Era un día normal en Howarts como cualquier otro. Frio y ventoso, que obligaba a sus alumnos a usar bufanda y gorros. Aunque eso no impedía que cierto Slytering anduviera furioso por los pasillos. Parecía que en cualquier momento echaría fuego por la boca y no era para menos ya que había visto a su presunto novio “el chico que vivió” o “el elegido” muy cariñoso con esa comadreja de Gini Weasley que coqueteaba descaradamente con él.
Hace mucho que habían dejado la rivalidad entre casas gracias a que el DIRECTOR había hecho una dinámica de integración donde tuvieron que convivir dos semanas en una sola casa común.
Ahí Harry y Draco habían descubierto que tenían más cosas en común que diferencias que los separaban. Por lo qué decidieron ser amigos. Luego de un tiempo descubrieron que sentían entre ellos mucho más que una amistad. Y luego de muchas idas y vueltas por parte de ambos decidieron estar juntos, lo cual fue un poco difícil al principio ya que no todos habían aceptado su relación de buenas a primeras. Pero ahora ala fin estaban juntos y él lo encontraba muy cerca de la comadreja hablando animadamente mientras la chica le tocaba el pelo y le sonreía descaradamente.
-no puedo creerlo – murmure- es un estúpido. Trataba de no llorar de pura rabia
-Draco, espera –hablando del rey de roma- Draco no es lo que piensas
No detuve mi paso, es más camine más rápido para llegar a las mazmorras y dejarlo hablando solo.
-Espera Draco-dijo tomándome de las muñecas y dándome vuelta para que lo enfrentara –tranquilízate un poco ¿quieres?
-que me tranquilice –dije –claro porque puedo estar muy tranquilo mientras tu vas por ahí coqueteando descaradamente con todo lo que tenga piernas
-estas celosito ¿no?- me dijo con diversión-no debería sorprenderme, siempre lo has sido
Su diversión no hacía más que molestarme
-estás loco ¿Cómo piensas que voy a estar celoso de esa niña? –Refunfuñe- no estoy celoso
-no te creo- me dijo con una sonrisa de medio lado que lo hacía ver muy sexi
-no me importa lo creas- le dije muy seguro tratando de no derretirme ante sus ojos verdes-solo sé que no seré el torpe que se queda viendo mientras coqueteas con otros
-Draco – me explico suavemente como si fuera un niño – solo estábamos hablando, además Gini tiene novio.
Me sujeto con más fuerza de la necesaria
Además en serio crees que podría engañarte, yo te quiero
-no te creo-le dije
Me empujo contra la pared, con una mano sostenía mis muñecas y con la otra agarro mi cintura y me pego a su cuerpo.
-¿no me crees?-susurro contra mis labios –quieres que te lo demuestre
Mi cuerpo se puso a temblar irremediablemente mientras sentía como todo mi cuerpo se acaloraba
-estas temblando- me susurro en un oído riendo
-no es verdad-dije tartamudeando-solo…solo tengo frio
-pues yo estoy bastante caliente, pero aun no me has respondido ¿no quieres que te lo demuestre?
-no me hagas esto por favor –susurre contra sus labios
-no te hago nada Draco- me respondió –solo demostrarte lo mucho que te amo
Tomo mi nuca y estampo sus labios contra los míos en una caricia suave al principio pero que luego se tornó en un beso voraz y salvaje que me robaba el aliento. Mordió mis labios para que habrá mi boca y cuando nuestras lenguas se encontraron no pude evitar soltar un gemido de puro gozo. Nuestras lenguas se enredaron y cada uno luchaba por llevar el control del beso, pelea que él estaba ganando con creces. Nuestros labios se movían uno contra el otro con furia y deseo. Quería seguir así toda la vida pero nos tuvimos que separar por falta de aire
-espero que esto te haya demostrado que te amo solo a ti-me sonrió-sino tengo otra forma más para lógralo
-¿Y esa cual sería?-le pregunte sonriendo nuevamente
-ven que te la demuestro
Solo pude sonreír y dejarme llevar, después de todo yo era esclavo de sus besos