–¡Jungkook! –Se sorprendió al verle entrar.
El menor ladeó su cabeza con una sonrisa traviesa.
–¿Creías que no me enteraría? –Se burló.
–¿Yoongi? –Preguntó.
–Sí –Se encogió de hombros.
–Le dije que no lo hiciera –Rodó los ojos.
Jungkook se acercó a su cama para sentarse en el mismo lugar en el que había estado Yoongi anteriormente hace unos minutos.
–Es tu amigo, es lo que hacen los amigos –Acarició su barbilla.
–Como sea, yo me encargó de eso –Hizo un puchero.
–Olvida eso y mejor apúrate a mejorar –Le contestó.
Estaban hablando cuando una enfermera entró al lugar.
–Chicos, ¿qué hacen todavía aquí? –Preguntó la enfermera evidentemente asustada.
–No sé. Yoongi me dijo que me darían de alta en unas horas –Dijo confundido.
–Creo que entendió mal joven, hoy le dimos el alta –Explicó la chica.
–¿Hoy? –Parpadeó varias veces.
Miró al menor y este soló alzó los hombros porque no sabía de eso tampoco.
–Así es, incluso el joven dejó su cuenta pagada –Contestó.
Una vez más Yoongi había jugado contra sus sentimientos.
–Debía olérmelas cuando me quitaron el suero –Bufó enojado y con los labios abultados en un puchero.
–Que extraña relación tienes con Yoongi –Se burló de él.
–Y no has visto nada –Se quejó.
Recogieron sus cosas para salir del hospital. Después se encargaría de matar a Yoongi en cuánto llegara a casa porque lo había tenido esperando horas. Esperó a que Jungkook estacionara su coche en el estacionamiento y ambos salieron rumbo a su edificio, se quedó sorprendió cuando a lo lejos vio que el pelimenta estaba en el barandal esperándolos con un cigarrillo en la boca.
–Min Yoongi –El menor se acercó dando zancadas a las escaleras y después las subió a una velocidad increíble.
–Cuidado o te vas a caer –Exclamó el pelinegro aún abajo.
–Jimin, luego porque terminas en el hospital –Habló el mayor dando una calada a su cigarrillo.
–Ni digas nada que por tú culpa estaba como idiota esperando cuando ya me habían dado de alta –Hizo un puchero con los brazos cruzados.
El mayor se acercó a él acarició su cabello con cariño, el pelinaranja sonrió ante su toque y cerró sus ojos, sin embargo el recuerdo de Jungkook saltó a su mente. Se alejó del chico mientras buscaba la presencia del otro.
Entonces sintió como chocaba con alguien que lo tomaba de la cintura, volteó hacia atrás para encontrarse con la mirada del pelinegro sonriéndole con picardía.
–Y-yo… –Empezó a tartamudear el pelinaranja –Tengo que entrar a casa a terminar los documentos del trabajo –Mordió sus labios nervioso.
–Deja eso para después –Habló el mayor apagando su cigarrillo –Hay algo mucho más divertido esperándote en casa.
–¿A qué te refieres? –Preguntó el chico aún inocente de los sucios planes de aquellos chicos.
–Resulta que me acosté con Yoongi –Soltó el menor –Y por fin entendí porque tenías tantas dudas por decidirte por uno.
–¿¡Qué hiciste qué!? –Cuestionó el pelinaranja aún contrariado por la información que le decía el chico.
Ambos chicos le sonrieron con coquetería.
–A decir verdad yo también estaría en duda Jimin –Soltó Yoongi –Este chico no sólo está bueno –Mordió su labio –Es muy bueno en la cama y con gusto repetiría con él.
Jimin aún intentaba procesar lo que estos chicos le estaban proponiendo. Es decir, es cierto que con Yoongi había empezado a sentir algunas cosas pero cuando volvió a reencontrarse con Jungkook, la curiosidad sobre el nuevo Jeon asaltó su mente.
Tampoco se podía imaginar a Yoongi enredándose con el pelinegro, de por sí para él aún era bastante increíble como podía estar enamorado de ambas personas.
–¿Acaso me están proponiendo lo que creo que me están proponiendo? –Preguntó indeciso.
Ambos chicos se miraron con complicidad antes de que Yoongi lo tomara de la mano para entrar a su casa, con Jungkook detrás de él.
–Jimin –Continuo explicando –Sinceramente es más complicado que estés intentando decidir por uno cuando ambos podemos darte lo que quieres.
–Yoongi hyung y yo ya lo hablamos en el hospital –Dijo una voz detrás de él –Y decidimos que era mejor que lo probáramos para ver como resultaba.
El pelinaranja no podía dar crédito a lo que oía. Hace unos días se odiaban y ahora de repente se enteraba que ambos estaban ofreciendo una relación de tres.
–¿Desde cuándo ustedes dos…? –Pero no terminó su frase cuando vio todo el cuarto del mayor lleno de rosas en la cama y algunas velas que atenuaban el ambiente.
–Vaya hyung –Exclamó el menor –Si que te esforzaste.
–Tenía que hacerlo –Sonrió –Después de todo será nuestra primera noche juntos.
–¡No me ignoren! –Reclamó el pelinaranja que había quedado en medio de ambos –Aún me deben explicaciones –Siguió quejándose –¿Y además quién les asegura que yo acepto una petición tan loca como esa?
–Por favor Jimin –Habló el pelinegro –Sabes que me deseas pero también a Yoongi –Lo miró con una sonrisa –Y lo mismo pasa con nosotros, ¿acaso está mal?
–Solamente es raro –Hizo un puchero –No es normal.
–Tampoco lo es acostarte con tu mejor amigo y a las pocas horas besarte con tu ex novio –Dijo Yoongi alzando una ceja incrédulo.
Jimin volteó hacia el menor que lo miró con una sonrisa traviesa y encogiendo los hombros, dándole a entender que esa relación poco normal ya tenía un rato que había empezado.
–Contestando a tu pregunta anterior –Habló Jungkook –El mismo día que fuiste internado en el hospital.
–¡Eso fue hace como quince días! –Expresó el pelinaranja.
Yoongi asintió.
–Al principio sólo fue por curiosidad pero después descubrimos que teníamos más en común de lo que creíamos así que simplemente se dio –Explicó –Así que los días restantes nos encontrábamos después del trabajo e íbamos de una casa a otra.
–Vaya que tuvieron diversión sin mí –Se quejó.
–Dejemos este tema para después –Argumentó el menor –Y mejor pongámonos en acción.
Jimin se sintió nervioso ante sus palabras.
Incluso con toda la experiencia que tenía, era la primera vez que participaba en un trío y aunque la idea le parecía muy retorcida en un principio, pronto se volvió seducido mientras más lo pensaba.
No dijo nada, pero sentía los nervios se iban acumulando a su cuerpo. Ya había estado individualmente con cada uno, pero aún no lograba resolver como ambos chicos podían complementarse en la cama.
Yoongi no dijo nada, simplemente se dirigió al menor para besarlo en la boca, cosa que el chico accedió de manera instantánea. Jimin los observó con curiosidad, viendo como los ruidos inundaban la habitación entera y el beso se volvía más desesperado.
Justo cuando comenzaba a sentirse incómodo por ser un mero espectador, ambos se separaron de su beso y lo miraron con intensidad, provocando que se cohibiera por tener tantos ojos sobre él. Ambos se acercaron para besarlo en el cuello, sintiendo como sus lenguas jugaban en cuerpo y su aliento chocaba contra su piel.
Sin notarlo, pronto se dio cuenta de que su cuerpo era dirigido hacia la cama. Cuando sintió que sus piernas chocaron con el colchón, ambos chicos lo tiraron cayendo de espaldas y haciendo que los pétalos de rosas se elevaran por su movimiento.
Yoongi se hincó para desabrochar sus pantalones y bajarlos, mientras Jungkook lo ayudaba para quitarle la camisa al muchacho desde el otro extremo de la cama. El pelinaranja se sintió vulnerable al quedar completamente expuesto ante ambos chicos.
Ambos chicos comenzaron a quitarse la camisa y a bajarse los pantalones para quedar desnudos frente a él. La imagen ya era de por sí muy lujuriosa, porque tenía a la vista a los dos hombres que lo habían hecho dudar por tanto tiempo.
Ya no veía a un mejor amigo o a un ex novio detrás de aquellos rostros, sino que veía algo más profundo que sólo ellos tres podrían entender. Sin embargo, aquellos pensamientos fueron borrados cuando el mayor comenzó a estimular su miembro.
–ngh… –Jadeó apretando las cobijas de la cama y cerrando los ojos.
El pálido sonrió ante la respuesta y siguió acariciando mientras acercaba su boca lentamente a su miembro hasta meter por completo su longitud en su cavidad. Por otro lado, Jungkook se encontraba masturbándose ante la imagen de ambos chicos.
Inesperadamente, el mayor dejó de chupar su miembro haciendo que el pelinaranja abriera sus ojos por haber dejado de sentir esa sensación tan placentera.
–¿Qué pasa? –Preguntó inquieto.
–No podemos dejar a Jungkook fuera de la diversión Jiminnie –El pelinaranja volteó a ver al menor que seguía viéndolos desde la distancia.
Si esto ya estaba jodido, entonces dejaría que las cosas se jodieran por completo. Dejo a un lado su moral que le decía que eso estaba mal y con una mano le indicó al menor que se acercara a ellos.
El chico obedeció en seguida, así que Jimin se puso a cuatro patas acercándose al miembro del más pequeño de todos para estimularlo con sus manos. El menor se dejó hacer, cerrando los ojos cuando sentía la lengua de Park paseando por toda su extensión y a su mano izquierda juguetear más allá de ella.
Yoongi aprovechó para estimular el esfínter del pelinaranja con ayuda de su lubricante y dos dedos, introduciéndolos en forma de tijera para prepararlo. Jimin estaba recibiendo un ataque de emociones porque sentía como los dedos del mayor eran hábiles en su pequeña entrada.
Cuando sintió que era prudente, el pálido tomó su miembro para meterlo por completo en el pequeño hoyo del chico, haciendo que soltara un gemido cuando lo sintió entrar y parando momentáneamente la mamada que le hacía al otro.
Así comenzó una serie de embestidas dentro del pelinaranja mientras el menor recibía un oral del chico. Haciendo que solamente ruidos obscenos llenaran la habitación por completo. Entre jadeos del menor, las estocadas del mayor y la respiración entrecortada del pelinaranja.
Continuaron así durante un rato hasta que Jungkook por primera vez llegó al orgasmo. El menor entonces se recostó en la cama mientras ambos chicos tomaban su miembro para masturbarlo al mismo tiempo y estimularlo nuevamente.
–ugh… –Jadeaba el pelinegro –Lo hacen tan bien… uh –Dijo mientras sentía como ambos chicos hacían movimientos de sube y baja sobre su extensión.
Ambos se miraron como cómplices y sin resistirse, buscarlos los labios del otro desesperadamente para calmar sus deseos. No dejaron de masturbar al menor, pero ahora ellos también estaban ocupados intentando controlar su respiración por la intensidad de su acto.
Posteriormente, Jimin tomó de la mano a Yoongi para recostarlo en la cama. El pálido no dijo nada, sólo se dejó guiar por el pelinaranja que parecía haber ganado más confianza. Se recostó mientras veía como este se dirigía al menor para robarle un beso.
Jungkook entonces lo tomó de la cintura para corresponder a él, metiendo su lengua en la cavidad de su mayor. Yoongi se masturbó ante la escena de ambos chicos que parecían desesperados por los labios del otro.
Al poco rato, Jimin se acercó al pelimenta para subirse sobre él dándole la vista de su hermoso trasero formado. Yoongi lo nalgueó una vez, provocando que el menor gimiera como respuesta.
El chico comenzó a moverse rítmicamente sobre el pálido, ayudándose con las manos del mayor para darle más impulso a sus pequeños saltos. El menor se acercó a ellos, para seguir besando al pelinaranja, y juntando ambos miembros para hacer fricción entre ellos.
La sola imagen de ellos masturbándose mutuamente mientras el pelinaranja se movía sobre su miembro hizo que el mayor se corriera, dejando escapar un gran gemido y manchando el trasero del menor que escurría de aquel líquido blanquecino.
El menor entonces se paró de su lugar, para buscar besarlo una vez más, recargando todo su cuerpo en él. Se meneaba cerca de su miembro, para despertarlo una vez más mientras metía su lengua desesperadamente en la boca de Yoongi, delineando perfectamente cada parte de ella.
Jungkook lo tomó de la cintura para esta vez ser él quién lo penetrara, sintiendo como aquella cavidad lo inundaba del miembro.
–Joder Jimin –Exclamó –Eres tan apretado.
Se movió con intensidad dentro de su mayor, mientras este seguía estimulando al miembro ahora preparado del pelimenta.
Jimin entonces se volteó para quedar frente al pelinegro, que lo miraba con la misma intensidad de antes. El mayor acogió su cuerpo entre sus brazos, sirviendo de soporte para él.
Él seguía dando estocadas dentro de su esfínter mientras Yoongi, quién se había sentado masturbaba al pequeño pelinaranja. Esta vez fue él quien llegó al orgasmo, dejándolo exhausto por haber aguantado tanto.
–Uuugh… –Soltó.
Su cuerpo entero tembló por las sensaciones e intentando tranquilizarse, buscó los labios del pelimenta quién respondió a su acto.
Yoongi se levantó de la cama, quedando detrás de Jungkook mientras Jimin se ponía nuevamente en cuatro. El mayor entonces, procedió a masturbar al menor, mientras el pelinaranja volvía a ponerse en cuatro para recibirlo. Se masturbaba a sí mismo ayudándose con el ruido que los dos chicos detrás de él hacían.
Pronto sintió como el pelinegro volvió a entrar detrás de él mientras el mayor no dejaba de besarlo en la boca, juntando ambas lenguas en un movimiento que sólo ellos conocían. Jimin ayudó moviendo sus caderas de adelante hacia atrás y apretando su culo, para estimular el miembro de Jeon al máximo.
–Quiero intentar algo –Soltó el mayor con una voz grave.
Ambos chicos lo vieron con el sudor corriendo de sus frentes y con la respiración agitada. Yoongi besó a Jungkook una vez más, esta vez con una mirada tierna mientras recorría el poco cabello que caía de su frente. Se acercó a Jimin que aún seguía en la misma posición e hizo lo mismo con el chico, besándolo con cariño antes de sentarse en la orilla de la cama.
Llamó a Jimin, quién rápidamente lo busco.
–Súbete arriba de mí –Exclamó el chico.
A lo que el pelinaranja obedeció inmediatamente, haciendo que el mayor pudiera penetrar su esfínter con cuidado. Él se recostó mientras tomaba las caderas del chico y alzando sus piernas un poco.
–¿¡Qué piensas hacer!? –Preguntó confundido Jimin.
–Relájate cariño –Soltó –Tú solamente disfruta –Susurró en su oído.
El chico se estremeció ante su voz y tragando saliva aceptó su petición. Confiaba en Yoongi, así que intentó abrir sus piernas para recibir al otro chico quién ya había llegado a su lugar.
Jungkook intentó meter su miembro en el mismo lugar donde Yoongi ya estaba, haciéndose espacio con lentitud para no lastimar al pequeño Jimin.
–Ugh duele –Se quejó el chico.
–Aguanta un poco más –Habló Jungkook –Ya casi bebé –Lo tomó de la mejilla mientras le sonreía.
–Eres fuerte cariño –Argumentó Yoongi –Así que tú puedes.
Jimin se estremeció por unos segundos, cuando sintió que el miembro del menor ya había entrado casi por completo. Sintió un ligero dolor dentro de su cavidad, le ardía pero por alguna extraña razón, también se sentía bien.
Cuando el pelinegro por fin logró su cometido, ambos empezaron un vaivén dentro de él, sintiendo como su ano se desgarraba pero al mismo tiempo como el placer se acumulaba dentro de su cuerpo.
Enterró sus uñas en el pálido mientras él lo tomaba de la cintura para embestirlo con fuerza, el menor tampoco se quedaba atrás pues de igual manera hacia unas estocadas con la misma intensidad que el mayor mientras se agarraba de las piernas de Jimin para un mayor soporte.
Jimin al tener sus manos libres, comenzó a masturbarse mientras sentía como los chicos lo penetraban con fuerza, jadeando y volviendo a jadear en aquella habitación.
Pronto los tres comenzaron a sentir que estaban a punto de llegar, por lo que los dos chicos que se movían dentro de Jimin aumentaron su ritmo.
De esta manera, los tres llegaron casi al mismo tiempo. Siendo Jungkook el primero, quién se alejo para normalizar su respiración, al segundo fue Jimin quién dejó de masturbarse para sentir como su cuerpo entero se estremecía y dejando que el mayor hiciera lo que quisiera con su cuerpo. El mayor se vino a los pocos segundos, enterrando sus uñas levemente en las caderas del pelinaranja.
El pelinegro cayó agotado en la cama, mirando a ambos chicos que aún seguían exhaustos en la misma posición, uno sobre el otro. Se acercó a ellos para abrazarlos y decidieron quedarse así un buen rato, con los ojos adormilados.
Cuando el pelinaranja se levantó de la cama ambos chicos lo observaron caminar hasta el baño.
–La próxima vez –Habló el chico –Tienen que avisarme con anticipación para prepararme mentalmente –Se quejó antes del entrar al baño privado de Yoongi para limpiarse el desastre de su cuerpo.
–“La próxima vez” –Imitó Yoongi –Eso quiere decir que aceptó nuestra propuesta –Acarició la mejilla del pelinegro antes de robarle un beso.
–Somos nosotros, ¿qué esperabas? –Sonrió escondiéndose en su pecho –Jimin está coladito por nosotros –Rio.
–Estoy de acuerdo con eso –Dijo sin soltarlo de sus brazos.
Quizás su relación pareciera extraña para los demás, pero de algo si estaban seguros y era de que nadie podría comprender cuán profunda era. Aún no sabían cuanto iba a durar o si alguno se cansaría de la situación, pero por el momento querían disfrutar de las delicias que la vida les otorgaba.