Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

HILO ROJO por Cafetonight

[Reviews - 17]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Sus labios se fundían con los de Seunghyun. Lo que al principio fue un dulce beso se convirtió en uno voraz, lleno de pasión. Las manos de Jiyong encontraron su camino en el cuello del alfa y sus piernas dejaron el suelo para sostenerse sobre las caderas de Seunghyun. El omega gimió, complacido ante el contacto de las manos sobre sus piernas.


Hermoso, brillante, magnifico, Jiyong no tenía una palabra precisa para describir como se sentía, porque aunque lo supiera, nada podría detallar la sensación de sus labios sobre los de Seunghyun.


Jiyong se aferró encantado, besando los pómulos del alfa. El olor que percibía era tan exquisito que nunca imagino que existiera.


Seunghyun lo observo por una fracción de segundos antes de ser halado sobre una superficie suave. Ahora sobre su espalda podía distinguir la silueta del omega acercándose a él. Seunghyun pensó que era extraño sentir tal atracción por alguien que apenas conocía, pero que al mismo tiempo amaba. El aroma almendrado de Jiyong estaba en todas partes, sumergiéndose en sus fosas nasales y deslizándose por todo su sistema.


El alfa deslizo una de sus manos hasta la parte baja de la espalda de Jiyong, este aspiro con fuerza, pero no lo detuvo. El omega por su parte hizo lo mismo, serpenteando sus manos debajo de camisa negra que llevaba Seunghyun.


Todo parecía ir bien, aunque el alfa sabía que no era el momento ni el lugar correcto para hacer esto.


“Por favor, cuida de Jiyong, la gente a veces suele ser cruel y no respeta la privacidad.” Las palabras de Soonho resonaron en su cabeza.


A Jiyong le hubiera encantado quedarse en el almacén con Seunghyun para siempre. Pero las cosas se estaban saliendo de contexto y no era  el lugar adecuado para hacer algo más. Seunghyun era un caballero y amablemente se apartó de él.


“¿Por qué tardaron tanto?”, Soonho pregunto mirando ambos.


“Lo siento, fue mi culpa”, Seunghyun se excusó.


Jiyong sabía muy bien, Soonho era demasiado entrometido cuando quería.


Cuando un cazatalentos le propuso a Jiyong modelar a la corta edad de dieciséis años, después de verlo caminar fuera de una tienda, Soonho fue encomendando por sus padres para cuidar de él. Jiyong, siendo un omega perspicaz tuvo sus dudas, ¿alguien tan joven como el cuidándolo?, él podría hacerlo solo. Soonho con veinte años era un joven inteligente y locuaz, que demostró todo lo contrario a lo que el omega pensaba,  ganándose así el respeto y cariño de Jiyong, convirtiéndose no solo en su manager, sino en su hermano,  amigo y confidente.


Sin embargo las cosas habian cambiado y Jiyong ya no era más un adolescente, sino un adulto.


“¿También quieres que te diga lo que hicimos?”, el omega estaba fastidiado.


“Sí, me gustaría escucharlo”, Soonho termino su bebida y deposito la copa sobre una mesa cercana.


Seunghyun vio la molestia entre ambos e intervino.


“Soonho, permitieras que lleve a Jiyong a casa.”


El omega y Soonho lo miraron.


“Si, está bien. Me ahorraras algo de trabajo.”


Jiyong estaba entusiasmado con la idea, así que regreso a su camerino para cambiarse de ropa. Quería verse bien para Seunghyun, pero en el pequeño guardarropa improvisado no había mucho de donde escoger.


“¿Jiyong?”


Jiyong giro para ver quien lo llamaba


“¿Si?”


“¿Te vas?, tan temprano.”


“Estoy agotado. Solo quiero irme a dormir.”


“Es una lástima, los chicos y yo planeamos ir al club y veníamos a invitarte.”


“Tal vez en otra ocasión”, Jiyong sonrió amablemente al joven modelo.


“Por cierto, ¿el alfa que está contigo es…?”


“Lo siento tengo que irme. Adiós”, el omega no estaba para interrogatorios y menos para alguien que conocía solo por trabajo.


Jiyong llego al pasillo y Soonho estaba esperando por él.


“¿Dónde está Seunghyun?”


“Le pide que te esperara afuera.”


“¡Por qué hiciste eso Soonho!”, Jiyong grito.


“Baja la voz. Lo hice por los paparazzi, ¿sabes cuántos de ellos darían lo que fuera por un escándalo tuyo?”


Jiyong se mordió la lengua con molestia, Soonho tenía razón.


“Mira Jiyong, sé que estas molesto, pero lo hago por ti y Seunghyun.”


 “Ya termino el sermón o aún más hay”, el omega cruzo los brazos con impaciencia.


Soonho se llevó la mano a la cabeza con ligera molestia, pero prefirió calmarse antes de hablar, “A veces te comportas como un adolescente caprichoso”, quiso decir pero no lo hizo.


“Lo que quiero que entiendas es que esta vez no solo se trata de ti, también involucra a Seunghyun y su trabajo, ¿Sabes que es abogado?, cierto. Él no puede estar metido es escándalos porque perjudicaría su reputación.


Jiyong lo observo, Soonho había captado su atención.


“De ahora en adelante tendrán que tener cuidado. Así que por favor, no apresures las cosas. Lo que tenga que pasar, pasara en su momento.”


Jiyong prefiero guardar silencio esta vez y siguió las indicaciones de Soonho. El alfa esperaría por él, en un lugar específico, alejado del evento de modas. Era molesto pero era lo mejor.


Jiyong con suerte abordo el auto de Soonho, después de un sin número de flashes. Al omega le gustaban las cámaras cuando estas lo captaban desfilando, grabando un anuncio publicitario o posando para un editorial de modas, más no, cuando se trataba de su vida privada. Había sobrevivido por años a supuestos embarazos, a ser tildado de manzana de la discordia o a romances con personas que ni siquiera conocía o solo había visto una vez. Para él era agotador, así que entendía el punto de Soonho. No sería justo para Seunghyun pasar por todo esto, no, si estaba en sus manos.


Jiyong diviso a un hombre de pie al lado de un auto negro, era Seunghyun, incluso desde el otro lado de la calle podía distinguir su aroma.


“Espera…” Soonho tomo la mano de Jiyong antes de que bajara del auto. Jiyong lo miro a los ojos y al contrario del sermón que imagino, vino un abrazo cálido.


“Siento no haberte creído antes, perdóname.” Jiyong correspondió su abrazo.


“Tonto, no hay nada que perdonar.”


“Se juicioso Jiyong, ahora todo lo que digas o hagas depende ti.”


Jiyong sonrió, “¿algo más?”


“Se feliz.”


Jiyong lo abrazo una vez más conmovido y luego se despidió de él.


La calle estaba vacía y no había muchos autos, así que tomo un gran respiro antes de caminar en dirección a Seunghyun. Mentiría si dijera que no estaba nervioso, a pesar de que minutos antes había estado besándose con él en una habitación sin nadie en absoluto. Sus pies parecían desequilibrados mientras daba pasos lentos hasta el otro extremo de la calle, cuando estuvo lo suficientemente cerca del alfa, se detuvo y miro al suelo. Estaba demasiado avergonzando para mirarlo a los ojos, Jiyong culpo a sus feromonas y la oscuridad.


Jiyong vio a Seunghyun acercarse hasta que sus pies estuvieron solo a centímetros de los suyos. “Sus zapatos son realmente bonitos”, pensó para sí mismo, tenían un detalle de flores en el diseño.


“Hace frio, ¿te gustaría entrar en el auto?”


La voz de Seunghyun era mucho más profunda y grave de lo que recordaba, o es que no había prestado la suficiente atención a ese detalle. El omega levanto la vista y se encontró con los ojos de Seunghyun. El alfa amablemente abrió la puerta para él y Jiyong tomo asiento, Seunghyun hizo lo mismo.


Ambos se quedaron en silencio por un momento, Jiyong creía que a este paso Seunghyun escucharía el martilleo de su corazón. El alfa lo observo por un momento, esperando a que dijera algo pero Jiyong estaba demasiado callado.


“Llegamos.”


Jiyong estaba tan absorbido en sus pensamientos que apenas había sido consciente de que Seunghyun lo había llevado a casa.


“¿Qué?”


“Tal vez fue mala idea pedirle a Soonho que te trajera a casa.”


“Se juicioso Jiyong, ahora todo lo que digas o hagas depende ti”, las palabras de Soonho resonaron en su cabeza.


“¡No!. Yo… bueno…”, Jiyong se llevó las manos a la cabeza, con frustración. El alfa lo observo confundido. ¿Seunghyun había malinterpretando las cosas?


“Yo solo… estoy un poco nervioso”… y avergonzado, quiso decir.


“Te entiendo, me siento igual.”


“No lo parece, te vez tan… seguro de ti mismo.”, la voz fuerte se convirtió en una débil.


“Tú también.”


Jiyong sonrió y negó con la cabeza, “Eres muy amable, pero no tienes que mentir.”


“No estoy mintiendo.”


Jiyong enfoco su atención en el alfa.


“Por un momento… tuve miedo de que te alejaras de mí”, Seunghyun apenas fue consciente de que estaba llorando, así que se limpió las lágrimas. “Lo siento”, se disculpó y miro hacia otro lado. Jiyong podía sentir el malestar a través de su pecho.


“Cuando te fuiste esa vez…”, Jiyong comenzó, “… sabía que estabas confundido por la presencia de Soonho.”


Seunghyun escuchaba con atención sus palabras a pesar de no verlo a la cara.


“Estaba asustado de no volverte a ver, Soonho dijo que estaba loco, que las cosas del destino no existen…”, Jiyong se detuvo un momento para tomar aire y desenredar el nudo de su garganta, “… entonces, cuando más quise negar sus palabras más reales se hacían. Yo… estaba muriendo, porque todo lo que deseaba era a ti”, Jiyong llevo sus manos al rostro para ocultar sus lágrimas.


Los cálidos brazos del alfa lo envolvieron, mientras el llanto se libera con fuerza de su interior. Seunghyun lo entendía muy bien, porque aunque estuvieran separados, la sensación de vacío y angustia era la misma que había experimentado.


El alfa beso su cabello, “Me sentía de la misma forma sin ti. Me pregunte qué clase de destino cruel era el nuestro para jugar con nuestras vidas.”


Jiyong aun con los ojos emborronados de lágrimas lo observo, Seunghyun apego su frente al del omega, mirándose uno al otro a los ojos, con sus manos entrelazadas, con los sentimientos a flote.


“Te amo”, pronuncio Seunghyun, antes de acercarse a sus labios y besarlo. Este beso era diferente, una reafirmación de sus sentimientos, un beso lento, sin prisa, lleno de anhelo y amor.


“Te amo”, respondió Jiyong cuando se distanciaron unos centímetros, una media sonrisa se dibujó en el rostro de Seunghyun. El alfa procedió a besar los rastros de lágrimas que aun acompañaban al rostro de Jiyong. El omega cerró los ojos, dejando que Seunghyun borrara la tristeza de su corazón, luego se quedaron abrazados en silencio, apreciando la presencia del otro.


Ellos no estaban calculando el tiempo, aun con el manto de estrellas brillantes que los envolvía desde el cielo.


“La primera vez…”


Seunghyun sabía que se refería a la primera vez que se vieron, “No sé cómo explicarlo.”


Jiyong se removió un poco de los brazos del alfa para observarlo mejor, con el rostro inclinado sobre su hombro, podía distinguir su perfecta mandíbula cincelada y sus largas pestañas.


“Todo olía tan dulce y ardía como el fuego, y el fuego se hizo profundamente doloroso… después ya no recuerdo.”


“Dulce… como la fragancia de algo que jamás habías experimentando, como el fuego envolviendo tus sentidos, como el dolor martilleando tu cuerpo para que siguas tus instintos.”


Jiyong movió su cabeza afirmativamente desde la posición en donde estaba, “Cuando saliste corriendo quise seguirte… luego me di cuenta de lo que pensaba y me detuve, no sabía por cuanto tiempo lo lograría”. El omega recordaba su lucha constante entre lo que le pedía su cuerpo y lo que decía su razón.


“Si continuaba unos segundos más frente a ti, yo…”, El alfa apoyo su cabeza sobre el respaldo del asiento y miro hacia el cielo, Jiyong no estaba seguro pero la temperatura corporal de Seunghyun parecía a ver aumentando. El omega se movió por completo y tomo el rostro del alfa para examinarlo, Seunghyun parecía sorprendido pero no por el contacto.


“Tu temperatura…”


“Estoy bien”, lo tranquilizo, tomando sus manos.


“No hay significado para el hijo rojo Jiyong, algunos piensan que es una bendición, otros que es una locura, de lo que si estoy segura es que es real. Lo entenderás mejor cuando estés con él”,eso fue lo que dijo su abuela cuándo busco respuestas. Aunque en un principio estaba furioso y molesto consigo mismo por sentir todos esos sentimientos por un desconocido, algo le impedía odiarlo y por el contrario solo desea estar cerca de él.


“Esa noche… en la estación de policía, ¿Qué fue lo que paso?”, pregunto Seunghyun.


Jiyong suspiro y comenzó a narrarle todo lo sucedido. El omega se había quedado sin supresores y no tuvo tiempo de informarle a Soonho sobre ello, ya bastante trabajo tenia para llamarlo a mitad de la noche y pedirle que fuera a comprarlos. Jiyong estaba absolutamente seguro de que él podía arreglárselas bastante bien, aunque no había contando con que su celo apareciera de improviso. Jiyong era consciente de que pronto lo tendría, como omega lo sabía, sabia del malestar que generaba no ingerir el medicamento, principalmente si no se tenía pareja, eso sumado a que estaba emocionalmente agotado con sus pensamientos hacia Seunghyun.


El omega tomo sus llaves a media noche y camino unas cuadras hasta una farmacia cercana para comprar el medicamento. Cuando lo tuvo en sus manos decidió volver a casa, en el camino sin embargo se encontró con problemas. Jiyong tenía un temperamento fuerte y difícilmente se dejaba intimidar por los alfas, cuando el desconocido comenzó a seguirlo desde una esquina cercana, Jiyong no se amilano ante el peligro. El alfa sin embargo, un hombre mucho mayor que Jiyong, era demasiado insistente, y cuando el omega le dijo rotundamente que no, fue la gota que derramo el vaso. El desconocido intento golpearlo, pero Jiyong fue más ágil, encestándole un puño en el rostro. El alfa no se dio por vencido y tomo el brazo del omega tan fuerte que parecía que uno de sus huesos estaba roto, Jiyong lucho y forcejeo, hasta que finalmente el hombre lo soltó, el omega corrió y en el camino perdió sus zapatos, fue entonces cuando una patrulla de la estación apareció y Jiyong pidió ayuda. Debido a la confusión y al testimonio falso del alfa, Jiyong fue detenido contra su voluntad y el resto es una historia conocida.


De alguna forma Jiyong se sintió más relajado al expresar todo lo sucedido ante Seunghyun, pero a diferencia de él, el alfa estaba visiblemente ofuscado, con los nudillos fuertemente apretados sobre el timón del auto.


“Seunghyun…”


Seunghyun se tomó unos segundos antes de expulsar su rabia en una bocanada de aire.


“No vuelvas hacer algo tan irresponsable como eso.”


Jiyong frunció el ceño ante el tono serio pero no estaba molesto y eso era extraño.


“No volverá a pasar, lo prometo.”


“No quiero que nada malo te pase. No quiero que te hagan daño.”


Jiyong se sintió a gusto con sus palabras.


“Entonces… volveremos a vernos”, Jiyong pregunto con timidez, frente al complejo de apartamentos donde vivía.


El alfa asintió con la cabeza, “Por supuesto, si tú me lo permites.”


Ambos sonrieron, era extraño pero no incómodo.


“Sera mejor que entres, está haciendo frio.”


“¿Me llamaras?”


“Si.”


Jiyong se acercó lentamente a su rostro y lo beso. Seunghyun espero unos segundos hasta que Jiyong desapareció en uno de los ascensores, luego se fue del lugar, con una sonrisa que ni el mismo creía.


 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).