Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Carta para Sasuke. por Kaida

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Bueno, soy nueva en la página, llevo un tiempo pensándome hacer un fanfic de Naruto en general y me ha costado horrores encontrar una buena idea. 

Espero que les guste.

Explicaré rápido las cositas que he puesto. Por redacción las palabras que vengan enfatizadas se escribirán en cursivas o negritas, dependiendo la situación, trataré de usar lo menos posible las comillas.

También quiero decir que todo el fin gira en torno a mensajes de texto, por lo que he decidido ponerlos como si realmente fuera whatsapp, o sólo textos, vienen del lado del remitente, como si nosotros mismos fuéramos Sasuke, y estos vienen en cursivas, si un día enfatizo una palabra dentro del texto entonces la marcaré negrita.

Espero que les haya quedado claro, porque creo que no me sé dar a entender.

Finalmente: LOS PERSONAJES DE ESTA HISTORIA NO ME PERTENECEN A MÍ, SINO A MASASHI KISHIMOTO.

Notas del capitulo:

Sí, soy nueva en la página, no, no he leído historias de aquí hasta ahora, es sólo que tengo una amiga que encontró la página un día tonteando y apenas me la recomendó para subir esta historia.

Espero, de todo corazón, que les guste, y, por favor, sino también díganmelo.

Volvía apenas del colegio como cualquier día, con tanta flojera como cabía en mi ser, había sido sólo otro aburrido día de clases donde no lograban enseñarme nada que no supiera ya.

Entré a la gran casa acomodada en una de las zonas más prestigiosas y caras de toda la ciudad, el servicio completo, que constaba de veinte personas, se apresuraron a darme la bienvenida a mi hogar, cosa que agradecí por lo bajo, procurando que mi padre no me escuchara siendo amable con nadie que no fuera de nuestra clase.

 

Estaba totalmente dispuesto a dejar mis cosas en la habitación y comer con la familia antes de que mis padres regresaran a sus labores cuando una chica, de nombre Ino Yamanaka, parte del servicio, llamó mi atención con sólo gestos.

 

-        Ino, me acompañarás a mi habitación ya que necesito que reorganices unas cosas. – mentí con lo mejor que se me ocurrió en ese momento.

-        Sí, señor Uchiha. – accedió sonriéndome con complicidad.

 

Subimos a las habitaciones y nos encerramos en la mía, Ino era mi amiga íntima desde hacía tiempo, o al menos hasta donde lograba recordar, aunque claro, todo era en secreto, mi padre no podía enterarse de eso, se volvería loco y lo de menos sería que Ino perdiera su trabajo, probablemente se encargaría de que no encontrara otro y me enviaría muy lejos, porque castigar a uno no le sería suficiente.

 

-        ¿Qué sucede, Ino? – pregunté curioso, normalmente esperábamos a que mis padres se fueran al trabajo para que el servicio, mis hermanos y yo pudiésemos convivir con armonía y paz, nadie osaba retar a mi padre.

-        Te llegó una carta hoy, Sasuke. No tengo idea de quién sea, no tiene remitente; pero estuve muy ansiosa todo el día. – explicó al tiempo que sacaba un sobre pequeño con mi nombre escrito por el frente junto con la dirección de mi casa.

-        ¿Nadie más la vio? – pregunté intrigado mientras tomaba el sobre entre las manos.

-        No, buscaba la correspondencia y la vi, decidí guardarla hasta tu llegada. – aclaró orgullosa.

-        ¡Fantástico, Ino! Te lo agradezco mucho. – declaré antes de animarme a darle un abrazo corto; pero fuerte.

-        ¿No la abrirás? – preguntó ella apenas nos separamos.

-        No hasta que se marchen mis padres, no quiero preguntas. – confesé para luego guardar esa carta debajo de mi colchón, el último lugar donde cualquiera buscaría.

-        De acuerdo, ¿comes? – la pregunta de Ino sonó más como una afirmación, por lo que ni siquiera pude negarme, sólo acomodé mis cosas en su sitio y salí de la habitación con ella nuevamente, ignorándola como si realmente no fuera nada ni nadie para mí.

 

Una hora y media de comida, como cada maldita tarde, y yo estaba cada vez más impaciente por descubrir quién había tenido tan lindo detalle, porque tenía que reconocerlo, la caligrafía era preciosa y escribir cartas era un romance que se había perdido años atrás. Sabía que no sería nadie que yo quisiera que me escribiera; pero tampoco podía rechazar la carta, tenía que leerla, al menos.

 

Tan pronto como mis padres se marcharon el ambiente en la casa se relajó totalmente, yo subí a la habitación a sacar mis cigarrillos y regresé con ellos y con la carta a la cocina, donde me senté con Ino dispuesto a leer. Antes de abrirla, siquiera, pensé en convocar a mis hermanos a escuchar, supuse que les causaría gracia; pero preferí no hacerlo, quizás sería más que una burla, ¿qué tal que ni siquiera era una carta de amor? Sacudí la cabeza un par de veces y luego rompí el sello del sobre, saqué una hoja pequeña, realmente diminuta, la magia de aquella carta se rompió un poco al ver el verdadero tamaño de lo escrito; pero, aun con eso, comencé a leerla en voz alta mientras fumaba.

 

Hola, no sé si me recuerdes; pero yo claro que me acuerdo bien de ti. Ha pasado mucho tiempo ya; pero sigo siendo la misma persona de ese entonces.

 

Sólo quería que supieras que estoy de regreso en la ciudad en caso de que, efectivamente, sepas quién soy. Me encantaría verte, claro, si tú también lo quieres.                  Sinceramente, K.

 

PD. Llámame alguna vez +343336845672.

 

Al terminar de leer esa pequeña nota me quedé estático, ¿quién me había escrito? Esto no era un error, conocía mi nombre y dirección; pero no tenía la menor idea de quién podía ser, además, ni siquiera firmó con su nombre, sólo dejó escrita una letra como remitente, ¿K? ¿Quién mierda era K?

 

-        ¿Conoces a esa persona, Sasuke? – preguntó Ino tras unos segundos en los que yo guardé completo silencio.

-        Sólo hay una manera de averiguarlo, Ino. – expresé justo antes de tomar mi celular y agregar un nuevo contacto para poder enviarle un texto.

-        ¿Le llamarás? – cuestionó ella sorprendida.

-        Primero le escribiré, si tengo alguna pista entonces llamaré, tranquila. – respondí mientras me planteaba los millones de posibilidades que tenía para escribir.

 

¿Quién eres?         Sasuke.

 

Sí, era algo de lo más imbécil el haber pensado por minutos lo que escribiría y haber elegido lo más simple; pero no tenía ninguna idea mejor. Los minutos trascurrieron y comencé a desesperarme, tampoco es como que llevara media hora ahí; pero solía ser extremadamente impaciente.

 

Alguien que conociste hace mucho tiempo.

 

Miré detenidamente el mensaje por un minuto, aproximadamente, hasta que tuve una idea de lo que escribiría, no era tan sencillo cuando no sabía con quién estaba hablando.

 

Eso lo dejaste muy en claro en tu carta, así que lo deduje rápidamente. Me refiero, ¿quién eres? Porque no estoy muy seguro de a quién debo recordar.

 

Firmaste como K; pero no recuerdo a nadie con un nombre tan raro que comience con K.

 

Tan pronto como llegaron esos mensajes, se marcaron como leídos, es persona estaba conectada esperando mi respuesta para decir algo.

 

No es mi nombre, es un apodo que tú me pusiste hace muchos años; pero está bien. No esperaba que me recordaras, sólo escribí en caso de que te interesara. Ten una buena noche y disculpa las molestias.

 

Si algo odiaba firmemente era sentirme rechazado, ¿primero me escribe, y cuando le escribo yo me rechaza? No tenía idea de quién era; pero no, no haría eso, porque nadie tenía permitido rechazarme por nada en el mundo.

 

Espera, veámonos, tal vez si te veo, te recuerde, ya que es muy probable que te haya conocido antes del accidente, y esa sería la razón por la que no me acuerdo de ti.

 

Nuevamente no tuve que esperar mucho para la respuesta, aunque claro, no tenía idea de lo que me escribiría esa persona.

 

¿Estás hablando en serio? ¡Ni siquiera sabes quién soy! ¿Eres así de estúpido todo el tiempo? Quiero decir, lo eras antes; ¡pero eras sólo un niño!

 

Pero, antes de que respondas eso, ¿qué accidente? ¿Estuviste involucrado en algo peligroso?

 

¡Siempre te estás arriesgando demasiado! ¿Estás loco?

 

Leer esos mensajes me dejaron perplejo, ¿de qué mierda estaba hablando esta persona anónima? ¿Qué se suponía que recordara?

 

De acuerdo, primero que nada, por favor deja de hablarme así, ya dejaste en claro que me conoces; pero sigo sin saber quién eres, ¿recuerdas? Así que explícate, ¿a qué te refieres con que siempre me arriesgo demasiado?

 

Hasta donde yo sé, mi accidente es información pública, lo encontrarás incluso a través de Google; pero ese ha sido mi primer y único accidente, ¿no es así?

 

Me sentí ligeramente perturbado al leer esos mensajes, ¿qué sabía de mí esta persona que yo no conociera? ¿Y si era cierto que nos conocíamos?

 

No buscaré nada acerca de ti, no soy un puto acosador, Sasuke. Preferiría leerlo o escucharlo de ti, que hacer ese tipo de investigaciones.

 

También, respondiendo a tu pregunta anterior, puedo recordar que te ponías en peligro por mi culpa, o tus hermanos, o tu hermana. Siempre estabas en el hospital con huesos rotos o heridas un poco menos graves.

 

Nadie sabía de la existencia de mi hermana, y nadie sabía de ella porque había fallecido poco antes del accidente que yo tuve, eso lo sabía gracias a mis hermanos; pero mis padres se habían asegurado que nadie supiera de nada sobre ella.

 

¿Me estás jodiendo? ¿Quién diablos eres? Estoy hablando en serio ahora, tengo el derecho de saber quién conoce tanto de mi vida.

 

Escucha, no me parece lo mejor vernos por ahora, no sabes quién soy, y probablemente tampoco te acuerdes viéndome ni nada parecido.

 

Pero hagamos algo así como un trato.

 

No me lo pensé realmente, estaba totalmente intrigado por esta persona, necesitaba saber quién era, saber si llegué a conocerla y, quizás, retomar el contacto, o quizás no; pero al menos quitarme esa duda.

 

Estoy leyendo.

 

Sigamos en contacto. Guarda mi número como te plazca, no me molestaré en absoluto; pero no me refiero a tener conversaciones triviales, me refiero a hablar como si tratáramos de conocernos el uno al otro, ¿qué opinas de eso?

 

Y cuando estemos seguros, entonces nos veremos. Entonces, si no me recuerdas, estará bien porque ya nos habremos conocido de nuevo.

 

Tan sólo leer eso me pareció de lo más lógico e inteligente, pensaba responder finalmente que estaba totalmente de acuerdo con esa idea cuando mis hermanos entraron a la cocina donde estábamos Ino y yo leyendo los mensajes de K.

 

-        Hermanito, ¿muy ocupado? – preguntó Itachi mirándome divertido.

-        Sí, en realidad, ¿qué querían? – cuestioné dejando el celular a un lado.

-        Salir, ya sabes, tomar algo de aire. – bromeó Sai en referencia a lo poco que podíamos salir cuando nuestros padres estaban aquí.

-        No, gracias; pero por ahora tengo otras cosas que hacer. – solté sin pensármelo.

-        ¡Qué aburrido eres, Sasuke! – declaró Itachi fingiendo molestia.

-        Oye, espera, ¿alguno de ustedes recuerda a alguien a quién yo solía llamar K? – pregunté sin más, Ino me miró confundida y esperó la respuesta de mis hermanos con las mismas ansias que yo.

-        ¿K? – preguntó Sai haciendo memoria. – No que yo recuerde, ¿tú sabes algo, Itachi?

-        No, a nadie, ¿es chica? Porque recuerdo que cuando eras pequeño solías hablar con una vecina, eran muy amigos, ella se mudó poco antes de tu accidente. ¿Por qué preguntas? – respondió Itachi luego de analizarme.

-        Me llegó esto. – expliqué vagamente mientras les tendía la carta.

 

Leyeron rápidamente la pequeña nota y se miraron entre ellos, ambos intentaron recordar algo que parecía perdido, y sin éxito me devolvieron la carta.

 

-        No aclara si es chica o chico, tampoco le he preguntado. Le escribí hace un rato, y sí nos conocíamos; pero no sé quién sea, y tampoco recuerdo que me hayan contado de alguna amistad llamada K. – solté pensativo.

-        No, al menos no que sepamos. – expresó Itachi mirándome curioso. - ¿Seguirás escribiéndole?

-        Quizás, quiero saber quién es. – confesé mirando el celular nuevamente; pero sin cogerlo.

-        Nada puedes perder haciéndolo, Sasuke. Si recordamos algo, te avisaremos, ¿de acuerdo? – ofreció Sai al tiempo que ambos se despedían con un ademán y se marchaban.

-        Bueno, al menos sé que no es nadie que ellos conocieran, aparentemente. – le dije a Ino bastante determinado a responder el mensaje.

-        Creo que Sai tiene razón, sigue escribiéndole. – pidió casi atentamente antes de ponerse de pie, darme un casto beso en la mejilla y luego de marchó a seguir trabajando.

 

Analicé el mensaje nuevamente, me sentía un tanto extraño de estar conversando con alguien a quién no conocía; pero eso era mejor que quedarme con la duda sobre quién sería.

 

De acuerdo, suena suficientemente justo. Sólo dime algo, ¿eres chico o chica? Ni siquiera estoy seguro de eso, y nadie parece saber con quién estoy hablando cuando pregunté por K.

 

Claro que no, el apodo ni siquiera está completo, no era sólo K; pero incluso si decidiera decirte el verdadero apodo, nadie sabría nada, era algo como una broma privada, algo que sólo tú y yo entenderíamos.

 

¿Cuál sería mejor? ¿Sería más fácil para ti escribirte con una mujer o con un hombre?

 

A K parecía divertirle responderme vagamente, no me daba respuestas concisas, sólo decía cosas a medias, se guiaba por mis reacciones, y eso me molestaba y frustraba demasiado, ¿cómo sabría quién es si no me habla realmente?

 

Sería exactamente lo mismo, quiero decir, no es como que estemos saliendo, sólo intento descifrar quién diablos me recuerda y por qué, eso es todo.

 

Entonces no importa si soy chica o chico.

 

Lo dejo a tu decisión.

 

Y esa respuesta, en particular, me molestó demasiado, ¿cómo me iba a dejar la decisión de si le escribiría como mujer u hombre? ¿Quién mierda era? Pensaba responder de mala manera, como suelo hacer, cuando releí lo que yo había enviado y entendí que había sido algo grosero, no era eso lo que había querido decir, no así.

 

No, deberías decirme esto, aunque sea.

 

No salió como quería.

 

Así seas chico o chica, no habrá diferencia, te seguiré escribiendo, ya lo acordé contigo, sólo siento curiosidad. ¿Podrías decirme, aunque sea, eso?

 

Soy un chico.

 

Buenas noches, Sasuke.

 

Hablemos en otra ocasión.

 

¿Hablemos en otra ocasión? ¿Qué otra ocasión? No entendía lo mucho que me intrigaba saber su identidad, tenía la necesidad de descubrirlo, miré el celular unos segundos hasta que me armé de valor para escribir lo que realmente estaba pensando.

 

¿Sería raro si te escribo después? No puedo soportar la curiosidad de averiguar quién eres.

 

Todo depende, ¿te refieres a sólo escribir más tarde?

 

No, me refiero a escribirte seguido, muy seguido. En realidad, tan pronto como me sea posible, me gustaría saber quién eres, y, si es posible, recordarte, o al menos intentarlo.

 

Honestamente realmente me gustaría saber de ti pronto; pero no te presionaré a nada, así que esperaré hasta que tú decidas que es un buen momento.

 

Está bien, K, ¿estaría bien si hablamos mañana? También me iré a dormir pronto.

 

Ya dije que tan pronto como tú desees. Te responderé tan pronto lea un mensaje tuyo.

 

Genial, hasta mañana.

 

Hasta mañana.

 

Con eso dejé el celular a un lado, ignorando completamente lo que sucediera a mi alrededor. No tenía idea de con quién estaba charlando; pero, extrañamente, me entusiasmaba saber que seguiría hablando con él. Al menos ahora sabía que era un chico, K era un hombre, y uno que, sin conocerme, lograba que me emocionara un poco al recibir un texto suyo.

Notas finales:

Espero leer sus comentarios más tarde, ya sean buenos o malos, y si les gusta, seguiré subiendo los capítulos conforme los vaya terminando.

Tengan un lindo día.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).