Capitulo 1:
Silencio era lo único que él podía escuchar, aquel bosque se encontraba en un profundo silencio, el viento era fuerte y helado. Un escalofrío lleno su cuerpo haciéndolo temblar de la cabeza a los pies. Miraba para todos lados buscando una manera de salir, aun él ni sabía como había llegado a aquel bosque, su mente se encontraba en blanco y un fuerte dolor en la cabeza era lo único que sentía
Kibum había despertado en un bosque sin ninguna razón alguna, no podía recordar nada, se sentía confundido y muy solo. Camino por un largo tiempo tratando de buscar una salida pero no tenía resultado alguno, cansado de tanto caminar se sentó en un tronco que había ahí.
Tenía frío y miedo, aquel bosque lo asustaba demasiado y el hecho de no recordar nada lo atormentaba aun más. Su cabeza comenzó a doler mas fuerte llevando así sus manos a su cien para sobarla y lograr calmar aquel dolor.
— ¿dónde estoy? - susurro al viento.
Un viento helado le atravesó el cuerpo haciéndolo temblar, se abrazo así mismo y oculto su rostro entre las piernas, de pronto un pitido se escucho a través del bosque y el presentimiento de estar en peligro se adueño de él, levantándose de golpe comenzó a correr alejándose de aquel pitido, pero mientras más corría mas sentía aquel pitido más cerca. El ruido aumento aun mas haciéndole doler sus oídos, con sus manos se tapó los oídos hasta caer al suelo, su cabeza comenzó a dar vueltas sintiéndose mareado para luego quedar completamente inconsciente.
***
Un olor a frambuesa fue lo que lo despertó, aquel aroma era delicioso y adictivo, abrió sus ojos lentamente topándose con un chico frente a él, aquel chico era de cabellos pelirrojos, su rostro era dulce al igual que su sonrisa y el olor que desprendía de él era el delicioso aroma que estaba disfrutando. Aquel pelirrojo lo observaba detenidamente con una sonrisa en su rostro, se veía tan feliz que daba miedo.
— Por fin despiertas - fue lo que dijo el pelirrojo.
Kibum al sentarse pudo percatarse que se encontraba en una cama, pero no era una común y corriente, aquella cama tenia la forma de una gota de agua y parecía tener agua por dentro. Kibum llevo sus manos a sus ojos y los sobo suavemente para luego mirar al pelirrojo y darle una mirada confusa y aun más al darse cuenta que aquel chico tenía unas enormes alas tras él.
— ¿dónde estoy y quien eres tú? - pregunto. El chico pelirrojo volvió a sonreír.
— Soy Taemin y estas en el mundo de los ninilus.
— ¿ninilus? - Aquella palabra se le era extraña pero familiar al mismo tiempo algo que el realmente no lograba comprender. - ¿que es eso y porque llevas alas?
— Porque soy un ninilu, nosotros somos parecidos a las hadas pero no lo somos y jamás nos llames así, si alguien te escucha te matarían. Nosotros nos encargamos de la felicidad y la tristeza de los humanos mejor dicho de sus emociones, si eso es. Cada ninilu se encarga de una emoción, yo por ejemplo me encargo de la tristeza, inseguridades, temores y mas…
Eso explicaba porque la cama tenia forma de gota, pensó Kibum. A pesar que el pelirrojo le decía todo eso el no llegaba a comprender como alguien que se encargaba de aquellos sentimientos podía tener una felicidad marcada en el rostro.
— ¿que hago aquí… Como llegue acá? - pregunto aun confundido por todo lo dicho. - no logro recordar nada.
— Yo te traje aquí.
— ¿como?
— Yo hice que terminaras en el bosque de la soledad y también me encargue de borrarte la memoria.
¡¿Que él había hecho que?! Molesto se sintió, por culpa de aquel pelirrojo había llegado a parar en ese lugar tan extraño.
— ¿por que hiciste eso?
— Porque eres el elegido, tú serás quien logre hacer que nuestro mundo no caiga.
¿Su mundo caer? Kibum no entendía nada, porque ese chico no podía explicarse mejor.
— No entiendo a que te refieres ¿como yo podría ayudar a tu mundo?
— Mira hay una darli que por si no sabes esas criaturas se encargan de la negatividad de los humanos como también de su positivismo. El problema es que esa darli está enamorada de nuestro rey quien es el único que puede encargarse de todas las emociones humanas habías y por haber. Esa darli quiere casarse con nuestro rey y así adueñarse del mundo de los ninilu.
— ¿y yo que tengo que ver en todo esto? - pregunto ahora aun más confuso que antes.
— Que tú eres el único que puede evitar toda esta tragedia. La darli no está enamorada del rey, ella solo quiere nuestro mundo. Ella tiene al rey en un hechizo el cual solo tú puedes romper.
— pero yo solo soy un humano, no tengo ningún poder.
— Claro que lo tienes. Tú tienes el poder del amor una de las fuerza más grande de este mundo un sentimiento único que cualquier no tiene.
Kibum tuvo unas inmensas ganas de reírse, lo que Taemin decía le parecía lo más tonto del mundo que había escuchado. ¿Que él llevaba el sentimiento del amor? Eso era imposible, aunque no recordaba su pasado estaba seguro que jamás había amado, el no sabía nada de aquel sentimiento.
— Te estás equivocando, yo no tengo nada eso es mas jamás he amado a nadie no sé que es eso. Además… Dices que cada ninilu se encargado de un sentimiento ¿dónde está el ninilu del amor? - aquello ultimo lo dijo con un tono de diversión.
El rostro de Taemin cambio radicalmente a una realmente molesta, aquella sonrisa resplandeciente había desaparecido.
— Ningún ninilu se encarga de aquel sentimiento, ese sentimiento no se puede manejar, cada uno decide como llevarlo.
— Si no se puede manejar ¿por que crees que yo si puedo hacerlo?
— Eres una persona pura de corazón eso cualquier ninilu se puede dar cuenta, por lo cual eres el único capaz de enamorar a nuestro rey.
Una fuerte carcajada se escucho, aquello no lo había podido evitar, era tan absurdo lo que le decía Taemin. ¿El enamorar al rey? Eso jamás podría pasar. El rostro de Taemin se puso de color rojo intenso, la risa de Kibum murió al verlo así. Taemin asustaba en ese estado.
Taemin se acerco a Kibum hasta quedar cara a cara, lo tomo por los hombros y en un destello ambos desaparecieron de la habitación para luego aparecer en un jardín resplandeciente, la luz del sol era fuerte y se podía escuchar a muchos pájaros cantar, el viento era cálido y el cielo era de un celeste claro. Kibum miro el lugar maravillado, se sintió feliz ahí pues eso era lo que el lugar le transmitía.
— ¿que es este lugar? - pregunto.
— Felicidad. Aquí es donde siempre podrás encontrar a ninilus de la felicidad, de los que se encargan de todos los sentimientos felices.
— Es muy agradable, no como ese feo bosque.
— Era el bosque de la tristeza que esperabas. - dijo y soltó un bufido - aquí encontraremos a Onew.
— ¿Onew, quien es él?
— Un ninilu feliz.
Taemin voló alto, se coloco ambas manos alrededor de la boca y grito el nombre de Onew formando un enorme eco. Pasaron segundos y un chico de sonrisa encantadora y de alas brillantes apareció frente a ellos. Kibum creyó que podría quedarse ciego si lo miraba a los ojos, el chico desprendí un brillo intenso.
— Taeminie es raro verte por aquí. - dijo el chico reluciente.
— He traído a alguien que tal vez quieras conocer. - señalo hacia abajo donde Kibum se encontraba mirándolos.
Onew lo examinó por unos segundos antes de mostrar su asombro en su rostro. Kibum no le quito lo ojos de encima por ningún segundo observando cada moviendo que el chico hacia. Onew bajo hasta quedar enfrente de Kibum, no podía creer que Taemin haya podido traer a un humano de tan fuerte poder.
— ¿como pudiste Tae? - le pregunto - traer a un humano aquí es muy difícil y aun mas a alguien como él ¿acaso no ves el poder que irradia? Si el rey se entera te matara y aun mas sin contar que el rey es tu hermano.
¡Su hermano! Taemin se había olvidado de aquella información. Ese chico pelirrojo era hermano del rey, ahora entendía el empeño del chico de querer salvar su mundo.
— Lo he traído por una buena causa y yo quiero que mi hermano sepa de él, cuando lo vea se que todo cambiara. Kibum es el único capaz de hacer que mi hermano abra los ojos y salga de ese hechizo que la zorra de Yura lo tiene.
— Me estas queriendo decir que él es… El es el de corazón puro.
— Lo es y créeme que no fue fácil encontrarlo.
— Taemin se que lo del compromiso del rey con la darli va a afectar mucho a nuestro mundo pero… ¿estás seguro que lograras que Kibum enamore a nuestro rey?
— Es mi única opción Onew.
— Bueno no se hable más, hay que presentarle a nuestro rey a su nuevo inquilino.
Ellos eran locos si creían que él, Kibum, lograría sacar a un rey de un hechizo. Todo lo que le pasaba era un sueño, nada de eso podía ser real, no existían los ninilus y los darli, todo era tan absurdo como del porque no importaba cuantas veces se piñizcara el brazo, el no lograba despertar de aquel sueño que parecía ser eterno.
***
La presencia de la darli en el castillo afectaba mucho al ambiente aun más cuando esa darli era de pensamientos negativos. Nadie entendía como el rey podía estar con aquella darli, era algo imposible de creer.
— Minho tráenos algo de beber, no ves que tu rey tiene sed. - ordeno Yura.
Minho era un ninilu de la furia, cosa que hacia más difícil obedecer las órdenes que la darli le implicaba. Él era el mejor amigo del rey y un cortejante del hermano de este. El sabía muy bien que su mejor amigo estaba hechizado y moría de ganas de poder hacer ver a su amigo de eso, pero ya lo había intentado y lo único que había logrado fue tener una pelea con él y hasta ser atacado, Jonghyun jamás lo había hecho pero al estar hechizado el ninilu que todos conocían parecía ya no existir.
Molesto decidió hacerle caso a Yura y aun más al ver el rostro de su rey, era mejor no desobedecer, salió del lugar para ir hacia la cocina pero en el camino se topo con su querida perdición de día y noche, aquel lindo pelirrojo se acercaba en compañía de Onew y un humano pero no uno cualquiera, frunció el ceño al percibir el poder que este destilaba.
— ¿por que tienen un humano con ustedes? - les pregunto. Taemin le sonrió al verlo.
— El es Kibum, Minho. El nos ayudara con el problema que tenemos con nuestro rey. - dijo Taemin.
— Yo en ningún momento dije que lo haría - dijo Kibum molesto. Lo habían traído ahí contra su voluntad.
Ninguno de los tres ninilus le hizo caso.
— ¿acaso el es de corazón puro?
— Lo es ¿no lo sientes? - Minho asintió - ¿Mi hermano esta en el santuario?
— Esta ahí pero no solo. La darli este con él.
El semblante de Taemin era de preocupación y Kibum pudo percatarse, su corazón sintió una punzada, se sentía mal al ver a Taemin de esa forma, unas inmensas ganas de abrazarlo y decirle que todo mejoraría se apoderaron de él y sin poder evitarlo lo hizo, lo abrazo fuertemente y palabras de consuelo salieron de su boca.
— Ahora entiendes porque eres el indicado - le susurro Taemin.
Kibum se mordió el labio inferior, no estaba seguro si ayudarlos o no, el no se creía capaz de enamorar al rey o el enamorarse del rey mucho menos amarlo, jamás había pensado en el amor y ahora le decían que era el único que podía controlar ese sentimiento, él ni siquiera era un ninilu.
— Yo…
— Por favor Kibum, al menos conoce a mi hermano.
— Yo… Está bien lo haré pero aun no estoy seguro si lograre algo al que él me conozca después de todo soy un simple humano.
— No lo eres - hablo Onew - tienes un poder muy fuerte que tu aún no te das cuenta.
Un poder, aquello le sonaba bizarro. No se creía alguien especial con un poder dentro de él. De todas maneras lo haría, lo haría para no ver a Taemin preocupado o triste, odia ver a alguien triste ese sentimiento estaba seguro que no le gustaba pero sabía que también era necesario.
— Los veré luego, debo ir por algo de beber para nuestra real su majestad. Odio que esa bruja este controlando a nuestro rey.
Dicho eso Minho siguió su camino con la furia impregnada en su rostro. Kibum quería saber que clase de ninilu era el aunque ya tenia un presentimiento.
— ¿que ninilu es él? - preguntó.
— De la furia - respondió Onew - ahora vamos ya al santuario.
***
— Cariño… ¿cuando será nuestra boda? muero por ya estar completamente unida a ti.
— Aun no es el momento, la boda debe ser cuando la flor blanca florezca, cuando eso pase recién podremos casarnos.
A pesar del hechizo Jonghyun siempre era de sentimientos secos hacia Yura, cosa que la enfurecía siempre, quería palabras de amor por parte de él pero parecido que él se estuviera secando de sentimientos, su rostro siempre era serio y carecía de sentimiento y para ser un ninilu que controlaba todos los sentimientos era algo molesto para ella, pero que podía hacer, aquel hechizo que había hecho había vuelto de esa forma a Jonghyun.
Ella lo amaba como también amaba aquel mundo y amaba las ganas de destruir a los humanos, si lograba apoderarse de aquel mundo sería capaz de quitarle a todos los ninilus sus poderes dejando así que los humanos se quedaran sin sentimientos como le estaba pasando al rey ahora.
Sabía que jamás lograría que Jonghyun la amara pero se conformaba con poder quitarles a los humanos sus sentimientos.
Las puertas del santuario fueron abiertas de golpe dando paso al hermano del rey, a un ninilu de la felicidad y un humano.
Los ojos de Jonghyun y Kibum se conectaron al instante al verse y una chispa de luz se reflejo en los ojos de ambos. Taemin y Onew al verlo sonrieron felices al darse cuenta que había encontrado al humano correcto.
Kibum se sintió quedar sin oxigeno, su corazón lleno de amor con tan solo verlo, se sintió completo y lleno de dicha, aquel sentimiento que lo embargaba era hermoso, se sentía volar. El rey tenía algo especial y él lo odia ver con esa.
El rostro de Jonghyun se veía más iluminado parecía que todo rastro de hechizo había desaparecido pero Taemin estaba seguro que eso no era cierto, para hacer que su hermano volviera a la normalidad Kibum y Jonghyun tenían que darse un beso de amor.
— ¡Por que entraron sin tocar! - el grito de Yura saco a ambos del trance.
El rostro de Jonghyun recobro un poco de color y sus ojos no dejaban de brillar, su mente le daba vueltas y la necesidad de acercase a aquel humano y abrazarlo era inmensas.
— No grites Yura. - ordeno Jonghyun haciéndola callar a Yura.
Era la primera vez que Jonghyun la callaba y eso le hacía tener a Taemin mas esperanzas de recuperar a su hermano.
— Taemin ¿por que has traído a un humano? - le preguntó a su hermano.
— El necesitaba ayuda - se justifico.
— Ayuda en que.
— En… - la mente de Taemin estaba en blanco, no podía decirle a su hermano que había traído a Kibum para sacarlo de su hechizo.
— Me trajo para ayudarme a amar. - respondió Kibum por él.
Onew como Taemin se quedaron sorprendidos por la respuesta de Kibum, agradecían que Jonghyun en ese estado no podía ver su pureza algo que les favorecía ya que el creería en la mentira de Kibum, pues este si sabía como amar el poder que el destilaba era amor.
— ningún ninilu te podrá ayudar en eso. - declaro Jonghyun.
— Ellos no pero si usted.
Kibum no sabía de dónde sacaba todas ese palabras, como podía estar hablando con el sin siquiera desmayarse, sentía una enorme conexión con él y ganas de tenerlo cerca, de poder tocarlo y sobre todo besarlo, necesitaba estar a solas con él.
— Yo no controlo ese poder.
— Eso usted cree pero estoy seguro que si podrá.
— Vamos Jonghyun yo sé que tu podrás hacer que él pueda amar. - dijo Taemin.
Jonghyun se pasó las manos por el rostro, su mente daba vueltas y las ganas de estar más cerca de aquel humano incrementaban a cada segundo.
— ¿me ayudaría? - los ojos de Kibum brillaron con mayor intensidad dejando sin aliento a Jonghyun, su rostro se lleno con mas color y sus alas que tan solo hace poco eran grises comenzaba a recobrar color.
— Déjenme a solas con el humano. - decreto.
— Pero cariño él es humano y…
— Cállate Yura y obedece.
El rostro de la darli se convirtió en rojo intenso, no sabía porque notaba a Jonghyun con más vitalidad pero fuera lo que fuera no era nada bueno para ella. Salió del santuario hecha una furia y Taemin y Onew se aguantaron las ganas reír, segundos después ellos se dedicaron a salir del lugar, una vez los dos solos, Jonghyun se acerco a Kibum hasta quedar frente a él. Kibum se estremeció ante su cercanía.
Jonghyun sintió un delicioso olor entrar por sus fosas nasales, era rosas lo que podía oler, se sentía mareado y adicto a aquel olor, se acerco al cuello de Kibum y olfateo hasta sentirse embriagado.
— Dime tu nombre. - su voz sonó a anhelo.
— Kibum. - respondió con las misma voz.
— ¿que es lo que eres, empiezo a dudar que seas un humano?
— ¿por que lo dices? - susurro.
— Tu olor… Se me es tan adictivo…
Kibum cerró los ojos al sentir la nariz de Jonghyun rozar con su cuello, su cuerpo se estremeció aun mas al sentir la lengua de Jonghyun recorrer su cuello, se sentía muy bien.
— No creo que eso signifique que no sea humano. - susurro.
Jonghyun se sentía morir a cada minuto, su cabeza daba más vueltas y ya se sentía mareado, tenía que alejarse de él pero no se atrevía a hacerlo, más bien quería tener a ese humano aun más cerca.
— Sabes que yo no puedo ayudarte a amar. - trato de alejarse pero no pudo.
— Yo se que puedes.
Las palabras salían por si solas de los labios de Kibum, se sentía en un trance infinito. Jonghyun se alejo de su cuello para llegar hasta sus labios y hacerlos rozar, era una sensación exquisita para ambos, pero una vocecita dentro de la mente de Jonghyun le decía que se alejara y poco a poco esa voz se hacía más fuerte, sacudió su cabeza y luego se aparto sorpresivamente sacando así a Kibum y a el mismo del pequeño trance en el que estaban.
Kibum sintió su pecho suprimido, se había sentido rechazado y aquel sentimiento no le había gustado.
— Vete. - dijo bruscamente. - ven aquí mañana por la mañana. – dijo después.
Aun desorientado Kibum asintió, dio media vuelta hacia la salida y antes de irse se detuvo para decir:
— Me gustan tus alas aunque serian más hermosa si tuvieran más vida. - dicho esto se fue.
Aquellas últimas palabras habían hecho un efecto muy fuerte dentro de Jonghyun, se sintió extraño por algunos segundos antes de volver a su estado normal de hace varios días.
***
— Hubo brillo en los ojos de ambos se pudo ver mucho la conexión que tenían. - decía Taemin entusiasmado - yo se que Kibum lograra que mi hermano se enamore de él.
— Ojala, ya estoy harto de la darli. - bufo Minho molesto. - me trata como a su esclavo.
— Todo se arreglara - Taemin lo tomo por la mano y la apretó fuertemente. Minho se estremeció, miro al pelirrojo y le sonrió.
Onew rodó los ojos, ya estaba cansado de esos dos, siempre era lo mismo, ninguno era capaz de dar el siguiente paso.
El ruido de las puertas abrirse llamo la atención de los tres. Kibum salía del santuario con un rostro indescriptible.
— ¿como te fue? - fue lo primero que le pregunto Taemin.
— Intento besarme - dijo Kibum - pero cuando lo iba a hacer se detuvo.
— Es por el hechizo - dijo Onew - pero sea como sea tienes que conseguir que Jonghyun te bese.
— Me quiere ver mañana. - anuncio.
Esas eran buenas noticias, cada vez más las esperanzas crecían en ellos.
— ¿que fue lo que sentiste cuando lo viste, Kibum? - pregunto Taemin.
— No sé como explicarlo, fue una sensación que jamás había experimentado. Me sentí completo.
— ¡sí! Esas son buenas señales, estoy seguro que lograras que Jonghyun te ame.
Eso esperaba el. Kibum ya sentía amor por Jonghyun o algo mucha más fuerte, el no podía describir exactamente que había sentido, pero de lo que estaba seguro era que haría todo lo posible por salvarlo.
— Sera mejor que ya vayan a descansar, presiento que mañana será un día muy agitado. - dijo Minho. - los veré mañana. - Se acerco a Taemin y le deposito un beso en la mejilla, el pelirrojo enrojeció fuertemente.
— ¿debo echarte agua, Taemin estas que ardes? - se burlo Onew.
— Que gracioso. - bufo Taemin. - vámonos Kibum te llevare a tu habitación.
Dicho eso Taemin cogió a Kibum del brazo y se lo llevo rápidamente de ahí. Onew solo río antes de desaparecer del lugar.
Al llegar a la que sería la habitación de Kibum - de por vida - este quedo impresionado, el cuarto era de por si extraño y muy colorido, pero el color que mas resaltaba era el blanco. La habitación parecía una flor por completo.
— Esto sin duda es impresionante - exclamo - ¿por que la cama es así?
La cama tenia la forma de una flor realmente extraña y sus colores era como ver un arcoíris, pero con siempre el blanco era el que más destacaba.
— Son la representación de todos los sentimientos que Jonghyun controla. Pero el que más lo representa es el blanco. - señalo Taemin.
— ¿por que?
— Porque su flor es blanca. La flor blanca es la que mantiene vivo a nuestro mundo. Jonghyun se encarga de mantenerla con vida dándole sus sentimientos, si esa flor se marchita nosotros estaremos en peligro como todos los humanos, sin esa flor ninguno de los ninilus seriamos capaces de llevarles a los humanos todo aquel sentimiento que necesiten. - expreso tristemente.
— ¿que hay de tus padres Taemin, ellos no pueden ayudar a Jonghyun? - Taemin negó rápidamente.
— No tengo padres. Nosotros no nacemos como los humanos. Nosotros nacemos cuando un humano expresa una emoción fuerte, yo llevo siglos de vida. - al ver el rostro aun confinado de Kibum, se lo explico mejor. - Jonghyun y yo somos hermanos porque nacimos de un mismo sentimiento. Cuando un humano se encuentra con sentimientos encontrados nace un ninilu o dos, en ese te caso fueron dos, pero yo solo cogí los sentimientos de tristeza mientras que Jonghyun cogió todos, es por eso que él es nuestro rey, porque es el único capaz de apórtale todos los
Sentimientos a la flor blanca, pero ahora Jonghyun esta careciendo de sentimientos, si se queda sin sentimientos no será capaz de cuidar de la flor y si eso sucede la flor se marchitara y todos estaremos perdidos y estoy seguro que eso es lo que busca la darli.
El problema era aun peor de lo que creía Kibum, de el dependía que el mundo de los ninilus no se destruyera, no podía dejar que eso pasara, no iba a permitir que los humanos se quedaran sin sentimientos, eso sería lo peor del mundo. Tomando más fuerza y valor decidió que no se rendiría.
— Por cierto Kibum… No te dije que tienes solo cinco días para enamorar al rey.
La mandíbula de Kibum cayó hasta el suelo. Cinco días era muy poco, no podía hacer que una persona se enamorara en tan solo cinco días, eso era imposible.
— Son muy pocos días.
— Lo sé, pero solo quedan cinco días para que la flor blanca florezca y una vez que eso suceda mi hermano se va a casar con la darli.
— ¡por dios!
Las cosas se ponían más complicadas, Kibum no sabía si podía lograrlo, pero no dejaría que Jonghyun se casara, eso sí jamás lo permitirá, primero muerto antes de verlo casado con alguien que no fuera él.