-¿a quién más esperamos?-
-a la señora Natasha-
-¿no pueden lanzar la bomba de una vez?-
-no Rhodey, tenemos que estar juntos, porque no repetiré esto mas de una vez. Sera un dolor de culo, hemorroide en verano o lo que sea para mí, y solo compartiré mi sufrimiento una sola maldita vez, y una sola maldita vez se reirán- el hombre de hierro siguió mirando su Tablet con la dona en la mano, sin importarle que manche su camisa blanca de seda.
Peter se mordió el labio, balanceándose en su sitio indeciso, mirando a cada miembro presente en la sala de estar de la base en el ala A.
Visión se veía tan tentador con ese ajedrez en la mesa, esperando algún contrincante, aun le sorprendía que volviera de la nada, con la apariencia humana que la roja androide. No era por ofender, pero si Visión fuera humano, se lo imaginaba como una versión flotante del Profesor X. Sam no sabía qué hacía, si mirar el cubo Rubik que tenía en la mano solamente, o calculando algún método de resolverlo con ecuaciones, porque se esta tomando su tiempo acostado en el sofá de cuero. Scott parecía el mas relajado, con los audífonos en sus oídos, escuchando Jonny Cash, cuanta envidia le tenia con ese MP3. El coronel si parecía algo tenso, con las prótesis de sus piernas vibrando por el movimiento impaciente de su pierna, al menos era buena noticia que las pudiera mover con los mismos hábitos. Su mentor seguía igual cuando llego, revisando algo en sus redes sociales y espolvoreando su camisa costosísima con la azúcar polvorizada de la dona. Clint se ha mantenido de lo lindo, sonriéndole a Tony de algo que él ya sabía, y el Alfa de manada solo lo miraba con odio, acuchillándolo con los ojos chocolate.
Una vez mas se pregunto si era correcto que estuviera aquí, según Tony, esto le concernía también, pero el ambiente incomodo de los 3 alfas le dada ansiedad, no ayudaba que el supuesto mediador estuviera igual que él, mejor se hubiera quedado con Pepper en el centro comercial, habían sacado a la venta su video juego que tanto había esperado.
-Ok, ya me cansé, para ese toqueteo en la mesa que me desespera- gruño el magnate, mirando acusador al mas joven, que no se había dado cuenta que golpeaba el mesón de mármol muy fuerte.
El millonario palmeo el puesto a su lado en el diván, con la expresión mueve tu culo aquí y no acepto replicas, que mejor cerro la boca y se sentó al lado de su maestro. El maduro se arremango la manga de la camisa, y froto su muñeca con la mejilla suave del omega, impregnándolo con su olor.
Peter agradeció el gesto, el aroma bajaba la ansiedad de la expectación, calmando un poco sus nervios. El aroma del dominante paso de agridulce a uno refrescante.
Tony miro con mala cara al coronel, por su falta de cumplimiento como mediador de la manada, ni podía calmar la ansiedad del arácnido.
El silencio volvió a reinar, excepto por el tictac del reloj de gato que Peter trajo para adornar la sala. La leve carcajada de Clint le dio a entender que estaba dirigida a Tony, que apretó la tablet en su mano, refunfuñando insultos al rubio. Sam parecía que quería mirar mas al reloj de gato que las prótesis del militar, incomodo con el sudor en la espalda.
Comenzó a recordar alguna dinámica en clases para romper el hielo, como la pin pon, el teléfono roto, o alguna cosa que los saque de una tranquilidad tan intranquila.
-puedo tocar mi nariz con la lengua-
Los presentes le miraron como si fuera algún bicho raro, y el omega comenzó a arrepentirse de lo que había dicho.
Tony bloqueo su tablet, suspirando por lo dicho del adolescente.
-Pepper en navidad me encadeno a una banca, dormí por cinco horas en la calle solo porque se me olvido darle el bono a Happy-
Si, sabia de sobra que alguien como Peter y siendo su casta tendía mucho a tener ansiedad por ambientes tensos, desde el inicio había notado la inquietud del adolescente. No sabía razón del porque le siguió el juego, pero ya se la había escapo de sus labios.
La carcajada de Rhodey comenzó a bajar la tensión entre los varones, sonriendo por tal estupidez.
-eso no es nada, tuve una cita de ciega con un urólogo. No fue tan genial, pero queda completamente seguro que no sufriré cáncer de próstata- conto el arquero.
-¿Qué? ¿alguien te metió el dedo por el culo? ¿Qué diría Laura si oyera esto? - sonrió malicioso el genio.
-no dirá nada porque el urólogo es su hermano, y ella misma también lo reviso- comento Sam.
-OHHH- abrió la boca en plano Scott.
-Maldito desgraciado-
-hablando de mujeres, yo te vi con Hope, está que arde hormiguita- comento socarrón el piloto.
-bueno, no tenemos nada serio ahora...-
-nada serio mis pelotas, estaba que se tragaba tu lengua ayer en la entrada-
-bueno, Hank ya me dio la luz verde, así que...-
-la conquistas, te la tiras y tienen 7 cachorritos, y todos vivieron felices para siempre-dijo arrogante Sam.
-ni tanto, no sé qué porquería tienes en la cabeza- negó Scott.
-no le digas nada de eso, sufre de eyaculación precoz, por eso aun no avanza a tercera base-burlo el arquero.
-señores, aquí no hablaremos de quien coge mas que otro que hay un niño presente, pero para su desgraciada suerte simples novatos, soy un dios caminando entre mortales- se señalo el millonario con maña.
-hasta que te amarraste las pelotas con alambre hace... ¿dos años?, ¿Qué pasa Stark? ¿estas tan viejo que no se te para? ¿a que farmacia vas a comprar? - se limo las uñas ojo de Halcón.
-nada que ver legolas, tengo 47 y sigo siendo dulce como el vino, entre más viejo más añejo y sabroso. Pero no hablemos de mí, las malas lengua hablan, que, entre más hijos, más problemas en el paraíso-
-OHHH-
-no hay nada de malo en mi matrimonio- frunció el ceño ofendido.
-eso no me dijo Laura ayer...- desvió la mirada a la izquierda, dándole un sorbo a su café.
-¿desde cuando te hablas con mi mujer? ¿de qué diablos hablan? -
-cosas mi querido flechitas, de cosas...-
-ya pareces de esas hacendosas- negó con la cabeza el coronel.
-hacendosa ya es lo eres mi querido amigo, ¿T'Challa no te tenía en un pedestal? ¿Qué paso ahora? Te vi lavando loza donde comió el gato en una foto que me envía anonimus. Lo peor, OMG, hecho a la ex y le grito perra, solo porque la encontró durmiendo en la cama del rey-
-¡¿Quién demonios deja que su ex duerma en su cama?!-reclamo el coronel con dramatismo.
Solo Tony y Scott alzaron la mano.
-la reina del drama. Ella estaba con ropa y era muy tarde en la noche, el gato tan malditamente caballeroso como es no la dejo irse tan tarde. ¿Qué no cogieron ustedes en la habitación de invitados? – interrogo el castaño.
-¿de qué demonios hablan enfrente del niño?- los saco del ambiente jocoso la pelirroja, entrando en la sala de estar.
Tony volteo la mirada hacia su lado, viendo al adolescente con la cara roja y sus manos retorciéndose.
Delicioso Tony...
-caballeros, a lo que venimos- el magnate abrió la carpeta de cuero en sus piernas, pasando las hojas grapadas en la mesita del café de cristal del centro.
-¿Qué es esto? ¿los acuerdos? - arrugo la nariz el rubio, recordando que por estas simples hojas habían desencadenado una tragedia.
-si y no. El concejo quiere tener a sus tres mosqueteros tan pronto como es posible, y el desgraciado de Barton cedió el puesto- gruño molesto al arquero.
-oh, asi que te consideraron, felicidades Tony-
-felicidades y una mierda, metete las flechas por el culo, ahora estoy obligado a ser director de la iniciativa- arrugo la nariz con desagrado.
Peter lo miro con los ojos de plato, y los demás solo se burlaron de su suerte.
-disculpa si no quiero que mis hijos entren en medio de una guerra- alzo las manos en señal de paz.
El de barba no pudo debatirlo, conocía los pequeños bartons de la familia, tampoco le gustaría incluir a niños tan jóvenes en medio de esto.
-como sea, para los de mi manada la situación es así; seré el nuevo director del grupo, Everett de asamblea y María de comité. La dinámica será la misma, no les pareció correcto los términos de los acuerdos en el último fallo, aunque tendremos algunos problemas pequeños si la cagamos otra vez, podría decirse que cadena perpetua-
-¿A eso le llamas pequeño? ¿Me quieres decir que otra embarrada como la guerra civil y de por vida vamos a la prisión?- Lang pregunto.
-no solo eso, también estarán considerando el nivel de daños que podríamos causar en la sociedad si no somos cuidadosos, la gente en verdad esta agradecida de nuestra protección, pero no de los destrozos que causamos a nuestro paso. Suena estúpido, pero es temporal-
-¿algo más?- hojeo Rhodey los términos.
-generalmente si, eso es todo. Si firman serán de nuevo vengadores activos bajo mi mando. Para los miembros del equipo de Steve, no están obligados a firmar, seguirán sus vidas aquí bajo libertad condicional, no podrás disparas siquiera una flecha o utilizar el traje bajos sus ojos, un exilio de ser héroe y vengador por así decirlo. En tu caso Lang, te pondrán trabas de nuevo con la custodia de tu hija- vio con algo de pena la mirada baja del beta, recordando a la dulce Cassie que reia en el aire.
-¿y que hay de mi señor Stark?-pregunto finalmente Peter.
Miro a su estudiante, llenando de aire sus pulmones y luego soltarlo con calma, con el chico no era nada fácil, su situación era mas complicada que del resto, pero se ha comprometido a meter la mano al fuego para que sea al mínimo.
-lo tuyo es complicado. Se revelará tu identidad tarde o temprano, así que ya no asistirás más a tu preparatoria- solto.
-¡¿Qué?! ¡¿en donde estudiare?!- pregunto escandalizado.
- aquí en la base, y Shield te graduara como cualquier otra persona, tu opción si quieres que traiga maestros privados aquí. Ahora déjame terminar... ¿estas al tanto de tu custodia cierto? -
-algo así...- ya sabía que May no estaba al día con sus papeles de tutora legal.
-bueno...mierda esto es difícil-se restregó la cara el genio.
-le quitaran la custodia del niño y se lo entregaran a Ross ¿cierto? – pregunto en afirmación la espía.
-si- se apretó el puente de la nariz.
-¿Ross?- no sabia el omega quien era Ross.
-el general malo Peter-aclaro el coronel.
-Oh... pero no me llevara ¿verdad? - pregunto esperanzado a su mentor.
El mayor solo desvió la mirada hacia el gran ventanal, pensando en lo que llevaría toda esta locura, y lo malditamente difícil que seria para el y para el niño.
-¿algo que confesar Tony?- levanto la ceja la femenina del grupo al magnate.
El resto miro con ojos entrecerrados al millonario, que parecía darle una migraña en este preciso momento.
-acepte ser director por el chico, y otras cosas más-
Peter lo miro mas perdido que nunca, ¿acepto ser director por él? ¿con que razón?
-¿le estan presionando de nuevo señor Stark?- visión por primera vez hablo.
-escuchen, yo no quiero ser director, pero me están amenazando con el niño y Pepper. En tal caso que no aceptara podrían fastidiarme la vida, posiblemente se desquiten con Rhodey, pero ambos sabemos que pasiva-del-rey no le importa su cargo porque tiene a un puto rey, y estoy tan podrido de dinero que no me molestarían para nada sus intentos. Pero la custodia del niño aun no fue avalada por la corte, May lo perderá y lo llevaran a un orfanato, Ross se relame. Con Pepper la acosarían, ella ha sufrido mucho últimamente, tampoco quiero que le pase lo mismo a Happy-
Peter miro el suelo, no creyendo lo que le harían a su tía y a la manada Stark.
-desde que iniciaste a ser vengador ha traído por así decirlo problemas graves. Peter, estoy dispuesto a aceptar, tu tía se unirá a mi manada y obtendrá tu custodia, hable con ella por teléfono ayer, esta de acuerdo en unirse, pero será ingresada a programa de protección a testigos y será reubicada cuando se sepa que tu eres el niño araña. Ross quiere meterte las manos encima, pero si tienes un vinculo con una manada oficial no podrá tocarte, eso sí...tendrás que dejar de vivir en tu apartamento-
Miro a su mentor, y luego al contrato. No tenia idea de que tan cruel podría ser el gobierno y el circulo de naciones unidas. Revelar su identidad podía ser un problema, pero no pensó más allá que hubiera gente con intenciones malas si caía en sus garras, tampoco que debía renunciar a la vida de Peter Parker en Queens. No lo deseaba, no quería separarse de May, de sus amigos, de su apartamento enfrente de la señora Jackson. Decirle el adiós a esa vida no quería hacerlo, le enojaba, le entristecía, odiaba lo que pasaba.
-¿no hay otra forma?-insistió.
-no, ya no hay vuelta atrás-
-pero...-
-peros no hay en esta situación, como héroe debes saber que siempre hay sacrificios que hacer-
-¡pero yo no quiero irme de mi casa!- grito enojado.
-cuida tu tono Parker- regaño.
-¡¿Cómo quiere que reaccione si me quitaran mi casa, a mi tia, mi vida!-
-¡¿y tu crees que yo quiero eso?! ¡es lo mejor que pude conseguir! -
-¡debe haber otra forma!- confronto al alfa.
-¡ya no hay tiempo! ¡abre los malditos ojos! ¡es el mundo real, no un maldito Comic!- grito enfureció, sintiéndose retado.
-¡entonces me voy!-
-¡¿y que harás Parker?! ¡¿huir con tu tía y maletas debajo de un puente?! ¡madura de una vez! ¡esto es lo que pasa cuando te pones una armadura o una máscara! ¡no es justo, pero es lo mejor que puedo hacer! ¡¿crees que porque soy adinerado puedo hacer todo?! ¡soy tu mentor, no una puta divinidad! - el tono de mando se le salió.
El mas joven se trago sus palabras, apretando sus puños, con el ardor en sus ojos aumentando y sorbiendo le moco, mostrando su cuello ante el mayor. Se sintió cansando, acorralado y sometido ante el poder de su maestro.
Ninguno dijo nada, en temor de agravar todo.
El magnate le lleno el arrepentimiento, mirando a Peter que se sometió a su mandato, sobándose el entrecejo estresado.
-ve a tu cuarto-
El joven se levantó corriendo del diván, escaleras arriba a su habitación.
Apenas Tony escucho el portazo soltó el aire pesado por la nariz, acariciándose la frente cansado, tenso y arrepentido por haberle gritado.
Él también le dolía, pero no podía ser más, el también busco mas opciones para que el omega siguiera su vida común y corriente, no involucrarlo mas en asuntos de adultos, pero lo hecho hecho esta.
-vaya que no se lo tomo bien- rompió el silencio el arquero.
-¿Qué esperabas? Es un cachorro todavía ¿Cuánto tiene? ¿14? ¿13?- Sam comento observando las escaleras.
-16 Wilson, ¿tú crees que no me es difícil tratar de comprenderlo? Se que no le gusta, pero es la mejor opción que pude conseguir. Ser guía de un mocoso es muy difícil. Solo... mierda, solo lean el maldito contrato, si les da la gana fírmenlo o quémenlo, yo iré a descansar, tengo dolor de cabeza- se froto las cienes, parándose del diván, escaleras arriba a su recamara. Paro enfrente de la puerta de la habitación del más joven, pensó que no era lo mejor por el momento confrontarlo, siguió derecho a la última puerta y dar el portazo.
Los restantes se miraron unos a otros, de hito en hito de al lado y luego el espacio de la firma aun en blanco. Los diferentes lapiceros y plumas finas en la mesa eran aquel instrumento que definiría la verdad de sus vidas en este momento, o la trituradora al lado del sofá, prendida y lista para hacer tiras el papel.
-yo no se ustedes, pero soy el único sustento de mi familia y necesito protección para ellos- el primero para sorpresa de la manda Stark fue Clint, tomando el lapicero negro en sus dedos, firmando fino y elegante. Lanzo el documento a la mesa y se levantó sin mirar atrás a la cocina por una lata, necesitaba pensar.
Rhodey y Visión no dejarían que Tony se subiera al hombro tal sacrificio por ellos sin compañía, sus contratos yacen firmados ahora en el montón de la mesa.
Natasha le dio igual, firmando otros años más de servicio.
Scott quedo solo en la sala, aun pensante de lo que haría. Vivir siendo vigilado no era vivir, ya tenia muchas condenas encima por su vida pasada de ladrón, perder a su hija no lo soportaría de nuevo.
Peter por otro aun pensaba que pasaría si firmaba ese acuerdo, muchos cambios bruscos en su vida darían paso. Al principio ser el amigable vecino fue como un juego, derrotando a los malos y ayudara a la gente pasar la calle, peor se había tornado serio con el buitre y la guerra civil, además de la amenaza de muerte de May por aquel villano padre de la chica con la que iba ir al baile. Solo era un chico de 16 que debería preocuparse el costo a entradas para ir a los temerarios. Pasada la ira de su cabeza, pensó que para su ídolo tampoco debía ser fácil.
Tony se removía en su cama, tratando de dormir en el colchón enorme de su habitación privada, con el sudor a flor a piel, apretando las sabanas con fuerza, el vientre subiendo y bajando con algo de velocidad, gruñendo al aire.
No lo dejes ir
Es perfecto
Debe ser nuestro
Pronto lo conseguiremos
El mayor apretó los ojos, tapándose los oídos ante las voces en su cabeza.
A cualquier costo Tony...
Siguió rodeando el borde de la taza, sintiendo la suavidad de la porcelana en sus dedos, viendo el poco café que había en el fondo, frio e inconfundible ahora.
No había podido dormir después de llorar un buen rato, pesando en las opciones y posibilidades, todo al alcance de un lapicero.
No quería renunciar a su vida de Peter Parker en Queens, le era difícil separarse de la rutina de las mañanas tocándole la puerta a la señora Jackson por Churros, el caminar a su preparatoria con Ned, las clases insufribles de castellano, tratar de lucirse poco en educación física, burlarse a las espaldas del profesor de historia, por último, salir con Michelle a comer Hot Dogs en el camino con el chico del carrito de siempre. Las salidas a las Comic Ons, los estrenos de las películas que faltan de Star Wars, las navidades con la familia de sus amigos en su pequeño apartamento, con la clásica comida estadounidense mezclada con la mexicana. Ser el amigable vecino, ayudando a pasar las clásicas abuelas la calle del demonio de la Mani Street, así como también detener robos y asaltos.
Un poder conlleva a una gran responsabilidad...
Si, también conllevaba a sacrificios, un héroe tenía siempre que hacerlos a diario, un vengador como lo eran el equipo no sabía cuántos remordimientos debían tener en su cuenta. Si, se arrepentía de haberle gritado al magnate, porque solo quería ayudarle de la mejor manera incluso si no se lo había pedido.
-¿mala noche?-
-si- murmuro sin quitarle la vista a su taza de café en la barra americana.
El arquero saco de la repisa de la cocina una caja de cereal con granola, vertiéndola en un plato con el agua hirviendo en la tetera. La fruta se picaba con rapidez y elegancia, las fresas hacían un buen adorno a los cereales con los pedazos de frutos secos alrededor.
-¿aun piensas en los acuerdos?- pregunto casual el rubio.
-es la causa que no pude dormir toda la noche señor Barton- se masajeo los ojos.
-por favor, llámame Clint, a estas alturas ya debes llamarme así niño- llevo el plato lleno a la barra enfrente del mas joven, con el café humeante al lado.
-¿desayuna a esta hora?- miro el reloj en la pared, las 3 y media de la madrugada.
-usualmente cuando en la mañana tengo que entrenar a los reclutas- encogió de hombros, llevándose una cucharada a la boca.
El sonido de las hojuelas siendo masticadas con el titac del reloj era un habiente algo tranquilizante, sintiéndose algo ameno con el alfa rubio.
-¿usted que piensa de eso?- se aventuró a preguntar.
-¿de los acuerdos?- hablo mientras masticaba, sacándole una carcajada al omega.
-no es justo...- murmuro Peter.
-claro que no lo es, yo pienso que es la mayoría de las veces una estupidez- mofo Clint llevándose a la boca otra cucharada.
-no firmo entonces...-
-por supuesto que firme, fui el primero en hacerlo- aclaro.
-pero usted dijo...- se sintió confundido.
-se lo que dije, ¿pero crees que un hombre debe tener mucha libertad? Tanta de esa es causa de muchas guerras niño, por eso existen las reglas, ¿creíste que por ser los vengadores haríamos lo que se nos de la gana? Aprobar misiones hay ciertos parámetros, hacerlas hay que seguir un líder, afrontar las consecuencias es definitivo, no importa cuánto escapes. Ser el hombre araña debe ser cool, pero no puedes hacer de las tuyas cada vez que quieras, una sociedad aun que no nos guste se rige por leyes, siempre ha sido así, para que la gente se sienta segura y probablemente en algunas ocasiones en contra. Un héroe sacrifica mucho, pero un vengador sacrifica también y vidas con ello-
-¿y usted por eso lo hizo?- pregunto con curiosidad.
-En gran parte, lo hice por mi familia para mantenerla a salvo, cuando hay seres queridos de por medio siempre hay sacrificios por hacer, estaré lejos de ellos la mayor parte, pero me tranquiliza saber que no serán acosados, no me separarán de ellos y ni me meterán a prisión, me basta con verlos algunas veces para yo estar conforme con ello. Soy el único sustento, siempre y cuando mi familia jamás pase hambre por trabajar, seguiré estando activo-
No lo sabía... pero era admirable ojo de Halcón por tener una causa tan noble.
-¿entonces debo firmar? ¿sacrificar por mi Tía? ¿mi vida? - pregunto con los ojos llenos de incertidumbre.
-¿crees que tu solo te estas sacrificando?-le contrataco.
-¿y no lo es?- pregunto en un gruñido. -dejaría mi vida atrás, ya no vería a mis amigos, no volveré a caminar por la calle sin que me señalen, no tendré una vida normal como Peter Parker, dejare a mi apartamento, dejaría de ver a May...- los ojos les sintió arder.
-supongo que eres igual de denso que Tony, nunca miran a su alrededor- negó con la cabeza cansado, sorbiendo el café caliente.
Peter frunció el ceño
-¿a qué se refiere?-
-¿no te has dado cuenta? Tu sacrificas eso es cierto, pero también los demás, tu tía está sacrificándose por ti, yéndose a no sé que mierda de lugar, con tal que no la utilicen en contra tuya, tus amigos deben ya haber aceptado que no volverás pronto, Tony acepto el puesto para no ponerte en riesgo, y déjame decirte que ser director es una mierda, te chupa la vida como un bastardo mosquito. No se porque, pero ustedes dos son demasiado parecidos, estúpidamente ciegos, ese idiota es capas de recibir una bala por ti, así que pregúntate ¿tú eres el único que sufre? También los demás hacen sacrificios por ti-
Nunca vio esa perspectiva, si lo pensaba más allá de los hechos frente a sus ojos, no era el único que sufría, se sitio culpable aun mas por haberle gritado al alfa, no dándose cuenta que olvido que él era una de las razones por las cuales hacia lo que hacía.
-maldita sea, debo disculparme-
-lenguaje- reprendió el arquero.
-¿Por qué usted puede decir groserías y yo no?- pregunto indignado.
-porque soy un adulto, y si no te corrijo menos lo hare con mis hijos, la vida es así, acostúmbrate- encogió de hombros, levantándose de la silla con los platos en la mano al fregadero.