En la Dimensión Arcturus.
La rapidez con la que caminaba producía unos ecos apenas audibles. Sus pasos eran elegantes pero constantes, algunos vampiros al verlo pasar se apartaban de inmediato haciendo una reverencia, como era un pura sangre eso era normal.
Avanzó hasta una oficina cerrada y abrió la puerta, allí estaba Kaname quien se encontraba sentado en su escritorio y Takuma estaba parado a su lado. Ambos revisaban unos documentos que el Consejo Vampírico les envió. Pero al verle entrar le prestaron atención.
—¿Ocurre algo Rido? –preguntó Kaname.
El castaño se levantó consternado y se acercó a su tío. No era normal que Rido le interrumpiera. Este siempre se mantenía apartado en algunos temas.
—Dime Kaname puedes sentir la presencia de Yuu –preguntó el castaño mayor.
Era normal que su voz fuera fría, pero Kaname le conocía demasiado bien y supo inmediatamente que estaba preocupado. El castaño frunció el ceño, y se concentró para localizar la esencia de su hermana. La busco en los campos de entrenamiento, en la mansión, en el jardín y sus cercanías pero no encontró ni un rastro de su presencia.
Kaname se volteo y vio directamente a su rubio amigo.
—Takuma, a ella la han mandado a alguna misión recientemente –le pregunto.
—Si, partió hace unos dos días, fue a eliminar a unos niveles E, que causaban problemas, tenía que volver hoy en la mañana.
—Tío ¿Pasa algo? –le pregunto a Rido.
No entendía porque estaba preocupado, nunca se sabía con qué excusa iba a salir Yuu, por lo que posiblemente llegaría tarde.
Yuuki siempre es despistada, pero orgullosa y fría con los que no le caen bien, pero sobre todo cruel y despiadada con los que lastiman a sus seres queridos.
—No pasa nada –respondió Rido con indiferencia.
Tal respuesta hizo que el castaño menor alzara una ceja molesta, ¿porque Rido no podía hablar con naturalidad y decir lo que siente?
—Si hay algo que te angustia deberías decirlo y ya –por el tono en su voz es notaba que estaba un poco molesto.
—Rido-sama –dijo Takuma quien no los había interrumpido en ningún momento.
Esta era una forma para darle a entender a Rido que estaba de acuerdo con el castaño. Este solo suspiro resignado, sabía que si no hablaba Kaname se enojaría demasiado.
—Anoche, podía sentir la presencia de Yuu viniendo hacia acá pero su presencia junto con la de su compañero desapareció y no la he podido sentir desde entonces.
Después de decir eso, en el rostro del Kuran menor no se podían leer ninguna emoción, nada ni alegría, preocupación o enfado.
—En qué lugar en específico la sentiste. –exigió saber, su voz no detonaba ningún sentimiento.
—En el Bosque Death bows –contesto irritado.
Sentía que fue mala idea ir a ver a Kaname, él solamente adquirió esa faceta madura, una barrera impenetrable para que nadie se percatara de sus sentimientos.
—Si Yuu no ha llegado en el atardecer la mandaremos a buscar, ya que si se fue a resolver otro caso de niveles E, ella nos informaría primero, Takuma estos documentos lo dejaremos para otra ocasión.
Takuma solo atinó y asintió con la cabeza, y Kaname empezó a caminar hacia la puerta.
Rido le observo, la elegancia con la que caminaba, era diferente a la de cualquier pura sangre, era más natural, no era forzada, era como si nunca perdiera esa aura de magnificencia que lo envolvía, pero algo últimamente le había llamado la atención, eran esos rizos castaños que le caían en forma de cascada por la espalda y bajaban por debajo de la cintura.
—Pensé que te cortarías el cabello, Kaname –dijo Rido.
Esa pregunta le tomo desprevenido, haciendo que se sorprendió un poco, pero cuando se compuso solo le contesto.
—He estado ocupado últimamente, por lo que no he tenido tiempo.
Rido le escuchó atentamente y pensó que ese estilo le daba un toque más delicado, con razón los viejos del Consejo no le habían negado ninguna de sus peticiones recientes.
—Te queda bien, no deberías córtatelo.
Kaname le sonrió sinceramente y Rido salió de la oficina, les daría una visita a los ancianos del Consejo, posiblemente amenazaría de muerte a algunos ancianos si se atrevían a tocar o insinuársele a su querido sobrino. Después de todo él era Rido Kuran quien se atrevería a contradecirle.
La figura del castaño poco a poco se perdió por los pasillos del corredor.
En la Dimensión Diphda
Pudieron ver unos cabellos largos plateados que eran mecidos por el viento y unos orbes amatistas, todos se quedaron sorprendidos al saber quién era. El joven salto de los montículos de piedras en donde estaba y sus pasos se dirigían en la dirección en la cual se encontraban.
—Yuu, enserio no cambias. Mira que ponerte a practicar un hechizo en medio de la noche y mandarnos a este lugar –hablo el peli plateado un poco molesto.
La mencionada solo sonrió dulcemente y acomodo unos cabellos que tenían en su frente.
—No te moleste, realmente lo siento –dijo la joven un poco apenada, parecía que la valentía mostrada recientemente se hubiera desvanecido.
Pero lo que nadie sabía, excepto el peli plateado era que ella lo hacía para aplacar la furia del oji amatista, simplemente era una buena manipuladora.
El joven de cabellos plateados, suspiro resignadamente, no era por hubiera caído en la manipulación, sino que no podía estar molesto con ella por más de unos minutos.
—No estoy molesto Yuu, pero será mejor irnos en este instante –dijo mostrando una bella sonrisa.
La castaña se alegró y corrió hacia él, le abrazo haciendo que el peli plateado le correspondiera de la misma forma.
—Me alegra que no estés molesto Ichiru –dijo para luego liberarlo del abrazo y sonreírle inocentemente.
Al ver esa sonrisa, Ichiru rápidamente se dio cuenta que abría un problema. Dirigió sus orbes amatista hacia los presentes, pasó su vista por los ojos de cada uno y solo había desconcierto en ellos, pero cuando poso su vista en el otro peli plateado, las amatistas de este perdieron brillo.
Su pecho dolió, le dolía mucho ver esas amatistas que se parecían las de su hermano, pero opacas, no entendía el porque de eso, pero noto de ese peli plateado había sufrido mucho y eso hacía que su pecho doliera.
—Te conozco muy bien, así que dime que pasa –le reprendió a la castaña quien al verse descubierta se puso un poco nerviosa.
—Bueno lo que sucede es que no puedo hacer que regresemos por ahora – dijo haciendo que la furia de Ichiru volviera.
—¡Me estás diciendo que nos trajiste hasta aquí no puedes mandarnos de regreso! –Exclamo molesto.
La castaña comenzó explicarle a Ichiru lo que les explico a Kaname y a los otros, haciendo que este solo se resignara. Es que Yuu no cambiaría por nada del mundo, cuando volvieran a su dimensión él mismo la obligaría a tomar nuevamente sus clases de hechizos.
—Bien, entiendo tu punto y agradezco que Aido te valla a ayudar a buscar ese libro, pero donde nos vamos a quedar mientras tanto.
—Les ofrecería que se quedaran aquí en la academia, si no fuera quedado destruida por la batalla contra Rido Kuran –dijo Cross haciendo que tanto Yuu como Ichiru arquearan una ceja.
—¿Una batalla? y ¿contra Rido? –Exclamo Ichiru sin comprender el porqué de ese suceso.
—Les explicaremos después –dijo Cross un poco serio.
Una seriedad que no era propia en él, dando a entender que era muy importante lo que les iba a decir luego ya que Cross siempre es risueño y alegre, pocas veces se comportaba serio.
—Bueno entonces ustedes vendrán con nosotros –pregunto Aido.
—¡No! –contesto Ichiru.
Esa respuesta hizo que los vampiros le miraran sin comprender.
—Lo que Ichiru quiso decir es que no será necesario. –corrigió Yuu tranquilamente.
—¿En dónde se quedaran? –preguntó Takuma con una ceja alzada.
—Aquí en la academia –contesto rápidamente Yuu sin darle verdadera importancia.
Todos estaban sin comprender es que ellos no habían entendido que la academia está destruida y no se podía habitar en ese estado. Yuu comprendió que ellos habían mal interpretado sus palabras o más bien ella no se había explicado bien.
—Bueno lo que sucede es que Ichiru realizara un hechizo para reconstruir la academia.
—Aunque necesitare un poco de ayuda –dijo mirando a Yuu, quien asintió levemente.
—Puedes hacer eso, te lo agradecería mucho –le dijo Cross.
Quien se puso muy emocionado, al saber que su preciada volvería hacer la de antes, posiblemente reanudaría las clases.
—Ya que van a reconstruir la academia, nos quedaremos aquí después de todo Aido les ayudara a buscar ese libro –les informo Kaname a los presentes haciendo que un peli plateado fruñera el ceño y gruñera.
—Enserio Kaname-senpai, muchas gracias –exclamo Yuuki feliz, ya que pensaba que lo hacía por ella.
Zero al ver esa escena desvió la mirada y Yuu frunció el ceño molesta, esa acción no pasó desapercibida por Ichiru.
—Bueno comencemos –le dijo la peli corto a Ichiru quien asintió.
El peli plateado cerró sus ojos y comenzó a decir palabras en un idioma que nadie entendía, los borgoñas de Yuu también se fueron cerrando lentamente y debajo de sus pies apareció un el símbolo del Ying y Yang, todos vieron como una tenue luz plateada rodeo su cuerpo y sintieron como su energía fue traspasada a Ichiru, todas las rocas destruidas empezaron a levitar y comenzaron a unirse hasta que toda la academia quedo como antes, el símbolo debajo de los pies de Yuu desapareció y ambos lentamente abrieron sus ojos.
—¿Acaso, absorbió parte de tus poderes? –pregunto Aido horrorizado.
Ichiru y Yuu se vieron entre ellos, ya que no entendían la actitud del rubio, no pensaban que eso fuera algo malo, después de todo no estaban matando a nadie.
—Si, hay algo de malo en ello– planteo su duda Ichiru.
—Es que eso... –no pudo terminar de habla ya que Yuu le interrumpió.
—No veo nada de malo en eso. Después de todo Ichiru es mi equilibrio.
—¿Tu equilibrio? –pregunto Yagari arqueando la ceja dando a entender que no comprendía.
—Vallamos a dentro les parece, ustedes nos explican sobre la batalla contra Rido y nosotros responderemos sus dudas –dijo Ichiru tranquilamente.
Todos comenzaron a ir hacia un edificio, pero antes de que Yuu entrara Ichiru la tomo de la muñeca.
—¿Acaso que molesta la actitud de Yuuki Kuran? –preguntó.
Yuu comprendió que Ichiru noto su molestia anterior. Eso era normal, él la conocía demasiado bien.
—Me pone furiosa. Me molesto que cuando Kaname dijo que se iban a quedar actuara de esa forma, es como si creyera que todo el mundo gira a su alrededor. Es fácil darse cuenta que Zero está enamorado de ella. Te puedo asegurar que Zero ni Kaname serán felices a su lado. Seguramente ellos han sufrido mucho por su culpa.
Cuando termino de decir todo eso, empezó a respirar entre cortamente y luego se calmó, debía mantener la calma, pero no podía ocultar su disgusto a causa de ese castaña.
—Entonces crees que debería alejarse de ellos porque no haría feliz a ninguno. Hay algo mas no es así.
—Diste en el blanco, considero que ellos serán felices si se dan la oportunidad de conocerse mejor. Posiblemente terminen enamorándose como sucedió con Ze nii-sama y Kana onii-sama.
—Sabes que estamos en otra dimensión así que posiblemente eso no sucederá.
La joven quien sonreía solo ensancho su sonrisa.
—Lo sé, así que tú me ayudaras a unirlos, sé que te diste cuenta de que lo ojos de Zero no brillan, parece que no tienen vida y te conozco lo suficiente como para saber que aunque él no es Ze nii-sama no quieres verle sufrir, tanto como yo no deseo que Kaname sea infeliz con Yuuki.
Ichiru solo sonrió como respuesta, no cabía duda de que ella era su equilibrio, como para darse cuenta de sus sentimientos.
—Hablemos de ello después. Nos están esperando, deseo saber sobre esa batalla reciente con Rido.
Ambos comenzaron a caminar hacia la puerta del edificio en el cual todos ya habían entrado, sería largo lo que iban a dialogar pero querían saber todo lo referente a esa dimensión.