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Diez Preguntas por MarceBlue

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Notas del fanfic:

¿En serio debo aclarar que los personajes no me pertenecen a mi si no a Eiichiro Oda?

Nos encontramos en la ciudad "Grand Line" en una cafetería cerca del campus de la universidad "New Word", donde un grupo de alegres amigos estaba reunidos comiendo y uno de ellos en particular devorando la comida de una forma sorprendente para cualquiera que no lo conociera, casi atragantándose con ella, y los demás cuidando que este no se robara su comida, ya que no sería la primera vez que esto sucediera.

— De verdad no se que regalarle, es nuestro aniversario, se supone que debe ser...... algo especial ¿Pueden ayudarme? — suplicó por ayuda un chico de nariz larga, cabello rizado y tez morena.

— ¿Por qué no solo le regalas carne? — sugirió un chico pelinegro de tez blanca, el cual tenía una cicatriz bajo su ojo izquierdo y un sombrero de paja, el mismo que anteriormente dije, devoraba la comida como si su vida dependiera de eso.

Al instante de haber dado aquella sugerencia, una chica de largo cabello naranja lo golpeo fuertemente en la cabeza causándole un gran dolor, porque claro, no es como si aquel chico estuviese hecho de goma para que no le doliera, era una persona normal...... relativamente hablando.

— ¡Kaya no es como tú!— le gritó furiosa su agresora, para calmarse luego— aunque creo que ella estará feliz con que le regales cualquier cosa que salga de tu corazón Usopp.

— Claro, podrías darle tu sangre, ya que la sangre sale del corazón — comentó una aparentemente calmada pelinegra de ojos azules.

— ¿¡Qué clase de comentario es ese, Robin!? — exclamó el de nariz larga.

— No entiendo porque hacen tanto drama solo por una fecha, pero si tanto te preocupa, podría sugerirte que le des una katana, yo estaría feliz si me regalaran una Katana...... o algo de Sake — dijo un peliverde que tenía una cicatriz pasando sobre su ojo izquierdo, la pelinaranja lo golpeó de la misma manera en la que había golpeado al glotón del sombrero de paja.

— ¿¡Que parte de "Kaya no es como ustedes" no entienden!? ¿Qué se supone que vaya a hacer ella con una katana?

— Solo trataba de aportar algo, bruja — se quejó el peliverde alterando más a aquella chica que parecía tener problemas de ira.

 — ¿¡Como me llamaste!? — exclamó.

— Nami-swan se ve tan hermosa cuando se enoja — comentó un rubio alegre mirando de forma extraña a la pelinaranja.

— No importa lo que le des, se que será un ¡Super! Regalo — comentó un chico de cabello azul haciendo una pose extraña.

— Creo que no fue buena idea preguntarle a ustedes — dijo Usopp suspirando con resignación.

— A las bellas damas siempre les fascinan las hermosas tonadas de una apasionada canción — dijo un hombre bastante mayor con un gran afro mientras se acercaba a ellos, en sus hombros cargaba un estuche de violín.

Aquel hombre siempre se colocaba en las afueras de esta cafetería disfrazado de esqueleto a tocar el violín u otros instrumentos, dejando el estuche de este en el suelo, donde las personas le dejan dinero, parecía ser también miembro de aquel alegre grupo de amigos.

— Vamos Usopp, no te deprimas, se que estos idiotas no ayudan mucho, pero la de Brook no es una mala idea — comentó la pelinaranja para consolar a su amigo.

— Pero quiero hacer algo grande, algo diferente, algo digno del Gran Usopp, una canción es algo muy común.

— Hey, espera un momento ¿Cómo que algo digno de "El gran Usopp"? Si estas pensando así vamos mal, debes desear que tu regalo sea digno de ella, no digno de ti — le dijo ella a modo de reclamo.

— Ya lo sé Nami, pero si me pongo a pensar en eso va a ser más difícil, no existe regalo que sea digno de ella...... yo...... yo no soy digno de ella, ella merece algo mejor que yo, y no importa lo que le regale, no será ni un cuarto de lo que ella se merece — Nami lo miró con ternura, y al fondo se podía escuchar al pelinegro pedir más comida.

— Ya pensaremos en algo — dijo sonriendo.

— Gracias Nami — le respondió — cambiando de tema, Luffy ¿Has pensado en el trabajo que debemos hacer?

— ¿Tenemos que hacer un trabajo? — preguntó el chico del sombrero de paja quien parecía estar muy sorprendido y confundido.

A él siempre le había sido muy difícil aprender, de hecho para muchos era increíble que aquel muchacho hubiese logrado llegar a la Universidad, pero Luffy a pesar de ser algo idiota, era alguien que lograba todo lo que se proponía y hacía cualquier cosa para cumplir sus sueños, y él tenía un sueño: Recorrer el mundo entero y explorar grandes y extraños lugares, vivir una gran aventura, tal y como el hombre que le había regalado el sombrero de paja lo estaba haciendo.

El nombre de aquel hombre era Shanks, un reportero apodado "Akagami" que tenía un programa de televisión donde mostraba documentales de sus aventuras al rededor del mundo, Luffy lo había conocido de pequeño cuando por casualidad paseaba con sus dos hermanos y su abuelo por un parque de la ciudad, y cerca de este le estaban haciendo una entrevista a "Akagami"; mientras paseaba, el pequeño pelinegro terminó perdido y tal vez por cosas del destino, se encontró con el reportero, quien al haber encontrado a un niño perdido lo primero que pensó fue en buscar a sus padres.

Los dos pasaron un corto tiempo juntos, y para entretenerlo, el mayor le contaba sobre sus aventuras al pequeño, quien estaba totalmente fascinado con estas, deseando saborear la libertad y vivir aventuras aun más grandes, divertidas y emocionantes a las que aquel hombre le contaba; por su parte el pelirrojo también quedó fascinado con el alegre y entusiasta niño, le recordaba a alguien que había conocido en el pasado, por lo que cuando encontraron al abuelo del pequeño, quien estaba dispuesto a regañarlo y darle varios de sus"puños de amor" por  haberse perdido, mientras los hermanos del menor solo se burlaban de este, sobre todo uno con pecas, el pelirrojo se despidió del pequeño entregándole su sombrero de paja diciéndole que cumpliera todos sus sueños y que tal vez algún día le devolviera el sombrero.

Luego de eso Luffy le preguntó a quien lo cuidaba, una mujer algo corpulenta y de cabello naranja llamada Dadan, sobre aquel pelirrojo que había conocido ese día en el parque, ella le contó sobre él y le explicó a que se dedicaba, el niño comenzó a gritar que quería ser como él a lo que la mujer se escandalizó diciéndole que aquello era imposible para un niño tonto como él, y así los dos comenzaron a discutir; lo cierto es que aquella mujer le tenía mucho cariño al pequeño y a sus hermanos, pero difícilmente lo demostraba.

En medio de la discusión otra mujer apareció, ella parecía ser tierna y dulce y tenía el cabello de un verde oscuro, al enterarse de la situación le dijo al niño que si quería ser como el hombre que le regaló ese sombrero, debía estudiar seriamente, ya que para llegar a donde se encontraba, ese hombre había cursado primaria, secundaria y estudiado periodismo en la Universidad. Después de ese día todos se sorprendieron de ver como con algo de dificultad el menor parecía progresar un poco en los estudios.

Su grupo de amigo lo fue haciendo con el paso de los años: en la primaria conoció al peliverde amante del sake y las katanas cuyo nombre es Zoro, a la pelinaranja algo agresiva amante de las mandarinas y el dinero llamada Nami, al de nariz larga llamado Usopp que escenas atrás estaba pidiendo ayuda a sus amigos para el regalo de aniversario que la daría a su novia Kaya y al rubio pervertido amante de la cocina y de las mujeres llamado Sanji; posteriormente, en la secundaria, conoció a la pelinegra misteriosa amante de la historia cuyo nombre es Robin, y al alegre peliazul amante de la Cola llamado Franky, Robin tiene un tierno perro peludo llamado Chopper con quien ellos siempre han jugado, Luffy dijo que el perrito hacía parte de su grupo de amigos; y ya al entrar en la universidad, cuando todos decidieron hacer de aquella cafetería su punto de reunión frecuente y Sanji comenzó a trabajar ahí, conocieron a Brook, quien completó aquel extraño grupo de amigos.

Para ellos  fue una suerte terminar juntos en la misma universidad, a pesar de estudiar profesiones distintas: El peliverde de la cicatriz estudiaba criminalística, soñando con ser el mejor detective de todos y poder usar sus habilidades de combate que había ganado practicando diversas artes marciales en el dojo de su familia junto con su hermana Kuina; Nami estudiaba Cartografía, siempre le apasionó aquella ciencia, de niña soñaba con explorar lugares y hacer mapas de estos aunque estos mapas ya existieran; Usopp al igual que Luffy estaba estaba estudiando periodismo, claro que este no tenía el mismo sueño de su amigo, se conformaba con ser un gran reportero famoso, pero estaba consciente de lo difícil que era lograr aquello, y era un poco temeroso, aunque detrás de ese temor tenía escondido un gran espíritu de aventura; Sanji estaba estudiando gastronomía, todos sus amigos concordaban en lo exquisita y deliciosa que era su comida, soñaba con explorar el mundo entero para probar toda la comida que encontrase de las diferentes culturas y aprender a cocinarla.

Robin quien siempre fue muy curiosa y como ya se había mencionado antes, es amante de la historia,  estudiaba Arqueología, deseando conocer la interesante historia de las civilizaciones antiguas; Franky estaba estudiando Ingeniería Civil, y luego de eso estudiaría Ingeniería Naval, desde niño fue gran fanático de construir distintos objetos, y soñaba con construir algo grande o "Super" como él diría, algo que perdure y haga historia, claro que en ese entonces desconocía lo que sería ese "algo"; Brook ya era un anciano, tenía 90 años, pero a pesar de su edad siempre estaba lleno de vitalidad, sus amigos y familiares mas cercanos habían muerto en un accidente cincuenta y cuatro años atrás, y desde ese entonces se sintió muy solo, junto con la única amiga que le quedó: una ballena llamada Laboon a quien iba a visitar todos los días en el acuario, el único deseo de aquel hombre era inspirar y alegrar a todas las personas con su música, hasta el día de su muerte.

Ahora volvamos con el grupo de amigos, donde Usopp reprendía a Luffy por ser tan despistado y no acordarse del trabajo que ambos tenían.
— Serás idiota ¡Tenemos que investigar sobre la facultad de medicina y entrevistar al decano, al docente y a uno de los estudiantes! ¡Debemos hacer un largo informe y no dejare que nuevamente me dejes todo el trabajo a mí! — se quejó.

— Bueno ya, solo dime qué debo hacer y lo hago — le respondió el pelinegro tranquilamente.

— Pensándolo mejor..... creo que es mejor que tú no hagas mucho o terminaras arruinando el trabajo  ¿Por qué no te encargas solo de entrevistar al estudiante de medicina? Incluso haré la lista de las preguntas por ti, solo tienes que anotar las respuestas.

— Que aburrido — se quejó Luffy haciendo un puchero.

— Vamos, puedes escoger a cualquier estudiante de medicina.

— ¿Qué Kaya no estudia medicina? Podemos escogerla a ella y listo.

— No, a ella no porque....... tengo mis razones, escoge a otro estudiante

— ¡Dijiste cualquier!

— ¡Ella no es cualquiera!

— Ya dejen de discutir — dijo Nami — bueno amigos, yo me retiro porque tengo clase.

— Si no me equivoco, a esta hora vas a tu club a reunirte con esos chicos a leer cosas sobre gays, yaoi ¿No? Incluso Vivi está ahí, quiero acompañarte, deseo investigar más sobre eso — le dijo Robin a la pelinaranja, y las mejillas de esta se tornaron en un ligero color carmín.

— ¡Robin! Tu......

— Solo vamos Nami — la tomó de la mano y ambas se retiraron.

— Adiós Nami-swan, Robin-chwan — se despidió Sanji.

— Eres tan patético — comentó Zoro.

— ¡A quien le dices patético, Marimo de mierda!

— ¿A quién más va a ser? Al más patético de este lugar, si no lo puedes identificar te daré una pista Ero-Cook, tiene unas horribles cejas rizadas.

— Tus palabras no me afectan te diría que te fueras a la mierda pero seguro te perderías en el camino ¡Cabeza de musgo!

— ¿Qué dijiste? Pues aunque digas que no te afectan mis palabras tu actitud no lo demuestra.

— Chicos ya, dejen de pelear por una vez en sus vidas — se quejó Usopp.

— Nunca me canso de ustedes chicos, son tan divertidos — dijo Luffy quien comía y reía al tiempo.

— Toma Luffy ya había hecho la lista de preguntas antes — le dijo Usopp entregándole una hoja de papel — me retiro, tengo cosas que hacer.

— Yo tengo que ir a mi ¡Super! Clase de topografía, así que nos vemos chicos — dijo Franky antes de irse.

— ¡Sanji! ¡Qué haces ahí vagando! ¡Vuelve a la cocina! — quien llamaba a Sanji era su jefa, una mujer alta de cabello rubio oscuro y ojos verdes llamada Jessica.

Desde muy pequeño el rubio de cejas rizadas trabajó en el "Baratie",  el restaurante de un hombre con una pierna de palo llamado Zeff, quien lo había sacado del orfanato donde lo dejaron sus familiares a quienes no les importaba aquel niño rubio, lo veían como un estorbo, un inútil. Zeff lo crió como a su hijo y le enseñó todos sus conocimientos, cuando iba a ir a la universidad lo echó del restaurante para que pudiera progresar por sí mismo, y fue cuando empezó a trabajar en aquella cafetería para ayudar a Zeff a pagar sus estudios.

— ¡Voy Jessica-san! — le respondió antes de retirarse.

— Yo voy a buscar un lugar cómodo para dormir a demás, en este lugar no venden Sake — dijo Zoro antes de irse, el del sombrero de paja simplemente rió luego de haber terminado de comer.

En aquel momento entró en el establecimiento un hombre pelinegro de tez pálida con marcadas ojeras y un gorro blanco con motas negras sobre su cabeza, con mirada fría se sentó frente a la barra en espera a que lo atendieran, aquel hombre por alguna razón había llamado la atención del alegre e hiperactivo chico con sombrero de paja, a quien le gustaba mucho hacer amigos, y como hacía con cualquier persona que llamara su atención, se acercó a hablarle.

— Hola, Me llamo Monkey D Luffy ¿Quién eres? — el recién llegado lo miró extrañado con el ceño fruncido.

— Soy Trafalgar Law, ¿Necesitas algo? — le respondió de forma seca y fría.

— Tara...traff... trar... ¡Torao! Te diré Torao — tartamudeó tratando de pronunciar aquel nombre, y al no poder hacerlo decidió ponerle un apodo.

— Mi nombre no es Torao, es Trafalgar ¿Tan difícil es de pronunciar?

— Para mí sí — el mayor suspiró.

— Repito, ¿Necesitas algo?

— Tu gorro es muy curioso.

— Tu llevas un sombrero de paja.

— Cierto — dijo riendo — este sombrero significa mucho para mí.

— Creo que lo he visto antes — comentó algo pensativo — ya recuerdo, cuando era más joven un reportero famoso lo usaba, y de un tiempo para acá dejó de usarlo, se llama....... "Akagami".

— Es el mismo que él usaba, cuando yo tenía 7 años lo conocí en un parque y me lo regaló, yo quiero ser como él: Conocer el mundo entero y vivir grandes aventuras.

— Pareces un chico fantasioso.

— ¿Qué estudias tu?

— Medicina.

— Oh, entonces creo que tú podrías ayudarme.

— ¿Ayudarte? ¿En qué?

— Se supone que debo entrevistar a un estudiante de medicina para un trabajo — luego de decir aquello comenzó a buscar el papel que su amigo le había entregado previamente, encontrándolo en el bolsillo de su pantalón — estas son las preguntas que me dio Usopp.

— ¿Una entrevista? Paso, busca otra persona.

— Buenos días y bienvenido ¿Vas a ordenar algo Law? — se acercó una camarera del lugar, quien parecía ser cercana al del gorro con motas, era una chica de cabello negro largo y ondulado apodada "Baby 5".

— Solo dame un café — le respondió el aludido.

— ¡Me necesitas! —  gritó emocionada — claro, en unos minutos te traigo tu café.

— ¿Solo pedirás eso? En este lugar venden cosas muy deliciosas, el tocino es el mejor que podrás probar, tienen unas tortillas exquisitas, y el pan que hacen también es muy rico — le comentó casi babeando.

— Odio el pan.

— Bueno, no solo he mencionado pan y...... un momento ¿Cómo puedes odiar el pan? Es decir ¿¡Quien odia el pan!?

— Yo.

— Como sea ¡Sanji! ¡Dame más comida!

— Ya comiste suficiente por ahora Luffy, no podemos fiarte más comida y Jessica-san podría molestarse porque no eres muy puntual a la hora del pago — comentó el rubio mientras se acercaba a ellos.

— Pero Jessica sabe que puedo pagarle trabajando.

— Sí, y también sabe que el que tu trabajes aquí lo que trae son más perdidas.

— ¿Podrías prestarme dinero?

— Lo siento Luffy, no tengo suficiente.

— Tranquilo Luffy-san, puedo darte el dinero que he recaudado esta mañana — dijo Brook dándole su estuche de Violín lleno de dinero.

— ¿¡De verdad!? ¡Gracias Brook! – gritó abrazándolo.

— Señorita Baby 5, ¿podría ser tan amable de mostrarme sus pantis? — le preguntó a la chica que le servía su café a Law.

— ¡Me necesitas! En seguida Brook — respondió y cuando estaba a punto de subirse la falda del uniforme, con las atentas miradas de Brook y de Sanji a quien le salía una gota de sangre de su nariz, se escuchó un grito desde la cocina.

— ¡Dejen de vagar y vuelvan a la Cocina! ¡Te necesito Baby 5!¡Sanji, tu tambien!

— ¡Jessica-san! — gritó Sanji obedeciendo a su jefa.

— ¡La jefa me necesita! — dijo la chica de cabello negro, yendo detrás de Sanji.

— Siempre pasa lo mismo — comentó Brook con tono deprimido.

— Tu comida Luffy — dijo Sanji saliendo de la cocina con lo que Luffy siempre ordenaba, para luego volver a entrar a esta.

— ¡Buen provecho! — gritó antes de comenzar a devorar la comida.

— Que ruidosos son todos — se quejó el azabache mayor.

— ¿Comenzamos con la entrevista? — le preguntó Luffy con la boca llena.

— Te he dicho que no lo haré.

— Pero yo decidí que te entrevistaría a ti.

— ¡No decidas cosas por tu cuenta! — gritó para luego suspirar — eres un chico muy raro ¿Lo sabías? — el menor ríe.

— Me lo dicen muy a menudo — dijo mientras comía — tú pareces un sujeto misterioso, pero ¿Sabes? Me caes bien, eres buena gente.

— ¿Cómo puedes decir eso si me acabas de conocer? — preguntó levantando una ceja.

— Solo lo sé.

— Eres algo........ — iba a seguir hablar cuando miró su taza de café — ¿¡Qué pasó con el resto de mi café!? No me digas que te lo bebiste.

— Yo no me he bebido tu café — dijo mordiendo su labio inferior y mirando hacia otro lado.

— ¿Cómo puedes ser tan mal mentiroso?

— ¿Cómo es que a ti no te gusta el pan?

— No puedo creer que exista alguien tan honesto, ingenuo e inocente como tú, a demás de sin modales, impulsivo, grosero y que tome decisiones de manera egoísta, puedo deducir todo eso y más de ti y apenas te acabo de conocer, pero ¿Te confieso algo? Tal vez, y solo tal vez...... tu también me caigas bien — el del sombrero de paja rió ante su comentario.

— Me gusta hacer amigos, Nakamas.

— ¿y quién te dijo que somos amigos?

— Dijiste que te caía bien.

— Dije que tal vez, y aunque así fuera, eso no significa nada.

— No me importa lo que digas, tu eres mi Nakama — él rueda los ojos — ya termine de comer y tengo veinte minutos antes de que comience mi primera clase de hoy ¿Empezamos con la entrevista?

— Que persistente eres, ya te dije que no voy a dejar que me entrevistes.

— Y yo te dije que lo haré, no me importa lo que digas.

— Hagamos una cosa ¿Para cuándo es ese trabajo tuyo?

— No tengo idea, de seguro Usopp lo sabe, aunque no creo que sea para entregarlo por ahora, porque según dijo Usopp, es un trabajo bastante extenso, dijo que solo me ocupara de esta entrevista.

— ¿y cuantas preguntas preparó él?

— Mmm......  — observó el papel, el cual estaba un poco manchado de tocino — Diez.

— Bueno, hagamos algo, voy a dejar que me entrevistes, pero solo puedes hacerme una pregunta por día.

— ¡Trato! — dijo emocionado — ¿Puedo comenzar hoy?

— Está bien.

— Ok, Mmm..... — comenzó a leer lo que decía en el papel — ¿Qué te inspiro a escoger una profesión tan exigente como lo es la medicina?

— Mi mamá y papá, los dos eran doctores y...... ¿No deberías anotar? Recién te conozco, pero tengo el presentimiento que se te olvidará todo lo que te diga.

— ¡Tienes razón! — exclamó volteando bruscamente, haciendo que la silla temblara y cayera, se levantó para acomodar la silla, y de su mochila sacó una libreta y una pluma, luego de eso se sentó nuevamente en la silla.

— Como decía, mis padres eran doctores, y desde pequeño siempre quise ser como ellos, veía lo duro que se esforzaban, y sabia que sería difícil, pero nunca me ha gustado ir por el camino fácil...... — comenzó a contar hasta que hizo una pausa — un día, mi hermana se enfermó gravemente, mis padres dijeron que era un virus desconocido, y empezaron a investigarlo para hallar una cura, pero en el proceso terminaron infectados ellos, y los tres murieron, aun no se sabe nada del virus, por eso...... desde ese día, yo jure que continuaría con su investigación y hallaría la cura.

— Vaya....... creo que eso es muy personal.

— Sí, omite esa última parte, solo deja lo primero, cuando digo que quiero ser como mis padres.

— Pero...... si no querías que colocara lo otro ¿Por qué me lo dijiste? No tenias que hacerlo.

— Se que no tenía que decirlo, no sé porque lo dije.

— Dices que no me consideras tu amigo, pero pareciera que confiaras en mi.

— Da igual.

— Pero ¿Quién se hizo cargo de ti luego de que tus padres murieran?

— Dijimos que solo una pregunta por día.

— Eso no hace parte de la entrevista, es mera curiosidad, pero si no quieres no respondas.

— Un socio del hospital de mis padres, en realidad era un amigo muy cercano a ellos, yo admiro mucho a ese hombre.

— Ya veo...... bueno, creo que iré a clase, nos vemos Torao — se despidió y se fue.

— Nunca te había visto sonreir de esa forma, siempre tienes una cara de amargado — comentó Baby 5 mientras recogía los platos que Luffy había dejado, recibiendo una mirada fulminante de parte del azabache.

Esa misma tarde el alegre chico del sombrero de paja, le informó a Usopp sobre la entrevista con su nuevo Nakama, "Torao".
— Bueno, el trabajo es para dentro de dos semanas, por lo que el tiempo es suficiente para que le hagas las diez preguntas a ese sujeto, pero ¿No crees que es muy complicado, Luffy? Yo digo que busques a otra persona, la entrevistas en un día, y salimos de esto rápido, ¿Sabes cuantos estudiantes hay en medicina?

— No, ya lo he decidido, yo quiero entrevistarlo a él.

— Bueno, haz lo que quieras, ahora te dejo, que voy con Nami a preparar lo de Kaya.

Pasaron ocho días y en ese tiempo ambos azabaches se seguían reuniendo en la cafetería, en cada uno de esos días el menor le hacía a Law una de las preguntas que había escrito Usopp, y se iban conociendo más mutuamente, incluso el mayor conoció a todos los amigos de Luffy y a su vez este conoció a los amigos de el contrario, los cuales eran dos: Penguin y Sachi y también le contó sobre su gato llamado Bepo. Para Luffy, "Torao" era alguien muy interesante, y admiraba el hecho de que al igual que él también tuviera una determinación; ya le había hecho nueve de las diez preguntas, por lo que aquel día debía hacerle la última, entró a la cafetería y pudo observarlo en la barra tomando su café de forma tranquila.

— Bien, hoy es el último día — comentó el mayor mientras Luffy se sentaba a su lado.

— Así es — dijo sacando el papel para leer la pregunta — ¿Has pensado en algún proyecto futuro para mejorar el mundo por medio de la medicina?

— Sinceramente en lo único que he pensado es en seguir la investigación de mis padres, no sé si eso mejore el mundo en un futuro, y sinceramente no me importa lo que le suceda al mundo...... supongo que esa respuesta no te servirá para tu trabajo.

— Da igual, Usopp se las ingeniará — respondió encogiéndome de hombros — gracias por tu ayuda, ¿Te puedo hacer una pregunta?

— Ya me has hecho diez, una más no hará mucha diferencia.

— ¿Sigues sin considerarme tu amigo? Solo por curiosidad, porque digas lo que digas, siempre te consideraré mi Nakama.

— Yo......... — en su rostro y el tono de su voz se notaba que quería decir algo, pero dudaba de aquello, y Luffy lo notó — eres irritante, pero sí, te considero mi...... amigo Mugiwara-ya — sonrió, luego de eso, se siguieron reuniendo y compartiendo momentos juntos y con su grupo de amigos, aunque cada uno ocupado con sus estudios.

Usopp le dio su regalo a Kaya, y ella también le dio uno a él, y Luffy no entendía muy bien lo que tenía que ver con el romance, por lo que siempre le confundían muchas cosas que sucedían a su al rededor; como el ver a Nami tan emocionada junto con una peliazul llamada Vivi, la cual también era su Nakama, mientras estas decían que había algo entre Zoro y Sanji, al esucharlas Luffy solo pensaba "¿Qué no pasan ellos discutiendo a cada rato?", pero cuando les hacía esa pregunta ellas siempre le respondían "¡Exacto!" y él no entendía lo que querían decir con eso.

Aunque él nunca se había interesado mucho en el tema del amor, por aquellos días se estaba sintiendo un poco raro siempre que estaba cerca de "Torao", y se daba cuenta de que a veces pensaba en él más que en sus otros amigos, incluso en algunos momentos deseaba pasar más tiempo con él que con los demás y estar con él de una forma distinta, no entendía muy bien como, solo sabía que con él era diferente, y se preguntaba el porqué sentía su corazón latir de forma acelerada y algo extraño en su estomago junto con otras sensaciones que no podía describir; pero a pesar de no saber el porque sentía todo aquello se sentía bien, y no cambiaría ese sentimiento por nada, ¿Debía preguntarle a alguien? Meditaba todo aquello mientras caminaba por el campus cuando se encontró con Zoro y Robin, pensó tal vez ellos sabían la respuesta a sus preguntas.

— ¡Zoro! ¡Robin! — los llamó a forma de saludo.

— ¡Luffy! — le respondieron ellos.

— ¿Les puedo preguntar algo?

— Claro — dijo ella.

— ¿Es posible sentirse diferente con una persona en específico?

— ¡Explícate bien! — le exigió Zoro.

— ¿Podrías ser más claro? — pidió la pelinegra.

— Mmm...... me refiero..... a pensar más de lo normal en una persona, y el sentirse diferente cuando estas cerca de esa persona, que el corazón se acelere y el pecho se hinche....... no lo puedo explicar muy bien, pero ¿Entienden?

— ¡Luffy! — exclamaron ambos sorprendidos al darse cuenta de lo que sucedía con su amigo.

— ¿Saben que significa? — Robin sonrió.

— Mmm......... ¿Por qué no le explicas tu Zoro? Creo que tienes más experiencia que yo en ese tema.

— ¿Qué insinúas?

— ¿O prefieres que llame a Sanji-kun? Creo que él tiene demasiada experiencia.

— ¡Eres igual que la bruja de Nami!

— Entonces...... ¿No lo saben? — Zoro suspiró.

— Luffy, cuando miras a esa personas ¿Te pierdes en sus ojos? ¿Solo quieres estar cerca de esa persona y protegerle? ¿Sientes como si tu corazón quisiera salir de tu pecho?, cuándo tocas a esa persona ¿Sientes una corriente eléctrica y muchas cosas más que no se pueden explicar? — mientras hablaba, el peliverde parecía un poco irritado, sin embargo se podía notar el sentimiento en sus palabras y cierto brillo en sus ojos, o por lo menos Luffy lo notó, por lo que se preguntó si él también sentiría esas cosas por alguien más.

— ¡Sí! ¿Sabes lo que significa?

— Es sencillo Luffy, estas enamorado, sí sabes lo que eso significa ¿Cierto?

— Enamorado........ — dijo pensativo — ¿Es lo que siente Usopp por Kaya? ¿Cómo el amor que dice Sanji sentir por todas las mujeres?

— Si es como lo que siente Usopp por Kaya, pero por favor ¡Deja de comparar esa absurda obsesión de ese cocinero pervertido con el verdadero significado del amor!

— ¿Celoso, Zoro? — le sonrió Robin.

— ¡Por supuesto que no! — ella rió.

— Y bien Luffy ¿Podrías sacarnos de la intriga y decirnos de quien estas enamorado?

— Pues...... — el azabache no entendía el porque se ponía nervioso y sentía sus mejillas levemente calientes ya que él nunca había sido así, se preguntaba ¿Qué le estaba pasando? — siempre que veo a Torao me siento así, por lo que supongo que es de él.

— Oh, Pues Torao-kun y tú hacen una pareja muy bonita — la imagen de él y Law estando de la misma forma que Kaya y Usopp pasó por la mente del menor y no pudo evitar sonreír, y fue cuando entendió que así era como deseaba estar con él, no se imaginaba estado de esa forma con nadie más.

— Y Zoro, ¿Tu por quien te sientes así? — le preguntó curioso el del sombrero de paja, a lo que el peliverde se sobresaltó.

— ¿Por qué crees que yo siento eso por alguien?

— Se notó cuando describías el sentimiento, ¿En quién pensabas cuando tu mirada se perdió de esa manera?

— Tal vez en alguien rubio que cocina muy bien y tiene unas ceja muy peculiares   — comentó Robin.

— ¿Qué? La única persona que conozco así es Sanji...... ¡No puede ser! ¿¡Te gusta Sanji, Zoro!?

— ¡Ya he dicho que no!

— Pero tu mirada decía que estabas muy enamorado.

— ¿Desde cuándo sabes tú tanto sobre estar enamorado? ¡No pudiste identificar tus propios sentimientos!

— Eso no lo sé, solo sé que en tu mirada se notaba.

— ¡¿Y que con eso?! ¿Qué si ese cocinero pervertido me llegara a gustar solo un poco? Mi meta es ser el mejor en mis artes marciales y el mejor detective, no puedo distraerme en estupideces como el amor, y aun si fuera así, el nunca se fijaría en alguien como yo, comenzando con el hecho de que es un mujeriego obsesionado con las mujeres, nunca se fijaría en otro hombre, ¿Vieron como reacciono con esos okamas el otro día? Incluso puedo pensar que el bastardo ese es hasta homofobico, pero no es que me importe, si quiere ser un mujeriego homofobico...... a mi me da igual, él no me gusta, es un idiota.

— Oh, entonces te gusta pero tienes dudas.

— ¡Eso no fue lo que quise decir!

— No tengas dudas, ¿Cómo puedes saber lo que él piensa o siente si no se lo dices? Es sencillo, por eso ahora mismo voy a buscar a Torao para decirle lo que siento, adiós y ¡Gracias! — dijo antes de salir corriendo, recordando que a esa hora podría estar en la cafetería.

Entró al establecimiento y pudo verlo ahí sentado tomando su café, sentía como sus latidos se aceleran y un sentimiento de felicidad invadía su cuerpo, pensó en las palabras de Zoro afirmando que estaba en lo correcto.

— ¡Torao! — gritó y saltó sobre él abrazándolo, pensaba en que podía ser algo lento y despistado para darse cuenta de las cosas, sobre todo siendo aquel un tema que anteriormente no le interesaba mucho.

— ¡Mugiwara-ya! ¿Qué sucede? — se separó de él volviendo a sentir un poco de nerviosismo.

— Torao...... yo...... creo que...... no, no creo...... estoy seguro de que....

— ¿Qué pasa? Es demasiado raro verte nervioso, debe ser algo grave si te pones así.

— ¡Te amo! Quiero estar contigo como lo están Usopp y Kaya, contigo...... se siente diferente, ¿Si? — confesó mirándolo directamente a aquellos orbes grises, y tal y como le había dicho Zoro, se perdió en la profundidad de estos, observó su rostro y vio sus labios, lo cual lo puso aun más nervioso ya que él nunca antes había besado a nadie, y por alguna razón en esos momentos tenía el deseo de besarlo, se preguntaba ¿A que sabrían sus labios? ¿Tal vez como la carne?

— Mugiwara-ya...... — susurró el mayor sorprendido — ha...... ¿hablas en serio? ¿No estarás confundido?

— ¡Por supuesto que no!

— Es que...... es... es demasiado bueno como para ser verdad.

— ¿A qué te refieres?

— Mugiwara-ya hace días que yo me di cuenta de que te veo con otros ojos, de que estoy enamorado de ti, pero...... yo...... estoy impuro, mis pensamientos no son limpios, en cambio tu eres tan....... puro e inocente, no quería corromperte, borrar esa pureza que hay en ti, esa inocencia que me encanta, a demás, pensé que tú nunca te fijarías en mi, en realidad pensé que nunca te fijarías en nadie, tu no le prestas atención a estas cosas y.....

— ¡Idiota! — lo interrumpió — eres igual que Zoro, ¿Si tenias dudas por qué no me dijiste y ya? No entiendo a que te refieres con todo eso, yo solo quiero estar contigo Torao, y no me importa lo que digas, ya lo he decidido — al escucharlo, Law simplemente rió, de una forma que era algo extraña en él.

— Esta bien Mugiwara-ya, yo también quiero estar contigo, porque también te amo.

Luego de decir aquello unió sus labios con los del menor, no sabían a carne, pero aun así, para él era un sabor es exquisito, entrelazó sus brazos detrás de su cuello y los fue subiendo hasta llegar a su cabeza y quitarle el gorro para poder acariciar su cabello, mientras el mayor rodeaba su cintura con sus brazos acercándolo más a él; de repente Luffy sintió como la lengua de Law invadía su boca, este trataba de seguirle el paso, pero le era un poco difícil por su inexperiencia, solo disfrutaba de aquellas nuevas sensaciones que recorrían su cuerpo hasta que tuvieron que separarse por falta de aire, y al hacerlo el flash de una cámara los segó.

— ¡Son super tiernos! — se escuchó el grito de una pelinaranja muy emocionada.

— No me ¡Super! Imites — se quejó Franky — aunque tienes razón, son ¡Super! tiernos.

— Este momento es merecedor de una romántica canción — dijo Brook comenzando a tocar su violín.

— Era romántico hasta que ustedes aparecieron — comentó Sanji — no me quejo de ti Nami-swan ¡Te vez hermosa siendo una fujoshi obsesiva!

— ¡Nami! ¡Debes enviarnos esas fotos! — gritaron Vivi y Usopp, ya que el de nariz larga también era fanático del yaoi.

— ¡Ero-Cook! — se escuchó otro grito, a diferencia del anterior, este era un grito varonil, el cual había venido de Zoro al entrar al establecimiento, mientras Robin entraba riendo tras él — ven conmigo.

— ¿Por qué te obedecería? Tú no me das órdenes.

— ¿¡Quisieras tan solo venir!?

— No.

— ¡Ya me hartaste! — volvió a gritar el peliverde.

Se acercó al de la ceja rizada e intentó agarrarlo de la cintura y levantarlo, pero el rubio lo hizo retroceder de una patada, por lo que Zoro en un movimiento rápido levantó las dos manos de Sanji con una sola de las suyas e inmovilizó sus piernas con ayuda de sus rodillas, para luego con su mano libre agarrarlo por la cintura y subirlo a sus hombros como un costal de papas, el rubio solo pataleaba y se quejaba mientras el peliverde lo sacó del lugar, siendo seguidos por una pelinaranja, una peliazul y un chico de nariz larga con cámara en mano.

Luego de eso solo se supo que esos dos también se hicieron pareja oficial, y una semana después, Luffy invitó a su novio junto con todos sus amigos a su casa, estaba muy feliz de compartir con sus seres queridos, aunque cierto pecoso y cierto rubio de cabello ondulado no dejaban de mirar a Law de forma amenazadora.


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