Hiroto se sentó en la punta de la cama a ponerse los pantalones, no volvería a bajar en ropa interior si era el invitado. Reita seguía acostado, fumando un cigarrillo, y Syou estaba dormido en un rincón de la cama.
- No te enfades con Syou, Reita
- No estoy enfadado – dijo Reita sin poder evitar molestarse – es él el que lo piensa, yo nunca me enojé…
- Suenas enojado ahora – lo miró
- Porque este tema me enoja, no me molesta que Syou se tome su tiempo, me molesta que piense que lo odio por eso, ¿acaso no sigo con él? Si estuviera con él solo por eso, ya lo habría dejado…
Hiroto se encogió de hombros y se acostó sobre su pecho.
- Él piensa que está mal, porque Tora le enseña que está mal…
- ¿Y ustedes lo permiten? – preguntó Reita molesto
- No podemos evitar que hable, pero puedo jurarte que no he dejado a Syou solo una noche desde que ocurrió todo eso…
- Voy a romperle la cabeza a ese Tora – dijo presionando el cigarrillo, rompiéndolo
Hiroto lo observó un poco asustado.
- No hará falta, se cansará de insistir, además ahora que Saga está con él, ya no le presta tanta atención a Syou, por suerte…
- No entiendo cómo lo permitieron… - dijo comenzando a vestirse
- Fue algo espontáneo, por lo menos conmigo… - se sonrojó levemente – a mí siempre me había gustado Tora y no podía desperdiciar la oportunidad…
- Lo dices como si fuera una en un millón – sonrió poniéndose una remera
Hiroto le sacó la lengua y Reita le acarició la cabeza, acerándolo y besándolo después.
- hum… - se dio vuelta – ¿qué hacemos con Syou?
- Déjalo, tiene el sueño pesado, no me gustaría despertarlo – se rascó la cabeza – Bajemos, tengo hambre
Reita bajó primero y Hiroto se quedó un rato para cerciorarse que Syou estuviera bien cubierto por las sábanas, le besó la frente y bajó tras Reita. Se sentaron juntos a la mesa, Kai y Uruha estaban comiendo y los recibieron sirviéndoles el desayuno a ellos.
- ¿Y Ruki?
- Se quedó con Miyavi – respondió Uruha acercándole un plato
- ¿Y Aoi? – lo miró sonriendo - ¿lo mataste anoche?
Uruha se puso colorado hasta las orejas y evadió la pregunta, sirviéndole el desayuno a Hiroto.
- Tiene resaca – acotó Kai entregándole el control a su mano expectante
Reita cambió de canal y se quedó viendo una película de acción. Uruha miró a Hiroto y le revoleó los ojos, éste se echó a reír. Kai volvió a recordarles los ensayos y los tres –a pesar de que Hiroto no era de su banda- lo ignoraron. Después de desayunar, Uruha y Hiroto levantaron la mesa y Reita se vio obligado a escuchar a Kai ya que se le plantó entre él y el televisor.
- Hey, lleva a los niños Alice a su casa – le dijo como regaño paternal
- No puedo, uno duerme – dijo intentando cambiar a través de su cuerpo
- No importa Reita, llévame a mí, seguro que a Syou no le molestará quedarse un rato más contigo – dijo secándose las manos
Reita suspiró y accedió, entregándole el control remoto a Kai.
- Vamos – dijo tomando las llaves del auto
Hiroto se despidió de Kai y Uruha y lo siguió animado, pasando antes que él al salir.