Capítulo VIII: Manos limpias.
—Te contaré una pequeña historia, KiHyun. —Aquel hombre se acercó a su cama, cuando el mencionado parpadeó notó que su entorno era ahora un inmenso campo con flores en éste que se extendían al infinito, con una tenue brisa que le relajaba. —Siempre ha existido un equilibrio y algunas pequeñas leyes o reglas que se deben de seguir porque yo lo he decidido así. Suelo estar ocupado así que cree algunos seres para que cuidaran estas leyes, con el tiempo fueron cambiando su aspecto y otros seres aparecieron y otros más perecieron, lo que ustedes los humanos llaman evolución. —
—¿Entonces no eres humano? —
—Entonces no me vuelvas a interrumpir. —
—Lo siento…lo… —
—Apareció JooHeon y WonHo y otros de su rango en la historia que te cuento, ellos eran algo así como la policía del tiempo, todo debe de llevar un orden, tal vez sea una pequeña obsesión así que ellos podrían decirse son mis favoritos y por eso les asigné esa labor. Pero tuvieron que tomar malas decisiones. —Dio un suspiro y pasó sus manos por sus cabellos tomando asiento a lado de KiHyun.
—¿Cuál fue su error? —
—No seguir las ordenes. Verás WonHo y JooHeon habían sido elegidos para subir de rango, solo tenían que unir sus almas a otras, las que se suponían estaban entrelazadas desde el inicio. —Volteó a verle esperando algún comentario haciendo que se encogiera de hombros.
—Es algo cursi pero bello. —
—Ellos no saben nada de esto pero WonHo conoció a su otra alma y JooHeon se molestó con él pero en el fondo estaba celoso de no encontrar la suya antes, pensó que WonHo prefería a ese pedazo de alma más que a los suyos y hubo muchos malentendidos y peleas y muertes…No quise meterme en ese asunto quería que lo resolvieran pero JooHeon fue demasiado lejos y WonHo actuó como pudo pero uno de los seguidores de JooHeon cumplió con la tarea de su maestro y cumplió su cometido sin importar que todo fuera a colapsar y no podía permitirlo. —
—Así como lo pones parece que eres Dios y te desahogas conmigo. —
—Dime Victoria. —
—Pero ese es nombre de mujer. —
—¿Quién lo dice? Como sea, ese pequeño aprendiz tú lo conoces y fue quien ocasionó tu muerte unas dos veces. —KiHyun abrió sus ojos, no sabía a quién se refería y el solo mencionarlo le heló la piel. —MinHyuk, pero ahora está muerto. —
—¿Qué? —
—Y yo te salvé, bueno decidí que vivieras. —
—¿Por qué? —Se alejó de aquel hombre, sosteniéndose de su cabeza, comenzaba a doler con tanta información tratando de comprender paso a paso.
—Creo que no me he terminado de explicar…En este momento el mundo que conoces está en una especie de licuadora donde cada mundo y realidad choca entre sí mientras justo ahora… —Saca un pequeño reloj de su bolsillo y mira el artefacto, KiHyun cerró sus ojos, brillaba con mucha intensidad. —JooHeon está apuñalando a WonHo y WonHo pues perderá, no ha logrado juntarse con su otra alma y JooHeon sí. —
—Dijiste que debía estar vivo ¿Por qué? —
—Lo olvidaba…la grandiosa alma que WonHo necesita y que yo necesito que tenga es la de tu hermano HyunWoo. Pero pasó algo extraño, él quiso que tomaras su lugar en la realidad de tu tiempo y pudo salvarte de tu muerte…así que tengo que tomar la vida de tu hermano mandándote a tu tiempo para arreglar todo. Suena complicado, es complicado y la verdad no espero que entiendas y no espero que me des permiso porque simplemente lo tomaré. —KiHyun se puso de pie mientras empezaba alejarse de aquel sujeto, cuando se dio la vuelta todo se había vuelto blanco, eran pasillos como si fuera un laberinto.
—No puedo permitir eso. —
—Solo vine a tener esta platica contigo porque si tan solo no hubieras aceptado la propuesta de KiHyun y hubieras aceptado la relación de tu hermano con HoSeok, en este caso WonHo la unión de sus almas ocurriría cuando murieran…todo sería en calma y paz y dados los problemas que hay en digamos…todo, quería que lo supieras y vivieras con ello. —KiHyun corría por los pasillos blancos, se llenaban de neblina y el aire comenzaba a congelar su cuerpo, hacía demasiado frío y en cada esquina que daba la vuelta encontraba a aquel ser esperándole con esa sonrisa maldita en su rostro.
—No fue mi intensión, HyunWoo no tiene por qué pagar, yo debo pagar mis errores. —Victoria se inclinó ante el hombre en rodillas, acarició su mejilla mientras le obligaba a verle.
—No es posible, así no funcionan las cosas. Desde un inicio se había decidido que tu hermano sería uno con WonHo y que tú estarías vivo mientras eso pasara, alteraste el destino con una simple decisión y aunque no se pueda cambiar el final se puede hacer con el proceso. Eso es lo que hago y lo que haré para mantener a lo que conoces como cosmos en función. Así que digamos que lo siento. —
***
JooHeon estaba a punto de atravesar el pecho de WonHo y arrancarle el corazón para así terminar finalmente con su vida pero todo se volvió tranquilo, estaba seguro que a su alrededor el Armagedón consumía el mundo pero ahora solamente estaban a la orilla de una autopista con WonHo del otro lado. Su vestimenta en ambos era distinta, más moderna, no traía los usuales trajes de hace siglos que tanto adoraba, traía ropa más ajustada y colorida y WonHo lucía más como a su versión humana en HoSeok.
—¿Qué sucedió? —Cuestionó WonHo para si mismo, revisando su cuerpo sin ninguna herida.
—La respuesta soy yo, WonHo. —
—¿Por qué ha decidido venir? —Preguntó el mencionado al ver a su creador haciendo una reverencia.
—No podía permitir que destruyeran mi creación por su culpa. Me han hecho enojar mucho y han hecho que interfiera para solucionar la paradoja que provocaron sus acciones. —JooHeon se puso nervioso y temeroso ante el tono de voz de Victoria, temiendo lo peor, que le diera una muerte rápido ero lo que menos podría esperar.
—No fue culpa mía…—
—Ya he decidido sus castigos…—Sonrió. —WonHo…—Debajo del traje que se moldeaba a su figura sacó una esfera brillante, tomando a WonHo por el brazo mientras pegaba la esfera a su pecho, presionándola para que se adentrara a su cuerpo. —Serás el nuevo cronometro del cosmos…lo siento. —Victoria había fusionado la alma de WonHo con la de ShowNu, en este plano HyunWoo había dejado de existir y ahora junto a WonHo se convirtieron en la fuerza que mantendría en movimiento al cosmos.
—Victoria yo…—
—No digas nada, JooHeon, estoy cansado de ti. —Se acercó a él, introduciendo su mano dentro de su pecho, nunca había sentido un dolor tan grande en toda su vida, pensaba que podría desmayarse del dolor pero Victoria se encargaría de que ello no pasara, solo le estaba extrayendo la mitad de su alma pero lo hacía lo más tardado y dolorosamente posible.
—Por favor…—
—Tu castigo será mantener el equilibrio en este mundo…con una pequeña ayuda. — Victoria dio la forma de ChangKyun al pedazo de alma que le había quitado a JooHeon.
—Detente…por favor…—
—Este chico no tiene nada de culpa, solo tuvo que cruzarse en tu camino. Digamos que ahora serán la nueva Luna y el Sol…destinados a ser complementos el uno del otro pero condenados a nunca poder encontrarse. Lo lamento JooHeon. —Todo se volvió blanco y Victoria empezó a caminar por el lugar, su lugar preferido; La nada.
Desde ahí podía ver todo a la vez, siempre había visto lo que sus creaciones habían hecho, quiso creer que harían lo correcto al final del día pero todo se salió de control. Tenía una regla personal cuando todo el cosmos había iniciado por su obra. Manos limpias.
Y por culpa de ellos había roto esa regla, no había otra opción y no podía dejarlos irse con la suya pero así las cosas debían ser y así serían, aunque aceptaba que pudo ser más rencoroso, fue misericordioso con todos y nos los hizo sufrir tanto, al menos esa había sido su percepción.