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Magical Boy: My dear soldier por hannabaDeli

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La tierra es un lugar curioso,nunca había visto algo así en lo que llevaba de vida,lo cual era un largo tiempo,aquel cuerpo celestial flotaba inerte en el espacio,en plena obscuridad donde lo único que brillaba eran las estrellas que pasaban fugases con una viveza que dejaba impactado a cualquiera,el había observado el planeta tierra durante su formación y eso le parecía lo mas interesante,aquel planeta otorgaba vida que ningún planeta tenia,se había reservado toda su vida para la visita a aquel planeta que conocía ya desde el big bang (que también fue un acto impresionante) y aun así se sentía emocionado por conocer todo.


Pero al pasar el tiempo fue observando la creación de aquellos seres que no sabia si darles cariño o asco,los humanos eran seres que el no entendía pero que después de un tiempo fue entendiendo las razones por que hacían las cosas y todo lo hacían por las emociones,estuvo analizando los humanos durante toda su vida,les parecía seres curiosos como extraños por no decir intrigantes,lo que mas le impresionaba de los humanos eran las formas de llegar a ser personas tan inocentes y puras al nacer pero con el tiempo y dependiendo del tipo de trato que tuvieron en su vida se vuelven seres asquerosos.Nunca en su vida había estado mas contradicho con el tema de los humanos,a veces llegaban a horrorizarlo con solo ver a los humanos ,una vez llego a sentir un sentimiento que le parecía tan extraño...se llamaba tristeza,ese sentimiento fue el que sintió hace un tiempo al ver como violaban a una niña de apenas diez años que esta suplicaba piedad pero sus agresores no llegaron a tomarlo en importancia inmiscuyéndose en el placer morboso que al rato la pequeña murió a manos de ellos con una cuchillo clavado en su garganta de forma grotesca,el odiaba a los humanos era cierto pero aveces llegaba a quererlos por cosas que le daban fe en la humanidad.

El no estaba solo a su lado estaba su mas fiel compañera observando callada los actos de esos ''abominables'' humanos como solía ella decirles,estuvieron un expectantes un largo tiempo hasta que ella rompió el silencio que albergaba el espacio que era tan sofocante.

-deberíamos ir -su voz era elegante,claramente se escuchaba como una mujer aunque claro según su pensamiento solo era polvo y no un humano,no tendría sentido que albergara un genero- deberías prepararte porque iremos a la tierra,disminuiremos este caótico mundo,cueste lo que cueste...



en ese momento no podía sentirse mas excitado por las grandes hazañas que haría,por el gran legado que dejaría.

el amanecer en la tierra era hermoso,de eso no lo dudaba,por fin estaba en la tierra y nada detendría su búsqueda implacable en sanar la tierra,pero había una cosa que le impedía poder acabar con todo,era una promesa mas bien un pacto,el prometía que no atacaría a los humanos con sus poderes ni con las armas,no quería ser igual a ellos.El había adoptado una forma masculina pero algo femenina por lo cual le llevo un tiempo acostumbrarse a su nuevo cuerpo y los cambios en este,mientras tanto su acompañante adquirió un genero femenino y se auto nombro ''minerva'' ya que era un nombre que le encantaba,pero ella quería ser un animal y a la vez un humano que se quedo con ambas -siendo que se quedaría como un gato mas tiempo y tendría poco tiempo el ser un humano.- no podía estar mas feliz con la flexibilidad de el animal que adquirió,sin duda un fantasía pensaba ella,el muchacho ya sabia las técnicas eh estrategia que tendría que usar con los malhechores a lo cual minerva decidió poner en prueba su ingenio,casi como una prueba.

-solo tienes que robar esa tienda y estas en nuestra pandilla -hablo chad un muchacho de unos 16 años que estaba en la pandilla mas grande de todo detroit,el era un afroamericano huérfano criado en las calle que...era de esperarse que saliera así- es pan comido

-¿no habrá otra cosa? -el se llamaba evans,el era un chico blanco eh escuálido que al no tener ni una pizca de aventura en su vida decidió ese día meterse en una pandilla luego de pasar algunas pruebas que le impusieron su grupo.

-que marica -replico uno del grupo provocando las risas estruendosas del grupo.

-¿crees que esto no es fácil? -siseo chad.

-n-no lose -murmuro cabizbajo.

-mírame cuando te hablo -el muchacho pálido como la leche le observo con aquellos ojos de cordero- ¿es tan difícil?

-n-no -titubeo.

-entonces saca tu trasero blanco de aquí y entra a esa tienda -demando,el muchacho casi como un soldado entro a la tienda nervioso.

-¿crees que lo logre? -una chica de ahí reía mientras el líder observaba arrogante la tienda.

-para nada...


el chico entro a la tienda con las manos temblorosas,nunca en su vida había atracado una tienda y hoy seria su primera vez,el disimulo bastante bien que observaba la comida casi interesado -aunque ni lo estaba- pero claro non era un merito que nadie aplaudía ya que ni el encargado estaba interesado en el cliente que visito a la tienda,tampoco noto que había entrado ademas de su obvio temblor ya que era mas importante la revistas de adultos que habían llegado hoy,el muchacho saco una navaja de su bolsillo y acercándose a pasos lentos a la registradora el encargado deparo su mirada en la del chico sin mucho interés empezó a preguntarle si ya iba a comprar algo.

-¿entonces? -el chico temeroso alzo la navaja apuntando a su cuello gritando alterado.

-¡dame todo de la caja,Ya! -el encargado aun sorprendido no reacciono rápido como pensaba que seria -segun evans- el blanco empezó a irritarse y replico nuevamente-¡el dinero de una vez,maldita sea!


el encargado empezó a sacar el dinero de la registradora lo mas rápido que pudo,llenando el saco del muchacho que al no haber mas dinero en la registradora dio una fuga rápida de la tienda reuniéndose con el grupo que le observaba estático,el líder le dedico una sonrisa felina observando el botín que había traído evans.

-¡que bien lo haz hecho,evans! -el negro palmeo la espalda del chico de forma orgullosa- supongo que eso quiere decir que estas dentro

-¡en serio! -la cara del chico se ilumino con tan solo esas palabras.

-si,pero...-el rostro de los chicos empezaron a sonreír de una forma rara,casi como a sabiendas de lo que significaba ese ''pero''- no eres lo suficiente para esta pandilla,blanquito

-¿Que...? -ellos se iban acercando hasta acorralarlo de forma asfixiante.


todo habría acabado mal...si no fuera por aquel ángel que intervino

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