Frío:
Dean se puso cómodo en el sófa y se acurrucó entre los brazos de Cas. A él no le molesta ser la cuchara pequeña en ciertas ocasiones. Sentir el abrazo cálido de Cas era una de las mejores cosas que podía pedir y más con este frío invernal.
Manta:
Dean llegó a la habitación y vio a Cas ya acostado en la cama y acurrucado debajo de varias mantas. No era ninguna novedad que Cas era muy friolento. Las bajas temperaturas no lo ponían de buen humor. Dean se acostó a su lado y lo envolvió entre sus brazos. Estuvieron viendo los capítulos de la nueva temporada de Dr. Sexy e intercambiando opiniones. Después de un tiempo, Cas atrapó la mano de Dean y entrelazó sus dedos hasta quedar sobre su pecho, calentando su corazón.
Mínima:
Domingo por la mañana. Cero grados centígrados. Dean caminó unos pasos hasta la sala de estar y le hizo señas a Cas para correr las mantas que los abrigaba. Dean le tendió la humeante taza con un guiño. Cas se lo agradeció con un beso en su frente, pero Dean resopló y lo miró desafiante, pidiendo más. Cas se rió y se inclinó para saborear los carnosos labios de Dean en un beso descuidado y ardiente.
Falso:
Dean se levantó y sintió un cambio en aire. Salió de la habitación y encontró a Cas en la cocina, disfrutando de los rayos de sol que se filtraban a través de la ventana. Su sonrisa era amplia y satisfactoria. Dean se acercó para saludarlo y también lo sintió. Que locura. Sacudió la cabeza. "¿Falsa Primavera otra vez? Cas sonrió. "Falsa Primavera otra vez, Dean".