lo que siempre había despreciado y criticado-
_ Steve, se supone que nadie debe saber que estoy aquí, déjalo así. –suspiró, pero no se resignó, en esos momentos ya pensaba en cómo sacarla de su camino- ¿Sabías que tu departamento estaba lleno de micrófonos?
_ ¿Qué? –no era la primera vez que a Steve le comunicaban algo así-
_ Los quité poco antes de nuestra primer noche –sonrió, pocas cosas enamoraban a Steve como lo hacía la sonrisa de Bucky- ¿Creíste que sin SHIELD ya no te controlaría ningún servicio de inteligencia?
_ ¿Fue Fury otra vez?
_ No… Fue la CIA… -el trabajo estaba hecho, Sharon no volvería a salir con Steve-
_ Lo supuse. –no podía enojarse con la rubia, ella sólo hacía su trabajo (o al menos eso creyó ante la mentira de Bucky), aún así ya no le concedería ni siquiera su amistad. Sin confianza no había amistad que valga- Que bueno que te tengo a ti para cuidarme… -le dio un beso mientras dejaba el celular nuevamente sobre la mesa-
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Mientras tanto, en Asgard las cosas se complicaban para el heredero del trono de Odín.
_ ¿Loki? –entró a su habitación, en guardia puesto que su hermano era impredecible. Al cruzar la segunda puerta de seguridad, vio todas sus cosas en el suelo y a Loki de pie, de espaldas a la puerta y con los brazos cruzados- Otra vez… -se acercó a abrazarlo pero, ni bien lo tocó, éste desapareció. Acto seguido sintió un libro que le fue arrojado a la cabeza- ¡Loki!
_ Oh… ¿Te dolió? –el menor estaba de pie junto a la cama- El único modo de que un libro llegue a tu cabeza y lo comprendas es a través de la violencia.
_ ¿Por qué cada vez que voy al mundo humano haces lo mismo?
_ ¿Quién te crees que eres para dejarme aquí encerrado mientras te vas con esa mujer?
_ ¡Ya no estoy con Jane! De hecho esta última vez que fui me contó que estaba saliendo con alguien más. –tarde se dio cuenta del exceso de información que había salido de su boca-
_ O sea que la viste.
_ Jane descubrió un mensaje de alguna parte del universo, se sospecha que de Alfheim, y sólo me llamaron para que los ayudara si se trataba de una posible amenaza. Ahora mismo están intentando descifrarlo, no tiene que ver con nosotros. –explicó-
_ ¿Alfheim? Yo sé hablar el idioma de esos tontos elfos a la perfección, y los midgardianos no pueden descifrar un simple mensaje –rió-
_ ¿Cómo sabes el lenguaje de los elfos de Alfheim?
_ Esa cosa que golpeó tu cabeza se llama libro. Si leyeras uno de vez en cuando, quizá tú también podrías usar el cerebro para algo útil. –lo que Loki decía era cierto, sin embargo no era tan fácil encontrar en Asgard a alguien que hablara ese idioma por mucho que estudiara (Loki ya había estado ahí). No tenía alternativa-
_ Entonces… -tomó aire, la sonrisa de Loki ya lo decía todo- Necesito tu ayuda, hermano…
_ Me encanta cuando lo admites.
_ ¿Lo descifrarás si traigo el mensaje?
_ ¿Perdón? –se acercó, los ojos verdes destellaban cuando algo de poder llegaba a sus manos y, si bien ese aspecto fascinaba al rubio, también le recordaba cuán peligroso podía ser el dios de las travesuras- Llévame a Midgard contigo y lo haré…
_ Tienes prohibido salir de aquí precisamente por lo que hiciste en la Tierra, Loki. –¿Llevar a su intrépido hermano nuevamente a Midgard? Hasta Thor sabía que eso era una pésima idea-
_ Entonces buena suerte, hermano… -lo rodeó con sus brazos y lo besó despacio. Para Loki, seducir a Thor era tan fácil como quitarle un dulce a un humano- Aprovechemos entonces este momento, Thor… Porque si vuelves a la Tierra solo, al regresar aquí te encontrarás con el cadáver de tu pequeño hermano… -era un tramposo, un maldito tramposo, y lo peor es que siempre lograba salirse con la suya. El rubio se vio entre la espada y la pared, estaba enamorado de Loki y éste sabía por dónde hacerlo sangrar-
_ Eres un tramposo, Loki.
_ ¿En serio?
_ Pero está bien, me acompañarás. Si intentas algo vas a lamentarlo. –lo besó antes de que el pelinegro pudiera responder o regocijarse. Estaba dispuesto a correr ese riesgo, Loki era más importante que cualquier humano-