Capítulo 14.- Lejos de los ojos, lejos del corazón
Ikky salió de la ducha con una sonrisa en los labios, no podía creer que estuviera en el hotel Venetian de Macao, el peliazul había tenido un largo día, y luego del vuelo de cuatro horas si estaba cansado pero no le podía decir que no a los planes de Seiya, que había reservado una mesa en uno de los restaurantes del hotel
- Cuéntame otra vez cuál es el plan – pidió Ikky empezándose a vestir
- Ohhhhh son dos días de decadencia y festejos totales, hoy empezamos con una cena, no vamos a hacer nada más y la cena no es con las demás personas, es una cena íntima solos tú y yo, mañana vamos a ir por el hotel, vamos a un paseo en góndola, y nos vamos a relajar en la piscina, en la tarde nos vamos al casino y en la noche ya tengo reservada la megamesa para todos en un show con música en vivo y todo, mañana, tenemos día de spa en donde nos van a dar un masaje relajante, tenemos un city tour en bus, almorzamos en un restaurante del centro y tarde ya nos vamos al aeropuerto – Seiya ya estaba vestido y abrazó a Ikky para besarlo con pasión en los labios
- Este es el mejor cumpleaños de mi vida, ¿cómo diablos la planeaste todo si has pasado tan ocupado?
- Ohhhh… Aioria y Shaka ayudaron, ellos son los que me dieron los contactos, Shaka me dio la lista de invitados y los contactos de todos en el hospital, y con Aioria lo planeamos todo, ya sabes que mi tío te ama y le gustó mi idea
- Lo sé, pero de Shaka no me lo esperé la verdad – Ikky se sorprendió, Shaka era uno de los médicos tratantes más jóvenes, por eso era con el que más congeniaba pero el rubio era sumamente serio, entonces no le cuadraba que fuera el del plan, Aioria si, él era otro de los médicos tratantes del hospital y era tío de Seiya, él y su esposa eran geniales y ellos si eran aparentes para planes fiesteros
- Shaka es tu mejor amigo del hospital, él fue el que ayudó cambiando los turnos de todos y con la demás logística, él era uno de los más emocionados por venir – aclaró Seiya pasándole las mancuernas a un novio
- Él también está estresado, por semanas ha dicho que le hace falta unas vacaciones, es una pena que Shun no esté aquí
- Él llega más tarde, ya me confirmó que subió al avión, no te preocupes que él viaja con Shyru y su esposa, todo está calculado mi amor, la vamos a pasar genial – Seiya sonreía despreocupado y emocionado, así que ayudó a abotonar la camisa de su novio porque no quería demorar más la cena, ambos tenían hambre en este punto
- Así como me estás vistiendo ahora, ¿me desvestirás más tarde? – Ikky abrazó a Seiya y lo besó en el cuello
- Todo para mi cumpleañero favorito, pero debemos apurarnos o vamos a perder la reservación, vamos… - Seiya le alcanzó el saco a Ikky que se lo puso y salieron rápidamente de la habitación
El hotel era lujoso, era algo que Ikky no había esperado, Seiya seguramente se endeudó o ahorró para poder hacer lo que estaba haciendo, entonces le debía a su castaño el aprovecharlo todo al máximo, en el elevador la pareja se besó suavemente y luego caminaron por los amplios pasillos hasta llegar al restaurante más grande del hotel, este tenía varios restaurantes y salones con eventos y shows. Los llevaron a su mesa y luego de pensarlo solo un poco hicieron su orden, Seiya ordenó una botella de champagne y cuando la trajeron, brindaron por su cumpleaños
- Te amo, y amo que hayas hecho todo esto por mi, no te merezco la verdad sea dicha – Ikky alzó su copa y Seiya sonrió
- Claro que me mereces, yo te merezco a ti y te amo con todo el corazón, estoy tan feliz de estar aquí contigo pollito, feliz cumpleaños – Seiya alzó su copa y la chocó con la de Ikky en su brindis
- Gracias amor, gracias, esto es tan genial – el peliazul bebió su copa y volvió a llenarla al igual que la copa de Seiya
- Me alegra que te haya gustado, y este es solo el inicio, ¿quieres bailar?
- Me encantaría
Ikky tomó a Seiya de la mano y fueron hasta una pequeña pista de baile, que estaba junto a un piano que tocaba melodías suaves, esta fue la razón por la que Seiya había elegido este restaurante, así que la pareja bailó suavemente al ritmo de la música, al inicio eran solo ellos dos en la pista, pero luego se les unieron algunas parejas, entre ellas estaban Aioria y su esposa Marin que al parecer también habían reservado su cena en este restaurante
La comida estuvo deliciosa, Ikky y Seiya la disfrutaron enormemente, luego bebieron más de su champagne, bailaron otro ratito, Aioria le pagó al pianista y les dedicó una canción la que bailaron, fue una noche mágica en muchos aspectos, Ikky nunca se había sentido tan feliz como esa noche, a sus criterios las estrellas se alinearon para traerle felicidad, y eso fue obvio para él al bailar suavemente con Seiya en sus brazos
Al regresar a la habitación, la pareja llegó a la cama entre besos y caricias, Ikky fue desnudando a su castaño y lo acarició con mucha ternura, como si fuera la primera vez que lo hacía, se estaba tomando su tiempo en estimularlo, le encantaba tener a Seiya cual pudín en la cama, con los ojos cerrados y llamándolo por su nombre en éxtasis, y eso fue lo que consiguió esa noche, le hizo el amor como mandan todos los dioses, le dijo entre susurros que lo amaba, que nadie lo había feliz como era ahora, que quería permanecer para siempre a su lado
Seiya se durmió con una sonrisa en los labios, el mejor sexo de su vida lo estaba teniendo ahora y era básicamente porque estaba profundamente enamorado de Ikky, este sentimiento lo abarcaba todo y los había cambiado a ambos
Shun llegó a la madrugada a Macao, fue directo al hotel, se registró, se duchó, pidió algo de comer y luego de enviar un muy corto mensaje de texto a Hades avisándole que había llegado vivo a su destino, se acostó y casi inmediatamente se durmió, ese día había sido por demás cansado. A la mañana siguiente lo despertó la llamada a su habitación, era Seiya el que quería ir a desayunar todos juntos, Shun tuvo que lavarse el rostro para despertarse del todo, se vistió y bajó al salón del desayuno buffet, ahí vio una mesa grande en la que estaban los amigos de Ikky del hospital, ahí estaba Seiya charlando con su tío Aioria, era una mesa por demás bulliciosa
- Shun!!!!!, llegaste hermanito – Ikky se levantó cuando vio llegar a su hermano, Shun caminó directo hacia él y se dejó abrazar, Ikky lo estrechó contra su pecho y besó su frente
- No me lo podía perder por nada, buenos días a todos, ¿soy el último en bajar?
- No, Shyru y Shunrey tampoco reviven aún – respondió Aioria con una sonrisa
- Es que llegamos casi a las 3 de la mañana, voy por un café, necesito uno cargado – Shun respondió todo amable, pero en este punto de la mañana si necesitaba un café, Ikky tomó su taza y dijo:
- Yo voy contigo porque me hace falta otra taza
- Vamos pues… ¿cómo así tan sonriente eh? – Shun caminó con Ikky hacia la barra en donde estaban todos los platillos, cafeteras, jarras de jugos y demás alimentos disponibles para el desayuno
- Ohhhh a diferencia tuya yo pasé muy buena noche, amo a ese castaño pícaro y divertido, es perfecto para mi – Ikky regresó la mirada y vio a Seiya reír a algo que había dicho su tío
- Y él te ama a ti, cualquiera que tiene ojos lo podría ver, me alegro tanto que el amor funcione para ti y Seiya esté en tu vida – Shun apretó la mano de Ikky que sonrió y abrazó a su hermano con un solo brazo, lo besó en la cabeza y le dijo:
- El amor también te va a sonreír a ti también, ¿qué tal te fue en la terapia?
- No lo sé, sabes que yo no creo en eso, me agradó el terapista pero no sé… no creo que alguien que no me conoce ni sabe nada de mi vida tenga calidad moral de opinar sobre mis decisiones o sentimientos
- No lo veas así, míralo como una persona que tiene una visión fresca y te puede ayudar con tus problemas, a veces lo que uno necesita es una opinión desde fuera, te veo estresado hermanito, no me gusta verte así, el amor debería traer alegría a tu vida, no preocupación, ¿no lo crees? – Ikky se sirvió su taza de café mientras Shun ponía fruta en un plato
- Eso es lo que pensé que encontré con Hades, pero todo se me complicó con Apolo, es… soy un estúpido Ikky, eso es lo que pasa, debo dejar de ver televisión y pensar que las soluciones fáciles arreglarán todo en mi vida sin estropearlo todo primero – Shun suspiró y tomó un rollito de canela
- No eres un estúpido, las cosas pasan por algo, y toda consecuencia tiene una causa, yo te conozco Shun, sé muy bien quien eres y por eso me sorprendió tu decisión de salir con varias personas a la vez, eso no necesariamente está en tu naturaleza, ¿te has puesto a pensar la razón de ello?, ¿eso te preguntó tu terapista?
- Aún no, pero no dudo que lo haga, odio pensar en las respuestas de pregunta existenciales, eso tampoco va conmigo y me niego a hacerlo el fin de semana de tu cumpleaños, mi terapista lo que me recomendó es que me divierta y eso es precisamente lo que voy a hacer, feliz cumpleaños Ikky, espero que cumplas muchísimos años más, todos con salud y felicidad y junto a mí, no sé qué sería de mi vida sin ti, es más… no me imagino mi vida sin ti – Shun dejó el plato de fruta en el mesón y abrazó a su hermano que le devolvió el abrazo con fuerza, esos hermanos en verdad que se querían mucho, Ikky conmovido contestó:
- Eres el mejor hermano que podría haber tenido, te quiero con toda el alma Shun, y yo tampoco imagino mi vida sin ti, y si tu terapista te recomendó divertirte pues… es exactamente lo que vamos a hacer, Seiya me habló de un paseo en góndola, ¿hay góndolas aquí?
- Dentro del hotel si, en la ciudad no, tu novio se lució la verdad
- Ohhhh si… me voy a casar con él – Ikky regresó la mirada y sonrió al ver a Seiya charlar con Aioria, él ya había pensado esto desde hace algún tiempo, pero en este fin de semana fue por demás evidente, Seiya era el hombre de su vida, ya no había más vueltas que darse
- ¿Este fin de semana? – preguntó Shun atorándose con el café
- No… pero me voy a casar con él, y tu me vas a ayudar a buscar los anillos, vi una joyería en el lobby del hotel, no sé si sea una buena idea proponérselo este fin de semana o hacerlo en casa, ¿qué dices tú?
- En casa mejor y lo planeas muy románticamente, no mezcles las cosas, festeja tu cumpleaños y luego se lo propones, ohhhh Ikky, te vas a casar, estoy tan feliz por ti – Shun abrazó de nuevo a su hermano y en verdad que estaba feliz por él, Seiya era uno de los buenos
- Y no te preocupes que no te voy a botar de la casa, pero debemos buscar un departamento más grande, si ya me ascienden en el hospital lo podrá costear, ohhhh ya sé cómo proponérselo a Seiya, y tú me vas a ayudar
- Lo que necesites hermanito, lo que necesites – Shun asintió todo entusiasmado, por lo menos la vida le sonreía a uno de ellos, eso era bueno
Luego del desayuno el ameno grupo de nueve fueron por el hotel, el paseo en góndolas estuvo increíble, este hotel tenía una réplica de Venecia en el que se podía caminar por sus calles y siempre era de día, todo esto le pareció increíble a Ikky que tomado de la mano de su novio disfrutó como nunca el paseo. En las góndolas, iban cuatro personas por bote, eso dejó fuera a Hyoga, él era otro de los médicos internistas que había ido al viaje, a él no le agradaban los botes así que no hubo problema, y dos botes llenos disfrutaron del romántico paseo, lo que dejó a Shun sentado junto a Shaka, no hubiera sido su primera opción pero no le quedó más remedio, en el otro bote estaban Ikky con Seiya, y Aioria con su esposa Marin, en este bote estaban Shyru con su esposa Shunrey, los solteros del viaje eran Hyoga, Shaka y Shun
Luego del paseo en góndola, disfrutaron de un snack de media mañana antes de ir por las piscinas del hotel, eso fue cosa de otro mundo, las instalaciones tenían todas las comodidades, Shun decidió ir a la piscina grande, porque en el Hidromasaje estaban dos de las parejas de su viaje y no estaba de ánimo de ser la quinta rueda
Luego de nadar un poco, el muchacho de ojos verdes se recostó en una de las cómodas bancas junto a la piscina y ordenó un coctel, iba a disfrutar del sol de la mañana y descansar, su descanso solo fue interrumpido por una llamada telefónica de Milo que quería saber si le había enviado los últimos archivos de su proyecto a su correo, al parecer iba a trabajar el fin de semana con Julián, Shun le dijo que si, que la última versión se la habían enviado y luego de desearle éxitos en sus trabajos de fin de semana colgó con una sonrisa el teléfono
- ¿Hablando con el novio?, ¿por qué no lo trajiste? – era Shaka el que se había acercado a él y se había sentado en la silla de junto
- No… hablaba con mi jefe, al parecer va a usar de excusa nuestro proyecto para irse de revuelque el fin de semana, espero que le vaya bien, no ha tenido mucha suerte en el amor últimamente – Shun se acomodó de ladito para poder hablar con Shaka que se acostó en la banca y tomó un sorbo de su propio coctel y preguntó interesado
- ¿Por qué no?
- Porque le gusta Seiya, pero como podrás darte cuenta, Seiya no le da ni la hora – Shun señaló el área del hidromasaje en donde se podía ver que en una de las pequeñas piscinas estaban solos Ikky y Seiya y se estaban besando suavemente sumergidos en el agua caliente
- Ohhhhh que mal ojo de tu jefe, tu amigo está completamente enamorado del mío, me alegro por tu hermano, ya se merecía que le llegara uno bueno en la vida – Shaka se volvió a acomodar en su silla y bebió un poco más de su coctel
- Pues si…
- ¿Y tú?, ¿sigues con el novio que estabas hace tiempo? – preguntó Shaka como quien no quiere la cosa, hace algunos meses en una reunión del hospital de Ikky, Shun asistió con Apolo, y ahí se lo había presentado a Shaka
- Si, si seguimos juntos – contestó Shun con un suspiro, Shaka arqueó una ceja y preguntó:
- ¿Problemas en el paraíso?
- No, nada que un poco de terapia y poco de tequila no cure – bromeó Shun bebiendo su coctel y levantándose
- No me gusta la terapia, quiero ser un loco no diagnosticado y feliz – respondió Shaka cruzando sus pies y apoyando su cabeza en uno de sus brazos doblados, era el rey de la comodidad
- Eso es lo mismo que digo yo pero… no se puede todo en la vida, voy a nadar otro ratito, ¿quieres venir?
- No, tu nada yo tomo sol, me hace falta porque estoy pálido y no puede continuar esta situación, necesito un bronceado a ver si así pesco algo, el ver a tu hermano tan feliz me estresa, nadie debería ser tan feliz cuando hay gente a su alrededor que no lo logra
- ¿Y qué pasó con ese terapista de lenguaje con el que salías? – preguntó interesado Shun
- No funcionó, lastimosamente mis horarios son complejos y necesito alguien comprensivo, como es Seiya con Ikky, ¿tú serías así de comprensivo Shun?
- Si… yo creo que si, nuestros horarios son un poco más fijos pero igual hay épocas en el año en que no veo a Ikky por días, ese sueño que tenemos de no dejarnos morir de hambre y por eso tener que trabajar, es complicado si tu pareja es exigente con tu tiempo y tus cosas
- Exacto, ¿por qué diablos no puedo encontrar a alguien que entienda las cosas como tú?, diablos… ¿no tienes ningún otro compañero de oficina así todo sexy y comprensivo como ustedes dos?
- Mi jefe cae en esa categoría, pero está de revuelque este fin de semana, déjame le pregunto el lunes como le fue y si no resulta te lo presento, ¿qué tal?
- Pero si es tu jefe, ¿no es mayor a ti?
- Debe ser de tu edad más o menos, un poco mayor a Ikky, pero Milo es muy atractivo
- ¿Cuál es su defecto entonces?
- Es perfeccionista, un poco mal genio, bebe mucho café, no duerme porque me suelen llegar mensajes de texto a las 3 de la mañana y él está trabajando, pero no son fallas muy graves, ¿o si?
- No… al volver vemos si la haces de casamentero
- Ok.
Shun nadó un rato más, luego fue al sauna en donde estaban Ikky, Seiya, Aioria y Marin, pero gracias a todos los dioses no estaban en los besuqueos, estaban charlando de todo un poco, Marin estaba acostada en la banca de madera y tenía la cabeza apoyada en la pierna de Aioria, pero eso era por demás normal, la charla en el sauna estuvo muy divertida, la pareja estaba en un tratamiento de fertilidad, ambos estaban optimistas con ello pero habían pasado un par de meses y no habían tenido éxito aún, de cualquier manera todas las bromas fueron dirigidas a Aioria que las aguantó con estoicismo, a la final dijo que si su futuro hijo se parecía a Marin, sería hermoso, eso le ganó un beso de su esposa
Luego de un baño, todo el grupo bajó para el almuerzo, la comida estuvo deliciosa y luego de eso fueron al casino, eso fue épico, Ikky se estaba divirtiendo como nunca, jugaba a la ruleta con Seiya a su lado, y la partida que le sopló los dados, ganaron todo el pote, fue espectacular y eso que Ikky no era muy afecto a las apuestas, pero al parecer el cumpleañero estaba de suerte
Shun jugó un par de horas hasta que perdió todo el dinero que iba a apostar, ahí se fue por la barra y ordenó un whisky, lo bebió tranquila y pausadamente, hasta que alguien llegó y se sentó a su lado, era Shaka que al sentarse ordenó un vodka
- ¿Ya te aburriste de las apuestas? – preguntó Shun dándole el último trago a su bebida
- Nunca he sido un hombre de apuestas, ¿y tú?
- Ya me desplumaron en la mesa de blackjack, así que estoy bebiendo para ahogar mis penas – Shun sonrió al ordenar otro whisky
- No deberías beber para ahogar tus penas, recuerda que las desgraciadas saben nadar – Shaka dijo muy serio pero Shun se rió con ganas
- Ok., trataré de recordarlo – Shun sacó su billetera con la intención de pagar por sus tragos y dar otra vuelta por el casino
- Si… pero espera… no te vayas, ¿quieres ir por algo de comer? – Shaka tomó su mano para no dejarlo ir
- No, si no comemos la cena, Seiya nos boxea, sé que hay un mega pastel o algo así, me sorprende que no sea Seiya el que vaya a salir del pastel, se ha pasado con los festejos del fin de semana – Shun se soltó suavemente del agarre de Shaka y pasó una mano tratando de acomodar su cabello
- Bueno, gracias por el halago, porque no es solo Seiya, yo ayudé
- Pues muchas gracias entonces – Shun se incorporó y tomó la mano de Shaka para apretarla suavemente en un gesto amistoso, pero Shaka tomó su mano y lo jaló atrayéndolo a su cuerpo para luego plantarle un sorpresivo beso en los labios
Shun abrió mucho los ojos y puso su mano libre en el pecho de Shaka para empujarlo, pero el mayor se puso de pie y lo estrechó contra su pecho sin soltarlo, Shun no necesariamente se relajó sino que soltó su mano y con las dos manos empujó a Shaka hasta quitárselo de encima
- ¿Qué diablos crees que estás haciendo? – Shun se llevó una mano cubriendo su boca
- Shun… lo siento pero, no podía dejar pasar esta oportunidad, tú me gustas mucho, siempre me has gustado, al verte aquí y sin tu novio yo pensé que habías terminado con él, luego al hablar contigo me dio la impresión de que las cosas entre ustedes no están del todo bien, entonces pues… ¿no crees que debes darte la oportunidad de probar cosas nuevas?
- No Shaka, eso es precisamente lo que me ha metido en todos los líos en los que estoy – Shun meneó la cabeza y se llevó una mano a la frente
- ¿En qué líos estás metido? – preguntó el rubio, a él Shun siempre le pareció un hombre bastante descomplicado, tenía un carácter muy agradable y era atractivo, por eso hizo su movida pero no esperó la reacción del muchacho de ojos verdes que estaba hasta algo pálido
- Créeme… no quieres saber, lo siento Shaka, en verdad, pero no puedo, es demasiado para mi todo esto
- Hey tranquilo, yo solo proponía diversión de fin de semana, no te estreses – el rubio trató de tomar la mano del peliverde que no se dejó tocar y simplemente respondió
- Lo sé, pero no es eso lo que yo quiero, no… no es quien soy… es complejo… - Shun lució confundido y molesto, pero no estaba molesto con Shaka que levantó ambas manos y dijo:
- Ok., no te enojes conmigo, olvidemos que esto pasó, no queremos importunar a Ikky, ¿verdad?
- No, es su fin de semana, déjalo que disfrute en paz lo que su novio hizo por él, si pregunta por mí dile por favor que me fui a caminar, nos vemos luego – Shun miró a Ikky que reía muy divertido junto a Seiya que sopló sus dados y la mesa entera vitoreó, aparentemente Ikky había vuelto a ganar su apuesta, todo eso fue demasiado para Shun que ya no dijo nada más y salió del casino
Caminó por el hotel pero decidió salir a respirar aire puro, así que salió del hotel al caer la noche, lastimosamente no podría caminar la noche entera como hubiera sido su intención porque la cena de cumpleaños de su hermano era en un par de horas, ohhh maldita suerte…
Shun no se alejó mucho del hotel, caminó por las iluminadas calles de Macao, se fumó algunos cigarrillos, sacó su teléfono y lo miró por largo tiempo mientras caminaba sin rumbo, y se dio cuenta de algo que no había pensado antes, lo que le dijo a Shaka en el bar era cierto, y era algo que no se había planteado antes, él no era así, él no era de romances furtivos, de escapadas de fin de semana en hoteles, de engaños y traiciones, no… eso no era lo que él quería de la vida, él quería lo que Ikky tenía, eso era lo que él quería y ahora, con su situación tan complicada como estaba mucho menos lo iba a obtener
Shun miró otra vez su teléfono y ahí una verdad le pegó durísimo, esa era la base de su problema, quería llamar a alguien, pero no sabía a quién…