Ambos estaban callados, viéndose a los ojos fijamente en un profundo silencio, pero no era uno incomodo, al contrario, era uno donde no hacía falta decir nada más. Lentamente sus rostros se fueron acercando, Kakashi llevo su mano a su máscara para deslizarla hacia abajo dejando al descubierto su rostro.
Tenzō se estaba dejando llevar por el momento, la respiración cálida de Kakashi chocaba con la suya, ¿aquello era real o un sueño? No creía que realmente estuviera pasando, pero si era un sueño tampoco es que quisiera despertar. Cerró los ojos y entonces, la puerta principal se abrió de golpe.
-¡Llegue!-grito Naruto entrando provocando que ambos se sobresaltaran, el niño se quitó las sandalias-¡¿dónde están?!-grito mientras corría por la casa para ir hacia la habitación-¿ya es hora de dormir?-trepo rápido la cama para saltar y colocarse en medio
Ambos estaban sonrojados, Tenzō sentía como su corazón latía demasiado rápido, como si hubiera corrido a una gran velocidad por un largo tiempo, estaba a nada de salirse de su pecho.
-¿Qué tal te fue?-pregunto Kakashi sonando levemente nervioso
-Muy bien, Iruka-sensei me compro un enorme tazón de ramen y-Naruto se giró a verlo, finalmente pudo verlo bien, sus ojos se abrieron con sorpresa
-¿Pasa algo?-pregunto el Hatake confundido, se podía observar el sonrojo en sus mejillas y aquel lindo lunar bajo su labio, tardo en darse cuenta que había olvidado subirse la máscara de nuevo
-No, nada-dijo Naruto girando su mirada hacia otro lado, ahora él también tenía las mejillas rojas, ¿era posible que alguien se viera así de bien? En su imaginación había creado rostros posibles bajo la máscara, creía que Kakashi la usaba para ocultar algo vergonzoso, quizá dientes enormes como los de un conejo, labios pequeños o extremadamente grandes.
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Naruto quedo dormido después de un rato, Tenzō estaba en la cocina comiendo, seguía procesando lo que había ocurrido. Kakashi era lo que consideraría su primer amor, así que aún no sabía cómo sobrellevar que este le hubiera correspondido.
Kakashi estaba recostado con Naruto, él se encontraba reafirmando lo que había dicho. Sabía que últimamente sentía algo por el castaño, se preocupaba demasiado cuando salía de misiones, había tenido ya varias discusiones con otros miembros de su equipo Anbu que casi llegaban a los golpes por defender a su pequeño Kōhai, se había enamorado también de la forma paternal en que trataba a Naruto, le parecía tierno su rostro frustrado cuando ayudaba al niño con la tarea y no lograba explicarle bien un tema. Ahora estaba seguro de algo, Tenzō no le gustaba, le encantaba, estaba enamorado de él.
Le gustaban leer novelas románticas, algo eróticas pero románticas, quizá era el momento de que dejara de ser espectador y vivir su propia historia de amor. Soltó un largo suspiro y cerró los ojos llevando uno de sus brazos sobre Naruto en forma de abrazo.
Tenzō termino su cena y se dirigió hacia la habitación apagando todas las luces que encontrara en su camino, había sobre analizado la situación y ahora estaba pensando << ¿Y si Kakashi solo le correspondió para no hacerlo sentir mal?>>, había escuchado muy seguro a su senpai, pero por alguna razón ahora dudaba un poco, quizá al final si era un sueño. Como de costumbre se recostó al costado libre al lado contrario del Hatake dándole la espalda, cerró los ojos para buscar dormir cuando sintió el brazo de Kakashi sobre de él.
-Tenzō, ¿mañana podemos seguir hablando sobre lo de hace rato?
-Está bien senpai-respondió tranquilamente, aunque el sonrojo había regresado a sus mejillas, su senpai lo estaba abrazando, era solo su brazo extendido, de esa forma también cubría al pequeño Naruto, pero aunque pareciera poco, sentía la calidez de ese gesto. Eso definitivamente no era un sueño.
La noche pareció haber durado un instante, fue tan rápida como si en un parpadeo ya hubiera amanecido. El pequeño rubio como siempre estaba en una posición desacomodada, un brazo encima de Kakashi, una pierna sobre Tenzō, las primeras semanas le habían molestado, pero ahora ya estaba acostumbrado. Se levantó aún somnoliento a preparar el desayuno y el almuerzo del niño.
Naruto rodo en la cama dándole un golpe en el rostro al castaño despertándolo, ya debían iniciar un nuevo día.
-Arriba enano-dijo mientras movía al niño
-5 minutos más-contesto rodando hacia otro lado
-vamos, o llegaras tarde
-Papá siempre lo hace, no hay problema
-Nada de no hay problema, debes levantarte-dijo moviéndolo de nuevo, más tarde tendría una charla con Kakashi otra vez sobre la importancia de enseñarle ser puntual a Naruto
-Está bien-Naruto se sentó en la cama para estirar sus brazos mientras soltaba un largo bostezo
Los días del pequeño habían cambiado drásticamente, antes era despertar para desayunar cualquier cosa que encontrara en la nevera, luego salía a hacer una que otra travesura para después ir hacia la academia y al final del día regresar a su solitaria casa. Ahora se levantaba para desayunar junto a sus papás, a veces era solo con uno, pero siempre acompañado, tras eso lo llevaban a la academia, si salía temprano iba al parque a jugar con sus amiguitos para ser recogido ahí, ya no regresaba a un departamento vacío, ahora lo hacía a aquel lugar que llamaba “hogar”. Cuando estaba Kakashi pasaban un rato juntos leyendo algún libro sobre héroes, si estaba Tenzō hacían algo de jardinería y manualidades juntos. Si estaban ambos mayores iban a Ichiraku ramen a cenar o a dar un paseo por la aldea, ya no tenía tiempo para las travesuras que molestaban a los aldeanos, ahora estaba ocupado con sus padres.
Tras desayunar y llevar a Naruto a la escuela, ambos mayores regresaron a la casa, fueron a su sala sentarse frete a frente. Tenían mucho de qué hablar, pero ninguno sabía por dónde empezar, hasta que finalmente uno aclaro sus ideas, soltó un suspiro y comenzó.
-Escucha Tenzō, lo de ayer, quizá lo hayas sentido muy repentino después de que tú me lo dijiste, y después de pensarlo estoy seguro de que lo que dije fue un error porque no creo que me gustas, yo en verdad te quiero y aprecio mucho, ya no solo como compañero, sino como algo más
-¿Algo…más?
-Sí, ¿quieres ser mí novio?
-Oh…senpai, ¿está seguro de eso?
-Por supuesto que sí, Tenzō, antes de que llegaras era un triste hombre deprimido siempre, ¿Quién iba a querer estar con alguien como yo? Después de todo lo que ocurrió con Danzo, nos hicimos más cercanos, tú no tuviste miedo de estar cerca de mí
-¿Por qué lo tendría?
-Porque soy un mata amigos
-Senpai, tú me explicaste lo que paso, no eres un mata amigos
-Porque quisiste escuchar la verdad de eso, realmente dudo que encontrare a alguien como tú de nuevo, eres más que un compañero o amigo Tenzō, incluso con lo de Naruto aceptaste en ayudarme y me has apoyado en todo esto. Tu compañía me hace realmente bien, me has ayudado a salir del hoyo donde estaba-Kakashi hizo una leve pausa para tomar aliento- entonces, ¿qué dices?
-Si, si, si-Tenzō no pudo evitar lanzarse sobre Kakashi para abrazarlo, su senpai le había ayudado mucho, el saber que él pudo hacerlo incluso sin darse cuenta lo hacía feliz. No le estaba correspondiendo por no hacerlo sentir mal, tenía razones para quererlo también.-pero, espera-se separó bruscamente del abrazo-¿puedo seguir llamándolo senpai?
-Sí, no voy a dejar de ser tu senpai, que seamos pareja no va a cambiar eso
-Oh, senpai-el castaño lo volvió a abrazar con fuerza –ahora podremos hacer esas cosas que leemos en los libros-dijo de manera alegre
Kakashi se sonrojo-eh… ¿a qué tipo de cosas te refieres? –Leían en su mayoría libros eróticos, acaso se refería a “esas cosas”, apenas le había dado el sí, no era posible que ya pensara en eso
-Pues salir juntos tomados de las manos, tener citas, cenas románticas, ese tipo de cosas-respondió emocionado para soltarlo y regresar a sentarse frente a él
El Hatake suspiro, Tenzō seguía siendo un alma inocente a fin de cuentas.
-Debo hacer unas compras, ¿me acompañas?-pregunto levantándose para ir hacia la salida
-Pensaba descansar un poco más el resto del día-contesto el castaño recostándose en el sillón
-te compro algo-añadió Kakashi mientras se ponía su calzado
-Pero si insistes, te acompaño senpai-Tenzō se levantó rápido para ir tras él
Ambos caminaban por la aldea platicando tranquilamente, a lo lejos eran observados por cierto azabache de cejas pobladas. Tenía curiosidad sobre el amigo castaño de Kakashi, sabía que era su compañero de anbu y que compartía su casa con él, pero su rival era demasiado reservado respecto a él, aunque parecían ser muy íntimos, ¿acaso era él quien estaba ayudando a Kakashi a salir de la oscuridad? Tenía varias dudas, y estaba ansioso por respuestas