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Cuando un angel y un demonio se encuentran por YamiDemon

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Notas del capitulo:

Capi 2 Up!

Capitulo 2: Misión a la Tierra   

-Ya Kagome, ¿que ocurre?   

-Tu padre me mando a buscarte   

-¿Y ahora que quiere?   -

No lo se, pero dijo que era urgente-miro seriamente al Inu, este suspiro.  

-Mas le vale que sea bueno –dicho esto se puso de pie- te veo luego Kagome –luego de despedirse extendió sus blancas alas y se elevo, volando a su hogar lo más rápido que pudo, para que su padre lo llamara debía ser algo importante.   

No tardo mucho en visualizar el imponente castillo que resplandecía casi por luz propia, poseía varias torres y ventanas, cada una con marcos dorados que brillaban como oro, a su alrededor se encontraban unos impresionantes jardines con bellísimas flores de todos los tipos, brindándole a quien pasara cerca una agradable bienvenida con sus deliciosos aromas.   

Al llegar a la entrada descendió, dirigiéndose hasta las enormes puertas de madera, tomo el anillo de la aldaba y la golpeo contra la base de la misma, al poco tiempo las puertas fueron abiertas, permitiéndole al fin pasar.   

Camino por los largos pasillos exquisitamente decorados y hermosos, hasta llegar a la sala principal, en ella pudo encontrar a su padre reunido con los demás arcángeles superiores, agacho levemente su cabeza como un saludo y luego se dirigió a su padre.   

-Ah, InuYasha, que bueno que has llegado tan pronto hijo-    

-Vine en cuanto Kagome me aviso-   

-Supongo que desearas saber la razón por la que te llame-   

-Si padre, que era tan urgente-   

-Pues veras hijo, necesitamos que tu nos-    

-Señor Taisho- interrumpió una joven y hermosa mujer, entrando a la sala con algo de timidez, tenía el cabello largo y ondulado, de un color castaño claro, ojos azules como el mar, sus alas eran mucho más grandes que las del joven peli-plata, demostrando que era mayor de edad-   

-Dime que ocurre Milaru- mirando a la joven que se acercaba a el con unos cuantos papeles en las manos-   

-Lamento interrumpir, pero aquí están las cosas que me pidió, se los traje cuando antes como me dijo –mientras le entregaba los papeles y fotos perfectamente ordenados-   

-Muchas gracias Milaru, siempre puedo contar con tu ayuda-   

-Es u placer para mi servirle- sonrió para luego posar sus ojos en el joven que la miraba con una expresión algo incomoda- hola InuYasha, cuando tiempo sin verte-   

-Si, mucho tiempo –“mientras menos la vea, mejor” fue su pensamiento, la verdad esa mujer lo incomodaba mucho, y no le caía muy bien, desde que su madre murió hace ya unos años ella se acercaba cada vez mas a su padre, aprovechándose de su estado, y el solo pensar tener a esa mujer de madrastra era suficiente para irritarlo, pero trataba de no demostrarlo, y cada vez que su padre le preguntaba sobre su opinión de Milaru, el desviaba el tema o salía con una excusa para no contestar.   

-Con su permiso señor Taisho, me retiro –hizo una reverencia antes de salir de la sala-   

-Ahora padre, podrías terminar de decirme por que me llamaste con tanta urgencia-pregunto algo molesto por la forma en que su padre miraba a la mujer alejarse-   

-¿Eh? Ah si, ven conmigo –dirigiéndose al centro de la habitación, donde había una amplia y larga mesa, deposito en ella los papeles y fotos que le dejo Milaru.   

InuYasha no pudo contener su sorpresa al ver que muchas de las fotos eran de ese lugar que lo tenía tan intrigado, la Tierra. Tomo las fotos y las paso una por una, apreciando cada detalle.   

-Necesito tu ayuda con una misión-menciono en tono serio el hombre mayor, captando toda la atención del ángel curioso- los demás arcángeles y yo decidimos enviar a uno de nuestros ángeles a la tierra para averiguar mas de los seres humanos, sus costumbres, como viven, como se transportan, etc. Y también la utilización de lo que ellos llaman “dinero”, he visto que es solo oro y plata el llamado dinero pero ha causado muchos pleitos y hace surgir en los hombres la codicia, necesitamos saber para que y como lo utilizan.   

Mientras su padre hablaba el escuchaba con mucha atencion, formándose una ilusión en su pecho que fue hecha realidad con la mención de las siguientes palabras.   

-Te hemos elegido a ti hijo, para efectuar esa misión, ya que tienes grandes habilidad que todos hemos comprobado y se también que estas muy curioso por saber mas de los humanos.   

-E-es decir que…-tartamudeaba InuYasha aun sin poder creerlo.   

-Iras a la Tierra de los humanos –esta ultima declaración fue seguida de una sonrisa al ver el brillo en los ojos de su hijo, sabia muy bien que había hecho bien al elegirlo para tal misión, confiaba plenamente en él- ¿aceptas?   

-¡Claro que si padre!-respondió con alegría y emoción, al fin su sueño seria realidad y conocería a los humanos de cerca, además la idea de que su padre le confiara una misión tan importante le daba una satisfacción extra, el siempre procuro hacer estuviera orgulloso y esta no seria la excepción.   

-Estupendo, ahora te daremos las indicaciones que deberás seguir-Inu asintió mientras los demás arcángeles presentes se le acercaban para darle sus instrucciones.

.-.-.-.-   

Ya al día siguiente en joven ángel de orejitas blancas como el algodón se disponía a comenzar su nueva misión sin antes recibir unas ultimas indicaciones de los superiores y los ciento un consejos de sus amigas Sango y Kagome.   

-Ay Inu ¡todo estará muy aburrido sin ti!-dijo Kagome, abrazando pro enésima vez a su amigo.   

-Kagome es la decimosexta vez que me dices lo mismo-dijo con un tono divertido InuYasha.   

-Ya Kagome, si no lo sueltas no podrá irse –   

-Sango tiene razón -tratando de librarse del abrazo que lo estaba dejando sin aire. Luego de varios intentos al fin estaba listo para bajar a la Tierra, se despidió de todos y extendiendo sus alas, dio un salto por el borde de los límites del cielo, comenzando su tranquilo descenso. Sobrevolando varios paisajes que le resultaron hermosos, por fin localizo su objetivo, una pequeña aldea cercada por el bosque, cerca de algunas montañas.   -

Esa es la aldea Shikon- Dijo para si mismo, voló por sobre ella, dando un fugaz vistazo a la misma para luego dirigirse hacia un lago no muy alejado- perfecto -dicho esto aterrizo suavemente a si orilla, mirando a su alrededor con emoción, sintiéndose ansioso por entrar a la aldea y ver de cerca de los humanos.   

-gracias padre –murmuro alzando la vista al cielo claro, casi desprovisto de nubes- bien, que comience la misión de reconocimiento –saco de una pequeña bolsa que llevaba consigo una botella con un liquido cristalino a dentro, la miro por unos momentos recordando las palabras de su padre al darle la botellita.   

-.- Flash Back -.-   

-Esto-dijo mientras le entregaba la botella- es un brebaje preparado especialmente para esta ocasión, al beberlo te convertirás en un humano común para mezclarte entre ellos, pero ten cuidado, cuando den las 9 de la noche el efecto desaparecerá hasta las 9 de la mañana del día siguiente, por lo tanto tendrás que encontrar donde refugiarte lejos de la aldea, asegurándote que ningún humano te vea por la noche, o todo se arruinara ¿entendiste?   

-Si padre.   

-Bien, recuerda, antes de las 9 de la noche ya tienes que estar lo suficientemente lejos de la aldea-recibiendo un asentimiento del menor- confió en ti hijo… y ten mucho cuidado.   

-x- Fin Del Flash Back -x-   

-hasta las 9 de la noche, no será difícil –sonrió para luego destapar la botellita y beberse todo el liquido que contenía y a los pocos segundos sintiendo un extraño calor en su interior.    

Sintiéndose mas débil callo arrodillado en el suelo, cerro los ojos con fuerza cuando comenzo a cambiar. Sus plateados cabellos comenzaron a oscurecerse hasta tomar un color negro azabache, sus alas se desvanecieron como si nunca hubiera existido, hasta su ropa cambio, ese brillo que caracterizaba la ropa de los ángeles se extinguió, ahora cambiando a un color marrón claro.   

El ultimo cambio se noto al abrir los ojos, sintiendo que el calor ya estaba desapareciendo, sus orbes dorados se oscurecieron hasta tomar un color marrón grisáceo.   

Levanto una de sus manos y tomo uno de sus mechones, para verlo con claridad, ahora era negro como la noche, trato de mover sus alas dándose cuenta que ya no las tenía, era un humano, un humano simple y ordinario.   

-.-.-.-.-.-   

La imagen del ángel arrodillado en el pasto, inspeccionando los cambios de su cuerpo era observada por un par de ojos rojizos.   

-Así que mandaron a un ángel inexperto… perfecto, será mas fácil –al decir esto una malévola sonrisa se formo en los labios de este ser.   

-Solo por que sea inexperto no significa que será fácil… a menos que también sea ingenuo –comento una voz profunda y grave, cuyo dueño surgía de las sombras tras el hombre de ojos carmesíes.   

-No seas tan pesimista –dijo volteándose hacia su visitante con su sonrisa aun presente mientras su cabello tan negro como la misma oscuridad se negaba a quedarse quieto a pesar de estar atado aun caía sobre las imponentes alas de un color rojizo oscuro, casi un tono como la sangre, las cuales se movieron un poco para apartar los mechones rebeldes.   

-Solo soy realista Naraku, no subestimes a tus rivales…-   

-Francamente solo di una observación, además si es tan difícil como tu dices, mandare al mejor de mis hombres a interceptarlo –volteándose de nuevo a la enorme esfera que era sostenida por raíces negras, en la cual se reflejaba la imagen del aun, confundido ángel.   

-¿Ah si? ¿Y a quien mandaras?-    

-Como ya dije… al mejor de mis hombres… ósea, tu, mi querido Sesshoumaru -inquirió ampliando su sonrisa al escuchar el leve gruñido tras de si.   

-¿Y que te hace pensar que seré “la niñera” de ese entupido ángel? -estrechando peligrosamente sus dorados orbes, acercándose con un paso lento hacia la esfera resplandeciente, fijando su mirada en el joven allí reflejado.   

-Por que si te ganas su confianza, fácilmente podría decirte lo que tanto queremos saber-   

-Ja, no seas estupido, un ángel nunca diría nada a un demonio-   

-Pero, el no sabrá que eres un demonio –mirando la ligera mueca interrogante del demonio a su lado prosiguió- ellos no son los únicos que poseen ese brebaje para ser humanos, solo que el nuestro es mas efectivo, el de ellos dura hasta determinada hora de la noche, el nuestro dura todo el tiempo.   

-¿Y tu pretendes que además de cuidar al estupido ángel me convierta en un débil ser humano? Ja, jamás haría tal cosa –volteándose, dispuesto a salir de ese lugar para no seguir escuchando el absurdo parloteo de Naraku   

-¿Te mencione que este chiquillo es el hijo del arcángel Taisho? -en ese momento Sesshoumaru se detuvo en seco- al parecer mando a su propio hijo para la “misión”, seria una desgracia que muriera siendo humano, que es cuando esta más vulnerable –sonriendo con satisfacción al escuchar que los paso se acercaban nuevamente.   

-¿Qué tengo que hacer?-   

-Es sencillo, gánate su confianza y luego averigua el punto débil de ese maldito portón que hay en el cielo, luego podrás torturarlo hasta la muerte si así lo deseas-   

-¿Para que quiere saber el punto débil de ese portón?-   

-Tan sencillo como tu misión, atacar y someter finalmente a los estupidos ángeles…demostrar que los demonios somos una raza superior y por ultimo aniquilarlos para siempre-   

-Mmm… me gusta ese plan –una sonrisa se formo en el rostro del aquel demonio de cabellos plateados mientras observaba a InuYasha dirigirse hacia la aldea.   

-Pues necesitaras esto –mientras sacaba una botella con un líquido negro y espeso en su interior, entregándosela a Sesshoumaru.   

-Así que este el famoso brebaje, mas vale que funcione –lo guardo entre sus ropas y se volteo, saliendo de aquella habitación, Naraku solo se limito a seguir observando a InuYasha.   

-Al fin…los ángeles perecerán como debió ocurrir hace mas de 100 años –una estridente carcajada resonó en todo el penumbroso castillo, haciendo ecos que se escuchaban a gran distancia, en tanto Sesshoumaru extendía sus negras alas que hacían un perfecto contraste con su cabello, dispuesto a ir a la tierra cuanto antes, así comenzaría el juego, un depredador que juega con su presa antes de devorarla.   

Continuara…

Notas finales:

Bien, aquí reportándose Yami-chan con un nuevo capitulo, perdonen si estuvo aburrido, falta de inspiración u.u, pero alégrense, en el próximo… mejor no se los digo o arruinare la sorpresa n.nU.  

Un par de cositas que olvide poner n.nU.  

Naraku vendría a ser el “líder” de los demonios, y Sessh como su mano derecha.  

Y si se preguntan por que Sessh cambio de opinión tan rápido al saber lo de Taisho pues, tendrán que esperar por que es una de las sorpresas de este fic XDD.  

Gracias a toda la gente linda que me escribió un review, realmente me inspiran a seguir escribiendo este capitulo es para todos ustedes non.  

Nos leemos pronto chicos y chicas, y recuerden dejen review o este fic se va a la basura T.T.  

Matta Ne


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