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Nadie Dijo Que Seria Facil por DariWin PD

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Notas del capitulo:

Este capitulo me encanta. Personalmente me costo mucho escribirlo pero me fascina el resultado. Espero lo disfruten.

En el ascensor, Flyn sonríe inconscientemente al tener presente el recuerdo de las chicas. Un sonido se escucha, el ascensor llego al primer piso, no se detiene, nadie lo ha llamado. Flyn saca su teléfono, se quita los guantes guardándolos en los bolsillos del suéter y con las manos libres lo desbloquea, saca sus audífonos y los conecta. Le da play a la música. Para su suerte suena: Wolf In Sheep`s Clothing de Set It Off. Una canción de odio es lo que necesita Flyn justo ahora.

Hahaha, this is about you. (Hahaha, esto es sobre ti)


Beware, beware, be skeptical, (Cuidado, cuidado, sé ecéptico)


 Of their smiles, their smiles of plated gold. (Se sus sonrisas, sus sonrisas pintadas de oro)


Deceit, so natural, (El engaño tan natural)


 But a wolf in sheep`s clothing is more than a warning. (Pero un lobo en piel de oveja es más que una advertencia)


Baa baa black sheep have you any soul? ( Bah, bah, oveja negra ¿tienes alma?)


No sir, by the way, what the hell are morals? (No señor, por cierto, ¿qué demonios es la moral?)


Jack be nimble, Jack be quick. (Jack sé ágil, Jack é rápido)


Jill`s a little whore, and her alibis are turning tricks. (Jill es un poco zorra y sus coartadas son trucos sucios )


So could you... ( Asi que te pregunto...)


Tell me, how you`re sleeping easy, (Dime ¿Como puedes dormir tan facil)


How you`re only thinking of yourself. ( cuando solo piensas en ti mismo?)


Show me, how you justify,( Muestrame, como justificas)


Telling all your lies like second nature, (Que mientes como si fuera una segunda naturaleza)


Listen, Mark my words one day, ( Escuchame, recuerda mis palabras un dia)


You will pay, you will pay (Vas a Pagar, vas a pagar)


Karma`s gonna come collect your debt. (El karma vendra a cobrar su deuda)

Al escuchar y entender claramente lo que dice la canción, Flyn se siente cada vez con más odio. El pelinegro sonríe con ironía cuando escucha en la canción:

Maybe you`ll change,
Abandon all your wicked ways,
Make amends and start a new again.
Maybe you`ll see,
All the wrongs you did to me,
And start all over, start all over again.


Flyn sabe inglés, le causa gracia lo que dice en español:


Quizás tú cambies,
Abandones todos tus trucos sucios,
Intentes enmendar y empezar de nuevo.
Quizás tú veas,
Todo lo malo que me hiciste a mí,
Y empieces otra, empieces otra vez.
Y le hace todavía más gracias pensar que ella cambiaria.

«Como si Sami pudiera cambiar, como si ella pudiera ver todo lo malo que hizo, como si ella pudiera abandonar sus trucos sucios» Flyn aprieta los puños, aprieta los dientes «Como si ella... pudiera empezar otra vez...»


Levanta el puño lleno de odio y lo abalanza contra una pared del ascensor, pero se detiene antes de golpearla.


-La pared no tiene la culpa de nada...-Se dice en voz alta para sí mismo.
Se recuesta otra vez del fondo del ascensor, se mete las manos en los bolsillos del suéter, mientras calmadamente tararea:

Tell me, how you`re sleeping easy, (Dime ¿Como puedes dormir tan facil)
How you`re only thinking of yourself.( cuando solo piensas en ti mismo?)
Show me, how you justify,( Muestrame, como justificas)
Telling all your lies like second nature,(Que mientes como si fuera una segunda naturaleza)
Listen, Mark my words one day,( Escuchame, recuerda mis palabras un dia)
You will pay, you will pay(Vas a Pagar, vas a pagar)
Karma`s gonna come collect your debt.(El karma vendra a cobrar su deuda)

Suena un ruido, Flyn no lo escucha por la música pero ve la luz de que llego a su piso. Ni siquiera se dio cuenta de que había pasado el segundo piso. Las puertas se abren pero no hay nadie alrededor, Flyn se encamina a salir, apenas sale del ascensor, este cierra las puertas tras de sí y continua hacia arriba, alguien lo ha de haber llamado. Flyn suspira y con la mirada baja va hacia el mostrador de la bibliotecaria de ese piso. No mira alrededor, no le importa lo que pasa alrededor.   Se sabe el camino de memoria, si caminara con los ojos cerrados igual llegaría sin problemas. Llega al mostrador, le pone pausa a la música y se quita los audífonos para poder hablar con la bibliotecaria quien esta distraída hablando con otra persona. Flyn se recuesta en el mostrador dando la espalda a este, observa todo el piso. No esta tan concurrido como la planta baja, pero hay una cantidad razonable de personas allí. La gran mayoría está leyendo en las mesas principales del centro o bien estudiando o haciendo cualquier otra cosa. Como están las mesas principales, también están las mesitas pequeñas al final de los pasillos de los grandes estantes llenos de libros. Allí es a donde va Flyn a leer. En la sección de novelas, al final del pasillo, está la mesita en donde siempre lee. Es más o menos como una tradición o más bien un hábito.   Siempre hace lo mismo, llega a la biblioteca, saluda a la bibliotecaria de la planta baja, sube al tercer piso, saluda a la señora Kress, le pide un chicle y se va a leer.   «Soy tan predecible...»   Enfrascado en sus pensamientos, no se fija cuando la bibliotecaria se desocupa. Esta, ante la indiferencia de Flyn, con una sonrisa en la que no enseña los dientes, pone uno de sus mechones de cabello rojizo detrás de su oreja y  dice recostándose en su silla:   -Buenas Tardes señor Zimmerman.   Flyn mira sobre su hombro, en su boca se muestra una pequeña sonrisa, se da la vuelta y dice tranquilamente:   -Buenas Tardes señora Kress.   -¿Que lo trae por aquí?-Dice divertida.   Flyn arquea una ceja.   -¿Es necesario preguntar?   La señora Kress da una pequeña risa que controla para no interrumpir la paz y el silencio. Flyn la mira y sonríe ampliamente, se recuesta en el mostrador apoyando sus brazos en él, e inclinándose un poco hacia a delante. Solo un poco puesto que no quiere que la señora Kress vea sus heridas de guerra pero al parecer esta no lo nota.   -¿Cómo esta señora Kress?-Pregunta aun con la sonrisa en un perfecto alemán.   -Bueno... estoy muy feliz en lo que cabe-Dice ella viendo a las personas leyendo en las mesas principales aun en alemán.   Flyn mira por encima de su hombro y ve a la cantidad razonable de personas leyendo. Después vuelve a ver a la señora Kress   -¿Le molesta que haya tantas personas?   -En absoluto... -Hace una pausa y suspira- Es solo que me gustaría ver más jóvenes interesados en la lectura, como usted-Flyn la mira a los ojos, ella apoya el codo en su escritorio detrás del mostrador y apoya la cabeza en su mano- Últimamente todos los jóvenes se quedan en la planta baja, como si los demás cinco pisos no importaran...   Flyn la mira y se ríe. Su risa desconcierta a la señora Kress.   -¿Qué le parece tan gracioso señor Zimmerman?   Flyn la mira a sus castaños ojos claros.   -Si todos los jóvenes estuvieran utilizando todos los cinco pisos de la biblioteca, le aseguro, que usted preferiría que se quedaran en la planta baja-La señora Kress alza una ceja en desconcierto- Los jóvenes de ahora les basta con saber cómo leer una página de GooGle. La mayoría están interesados en la lectura pero al no conseguir los libros en físico, prefieren descargarlos. Cosa que me ha ocurrido a mí, señora.   La señora Kress va a responder algo cuando escucha un sonido. Desvía la mirada en dirección de este y resulta que es un niño que se le cayó la pila de libros que estaba en la mesa. El niño se pone a recoger sus libros, nadie más lo ayuda pero parece no importarle. La señora Kress y Flyn permanecen en silencio por unos momentos.   -Tal vez tengas razón Flyn-Dice la señora Kress rompiendo el silencio, Flyn la mira al escuchar la mención de su nombre, normalmente ella le dice por su apellido y le habla de “usted”- Los libros no son para todas las personas, creo que será mejor, que las actuales generaciones se queden enfrente de las pantallas-Hace una pausa y suspira- Al menos allí leen...   Flyn ríe. La señora Kress continúa.   -Después de todo... Fuera del perro, el libro es probablemente el mejor amigo del hombre...   -Y dentro del perro, probablemente está demasiado oscuro para leer-Termina Flyn.   La señora Kress sonrió felizmente al escuchar a Flyn, se siente recta y susurra:   -No sabía que leyera a Walter Risso, señor Zimmerman...   Flyn sonríe mientras se endereza.   -Sentí curiosidad por la frase que dijo usted el otro día y decidí investigarlo un poco.  

La señora Kress vuelve a recostarse en su silla y le da una sonrisa tranquila y apacible sin decir nada. Flyn levanta la mirada y observa el reloj: Las cinco y cuarenta y tres. La cena es a las siete en punto. O corta la conversación con la señora Kress o se aguanta el regaño de sus padres por llegar tarde a la cena además de salirse a escondidas.

Flyn suspira, la señora Kress nota algo de frustración en el muchacho asique decide dejar que siga con su lectura en paz. Ella tampoco es tan mayorcita como para no comprender la vida de los jóvenes.   -Entonces...-Dice para dejar que Flyn se valla- ¿Cual libro va a leer hoy señor Zimmerman?   -¿Eh? Ah, si-Lo tomo desprevenido sumido en su mundo- Voy a leer El Perfume de Patrick Süskind  señora Kress.   -El Perfume de Patrick Süskind  -Repite la pelirroja  mientras teclea en su ordenador, después le da una sonrisa a Flyn y toma un libro que estaba leyendo.   Flyn se desconcierta un poco y la mira como esperando algo, ella lo ve de reojo, sonríe.   -¿Que está esperando señor Zimmerman?   -¿No va a decirme nada?   La ojicastaña sonríe y desvía la mirada hacia su libro.   -Me parece innecesario que le diga en donde esta lo que busca, si está más que claro que usted sabe mejor que nadie en donde puede encontrarlo-La señora Kress arquea una ceja- ¿Verdad?   Flyn sonríe, asiente y se retira, dejando a la señora Kress con su libro para el también proceder a leer. Camina tranquilamente hacia el pasillo de la sección de novelas cuando se detiene bruscamente, se la vuelta sobre sus talones y regresa hacia la señora Kress, esta sigue sin mirarlo puesto que sabe porque está allí, le sorprendió que lo olvidara.   -Señora Kress...-Dice Flyn con algo de vergüenza.   -¿Mm?-Pregunta sin despegar la vista del libro.   -¿No tendrá de casualidad un chicle que me regale?   La señora Kress ríe, deja su libro en su escritorio no sin antes marcar la página por donde iba, jala uno de los cajones de su escritorio y saca dos chicles de fresa. Le entrega uno a Flyn y se mete el otro a la boca. Flyn lo toma, sonríe y se encamina a por fin leer.   Toma su teléfono, revisa la hora: las cinco y cuarenta y nueve. Flyn chasquea la lengua al notar que solo le quedan una hora y diez minutos para leer. No cambia el ritmo con el que camina, seguramente, no, es seguro que sus padres ya saben que él se fue a la biblioteca pero igual debe de apresurarse si no quiere recibir más regaños. Conecta los auriculares al teléfono y le da play a la música, los fuertes sonidos de la canción Dropout - Rock n Roll llena sus oídos mientras que estira la mano para sentir la portada de los libros. Escuchar música mientras lee es una de las cualidades que Flyn posee, sus amigos no entienden cómo puede leer y tararear la canción al mismo tiempo pero siempre han dicho que Zimmerman es un bicho raro, Flyn ya se acostumbró. Sus dedos  se deslizan por los lomos de los libros hasta que instintivamente se detiene en seco. Con la punta del dedo índice lo toca, para después deslizar sus dedos en él, tomándolo con confianza entre sus manos. Lo mira mientras que en su portada dicta El Perfume- Historia de un Asesino. Patrick Süskind   Acaricia el titulo con la yema de los dedos para después sonreír y encaminarse a la mesita en donde siempre suele leer, con la vista fija en el libro, comienza a abrirlo sin necesidad de mirar hacia donde va. Llega a la mesita donde siempre, SIEMPRE  se sienta, en serio. Así de predecible era. Abre el libro, busca la página donde lo dejo, que bueno que tiene un marca libros personalizado que sus hermanos le regalaron, así sabía cuál de todas las copias era la suya. Se sienta sin prestarle la más mínima atención a lo demás. El pelinegro comienza a leer pero la luz no es muy buena por lo que se dispone a encender la pequeña lámpara de la mesa, baja la cadenita de la lámpara pero nada sucede, Flyn frunce el ceño y vuelve a tirar de la cadenita dorada de la lámpara pero nuevamente nada sucede. Flyn suspira con desesperación, marca la página donde se quedó y cierra el libro dejándolo sobre la mesita. Se pone de pie, revisa la lámpara de reojo. La toma por el mango pintado de un intenso pero algo antiguo color dorado y mira sobre la tapa de un color verde oscuro brillante semitransparente, esperando que sea la bombilla que se haya fundido pero a su vista está completamente bien. Revisa el cable de la lámpara, tal vez se dañó. No es electricista asique solo sabe lo básico sobre la electricidad: que es peligrosa, que nunca hay que tocarla ni meterse con ella. Lleva su mano al cable y jalándolo con suavidad descubre que la estúpida lámpara ni siquiera estaba conectada.  

Flyn mira con cara de asesino al cable, resopla y se agacha para conectar la lámpara de una vez por todas y ponerse a leer. No ve muy bien, puesto que además de que no hay mucha iluminación el tomacorriente esta debajo de la mesita, solo agachado con su gran cuerpo no podrá caber allí abajo. Flyn bufa pensando en lo que debería hacer. Sobre pesa los pros y los contras de hacerlo.

«Si alguien me viera en esa posición sería una de las vergüenzas más grandes de mi vida» Mira el cable en su mano «Si lo hago rápido probablemente nadie me vea y pueda leer de una buena vez» Gira la cabeza, mirando sobre su hombro el pasillo, su castaña mirada se queda en el pequeño grupo de personas que están en las mesas principales, todos concentrados en sus libros, la gran mayoría dándole la espalda, vuelve a mirar el cable, suspira cansado «Muy bien... acabemos con esto de una buena vez»  

Apoya sus rodillas en la alfombra vino tinto, se inclina hacia delante y con sus manos apoyadas también en la alfombra se pone a cuatro patas para poder llegar al bendito tomacorriente, se siente avergonzado en aquella posición pero que más. Avanza unos pasos como perrito, se mete debajo de la mesa y busca con los ojos entrecerrados el tomacorriente, lo divisa apenas en la oscuridad. Como una pequeña y opaca puertecita de color blanco con dos caras en ellas que muestran tristeza. Sin tiempo que perder lleva el cable hacia la cavidad y lo mete con apuro, para después darse cuenta de que lo metió incorrectamente, Flyn maldice internamente, vuelve a sacar el maldito cable y este se le cae de las manos, vuelve a maldecir, se inclina para recogerlo bajando su pecho alzando sus caderas, elevando así sus prominentes posaderas.

En esa posición, pudo por fin agarrar el escurridizo cable y meterlo correctamente en el tomacorriente, deslizo sus dedos por el plástico aislante hasta sentir el frio del metal en ellos, solo para darle una idea de dónde meterlo. Grave error, puesto que sus dedos seguían tocando el metal en el momento en que inconscientemente lo introducía en el tomacorriente, pudo sentir como unas cargas eléctricas pasaban de sus dedos a su muñeca subiendo por su brazo terminando en su pecho, haciéndolo estremecer mientras sentía la electricidad viajar por su cuerpo, suelta desesperadamente el cable, intenta levantarse instintivamente y termina dándose un golpe fuerte en la cabeza contra la mesita que se tambalea por el impacto.

-¡Joder!-Exclama Flyn con rabia.

Siente sus dedos entumecidos contra la suave sensación de la alfombra, toma el cable con la misma mano y con algo de temor por fin logra encajarlo correctamente. Flyn se recuesta en el suelo unos segundos, sintiendo el cosquilleo de la alfombra sobre su rostro pero al recordar que esta en una posición nada favorable se endereza, con cuidado de no darse otra vez con la mesita. Da unos pasos en reversa como perrito para impulsarse hacia atrás y terminar en cuclillas. Se pone de pie al instante, mirando la mesita, se lleva los dos dedos que hicieron contacto con el metal a la boca, le arden y palpitan incesantemente. Con la mano libre se soba la cabeza. Se saca los dedos de la boca, los limpia en su pantalón y los mira. Las yemas de los dedos están rojizas.

«¿Porque me quite los guantes?»

Se soba la cabeza.

«Al menos el gorro amortiguo el golpe... espero»

Flyn mira la dichosa lámpara, si no fuera porque le tiene un gran respeto a la señora Kress ya habría descargado toda su furia y frustración en esa lámpara. Con delicadeza de no romper nada, jala de nuevo la cadenita dorada de la lámpara y esta enciende, dejando ver una luz tenue que pinta de color verdoso los estantes y al mismo pelinegro enfrente de esta. Flyn suspira con cansancio y desesperación.

Se dispone de leer cuando siente unos toques en su hombro y escucha apenas un murmullo inentendible que es similar a como si alguien hablara a la lejanía puesto que todavía tiene los auriculares puesto y la música continua invadiendo sus oídos.

-¿Se encuentra bien?

Notas finales:

Uffff... bueno. Me costo horrores hacer todo los cambios en el texto para que la pagina aceptara pero todo vale el esfuerzo.

¿De donde proviene ese murmullo? ¿Quien sera?

Paresco disco rayado pero Gracias por su lectura.

Y no puedo irme sin preguntar:

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