Reto 8: Celos que matan
”Los están engañando”
Aquella frase dicha por su amiga de confianza, Sakura Haruno, había conseguido que los nervios, casi siempre de acero, de Menma y Sasuke se pusieran de punta. Ellos no eran muy dados a ninguna clase de broma y siendo de este tipo tan pesadas aun menos, mas Haruno aseguró que era verdad y les relató lo que ella vio con sus propios ojos…
―Charasuke por favor sal conmigo este sábado ―pidió Naruto inclinando su cabeza ante el otro que se encontraba recargado en una pared jugando con una rosa en su mano.
―De acuerdo ―accedió el otro con simpleza.
―Pero mantenlo en secreto que Sasuke no debe enterarse ttebayo ―ordenó preocupado de que su cuñado fuera a decir algo respecto a su “cita”.
―¡Ni que fuera suicida! ―exclamó el azabache escandalizado―. Si Menma se entera me va a matar y a ti mi hermano.
―Entonces nos veremos el sábado en la tarde ―se despidió Naruto dejando un pequeño papel en las manos de Uchiha.
Ese fue el relato que les dio su amiga de cabellos rosados antes de huir despavorida al notar la expresión de cada uno de los afectados al oír que sus novios los engañaban y para colmo con sus gemelos. Por lo cual ambos decidieron rastrearlos y ver con sus propios ojos dicho engaño antes de atravesarlo con su chidori y pulverizarlo con su rasengan, respectivamente a cada uno de ese par de infieles, traidores y todos los adjetivos que venían a sus mentes nubladas de celos. Sin ningún acuerdo verbal previo ambos se limitaron a seguir a su objetivo sin interferir con el otro. Sus dañados orgullos no les permitían rebajarse aun más pidiendo ayuda del otro engañado.
Los vieron reunirse en un callejón oscuro, se acercaron a susurrarse palabras al oído mientras reían divertidos con aquellas sonrisas que siempre les regalaban. Los ojos azules de Menma miraban a su novio guiñando un ojo mientras sonreía con su típica coquetería y Sasuke clavó su mirar en el rubio que sonreía apenado mirando algo sonrojado a su gemelo. Lo que provocó que su sharingan comenzara a girar amenazante.
Charasuke y Naruto caminaron por varias tiendas mientras el moreno se colocaba anillos que el rubio veía probarse. Collares, anillos y algo de ropa estuvo probándose Charasuke para Uzumaki a medida que recorrían las diferentes tiendas de Konoha. Los dos espías sentían su sangre bullir en sus venas al ver semejante escena delante de ellos, cada uno preguntándose: ¿Por qué conmigo no es así? Sasuke miraba a su gemelo notando lo diferentes que eran, si bien él no era de usar joyería como el otro, había alguno que otro detalle que viniendo de Naruto lo aceptaría de buen grado. Mientras Menma reflexionaba sobre porqué su novio estaba con su gemelo ¿era por qué Naruto sí estaba dispuesto a consentir sus caprichos y él no?
Sin embargo, la gota que derramó el vaso fue ver a Charasuke abrazando posesivamente al rubio mientras decía con voz seria: “Él viene conmigo”. Allí el límite de los espectadores derivó en un rasengan y en un chidori con los que atacaron a sus novios. De pura casualidad (y quizás instinto de supervivencia) lograron evadir semejante ataque.
―Pero ¿qué demonios? ―exclamó Naruto viendo los rastros de destrucción del chidori.
―Casi me matas, imbécil ―reclamó Charasuke mirando mal a su novio.
―Eso es lo que intentaba, Ero-Teme ―respondió Menma matándolo con la mirada―. Creía que ibas en serio.
―¿Qué? ―cuestionó confundido sin entender nada.
―¡No te hagas! ―gritó Sasuke apuntando con su katana al rubio―. Ustedes estaban teniendo una cita a nuestras espaldas.
―Idiotas ―afirmó Charasuke rodando los ojos―. Arruinaron todo ―dijo haciendo un puchero.
―Tú arruinaste nuestra relación y la suya... ―comenzó a reclamar Menma siendo interrumpido por su gemelo.
―Vinimos a comprar un regalo ―confesó Naruto con algo de molestia por las acusaciones mostrando un par de bolsas en sus manos―. Son para el cumpleaños de Sasuke y de Charasuke. Como ellos tienen medidas similares pude comprar ropa de la talla del Teme.
―Eso no explica por qué estabas abrazándolo tan… tan posesivo ―gruñó con furia Menma.
―Unos chicos no paraban de decirle obscenidades a mi cuñado y por eso dije eso, pero creo que huyeron más por sus ataques ―explicó señalando los destrozos hechos.
Nuevamente la sangre en Sasuke y Menma bullía en su cuerpo, pero esta vez por vergüenza. Ambos habían actuado de manera irracional por celos, sí, por los malditos celos que no los dejaron recordar que pronto sería el cumpleaños de los gemelos Uchiha. Naruto estaba buscando un regalo para su novio y hubiera sido una linda sorpresa, puesto que luego de inspeccionar el contenía de la bolsa para verificar que fuera cierto, en ella encontró ropa bordada con su nombre con un logo que le encantaba. Por su parte Menma se sentía idiota por no haber pensado en pedir ayuda a Sasuke para el regalo de su novio y aun si descartaba el pedir ayuda debería haber estado pensando en qué darle.
―Es raro que ustedes actuaran tan impulsivamente ―dijo Charasuke repentinamente rompiendo el silencio.
―Ustedes siempre son más de pensar las cosas antes de actuar ―secundó su cuñado.
―A menos que… ―dijeron a coro― Estuvieran celosos ―finalizaron con una gran sonrisa llena de burla mientras miraban a sus novios.
”Los están engañando”. Fue la frase descuidada que dijo su compañera abriendo la caja de pandora en ellos.
“Mami hay dos chicos volando”. Fue lo que dijo un niño a su madre cuando Charasuke y Naruto salieron volando por un ataque de sus novios por burlarse de sus celos.