Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

RETOS DE DRABBLES por shiki1221

[Reviews - 23]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Este es un drabble que hice para mi amiga Vanesa por su cumpleaños como dijo tema libre hice lo que pude XD Espero que le guste a ella y ustedes :D 

Para Vanesa. Drabble 16: el anillo

 

―¡No puedo comprar eso! ―gritó Charasuke alejándose rápidamente del local.

“Vergüenza” quedaba corta para describir su estado. Su pálido rostro fácilmente hacía relucir sus nervios. Sus manos apretaban con fuerza la bolsa de las compras. Y el inconfundible sonido del plástico atrajo la atención de una curiosa Sakura. Ella había salido de compras con su mejor amiga Ino y durante su regreso se percató de aquel peculiar cabello de pato ocultándose detrás de una pared. Parecía haber huido de algo o de alguien. La pregunta era: ¿de qué? Alguien como su compañero de equipo rara vez se sorprendía por algo.

―¿Qué sucede, Charasuke? ―preguntó ella sin poder ocultar las ansias de saber el chisme.

―Nada ―respondió de inmediato Uchiha queriendo mantener las apariencias.

―No me mientas ―pidió ella con una sonrisa falsa.

El moreno podía percibir sus intenciones homicidas. Si intentaba mentirle de nuevo, terminaría estampado contra una pared cercana. No, no quería lidiar con la fuerza sobrehumana de su amiga. ¿Qué importaba la dignidad cuando su preciado cuerpo corría riesgo de ser destrozado? Tomó aire para responder, pero volvió a cerrar la boca. No podía ni decirle la respuesta a su pregunta. Por culpa de aquel máximo nivel de pudor que sentía de sólo figurarse haciendo la compra o siquiera revelando su intención.

―¿Qué sucede, Cha-ra-suke? ―preguntó Haruno en un tono aún más demandante. Incluso marcó sílaba por sílaba su nombre para acentuar más su impaciencia.

―Na… ―quiso volver a mentir. Sin embargo, ver a su amiga romper la pared con su puño lo hizo cambiar de idea―. Es sólo que estaba comprando algo.

―¿Quieres ayuda? ―preguntó cambiando su expresión a una más alegre. Amaba ir de compras y pese a muchas cosas, su amigo tenía buen gusto a la hora de elegir algo.

―Es que no es para mí la compra… ―respondió comenzando a sentirse acalorado. ¡Maldición! Esas no eran cosas que quería compartir con ella.

―Habla o lo siguiente que rompa no será la pared shannaro ―advirtió con una sonrisa amenazante y falsa.

―Bien, tú ganas ―aceptó soltando un largo suspiro―. Tú sabes que Menma y yo hemos sido novios desde hace años ―explicó tranquilo.

―¿Y qué sucede con eso? ―preguntó sin entenderlo―. ¿Buscas su regalo de aniversario? Pero si siempre le regalas alguna tontería o en su defecto algún traje que nunca en la vida se pondrá para ti ―afirmó divertida.

―Cállate, déjame soñar con un Menma vestido de conejito, maid, zorrito ―enumeró cada traje que le gustaría que su novio usara y cuando Sakura se cansó de oírlo le dio un golpe en la cabeza.

―¿Quieres seguir de una vez con tu relato? ―preguntó impaciente. Sabía de lo pervertido que era su compañero cada vez que se ponía a hablar de su novio.

―Es que luego de tanto tiempo, ¿qué le puedo regalar? ―preguntó avergonzado―. Me dijeron que espera un anillo, pero no sé.

Haruno entonces volteó en dirección de donde había escapado Charasuke, notando que se trataba de una tienda de joyas. Específicamente se fijó en los anillos de compromiso exhibidos hasta adelante. Soltó una risa que intentó disimular con su mano, pero luego comenzó a acrecentarse más y más hasta convertirse una carcajada que la obligó a sujetarse el vientre. Las lágrimas se asomaban al borde de sus verdes de sólo imaginar lo que sucedió.

―Tú ja, ja, ja huiste de la vendedora ¿cierto? ―preguntó sólo para oírlo de la boca del otro.

―¿Terminaste de burlarte de mi desgracia? ―preguntó con una cara llena de malhumor.

―Ya casi ―dijo ella riéndose otro rato más―. Ya, ya. ¿Por qué te cuesta tanto comprarlo? ¿Pareces avergonzado de comprar un anillo?

―Lo estoy, una cosa es ir a una sex shop y pedir consoladores de tamaño especifico y otra es entrar a una joyería ―explicó ofendido al sentirse incomprendido.

―No entiendo cómo funciona tu atrofiado cerebro y no creo querer hacerlo ―comentó sin saber qué debería estar sintiendo en ese momento―. Puedo acompañarte a comprar si gustas.

―¿De verdad? ―preguntó entusiasmado mientras sujetaba sus manos.

―Claro, me siento responsable de que quedaras tan tarado ―bromeó sonriéndole―. Seguro que de tanto golpe descompuse algo.

Sin dejar las bromas de lado ambos fueron juntos a la tienda. A medida que se acercaban, Charasuke se pegaba más y más a la espalda de su amiga. Y de no ser por la fuerza sobrehumana con la cual tenía sujeto su brazo habría escapado corriendo como lo hizo anteriormente. Sakura mantenía una sonrisa natural sin dejar de casi romper el hueso de Uchiha al tenerlo allí. Luego de un rato haciendo algunos pedidos para ver los anillos del escaparate, el moreno se tranquilizó un poco. La presencia de Haruno allí lo tranquilizaba. Menma iba caminando cerca de la tienda donde estaban Charasuke y Sakura. Reconoció sus presencias y estuvo a punto de entrar a ver lo que hacían. Mas se detuvo al ver a su amiga ponerse un anillo de compromiso y al moreno hablando con la vendedora. Frunció el ceño por un momento y se dispuso a averiguar qué sucedía.

—¿Estos crees que le gusten a Menma? —preguntó Uchiha mirándola curioso.

—Por supuesto —aseguró Sakura—. Son de color azul oscuro como sus ojos, será un lindo detalle.

—Entonces se los daré luego de cenar —afirmó el moreno guardando la cajita en una bolsa no transparente.

—Yo también iré a ver —avisó juntando sus manos—. Será tan romántico —dijo ilusionada.

Namikaze había usado sus habilidades ninja para espiarlos. Algo éticamente cuestionable, pero era necesario. Se aseguró de que no notaran que él estaba allí y cuando obtuvo lo que quería, sonrió un poco más tranquilo. Confirmó que su novio no lo estaba engañando y que además le pediría matrimonio. Ahora sólo faltaba fingir sorpresa cuando se lo propusiera. Luego de alejarse de allí, estuvo practicando un poco para que saliera natural. Cuando el tiempo de reunirse en el restaurante llegó, se arregló y actuó con naturalidad. Estuvieron comiendo y conversando hasta que, repentinamente, Charasuke se levantó y se puso de rodillas frente a él. Sujetó la mano de su pareja y comenzó a hablar.

—Llevamos años siendo pareja y creo que ya es tiempo de llevar nuestra relación a otro nivel ―dijo sujetando la mano de Menma antes de sacar una cajita de su bolsillo―. Así que, Namikaze Menma, ¿me harías el honor de ser.. ―dijo mientras veía al jinchuriki cerrar los ojos con una sonrisa―… Mi sumiso?

—¡Acepto! —exclamó sin pensar, pues puso en acción lo que practicó.

Momento. ¿Qué dijo ese idiota?

—¡Damas y caballeros este hombre de aquí acaba de aceptar ser mi sumiso! —gritó Charasuke por lo alto atrayendo miradas de confusión y desconcierto.

—¡Espera, idiota! —ordenó el joven de ojos azules—. ¿No se suponía que me propondrías matrimonio?

—No pude, me dio vergüenza ―respondió rascándose la nuca mientras Menma revisaba la caja que debería contener su anillo de matrimonio, encontrándose con un anillo diferente…

—Pero no te da vergüenza darme un estúpido anillo para el pene ¿no? ―inquirió mirándolo de mala manera.

—Es que como tú eres el de abajo lo creía más conveniente ―contestó encogiéndose de hombros sin darle importancia al asunto―. Aunque si quieres me pongo uno para que hagan juego ―ofreció guiñándole el ojo.

—Voy a matarte —dijo Menma invocando a sus bestias celestiales—. ¡Atrápenlo! —ordenó señalándolo con la mano en alto.

Charasuke, como cualquier ser con instinto de supervivencia, huyó por su vida siendo seguido por su embravecido novio.

―¿Qué haremos con el anillo de bodas en el champagne? ―cuestionó un mesero viendo la copa.

―Guárdelo para cuando regresen ―respondió Sakura mirando el anillo preparado con una pequeña rosa―. Luego vendrán aquí otra vez.

―Luego de lo que ha hecho ese joven dudo que se reconcilien ―afirmó el mesero mostrándose escéptico.

―El orden de los factores no altera el producto. El anillo que le diera primero no cambiará que se casarán ―dijo sentándose a la mesa probando de la botella de vino que sus amigos dejaron—. Ya tengo el regalo de bodas perfecto: vaselina para Menma y un botiquín de primeros auxilios a Charasuke ―anotó en un pequeño papel.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).