El hombre gentilmente golpeteaba su pluma contra el pergamino frente a él. Su padre estaba esperando por su reporte en la capital, pero Jonghyun tenía que esperar a recibir sus propios reportes antes de poder escribir los suyos. Sus hombres estaban afuera en el campo de batalla, contando a los muertos y ayudando a los heridos, y encadenando a los prisioneros en la tienda de campaña en medio del campo.
Elevo la vista cuando escucho un profundo carraspeo del capitán de su escolta. Jonghyun asintió suavemente e indició que el hombre continuara. Minho se inclinó, “Mi príncipe. El prisionero está asegurado y listo para ser interrogado”
Jonghyun asintió, y luego de ponerse su abrigo, siguió al hombre fuera de la tienda y hacia la pequeña tienda en la que estaba ese prisionero especial. La puerta de la tienda fue sujetada y el ingresó inclinado.
El interior era iluminado débilmente por la linterna en la mesa. Era la única cosa en el lugar, junto a la gran estaca que estaba clavada en el medio para mantenerla, y la criatura que estaba esposada a esta. Lo observó, su mirada era penetrante mientras el príncipe se acercaba. Su armadura de oro aún estaba en su lugar, y donde debía haber abolladuras y ralladuras no había.
Este siseó mientras Jonghyun se acercaba. Él solo bufó “Sisear no le hará nada bien a tu pueblo ni a ti” Luchó contra sus ataduras, sabiendo que era inútil, mientras el otro hablaba. Su lenguaje nativo inundaba a Jonghyun en un intento de controlarlo pero sus cadenas quemaban contra su piel dejándole marcas rojas y el gruñía cuando su hechizo era cortado. Jonghyun solo reía, “No intentes tu magia conmigo, elfo”
El elfo le escupió. “No te atrevas a tocarme bestia asquerosa”
Jonghyun solo se arrodilló frente al otro, pasando sus dedos alrededor de la armadura de metal del hombre y jalándolo hacia él para poder tener una mejor vista del susodicho. “Haré lo que me dé la gana. Podrás ser un príncipe y un dios en tu estúpido pueblo, pero aquí solo eres mi prisionero. Dime lo que quiero saber, y nadie te hará daño”
El hombre lo miró con odio, y escupió en el rostro de Jonghyun. “Haz lo que quieras, pero nunca te diré una sola cosa”
Jonghyun solo se limpió con su manga, y cuando salió del cuarto asintió hacia Minho. “Ajusta las cadenas. Aumenta la seguridad”
Veamos si puedes hablar más por la mañana.
No lo haría.
Cuando la armadura fue retirada, el elfo había rotó los dientes de los dos hombres, casi prendiéndose de sus cuerpos. Por supuesto aquellos dos soldados nunca se acercaron a la tienda o a la criatura nuevamente.
Cuando el médico entró a revisar las heridas del elfo, este se las arregló para ponerse de pie y pateó las piernas del hombre antes de tirarse contra la estaca de madera como si nada hubiera pasado. No es necesario decir que el médico no regresó cuando le ordenaron intentarlo nuevamente.
Se rehusaba a comer. A hablar. A hacer cualquier cosa aparte de mirar con odio a quien sea que entrara a la tienda, y hacer cualquier cosa que pudiera para hacer que se fueran y nunca quisieran regresar nuevamente. El único que nunca regresó fue Jonghyun.
Se arrodilló frente al hombre, viéndolo con cuidado mientras se movía lentamente para ver sus heridas. El hombre se alejó, mirando al otro mientras sus ojos calculaban la mejor manera de hacer que el otro se fuera. Jonghyun solo frunció el ceño y se sentó acuclillándose sobre sus pies. “Bien, pero si no dejas que alguien vea eso, morirás”
El elfo tiró su largo cabello fuera de su rostro mientras decía siseando. “Si no fuera por estas cadenas, ya estaría curado”
Jonghyun solo sonrió ligeramente, antes de encogerse de hombros. Limpió sus manos en sus pantalones mientras se ponía de pie. “Porque si eres quien creo que eres, no creo que quitarlas sea una buena idea”
“Prometo no destruir todo. Solo las sucias bestias” prometió el elfo. “Dejaré a los caballos vivos”
“Me halaga que pienses de cómo una bestia, pero que estés vivo y sin hablar o muerto es lo mismo para mi” Se volteó para irse, “Espero que disfrutes tu estancia”
Antes de que pueda salir de la tienda, escuchó un molesto ‘espera’. Volteó la vista para ver a la criatura, su cabello oscuro cayendo sobre su rostro mientras el levantaba la vista ligeramente. “Al menos déjame curarme. Por favor”
“Entonces déjame ayudarte” dijo Jonghyun.
Luego de unos minutos el elfo aceptó sin ganas. “Bien”
Y cuando Jonghyun se acercó él no se alejó ni intentó atacarlo. Cuando se movió lentamente para tocarlo y ver las heridas, le dejó hacerlo. Desde ese momento Jonghyun era el único que elfo dejaba que se acercara, y Jonghyun no sabía cómo se sentía con eso.
*****
Sus razas habían estado en guerra por tanto tiempo como Jonghyun podía recordar. Él había nacido en medio del conflicto, y entró en la sangrienta guerra tan pronto alcanzó la mayoría de edad. Su padre nunca le dijo porque estaban en guerra con las personas élficas, pero parecía que nadie recordaba la razón. Había rumores, sobre como su rey usó a una mujer humana y luego la rechazó, o la otra sobre el huevo de dragón que fue robado por los humanos y cómo los elfos lo querían de vuelta. De cualquier manera, Jonghyun estaba cansado de la guerra y las muertes.
No le gustaban los elfos, eran seres mágicos extraños que dada la oportunidad podrían matarlo con un chasquido de sus dedos, pero no los odiaba. No creía que merecían ser forzados a pelear contra los humanos, y morir por cientos con sus propios hombres.
La mañana siguiente luego de permitir a Jonghyun curarlo, el batallón empezó a moverse. El elfo era el prisionero personal del príncipe, siempre estando a su alrededor. Caminaba junto al caballo de Jonghyun con sus manos esposadas frente a él, y si era necesario lo lanzaban sobre el regazo del príncipe cuando debían ir más rápido. Que es donde el elfo estaba mientras Jonghyun tiraba de las riendas para hacer que el caballo fuera más lento.
“Crees que pueda conocer tu nombre antes de ser tirado sobre tu regazo” Comentó amargamente mientras limpiaba su boca con su manga.
“Mi nombre no significa nada para ti” Jonghyun agarró al hombre por su camiseta, y lo lanzó fuerte contra el polvoriento suelo.
El elfo solo se sentó en el suelo y lo vio con odio mientras el hombre bajaba del caballo. “Tú sabes el mío”
“Yo sé cómo te llamas a ti mismo, sí” comentó Jonghyun mientras revisaba entre sus alforjas. “Pero, ¿Sé tu nombre? ¿Ese nombre? No lo sé Onew”
Onew solo sonrió altivo, parándose habilidosamente sin usar sus manos y ladeo su cabeza para ver al hombre. “Pero nadie lo sabe”
Jonghyun rodó los ojos, y continuó buscando lo que quería. Por esto no notó cuando Taemin se acercó y arrojó una pieza de carne al elfo gritándole que la atrape, antes de reí cuando esta solo chocó contra su rostro. Onew solo suspiró y se quitó la carne. “Imbécil” Murmuró por lo bajo, y Taemin se esfumó antes de poder oír al príncipe reir por la única palabra que el elfo dijo.
xoxox
Los meses pasaron, y Jonghyun no estaba cerca de conseguir lo que necesitaba del hombre. Estaba perdiendo su paciencia, principalmente porque mientras más se tardaba, más difícil sería decirse que odiaba a la criatura.
Así que mientras estaban sentados en su tienda, el elfo tendido en su catre mientras él se sentó un poco lejos escribiendo sus órdenes, le tomó a Jonghyun todo dejar de elevar la vista para verlo, pero cada vez que lo hacía Onew lo estaba viendo directamente. Maldecía diciéndose que volviera la vista al papel frente a él, y odiaba como esa pequeña sonrisa del elfo estaba aún plantada en su mente.
Más tarde esa noche cuando Jonghyun elevó la vista para ir a la cama, Onew estaba dormido y enroscado en el catre. Usualmente dormía en la estera que estaba en la habitación, sus manos encadenadas a la estaca de metal que estaba allí, y usualmente Jonghyun lo movía, pero sentía que no debía hacerlo esta noche. Él no quería interrumpir el sueño de Onew, porque se veía tan tranquilo… tan hermoso de esa manera.
Así que en contra de su buen juicio trepó hasta quedar detrás del hombre, enroscando un brazo alrededor de la cintura del elfo, y lentamente se quedó dormido. Poco sabía él que Onew estaba despierto, completamente despierto, y podía atacarlo en cualquier momento, pero no lo hizo. Solo suspiró y se inclinó contra el tacto, sabiendo completamente que no debería hacerlo, pero por una noche se dijo que estaba bien dejarse llevar. Se dijo eso por solo una noche, Jonghyun no era un príncipe humano y él no era un príncipe elfo. Ellos solo eran dos personas que podían hacer lo que quisieran, y no enemigos desde el nacimiento y la circunstancia. Solo por una noche.
Y cuando Jonghyun despertó la mañana siguiente Onew aún estaba entre sus brazos, solo había volteado hacia él con sus brazos apretados contra sus cercanos pechos, durmiendo sonoramente. Jadeó suavemente, al ver que tan cerca estaban y cuánto comprendía que amaba el sentimiento de su respiración contra su rostro. Rápidamente cerró los ojos, porque quería disfrutar esto, por tan solo unos minutos más. Un momento después abandonó el catre, y también al hombre, fue a cambiarse para el largo camino que les esperaba, pensando que Onew no era conocedor de lo que había pasado la noche anterior.
xoxox
“¿Cómo me baño, Jonghyun?” preguntó Onew mientas se paraba junto a él.
Jonghyun vio sobre su hombro al elfo, y rápidamente volteó su cabeza nuevamente. “No lo sé. ¿Solo salta en el río?”
Ambos hombres estaban un poco alejados del resto de la armada, porque a Jonghyun le gustaba cuando era capaz de bañarse solo. Onew solo pasaba a acompañarlo.
“No puedo necesariamente lavarme con estas esposas puestas”
Jonghyun bufó y se acercó a él. “¿Qué quieres que haga? ¿Lavarte?” Estaba sin su túnica, solo tenía sus pantalones puestos con sus botas tiradas a un lado.
Podría haber jurado que el hombre sonrió con astucia. “Bueno, tienes que desvestirme primero”
Jonghyun solo presionó sus labios juntos, pero sin embargo cedió. Antes de que lo supiera estaba parado detrás de un Onew desnudo, y el también estaba desnudo, lavando el cabello del elfo. Odiaba admitirlo, pero amaba sentirlo a través de sus dedos. Era suave y largo, negro como la noche, y tuvo que forzarse a ignorar como oía al otro hombre gemir levemente mientras sus dedos hacían su labor.
Pero cuando todo termino, y se estaba moviendo para subir. Onew no se lo permitió, porque no podía contenerlo más. Así que, envolvió sus manos en la muñeca del hombre y tiró de él. Jonghyun lo vio confundido, preguntándose si quizás esta era una mala idea, pero luego Onew tenía sus labios presionados con los suyos y todos los pensamientos coherentes escaparon de él.
El creyó que quizás esta era la manera en la que el elfo lo tentara aquí, solo para ahogarlo, pero Onew solo elevó sus brazos conectados sobre la cabeza del hombre y lo jaló fuertemente contra él.
Y Jonghyun ni siquiera pensó en detenerlo mientras lo besaba de vuelta.
xoxox
Fue cuando un pequeño grupo, como una docena de hombres, se adelante para revisar el punto de encuentro donde ellos fueron atacados. Onew había ido con ellos, porque nadie en el campamento quería vigilarlo.
Minho se acercó rápidamente a Jonghyun, porque si alguien quería llegar hacia él primero deberían pasar sobre Minho. Los atacantes eran elfos, y por un momento la compañía humana creyó que solo era un plan para traer de vuelta a su príncipe. Sacaron las espadas y la pelea inició, ese pensamiento se hizo más real. Jonghyun no estaba preocupado por perder un prisionero, pero si por perder a una compañía que siempre estaba ahí. Tenía miedo de tener que ver como se iba a Onew.
Fue un segundo error, ver al elfo en el momento equivocado, y la espada de su atacante estaba cortando el aire hacia su hombro, pero el golpe nunca llegó. El atacante había sido convertido en polvo justo ante sus ojos, elevó la vista para ver a Onew parado, su mano izquierda apuntaba al frente mientras un humo brotaba de sus dedos. Jonghyun parpadeó sin creer lo que veía, porque como se quitó las esposas que ahora estaban rotas en sus pies, y más importante, ¿Por qué lo salvó?
Pero antes de que algo pueda ser concretado, sintió el frio metal entrar a su pecho. Escuchó a Onew gritar y correr directo hacia él. El elfo que lo había apuñalado había sido convertido en polvo. Antes de que Jonghyun pudiera chocar contra el suelo, se encontró en los cálidos brazos del otro, elevó la vista para ver a Onew observándolo. Recordó su primer beso, las caricias. Como había alejado al elfo porque lógicamente creía que todo era una trampa para que él confiara lo suficiente como para darle la oportunidad para escapar, y/o matarlo en el proceso.
Pero ahora, al ver sus hermosos ojos y su oscuro cabello que caía alrededor de su rostro, Jonghyun no pensaba en nada de eso. Ni siquiera el hecho de que su camisa no estaba empapada de su sangre, y que probablemente estuviera a punto de morir pasó por su mente.
Onew tocó su rostro, y una sola lágrima cayó en la mejilla de Jonghyun. “Eres tan estúpido”
“Mataste a tu propia gente” murmuró Jonghyun, “Eres libre, pero no puedes volver”
“No me importa” confesó Onew. Rasgó la túnica del hombre y ubicó su mano sobre su herida. Vio los débiles y suaves rasgos de Jonghyun y mordió su labio.
“¿Qué estás haciendo?”
“Di Jinki”
“¿Qué?”
Onew se inclinó, rozando sus labios. “di mi nombre Jonghyun” Lo besó una vez más, sosteniendo ambas manos sobre la herida y cuando se aparto del hombre, Jonghyun dijo su nombre suavemente.
Todo lo que vio fue la cara de Jinki, lentamente desapareciendo mientras la blanca luz se cerraba a su alrededor, antes de que todo se volviera negro para él. Podría jurara que escuchó al elfo susurrar unas últimas palabras.
“Te amo”
xoxox
Cuando Jonghyun se levanto casi una semana después, Jinki estaba acurrucado junto a él. Y cuando le preguntó que había pasado, el elfo le contó todo. Jonghyun también preguntó algo suavemente, vacilando. “¿Te escuché bien?”
“Escucharme, ¿Cuándo?” preguntó Jinki, sobando la ´punto de su oreja entre sus dedos, vio al hombre temblar, y tronó sus dedos. Una pequeña flama salió de su mano, la mantuvo cerca para calentar al hombre, sin mencionar que permitió que algo de su propio calor corporal sea transferido al hombre.
“Cuando me desvanecí” dijo Jonghyun. “¿Dijiste que me amabas?”
Jinki parpadeó, elevando la vista, viéndolo a través de sus cabellos antes de que una pequeña sonrisa se formara en sus labios. “¿Por qué más dejaría todo solo para salvarte?”
“No me merezco esto” murmuró el humano “Te mantuve prisionero”
El elfo se inclinó más cerca, viendo directamente a los ojos del hombre. “Aún lo soy, incluso sin las esposas”
“¿A qué te refieres?”
“No puedo volver con mi gente. Maté a muchos para salvar a un humano no puedo volver, porque sabes mi nombre verdadero, un nombre que solo yo sé. Soy el prisionero de tus deseos, porque con ese nombre puedes hacer que haga lo que sea. Soy tu prisionero porque no me puedo ir. Tu corazón es mi llave. Mi escape pero también mi prisión”
Jonghyun parpadeó viendo a la criatura. Tenía información vital, un prisionero y algo que usar. Él era algo que su propia gente creía un monstruo y creían que necesitaban ser matados, pero Jonghyun ya no creía eso, y si era honesto con él mismo siempre había sabido que esto era así.
Desde el momento en el que posó sus ojos en Jinki, sabía que algo pasaba. Una conexión, una cadena de trampas que podían cerrarse en cualquier momento, pero no lo hicieron. Esa cadena del destino que los conectó los había mantenido juntos, los salvó de una vida que nunca quisieron.
“T-también te amo” susurró Jonghyun tímido.
Jinki le sonrió, dejando correr sus dedos por la mandíbula del hombre. “Sabes, no podemos volver. Tu gente cree que está muerto”
¿Él era libre? ¿Finalmente libre de la vida con la que nació? No más matanzas, o muerte o asesinatos. No más de mandar a sus propios hombres a ser quemados vivos por un salvaje incendio. No más.
Jonghyun envolvió sus brazos alrededor del cuello del elfo, y lo jaló hacia él. “Creo que puedo con eso”
“Estarás conmigo hasta tus últimos días. Solo yo. ¿Estás bien con hacer eso con un elfo?”
Jonghyun empujó sus dedos a través del negro y suave cabello y sonrió mientras se inclinaba para rozar sus narices juntas. “Solo si ese elfo eres tú, Jinki”
~FIN~