Los minutos pasaban amenamente, y Sasuke disfrutaba mucho de esos momentos estar con su rubio, haciendo cosas cotidianas podría parecer loco pero a él le gustaba imaginaba estar con Naruto en su casa haciendo esas típicas cosas de pareja, pero al recordar su Triste realidad su corazón se entristecía sólo le quedaba disfrutar esos pequeños momentos.
Los minutos seguían pasando y Naruto ya había terminado de preparar el postre, Sasuke también termino de picar las verduras y se fue a sentar al sillón de la sala, y se puso a ver que había en la televisión mientras Naruto terminaba de poner la mesa él había insistido en ayudarle pero el rubio se había negado alegando que él podía hacerlo solo y que no era tan difícil pasaron alrededor de unos 10 minutos y la puerta se abrió, y por esa puerta entraba cierto pelirrojo vestido de traje y con un saco largo y una paraguas, Naruto se apresuró a acercarse al pelirrojo para recibir su maleta y la paraguas —la cena está lista ve a cambiarte amor— dijo el rubio con una gran sonrisa
El pelirrojo sonrió y le dio un beso en la frente a Naruto en forma de saludo —está bien enseguida vuelvo— dijo Sin voltear y se dirigió a la habitación que compartía con el rubio, Sasuke que había visto todo aquello tenía una confusión de sentimientos sentía celos y a la vez dolor, el dolor que le causaba pensar que él podría haber estado viviendo todo aquello pero no podía por ser un ciego estaba ensimismado en sus pensamientos, que no se dio cuenta que Naruto estaba frente mirándolo extrañado
—Qué te sucede Sasuke ¿estás bien?—
—Sí claro que estoy bien Dobe sólo estaba recordando algunas cosas— dijo tratando de que aquellos recuerdos mejor dicho anhelos de su mente no se reflejará en su tono de voz minutos después la puerta se volvía a abrir pero lo que se escuchó fue una horrible voz chillona diciendo
—Naru querido primo ya llegué—
—Ya te escuché Karin necesario que grites— dijo el rubio sonriendo, Sasuke la miro desde el sillón examinándola de arriba abajo no podía creer que ella fuera prima de Naruto era muy Escandalosa
La pelirroja se acercó a donde Sasuke se encontraba —vaya veo que tenemos visitas— dijo acercándose más al pelinegro invadiendo su espacio personal — ¿y tú quién eres?— preguntó un poco extrañada
—Cómo es posible que no lo recuerdes Karin es Sasuke— decía el rubio con una sonrisa
—A sí… si… Sasuke—volvió a repetir la pelirroja mientras que el pelinegro se mantenía callado solamente observándola con el ceño fruncido
—Vamos Karin ve a cambiarte de una vez, la cena está lista en cuanto Gaara termine de cambiarse cenaremos—
—Está bien— respondió el pelirroja con una gran sonrisa, y acercándose mucho más a Sasuke y le susurró al oído «sé quién eres y que todo lo que le hiciste a mi querido primo Sasuke Uchiha pero mi pregunta es ¿qué haces aquí?» dijo sonriendo alejándose de Sasuke dejándole muy extrañado —me iré cambiar— volví a decir caminando hacia su habitación.
—Está bien— dijo el rubio que no había escuchado nada de aquello —vamos Sasuke ven Siéntate enseguida vendrá Gaara— el pelinegro asintió con la cabeza se levantó del sillón para dirigirse a la mesa, y no faltó mucho para que Gaara saliera de su habitación ya con unas prendas mucho más cómodas, se acercó al pelinegro —buenas noches Sasuke ¿cómo estás? — dijo extendiendo la mano para saludarlo
El pelinegro estrechos su mano — bien Y tú ¿cómo estás?— fue su simple respuesta
—Qué bueno— respondió Gaara —yo estoy bien gracias por preguntar, siéntate por favor— dijo tratando de ser lo más natural posible
—Claro— respondió Sasuke tomando asiento el rubio sólo sonrío ante la acción de aquellos dos eran tan serios —empezaré a servir la cena— dijo para dirigirse a la cocina
— ¿Quieres que te ayude?— dijeron al unísono Gaara y Sasuke que voltearon a verse después de lo dicho
—No es necesario tranquilos—respondió Naruto entrando a la cocina, el silencio en el que se quedaron Gaara y Sasuke fue muy, pero muy incómodo hasta que la pelirroja salió de su habitación he hizo acto de presencia
—Vaya… Vaya… pues huele delicioso me pregunto qué habrás cocinado mi adorado primo—
—Claro tú sólo comes ni siquiera quieres ayudar— le dijo Gaara
—Oye… yo ya trabajó mucho—respondió rápidamente la pelirroja
—Naruto trabajar tanto o más que tú y el prepara la cena y recoge la casa pero tú no lo haces— volvió a decir Gaara algo molesto
—Bueno… bueno… ya… Y qué quieres que haga
que llegue a la casa ¿y cocine rojito? —respondió la pelirroja levantando una cuchara con la intención de tirársela
— ¿Me dices rojito a mí? tú y yo tenemos el mismo color de cabello
—pero es obvio que no tenemos el mismo temperamento—siseo Karin
—Estoy de acuerdo— respondió Gaara —pero aun así pienso que deberías hacer algo por lo menos ya que te viniste de colada a nuestro departamento—
—Colada eso no… eso no es lo que pasó… lo que pasa es que estoy buscando un departamento y no encuentro uno por eso estoy aquí y cuando lo encuentre me iré—
—Llevas diciendo eso desde que estamos en Alemania No puedo creer que hasta ahora no encuentres un departamento— replicó Gaara haciendo que la pelirroja rabiar
—Pues si quieres a mi primo Pues me tendrás que aguantar— fue lo último que dijo la pelirroja haciendo un puchero, Sasuke se había mantenido en silencio escuchando la pequeña discusión que tenían ambos pelirrojos no entendiendo porque la pelirroja vivía con la pareja, pero en el fondo lo agradecía no quería que Gaara y Naruto estuvieran completamente solos él sólo hecho de pensarlo hacia qué le hirviera la sangre
Naruto volvió con una bandeja al comedor —ya dejen de pelear ustedes dos que van hacer pensar a Sasuke que esta casa es un desastre— dijo poniendo los platos para cada uno al terminar se sentó en una silla también —Espero que les guste mucho la comida—dijo con una sonrisa y automáticamente los tres sonrieron al ver la sonrisa del Rubio estaba claro que el rubio era la debilidad de los tres Karin atacó rápidamente su plato y con una sonrisa
—está delicioso Naru como siempre presumiré que mi lindo primito cocina delicioso—
—Pues en realidad Está delicioso— dijo Sasuke con un intento de sonrisa
—tu cocina no puede ser mejor—dijo Gaara con una sonrisa Naruto estaba tan feliz al recibir los halagos yo solo pudo sonreír la comida se dio de manera amena Por así decirlo ya que nunca faltaban los comentarios extraños de Karin y las réplicas de Gaara y palabras de amor que le decía Naruto al pelirrojo cosa que le molestaba al pelinegro, pero no podía decir nada, prefería 1000 veces escuchar lo que esos dos pelirrojos y Naruto hablaban ah hablar él directamente porque no sabía qué tema tocar, ya que él estaba ahí por Naruto sólo por su rubio.
Después de comer el postre Gaara estrecho la mano de Naruto con cariño —Gracias cariño la comida estuvo deliciosa —en ese momento Sasuke pudo ver claramente que los ojos de Naruto había un brillo especial mientras una gran sonrisa aparecía en su rostro, Sasuke nunca había visto ese tipo de sonrisa en el rostro del rubio, no se corrigió si había visto ese tipo de sonrisa pero fue antes de que todo aquello pasará cuando eran amigos cuando Naruto le amaba una y otra vez los recuerdos se agolpaban en su mente recuerdos qué le recalcaban lo que había perdido sin poder antes disfrutarlo.
—Oh Qué lindos—Dijo Karin sonriendo esas palabras sacaran de su ensoñación al pelinegro —lo que nos hace falta aquí—agrego la pelirroja agarrando su cuchara y moviéndola de un lado a otro —necesitamos un bebé—dijo con una gran sonrisa —se imaginan un bebé de ustedes dos— agregó emocionada lo cual provocó un sonrojó en el rostro del rubio —no sería lindo— volvió a decir sonriendo
«Claro que sería lindo» pensó el pelinegro «un hijo de Naruto, un pequeño Rubio de ojos azules igual a Naruto» aquella idea le hizo sonreír internamente pero en aquel momento recordó que el padre del hijo de Naruto no sería él sino el pelirrojo, y esa idea le partió el corazón se levantó de la mesa rápidamente como temiendo escuchar las siguientes palabras —ya tengo que irme—Dijo rápidamente
—Pero aún es temprano replicó el Rubio
—Mañana tengo una junta importante y es muy temprano lo siento—respondió
—Bueno está bien— dijo el rubio levantándose de la mesa —te acompañó hasta la puerta— Gaara también se puso de pie y levanto su mano para estrechar la con la del pelinegro —gracias por venir Sasuke espero que la cena se repita—Dijo Gaara intentando sonreír sin lograrlo del todo
—Claro tal vez en otra ocasión—respondió el pelinegro también estrechando la mano del pelirrojo
Ambos Naruto y Sasuke se encaminaron a la puerta ya estando ahí el rubio le dio un pequeño beso en la mejilla a Sasuke en forma de despedida diciendo —Gracias Sasuke para mí es muy importante que intentes llevarte bien con Gaara— dijo sonriendo ampliamente Sasuke que se había quedado embelesado por aquel gesto de cariño sólo asintió con la cabeza y empezó a caminar sin saber qué decir o qué pensar su corazón empezó a latir fuertemente y no se detuvo hasta mucho Después de que llegó a su hogar.
Fin Flash-Back
De aquella cena sólo se queda con el recuerdo de aquel pequeño gesto de cariño de Naruto hacia él, pero también le entristecía el pensar que si no hubiera sido un ciego en ese momento el que compartiría los momentos felices con Naruto sería el y no el pelirrojo, y tal vez ya tendrían aquel hijo que Naruto deseaba tener hace tanto tiempo, y pensar en todo eso lo lastimaba profundamente.