Era ya las 12:00 p.m. y todos salieron de sus departamentos respectivos para ir al comedor, era el único momento del día donde todos los Preventers se unían para hablar de cosas cotidianas y sin importancia donde ellos dejaban de ser soldados por una hora.
-Maxwell, deja de ser tan payaso y come, ninguno de tus chiste da gracia- Refunfuño el chino del grupo algo molesto mirando al trenzado.
-Oh vamos Wu-chan, todo el mundo sabe que soy el alma de la fiesta- Hablo con orgullo el aludido- A nadie le molesta mis chistes.
-Eso dices tú- El chino miro despectivo al trenzado.
-Claro que si- Miro a su alrededor- A ver, Trowa, tu que trabajas en un circo y te debes de saber muchos chistes, ¿te hago o no te hago reír aunque el chiste sea repetido?- Interrogo el trenzado
-Para mí mala suerte, si me haces reír- Comento con tranquilidad como siempre.
-¿Y tu Q-man?- Miro al rubio del grupo.
-Bueno, no soy muy conocedor de chistes pero todos me han gustado, Duo- Hablo tímido.
-Winner no se vale, él se ríe hasta de los chistes malos que cuentas.
-Ok, ok, en ese caso buscare un buen reto, ¿vale?- Se sentó algo molesto el trenzado.
-En mi opinión deberías hacer reír a Yuy- Sonrió el chino malicioso al ver como Duo miraba con cierto horror al soldado perfecto.
-Eso no- Heero miro a Duo de forma indescifrable- Heero, tú no te reirías de un buen chiste aunque una misión dependiera de ello.
-Podría reír si una misión así lo amerita- Los pilotos lo miraron incrédulos.
-Eso hay que verlo- Reto con tranquilidad Trowa.
-En ese caso hagamos esto- El trenzado miro su reloj y vio que aún les quedaban 42 minutos de descanso- ¡Hey! ¡Oigan todos!- Los presentes en el comedor miraron algo extrañados al trenzado que daría un anuncio- Todos conocemos al tempano de hielo de Heero Yuy ¿no?, también conocido como el “Soldado Perfecto”- Algunos sonrieron por la ironía del shinigami de nombrar al piloto por sus apodos estando frente a el- Haremos un reto, todos nosotros contaremos un chiste, chistes de soldados y para poner más animada la cosa, el que haga reír a Heero Yuy… mmm… Bueno… etto… no se me ocurre nada- Rio despreocupado.
-Con tan solo saber que hicieron reír a Yuy con eso vasta, después de todo, ¿alguien lo ha escuchado reír?- Pregunto el chino y todos los presentes negaron con la cabeza murmurando entre ellos como se vería la sonrisa de Heero Yuy- Allí esta, el que haga reír a Yuy se llevara el título de ser el único en hacerlo reír- Resolvió.
-Oh, vamos Wufei, algo que valga la pena- Exigió Duo.
-No estará en mi lista de personas que matare si me hacen enojar- Hablo con seriedad el Soldado perfecto.
-Eso es algo bueno- Comento el trenzado temblando un poco- A mí me conviene, y mucho, en ese caso empezare yo- Todos los demás se colocaron alrededor del trenzado con sus sillas y algunos desde la mesa terminado su almuerzo, Duo aclaro su garganta y empezó con su chiste.
“El teniente de una tropa le dice al soldado Tanainas:
-Soldado Tanainas ¿usted es capaz de eliminar al enemigo? -A lo que el soldado le responde.
-Si señor, ¡ayer eliminé como a dieciocho!- El Teniente sorprendido le pregunta.
-¿En la guerra?
-No señor, ¡en el Facebook!”
Todos los del comedor estallaron en risa, pues Duo con su carisma le daba más gracia al chiste pero entre todos ellos Heero solo permanecía mirando fijamente al trenzado sin una pizca de gracia.
-Perdiste Maxwell, Yuy no se rio- Hablo de forma burlona el chino.
-Heero, se supone que te reirías, somos parejas y las parejas se apoyan- Comento haciendo puchero pero Heero no dijo nada- Ya veras, esta noche no follas- Mascullo entre dientes de forma inaudible- En ese caso cuenta tu uno Trowa.
-Ok- Se sumó al reto, se paró en medio del círculo y comenzó su chiste.
“El sargento reúne a todos los soldados en el patio del cuartel y los forma en línea, y el sargento dice:
-El que tenga una navaja, dé un paso al frente.
Y un soldado dijo:
-Yo tengo una, mi sargento.
Y el sargento dice:
-Ok, usted se va a Hawaii por una semana con todos los gastos pagados.
Al siguiente día, el sargento vuelve a preguntar:
-El que tenga una navaja, dé un paso al frente.
Y todos dan un paso al frente y el sargento les dice:
-¡Ok, hoy, todos a pelar papas!”
Y nuevamente todos estallaron en risa al escuchar el chiste, y más al recordar que su sargento era muy estricto con ellos, pero Heero aún seguía sin reírse.
-Bueno Q-man, eres nuestra salvación- El trenzado coloca las manos en los hombros del rubio.
-Pe… pe… pero Duo, yo… yo no sé contar chistes- Hablaba entre cortado con un gran sonrojo por la vergüenza que sentía.
-Vamos, no seas tímido, te he contado muchos chistes, alguno te tienes que saber- Ánimo el trenzado.
-Está bien- Se paró frente a todos y comenzó.
“Un general le dice al soldado:
-¡Soldado, ice la bandera!
El soldado responde:
-Lo felicito mi general, le quedó muy bonita.”
Para sorpresa del rubio todos rieron, pero Heero seguía rígido sin inmutarse por el chiste.
-Bueno, al parecer tampoco gane- Sonrió algo derrotado el rubio.
-Wufei, eres la última esperanza que tenemos- Comento el latino mirando al chino.
-Ganare- Sentencio muy confiado y se paró en medio del grupo de Preventers.
“El Sargento le pregunta a un soldado:
- Soldado, ¿por qué no fue ayer al entrenamiento de ocultamiento y camuflaje?
- ¿Quién dice que no fui?”
Todos quedaron en silencio, solo se escuchaba la pequeña risa de Quatre pero como decía Wufei, el árabe se reía hasta de los chistes malos.
-Que poco sentido del humor tienen- Mascullo molesto el chino al verse derrotado hasta por sus compañeros, pero en eso se escuchó como Heero estallaba en carcajadas, tomando su estómago y riendo, mucho o la gran mayoría veía la risa de Heero como algo macabro y escalofriante incluso hasta se asustaron al verlo, así que se fueron alejándose del ojos cobalto por su risa psicópata, después de un rato y de ver que Heero se reponía de semejante acción nadie podía salir del asombro- ¿Lo ven? Fui el único en hacer reír a Yuy- Sonrió victorioso el chino.
-No me reía de tu chiste- Se recuperó aun más limpiándose las lágrimas de sus ojos después de reír tanto- Me reía del chiste de Duo.