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Libre y puro amor por KoichiBielefeld18

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Notas del fanfic:

Primera historia de BSD... Soukoku... algo bastante Light para empezar... ya que esto lo escribi para alguien muy especial :3 <3

Notas del capitulo:

Asi incia nuestra historia omegaverse...

Chuuya cuenta de primera mano... como se dio cuenta de su amor <3

- ¡Haru!... ¡Thoru!... ¡vuelvan enseguida! - oí gritar a Dazai mientras que me encargaba de la cocina.

¡Hola! Mi nombre es Nakahara Chuuya, un miembro de la tan nombrada “Port Mafia” y a quien acaban oír gritar, es mi estúpido esposo Osamu Dazai, ex miembro de la Port Mafia y actual miembro de la Agencia Armada de Detectives. Se lo que piensan… ¿Cómo siendo de grupos enemigos están juntos?... es una gran pregunta y la respuesta la sabrán más adelante.

Por ahora solo quiero que sepan, que por la ineptitud de “mi esposo”, veo como mis dos niños corren desnudos por la casa. ¡Oh sí! Oyeron bien, mis dos niños. Como ya deben imaginarse, yo soy un omega y Dazai un Alpha. Lo gracioso de todo esto es, que extrañamente, ese tonto que acaba de caer al suelo es mi pareja destinada.

Quizá ustedes no crean esto, incluso les parece ridículo, pero les contare como Dazai-bakka y yo, terminamos en esta extraña situación.

Esto paso hace ya bastante tiempo, cuando Dazai y yo éramos compañeros en la Port Mafia. Si lo sé, ambos éramos compañeros, asesinos… bueno, yo aún lo soy.

Como dije, todo empezó cuando éramos compañeros.

Desde que lo conozco me sentí atraído hacia él, no por su forma de ser, que, aunque no me molestaba en lo absoluto, siempre terminaba cayendo en sus bromas pesadas y aún más, en sus estúpidas trampas, inclusive ¡aun caigo! Y eso me irrita demasiado. Lo bueno es que ya no caigo en sus bromas como antes, pero como decía… lo que me atraía de él era algo… diferente, algo que me decía que debía estar a su lado… para siempre.

Mi vida cambio, un horrible día de agosto, cuando luego de una misión, regresábamos a la base.

Yo me encontraba caminando por los pasillos, cuando comencé a sentirme extraño, agitado y sudoroso. Fue mientras intentaba calmarme, que caí en cuenta de lo que sucedía… ¡Mi maldito celo había llegado! ¡Y yo sin mi medicamento! Antes de ponerme peor, comencé a correr hacia la oficina de Mori-sama, mi jefe y un horrible doctor. Pero no importaba, sabía que él podría ayudarme con un poco de medicina.

Corrí lo más rápido que pude, básicamente corrí por mi vida. Sabía lo que podía pasar si había Alphas cerca, sabia como terminaría y no quería. Mientras mas corría, notaba como varios miembros comenzaban a mirarme mientras pasaba a una velocidad increíble para lo horrible que sentía mi cuerpo. Incluso vi como varios comenzaron a seguirme… ¡Maldita sea! Mi olor los estaba atrayendo y eso me hizo sentir miedo.

Estaba cerca… muy cerca de la oficina, cuando mis torpes pies decidieron fallarme, haciendo que tropezara conmigo mismo y cayera al suelo con fuerza.

Ahí vi, como varios Alpha, miembros nuevos por cierto, venían hacia mí. Yo entre en pánico, de verdad que tenia miedo y eso, mas el comienzo de mi frenesí, no me permitían moverme;

- ¡no se acerquen! - les gritaba a los chicos que me veían como si fuera un pedazo de carne

- ¿ese olor? - me dijo un chico flacucho que estaba a mi izquierda

-Chuuya-san huele delicioso- escuche decir a otro mientras me arrastraba hasta la puerta de Mori-sama con mi cuchillo en mano. Vi como estaban mas cerca, lo que mas temía iba a pasar… yo no quería que pasara o al menos no quería verlo, así que solo cerré los ojos con fuerza y fue cuando sentí que alguien me tomo de un brazo y cuando me di cuenta me estaban cargando. Abrí los ojos y fue cuando lo vi… Osamu Dazai, él me tenia en sus brazos mientras que les dirigía una mirada rabiosa a los otros que estaban a nuestro alrededor;

- ¿Qué hacen ustedes alimañas, cerca de mi esposa? - lo oí decir con rabia

- ¿ah? – exclame -¿esposa?-, pero no tenía tiempo de enojarme por sus palabras, ya que un chico estaba por atacaremos, pero sabia con certeza que no pasaría, ya que el poder de Dazai lo detuvo y el pobre tonto cayo al suelo con fuerza

- ¿alguien más quiere intentar acercarse y tomar a mi esposa? - preguntó Dazai cuando todos se hicieron hacia atrás. Dazai-bakka sonrió y paso en medio de todos hasta llegar a la oficina de Mori-sama, claro, aun conmigo en brazos.

Cuando entramos, cerró la puerta y me coloco sobre el sillón que había en la oficina. Luego se alejo un poco de mi y se puso a buscar algo entre los estantes. Claramente lo vi agitado y vi como su autocontrol estaba comenzando a fallarle. Temblaba de arriba abajo y su respiración era entrecortada como la mía, lo cual me hizo sentir vergüenza;

-lo siento. - dije en voz baja e intente levantarme y acercarme al estante -Yo puedo encárgame desde aquí… Dazai-san

-Mori-sama no está… estoy de encargado de la… mafia- lo oí decir sin voltear a mirarme, lo cual me comenzó a irritar

-solo necesito… un… supresor- dije de nuevo y sin querer toqué su mano. Fue cuando lo vi… por primera ves vi esa mirada de bestia que todo Alpha tiene. Fue la primera vez que la iba en este hombre

- ¡aléjate! - me grito y me tomo de los brazos con fuerza - ¡no entiendes! ¡ya no me puedo contener! - y me mostro sus dientes, esos dientes que sabía querían terminar en mi cuello, pero fue gracioso… no sentí miedo, más bien sonreí y lo que paso luego… fue instantáneo.

Simplemente tome a Dazai y lo lance al suelo, sujetándolo de sus vendas, me senté sobre su regazo y me quede mirándolo fijamente;

-tu olor… - lo oí decir en voz baja -hueles a flores

- ¿flores? - le dije acercando mi rostro al suyo

-tu olor es peculiar… hueles diferente- me susurro al abrazarme.

Al sentirlo, mi corazón corría a mil por hora… fue espantoso… pero luego una idea cayo en mi cabeza;

¿Pareja destinada?” pensé cuando sentí sus labios sobre los míos.

 

 

 

 

 

 


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