Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Hombre o mujer?¿A quién prefieres? | JongKey por Blackcloud

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

KIBUM

 

Sentado en esa vieja banca de aquel solitario parque había vuelto ser Gwiboon, estaba dispuesto a todo para que esa sonrisa de cachorro me perteneciera solo a mí.

—Gwiboon ¿cierto?—escuché aquella voz que se me hacía tan familiar pronunciar mi supuesto nombre.

—Jong—le miré y sonreí fingiendo cierto asombro, él era la razón por la que me encontraba en ese lugar, porque sabía que él iba todas las tardes después de la escuela.

— ¡Wuau! no pensé que volvería a verte.

—Sí, yo tampoco—mentí.

—Debe ser el destino — ¿Destino? ¿A esto se le podía llamar destino?, no, creo que no.

Él se sentó a mi lado y yo seguí con la conversación.

— ¿Y que ha sido de ti después de esa tarde en el café?

—Han pasado tantas cosas...cosas realmente tristes—una media sonrisa y el dolor en que reflejaba su mirada hicieron que se me formara un nudo en la garganta ¿Era Amber la causante de su tristeza?—. Pero sabes, para qué hablar de eso ahora, hará que me ponga triste—sonrió de manera radiante como si todo lo que sentía minutos atrás hubiera desaparecido—Ah, casi lo olvidaba quería pedirte disculpas por dejarte sola esa tarde, no debí hacerlo, no fue digno de un caballero.

—Ah, no te preocupes—dije, tratando de mantener la compostura cuando sus amables orbes cafés me miraban de esa manera.

— ¿Enserio?, ¿no quieres que te de nada a cambio? ¡Haré lo que quieras, lo juro! —elevó su mano derecha en signo de promesa.

—Eh, no sé, quizás, déjame pensar—toque mi barbilla tratando de pensar algo— ¡Ya sé! , ya que mi escuela queda cerca de este parque ¿por qué no nos encontramos mañana aquí a la misma hora?

—Bien, me parece justo—sonrió

Conversamos bastante tiempo de muchas cosas, estupideces sin sentido que me sacaron más de una risa, inclusive cosas de él que ya sabía de memoria. Me sentía realmente feliz estando a su lado, aunque no fuera como yo realmente quería.

El atardecer se hacía presente, mi celular vibraba como loco, de seguro era mi madre, pero no me importaba. Estando así, perdido en sus ojos y en esa hermosa sonrisa que hacían corazón latir inmensamente, era lo único que necesitaba.

El frio aumentaba a cada minuto, comencé a tiritar, él lo noto, se sacó su chaqueta y la puso sobre mis hombros, me estremecí cuando el dulce olor de su perfume inundó mis fosas nasales.

—Creo que es tiempo de irnos—dijo, yo solo asentí.

Caminamos juntos hasta la avenida y nos miramos unos segundos hasta que me decidí a hablar nuevamente 

—Bueno, hasta mañana—dije con dificultad ya que mi labios se habían helado un poco— .Y recuerda nuestro trato.

—Claro Gwiboon—comenzó a acercarse lentamente hasta que sus labios rozaron mi frente ¡AHH! su cálido beso me hizo delirar— .No lo olvidaré.

¡ESE HOMBRE ME VOLVÍA LOCO!

 

[]

 

Iba de camino a  casa, cuando recordé que estaba vestido como niña ¿¡Qué diría mi madre si me viera así!? Seguro se escandalizaría, pero Kibum siempre tiene un as bajo la manga

Toque el timbre de esa casa, dos amigables cachorros miraban por la ventana, alcé mi mano para saludar a Jackjack y Gongju, ellos movieron la cola ansiosos, de seguro ya sabían quién era yo realmente, entonces anote mentalmente: Nunca subestimar la inteligencia de un perro. Segundos más tarde, la señora Liu salió a recibirme.

— ¿Sí?—preguntó

—Hola señora Liu—hice una reverencia— ¿Se encontrará Amber?, quisiera hablar con ella, por favor. 

—Claro, pero ¿Quién eres pequeña?

—Ah, perdón por no presentarme, soy Kim Gwiboon, una amiga de su hija—volví a hacer una reverencia.

—¡Ay! Pero que adorable niñita... ¡Amber!—gritó—.Una de tus amigas está aquí, ¡baja!

— ¡Allá voy!—gritó Amber, de seguro se le caería la cara después de verme de esta forma.

—¿Quién ha venido a verme mamMAAH?—gritó— ¡Gw-wi-bo-on! ¿Qué haces aquí?—preguntó nerviosa.

—Sólo pase a verte, necesito decirte algo—guiñe un ojo para que captará mi señal.

—Amber ¿porque no la llevas a tu habitación?, hace mucho frío allá afuera.

—Claro mamá.

—Con permiso—apenas entre por la puerta ambos cachorros se abalanzaron sobre mí esperando que jugase con ellos.

— ¡Jackjack! ¡Gongju! ¡Vengan aquí! — gritó la madre de Amber —. Creo que les caíste bien.

—Sí, así parece—sonreí nervioso y me dispuse a seguir a Amber por las escaleras, quería reírme, todo lo que estaba pasando era muy gracioso.

Llegamos a su habitación y lo primero que hizo fue cerrar la puerta con pestillo

— ¿¡Cómo se te ocurre venir "así"…—apuntó a mi ropa—…hasta mi casa!?

—Jajaja—no podía parar de reír— .Necesito tu ayuda, no puedo llegar vestido "así"—apunte a mi ropa también—. A mi casa.

— ¿Por qué no trajiste ropa para cambiarte?

—Lo olvide.

—Que idiota eres ¿y qué quieres que haga?

—Que distraigas a mi mamá, mientras entro por la puerta de la cocina.

— ¡Ahhh Kibum!—refunfuño mientras se ponía un abrigo y un beanie sobre su cabeza— .Oye, esa chaqueta es nueva—dijo mirándome fijamente—.Nunca la había visto.

—Ah sí, es que la compre hace poco — no sabía porque le había mentido.

—Me gusta, es linda—no le dio más importancia al asunto—. Bueno, vamos a tu casa antes de que se haga más tarde.

— ¡Vamos!—sonreí. De alguna u otra forma, siempre conseguía lo que quería.

Salimos de su casa y nos dirigimos a la mía.

Cuando llegamos, Amber tocó el timbre, mientras yo me dirigía a la parte trasera.

— ¡Amber!—escuche la voz de mi madre— ¿Qué te trae por aquí? 

—Hola señora Kim—contestó.

Esa fue la primera vez que agradecí que mi madre fuera tan despistada, había dejado la puerta de la cocina sin seguro. ¡Suerte la mía! Abrí la puerta, me saque los zapatos y entre en sumo silencio.

— ¿E-está Kibum?—la voz de Amber se escuchaba nerviosa, definitivamente no era buena mintiendo.

—No, él no está, de hecho iba a llamar a tu casa para saber que estaba contigo, pero ya veo que no.

Me acerque a la escalera y comencé a subirla, despacio, y le hice una señal a Amber para que se fuera.

—Bueno, gracias señora Kim, que descanse.

—Igualmente.

Estando ya en el segundo piso, entré a mi habitación, cerré la puerta y comencé a cambiarme de ropa.

La peluca fue lo primero que saque, picaba si la tenía mucho tiempo puesta.

Me miré al espejo y recordé que aún llevaba la chaqueta de Jong puesta, suspiré y sonreí involuntariamente, ese día había sido maravilloso y lo recordaría siempre.

— ¿¡Kibum!?—escuché la voz de mi madre— ¿Estás allá arriba?—ahora sus pasos sobre la escaleras, debía cambiarme ultramente rápido— ¿Kibum?, ¿¡Kibum!?— la perilla de la puerta giraba lentamente, así como en la películas de terror, entonces la puerta se abrió. —Kibum donde... —se detuvo abruptamente cuando encendió la luz—.Ahhh...así que estabas durmiendo—hacerse el dormido, ja, que viejo truco—.Descansa hijo—sentí sus labios tocar mi frente, qué alivio, lo peor ya había pasado.

Esa noche dormí feliz, como no lo había hecho en años.

 

 

Notas finales:

¡Gracias por leer!

¿Te gustó el capítulo? Deja un comentario


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).