El equipo se movilizo con rapidez a donde la policía los había instalado; para su sorpresa Spencer se encerró en la habitación donde tenían su perfil psicológico y no los dejo entrar mientras colocaba todo en la mesa y pizarrón.
Pasaron dos horas mientras Aaron veía preocupado donde Spenncer se movía viendo fotos y anotando cosas; el resto había empezado a armar un equipo de búsqueda y rescate que los llevase a las montañas.
Cuando el chico genio del equipo salió todos lo rodearon llenándolo de preguntas, Spenncer solo les indico que lo siguiesen mientras entraban a la oficina.
-tengo el perfil armado-
Todos se pusieron alrededor del chico genio del equipo mientras este empezaba a colgar las fotografías de los casos, el equipo de búsqueda y rescate también escuchaba al chico con atención.
-tenemos a un grupo de ignotos, pero los principales deben ser solo dos; están o son de alguna manera de rasgos asiáticos, por lo cual están obsesionados con ello-
-todas las niñas han sido de rasgos asiáticos, pero ¿Por qué asesinarlas? –
-eso es debido al complejo de Hittler, así como Hittler consideraba a los alemanes puros como la raza superior, nuestros ignotos creen que la raza asiática es superior-
-las victimas no eran 100% asiáticas-
-por eso todas las niñas no sobrevivieron al no ser 100% de su raza ambos ignotos perdieron el control-
- ¿y como estas tan seguro de que sean dos? –
-tenemos un total de 11 víctimas, los patrones de tortura y muerte son diferentes, pero se dividen en dos tipos de patrones; debido a esto pienso que uno de los ignotos es más joven que el otro; el ignoto mayor entierra a la victima con mayor cuidado y su nivel de sadismo es menor; el ignoto más joven es más desesperado; sus métodos son más experimentales, y es más sádico-
- ¿Cuánto tiempo tenemos? –
-Mitsuki es una niña completamente asiática; con las otras victimas el lapso entre muerte y rapto era de 36 horas; supongo que podemos duplicar el tiempo; pero es indispensable que la encontremos antes de las 36 horas-
- ¿Por qué? –
-a las victimas anteriores se les extrajo el útero; temo que no sea simplemente un castigo-
- ¿a qué te refieres Spenncer? –
-pensamos que era una forma de castigarles, pienso que es una forma de recordarlas; son trofeos-
-esos malditos-
-/-/-/- en un lugar de las montañas -/-/-/-
Miraba hacia ambos lados mientras observaba a dos hombres de rasgos asiáticos; dejo de forcejear cuando vio las armas de alto asalto que sostenían varios sujetos más, mientras ambos sujetos parecían satisfechos, el mayor de ellos tomo su rostro mientras lo delineaba.
- ¿Cuál es tu nombre? –
-Mitsuki, Mitsuki Long-
-ella es-
-tranquilo hijo; tenemos que ver al doctor primero ¿nos seguirás? si no intentas huir no te pasara nada malo-
-sí-
La chica camino por los pasillos de aquella fortaleza mientras la detallaba en su mente; solo había una forma de entrar y de salir mientras pasaban a un par de guardias quienes traían rifles; ella conocía bien esas armas y su poder; su tío y sus guardias las usaban cuando atacaban la mansión; sigo observando mientras muy dentro de ella imploraba que Spenncer y el resto la encontraran.
El piso era blanco al igual que las paredes; parecía un hospital; entraron a una puerta de metal; del otro lado había todo lo necesario de una pequeña clínica un hombre de bata blanca y gafas los observo; Mitsuki pudo notar que temblaba ligeramente y que estaba pálido.
-Shun, saca muestras de su sangre-
-si Yuki-san-
El hombre le indico que se sentara en una silla mientras ella esperaba pacientemente, movía sus pies en la silla mirando a ambos hombres; dio un suspiro, si quería seguir con vida debía cooperar con ellos.
-sacaré un poco de tu sangre ¿de acuerdo? –
-sí-
No es la primera vez que lo hacen así que ya conoce el procedimiento; extiende su brazo mientras el doctor pone una liga algo apretada arriba de su codo mostrando la vena y toma una ajuga y varios tubos; para este punto decide que es mejor girar la vista nunca fue afecta a ver la sangre.
-eso, buena chica; listo, ya acabamos-
Asiente mientras el hombre le coloca unas etiquetas preguntándole su nombre; para colocarlo en las etiquetas.
-vamos Mitsuki-
La niña hace una leve reverencia mientras sale detrás de ambos hombres, caminan varios pasillos más hasta llegar a una puerta diferente esta es deslizable como las que había en su casa cuando la abren puede ver una ambientación peculiar con varias puertas parecidas y piso de madera.
Sigue a ambos hombres que se cambian su calzado normal por unas zapatillas orientales, y ella repite el proceso sin decir nada de los otros 11 pares de zapatos de diferentes tallas. Los sigue hasta que se detienen en una puerta el hombre mayor Yuki abre la puerta dejando ver una habitación normal, con una cama matrimonial y decoración oriental; lo único extraño es que en una de las esquinas hay una cuna para un infante; y cosas de bebé.
-dormirás aquí-
-y ni se te ocurra escapar-
-Kai, déjala ya; la asustaras-
-lo siento padre-
Ambos se retiran y la pequeña al fin pierde la calma corriendo a la cama mientras se abraza a una almohada cuando se siente sola y segura, se permite derramar lágrimas, tiene miedo, mucho miedo; había huido de China de un mundo parecido solo para caer en manos de sujetos que le harían daño, más daño del que su propia familia le hizo.
- “mi ángel…ayúdame” –
-/-/-/- camioneta N.C.I.S -/-/-/-
Spenncer toco su pecho mientras apretaba el arma en sus manos, se sentía mal; casi no había dormido esa noche pese a que Aaron lo forzó a hacerlo quedándose a su lado; investigarían un poco antes de intentar entrar; era un lugar apartado y no sabían que equipo tenía el otro bando.
-Spennce-
La mano de su jefe apretó la suya, Aaron también estaba mal; las ojeras debajo de sus ojos lo delataban; pero aun así intentaba darle calma, el chico genio dio un suspiro mientras observaba el camino, cuando sintió el calor alejarse desvió la vista mientras halaba la mano de su superior entrelazando sus dedos.
-ya casi llegamos-
Todos dentro asintieron, entrarían con un equipo por un lado de la montaña y subirían esta a pie hasta localizar el lugar donde el ignoto se escondía; con ayuda de García podrían establecer un perímetro y crear un mapa; la técnica les había mandado un dron pequeño que se perdería entre los árboles permitiéndoles vigilar el lugar.
-bajaremos aquí, dividámonos en dos equipos-
-sí señor-
-Morgan, J.J y Prentis ustedes vayan con el equipo del dron-
-Spenccer, Rossi, y yo iremos con el equipo de rescate-
-vámonos-
No iba a dejar al chico genio solo, sabía que podía cometer una locura; al igual que él; suspiro mientras iban por el otro lado para llegar al lugar; sus teléfonos mantendrían conexión satelital obra y gracia de García quien les daría todos los datos de los ignotos en cuanto los pudiesen ver.
-/-/-/- Fortaleza -/-/-/-
Mitsuki se levanto mientras una criada entraba al lugar, ella también temblaba pero sin más ayudo a la pequeña a arreglarse con un kimono color rosa, antes de que la mujer se fuese Mitsuki tomo su rostro obligándola a mirarle.
-estas temblando ¿te preocupa tu bienestar o el mío? –
-yo…-
-habla, no diré nada-
-pequeña-
-moriré eso es seguro, las fotos que mi ángel tanto me oculto las vi en el avión cuando todos se durmieron, moriré como esas niñas-
La mujer negó mientras se inclinaba y las lagrimas mojaban el suelo; subió el rostro tomando la pequeña mano, mientras acariciaba su rostro Mitsuki tuvo ganas de llorar ante el cálido contacto.
-tú eres lo que quieren, no morirás; ellos solo quieren un bebé, uno con sangre asiática en sus venas; están dementes; eres una niña-
A la pequeña le recorrió un escalofrió, sabía como se hacían los bebés su curiosidad la llevo a la biblioteca y el proceso no era nada fácil; su cuerpo no estaba listo, y moriría; intentaría retrasar aquello todo lo posible hasta que su ángel viniera por ella; su ángel, Spenccer era humano quizá fuese mejor que no viniera.
-gracias por decirme; ahora sal o te regañaran-
La mujer se fue mientras Mitsuki temblaba levemente, fue criada para atender al esposo con el que la casarían cuando tuviese doce; cuando salió de China ese temor había desaparecido y ahora volvía con tanta fuerza que se le revolvió el estómago; fue al baño mientras vomitaba lo poco o nada que había en su interior.
Tocaron a su puerta mientras la pequeña abría miro a ambos hombres quienes parecieron sorprendidos y entraron; la niña solo pudo dar un paso atrás mientras era inspeccionada de pies a cabeza.
- ¿Qué te parece Kai? –
-es hermosa; será una buena madre-
Mitsuki bajo la cabeza temblaba; Yuki subió su rostro mientras acariciaba sus labios con el pulgar; sus ojos verdes se aguaron un poco al ver el rostro contrario; una vez vio esa mirada en un guardia cuando era más pequeña, no había entendido a esa edad porque su tío se había enfadado tanto que había asesinado al hombre en el jardín minutos después; ahora lo entendía, lasciva, su ser provocaba eso en aquellos sujetos; el joven la tomo en brazos mientras la cargaba; una mano en sus posaderas y otra rodeando su cintura.
-no pesas casi nada-
-soy pequeña-
-si; tendré que esperar un poco, a los catorce empezaras a darme hijos, tu sangre es valiosa-
Sus palabras solo le dieron alivio momentáneo; así que no estaban demasiado enfermos al menos no el más joven el mayor, aun le daba miedo la mirada en su rostro; fue llevada al comedor mientras el joven se dedicaba a atenderla como haría un esposo a su esposa; ella se levantó cuando traían el té y lo sirvió.
-tu crianza-
-mamá me enseño a atender a mi futuro marido-
-increíble pensé que las mujeres ya no les daban esos valores a sus hijas-
-eres especial-
La pequeña baja la mirada mientras sirve a ambos; tiene miedo, pero esta un poco más tranquila; solo quiere irse; por el momento actuará lo mejor que puede para mantener contentos a esos dos; solo así podrá sobrevivir.
- ¿deseas algo más mi esposo? –
-no; ven aquí-
Se sienta a su lado mientras el joven acaricia sus cabellos; y desata su chongo, le gusta más así; un ruido leve los alerta mientras ambos se levantan y salen al jardín; ella los sigue y en su rango de visión puede ver un pequeño dron; una sonrisa se forma en sus labios y el alivio de su pecho crece, parece que los mayores no lo han visto y es normal, su presencia se oculta en los arboles pero con su memoria es imposible no darse cuenta de ello.
-/-/-/- equipo del dron -/-/-/-
-son ellos-
-hay esta Mitsuki-
-parece que solo ella lo ha visto-
-muñeca has tu trabajo-
-claro mi tableta de chocolate; enseguida-
-los tengo; el mayor es Yuki Hayashi de 50 años ex combatiente de Irak, y Pearl Harbor fue dado de baja sin honores cuando ataco a uno de sus compañeros que lo insulto diciéndole peste; le dio 7 puñaladas que dejaron a su compañero en coma; está obsesionado con la raza asiática el ataque en Pearl Harbor lo saco de sus casillas, ya que según un reporte ataco a varios de sus compañeros y aliados-
-el hombre esta demente-
-eso no es todo hace dos años su esposa Sakura Hayashi se suicidó, fue al bosque y se colgó de un árbol; según el reporte un hombre la violo y dejo embarazada-
-por eso los úteros; ¿García, puedes decirnos algo del joven? –
-enseguida, bien parece que el joven es su hijo Kai Hayashi; su padre se lo llevo con él cuando su madre se suicido tiene 20 años, cuando tenía 15 entro a la correccional de menores cuando ataco a uno de sus compañeros de escuela; cuando se lo llevaron gritaba cosas como que era un ser superior-
-el padre fue el que le metió ideas al hijo; ¿escucho jefe? –
-/-/-/- equipo de rescate -/-/-/-
-fuerte y claro-
Aaron colgó el teléfono mientras seguía al dron en una pantalla, en el lugar parecía que la joven logro que ambos adultos entraran de nuevo mientras ella se ponía a juntar flores de un árbol de Sakura, le hizo una seña al dron y Aaron lo llevo hasta el árbol gracias a su follaje podía ser ocultado; la niña observo la cámara y rogo al cielo que pudiese ser escuchada hablo a un tono justo solo para que ella escuchase.
-si me escuchan muévanlo de arriba abajo-
Sonrió al recibir la respuesta, mientras sus ojos se cristalizaban.
-¿Spenncer? –
-sí-
-sácame de aquí por favor-
-sí-
-tengo miedo, ellos, ellos quieren…-
Callo al ver llegar al joven y bajo la cabeza mientras el dron subía un poco, pero sin dejar de observar la escena, Aaron apretó los puños mientras Spenncer se acercaba.
- ¿Qué haces aquí, Mitsuki? te resfriaras-
-lo lamento, quería aire fresco-
-esta bien, mírame-
El chico subió su mentón mientras sujetaba su fina cadera, Mitsuki tembló, pero mantuvo la mirada; los labios del joven se juntaron con los suyos mientras se tensaba; cuando el joven la soltó sus mejillas estaban rojas y dos lagrimas traicioneras surcaron su rostro.
-no llores, acostúmbrate; papá planea casarnos en una semana y cuando cumplas catorce me darás a mi primer hijo ¿entendido? Por ahora seguirás durmiendo donde te asignamos, pero en cuanto estemos casados dormirás como una buena esposa a mi lado ¿entendido? –
-sí-
-buena niña, eres hermosa; no puedo esperar a poder ver debajo de tu ropa-
Sus manos cubrieron su cuerpo mientras el joven tomaba su muñeca; dio una leve mirada hacia atrás mientras en sus labios se formaba una palabra sin voz “sálvenme” del otro lado de la pantalla el equipo de rescate veía a los agentes de U.A. C, Rossi se acerco solo para desarmar a Aaron quien sujetaba su arma con fuerza; Spenncer temblaba y lágrimas silenciosas recorrían sus mejillas; Rossi llamo la atención de su jefe hacia el chico genio y Aaron lo abrazo.
-Aaron…esta asustada y quiere regresar con nosotros-
-lo sé-
-tenemos que ir ya, mi pequeña; si ellos le tocan un pelo-
-tranquilo Reid, la salvaremos-
-Aaron-
El joven genio lloró abrigado en el pecho del mayor, cuando rescataran a Mitsuki necesitaría terapia mucha terapia, no era fácil lo que estaban viviendo; su mirada se endureció mientras Spenncer se calmaba cuando lo sintió más tranquilo; el equipo siguió se colocarían en un lugar estratégico; en su equipo había cazadores así que conocían las montañas y muchos de ellos después de la escena también querían la cabeza de ese par de sujetos.