Una risa burlesca de parte del joven hombre de cabellos azules cortos, se hace presente para acto seguido acercarse a Shion y revolverle los cabellos verdes, con cierto fastidio –Se dice ¡¡¡¿DE QUÉ DEMONIOS ESTÁS HABLANDO?!!!- Intenta imitar la voz un poco más juvenil de Shion.
Se da cuenta de su error, por los terribles nervios que le entraron por culpa de su primo y las tonterías que ha dicho.
-¡¡¡COMO SEA!!! ¡¡¡SEGÚN TÚ!!! ¡¡¡¿QUIÉN SE ESTÁ PASANDO DE LISTO CONMIGO?!!!- Frunce el ceño, apartándose de golpe del agarra de su primo.
-¿Cómo que quien?- Frunce el ceño y mira súper enojado al castaño, que de igual forma lo mira retadoramente -¡¡¡ESTE MOCOSO, SE LE NOTA MUY INTERESADO EN TI!!! ¡¡¡NO ME DIGAS QUE NO TE HAS DADO CUENTA QUE…!!!-
Un ligero pellizco siente en su brazo, llamándole de esta forma la atención alguien.
-Manigoldo, te dije que no debías meterte en la vida de Shion, es tu primo, pero no debes estar diciéndole esto enfrente de sus amigos- Albafica calmado como es su naturaleza, pero actuando de forma discreta para que su novio no ande fastidiando al peliverde.
-Pero…- No puede protestar, su florecita tiene razón toda la razón posible, sin embargo eso no evita sentirse alterado por que alguien sea capaz de jugar con el peliverde.
Después de todo, en la familia que ambos pertenecen, Shion es el único doncel, sintiéndose en la responsabilidad de defenderlo si es necesario.
-Gracias Albafica- Solo asiente sonrojado por la vergüenza que el peli azul lo hizo pasar delante de todos.
-De nada- Sonríe, para mirar a los allí presentes -¿Quieres que los llevemos a casa?- Ofrece el auto que no es suyo, sin embargo Manigoldo no niega ninguna petición que el peli celeste le hace.
-Con Manigoldo conduciendo, prefiero irme caminando, aunque…- Mira al rubio amigo y suspira decaído –Aceptare solo esta vez, pero… Debe ser a Asmita, a Deuteros, y Dohko también- Pone sus condiciones, que no son para Albafica si no por el otro.
-Claro, a ti y al rubio pueden subir, el de cabellos alborotos azules pues… Creo que es el novio del rubiecito amigo tuyo, pero el castaño claro que no- Cruzado de brazos, mirando desafiante al otro.
Esto irritando algo al castaño –No te preocupes Shion, puedo caminar… Pero ¿Se puede confiar en este tipo?- Señalando al otro, que se la paso siendo grosero con todos, que no lo va a permitir, sobre todo mofándose a costa de su peliverde amor.
-¡¡¡¿A QUIÉN LE LLAMAS TIPO?!!! ¡¡¡TU CHINO DE QUINTA!!!- Le enfurece ser tratado de esa forma
-¡¡¡¿A QUIÉN LLAMAS CHINO DE QUINTA?!!!- Puede ser que Dohko sea más bajo que el peli azul allí presente primo de su borreguito, pero no se va a dejar que lo intimiden.
-Manigoldo, deja de estar peleando con el amigo de tu primo- La verdad que pareciera ser que Albafica está al mando de esta relación y sobre todo, ser el único capaz de regañar al otro.
Pero más arto de esta situación se encuentra el peliverde, no va a permitir que su primo moleste a Dohko, puede luego pensar en que excusar dar, sin embargo el sentimiento de querer estar de lado del castaño está presente.
Parándose delante del de segundo año, enfrentando a su propio primo, mirándolo furioso con esos cuarzos brillantes, y con el ceño fruncido, demostrando su furia.
-¡¡¡YA BASTA MANIGOLDO!!! ¡¡¡SI VAS A SEGUIR ASÍ, MEJOR SOLO LLEVA A ASMITA QUE LO NECESITA, YO ME IRÉ CAMINANDO CON DOHKO!!!- Podría ser una actitud caprichosa, pero es que detesta tantas ofensas hacia ese amigo suyo, que de a poco los sentimientos surgen aunque lo negara tanto como pueda.
-¡¡¡TANTO TE IMPORTA ESTA COSA!!!- Su tono ofendido y grosero la vez.
-¡¡¡¿CÓMO QUE COSA?!!!- Estando en ambos lados, entre la alegría que el peliverde lo defiende y enojado por la actitud tan grosera del peli azul corto.
-¡¡¡SI ME IMPORTA O NO, NO ES ASUNTÓ TUYO!!! ¡¡¡SOLO ERES MI PRIMO MAYOR!!! ¡¡¡ADEMÁS NO VAS A ESTAR ALEJANDO A CADA AMIGO QUE TENGO, COMO LO HICISTE CON YUZURIHA!!!- Le va a estar sacando las verdades de frente.
-Pachoncito, hago esto porque te cuido, no quiero que se aproveche de ti y te deje con algún crio- Le dice seriamente.
-¡¡¡POR TODO LOS DIOSES, SOLO SOMOS AMIGOS!!! ¡¡¡DEJA DE ESTAR INVENTANDO COSAS!!!- Mas rojo que la grana, sintiendo la sangre hirviéndole, los puños cerrados para darle un buen golpe a su familia, pero debía calmarse, solo un poco, aunque de verdad está haciendo un esfuerzo sobrehumano.
Tanto Asmita como Deuteros ven esta escena, algo sorprendidos por como los gritos se hacen presentes, el hecho de que Dohko sea capaz de defender así a Shion, aunque no sorprende mucho al peli azul alboradas, que ya deseaba también unirse para apoyar a su mejor amigo.
Es oficial el primo de Shion no es alguien grato para nadie.
Asmita, solo puede apreciar todo, por el tono de voz alterado del peliverde que de verdad está muy enojado, a punto de querer matar a Manigoldo.
-Bueno ya fue suficiente, Manigoldo no exageres solo son amigos, no hay necesidad de estar ofendiéndolos- Mira a los dos más jóvenes, dándoles un pensamiento nostálgico, aunque Shion es mucho más difícil de convencer de lo que él fue en su edad.
Pero esa es una historia aparte.
-Además es ya algo tarde, sus padres deben estar preocupados, será mejor llevarlos de una vez, además tenemos que estudiar para preparar el proyecto del lunes- Albafica habla tranquilo, con una ligera sonrisa, y que ya estaba fuera del auto, con los brazos cruzados y mirando feo a su novio.
De mala gana, suspira asintiendo sin más –Muy bien, el chinito puede ir- Mas una sonrisa se planta en sus labios –Pero atrás solo hay espacio para tres-
-No pasa nada- El rubio tiene la palabra ahora -Shion puede ir sentado en las pierna de Dohko- Una ligera risita se hace presenté, quiere que solo sea una broma, pero…
Solo provoca que Dohko Y Shion se pongan muy rojos, desviando la mirada para otro punto ajeno a encontrarse mutuamente.
Aunque la idea lo de desagrada para nada al castaño, pero debía guardar la compostura de no hacer una locura así, tampoco es como que quiera enemistarse de una vez con la familia de su borreguito.
-¡¡¡DE NINGUNA MANERA!!!- Claro que Manigoldo protesta.
Dicho esto y luego de pensarlo rapdiamente, el orden en que se subieron y comenzaron a viajar en el auto es el siguiente.
Asmita hasta en el lado izquierdo detrás del piloto, ayudado por su Deuteros para subir, pues las gotas aun le impiden ver bien, desde luego en medio el peli azul alborotado y de lado del copiloto por detrás, Dohko, con una cara algo seria, porque lo han alejado de su Shion, el cual va adelanté compartiendo el asiento con Albafica, que buena suerte que ambos sean delgados.
Al peli celeste no le molesta, aunque desearía que su novio no fuera así de exagerado, pero… No le Sorprende porque es así…
Lo entiende por qué ya lo ha hablado con él, y es completamente imposible ser diferente ahora…
Mantiene una pequeña promesa que hizo hace mucho tiempo.
Puede que los errores del pasado que absorbe a ambas familias, separen a los adultos, pero a los jóvenes la culpa no debería alcanzarlos.
El viaje siendo en silencio, salvo porque de repente Deuteros le pregunta al rubio como se siente, este solo respondiendo que mejor, que sus ojos ya no le molestan en lo más mínimo.
Albafica sacándole platica al peliverde, aunque tampoco tocando temas que pudieran avergonzarlo, pues nota ese destello único entre dos enamorados, uno que puede ver con evidencia entre Dohko y Shion.
Pero sabe que no será un camino fácil, conoce mucho de la historia de ambas familias… Y por qué Shion como sus hermanos no llevan el apellido Cancerum, el cual es el del padre de ellos, igualmente compartido por el de Manigoldo y este igual lo porta.
Sin embargo anteriormente se mencionó porque eso no ocurre, el por qué en este mundo los apellidos pueden llegar a cambiar.
Sin importa que sea el apellido del padre, madre o papá doncel…
-¿Dónde viven?- Pregunta el peli celeste hacia los dos jóvenes de detrás.
-Pueden seguir por este camino cuatro cuadras, y da vuelta hacia la derecha, cinco cuadras adentro y en la casa color ladrillo de dos pisos- Dohko contesta de mala gana, dedicando una mirada de enojo puro en el reflejo del retrovisor, cosa que Manigoldo también responde con una mirada igual o peor.
Ya no debían a ver disputas verbales, o si no, su florecita no sería dulce con él y eso sí que no lo puede permitir.
Fue el camino más rápido de todos, sí que el peli azul se quería deshacer de ellos lo antes posible para lograr hablar con mejor tranquilidad, sin contar que ya odia al castaño, solo por osar posar los ojos en su primito, cosa que no permitirá en lo más mínimo.
Obviamente al llegar al destino de ambos jóvenes, apenas si les da oportunidad de despedirse de los dos donceles, que lo hiciera de Asmita el peli azul, para Manigoldo era igual, no era como que lo tuviera que cuidar, pero Dohko solo podía despedirse de lejos del de ojos rosas.
-Por favor Asmita… Cuando te sientas mejor puedes llamarme, no te esfuerces en mandarme mensajes- Preocupado por un doncel que aún no es su novio, pero que ya ama como tal, siendo algo evidente para todos, pero siempre para el objetivo aún no.
-Claro Deuteros, gracias por permanecer a mi lado y ayudarme- Una sonrisa dulce dedicada al peli azul alborotos.
-No debes agradecer, es un placer el poder protegerte- Sonríe, con las mejillas coloreadas de rojo, hasta que se da cuenta de lo que ha dicho y los nervios lo comienza a invadir. –Yo… Bueno… Proteger, como amigos… Si…-
Aun se siente tímido en si quería lograr confesarse, la situación como amigos es más llevadera ahora, aunque desde luego le gustaría pasar a otro nivel, pero ni el tiempo es oportuno, ni es aun completamente valiente para hacerlo.
Las expresiones adorables que hace Deuteros, provocan que el rubio sonría enternecido por como actúa, admirando que es sin duda un joven bastante atractivo, y se ve muy lindo, jamás como un monstruo como los demás lo quieren hacer parecer.
Deuteros es diferentes y desea que todos vean lo que él puede apreciar, la seguridad y bondad de su corazón.
La timidez es algo que abunda en esta dulce pareja.
-Shion, nos veremos luego… Espero…- Ni siquiera pudo terminar de hablar, cuando el dueño del auto comienza con sus tonterías.
-Es hora de que bajes enano- No será respetuoso con el chico enamorado de su primito, lo ve solo como una amenaza para dañar al peliverde.
-Manigoldo, no seas grosero- El peli celeste rápidamente lo reprende.
-¡¡¡ERES TAN INSOPORTABLE!!!- Shion acto seguido, abre la puerta del auto color azul, para bajar, pues ahora podrá ir cómodo en la parte trasera con el rubio, pero de paso hacer algo más.
-¡¡¡OYE!!!- Se aguata en intentar seguir fastidiando al otro.
Ya estando abajo, cierra la puerta con cuidado, pues está molesto con su primo, no con el novio de este, siendo el único que calma al imprudente peli azul.
-Lo siento Dohko- Lo que desea hacer es disculparse con el castaño, el comportamiento de su familiar no ha sido la mejor de todas.
Ya abajo, y cerrando igualmente la puerta, mira al de cuarzos rosas, siendo el único motivo por lo cual soporto a este tipo, ya que sin duda Shion lo vale, pero tampoco lo va a permitir.
-No es tu culpa…- Una sonrisa, las mejillas sonrojadas, y mirando atento al de cabellos verdes –Esta bien, gracias por permitirme estar a tu lado- Suspira, tomando su mochila.
-Manigoldo es un fastidioso cuando se lo propone, no se…- Cruzado de brazos, mirando hacia abajo –De donde saco la idea de que tú y yo…- Niega con la cabeza, si sabe de dónde fue esa reacción, pero es mejor que la evite decir –Prometo hacerlo entra en razón, espero que nos veamos en la escuela el lunes- Dice esto con los nervios invadiéndolo.
Aun con la situación del rubio, pensaba disfrutar un poco el camino de regreso a casa, tal vez hablar un poco más con Dohko, sobre temas más interesantes, y pedirle algunos concejos para las próximas materias.
Pero su primo debía arruinarles el plan.
El sonido del claxon se hace presente, desde luego rompe la pequeña atmosfera romántica de ambas pequeña parejas, aunque con la intención de fastidiar a quien intente tomar a su primito.
Era mejor hacer caso por ahora…
Sin embargo, esto no evita que en el corazón del peliverde los sentimientos afloren, y desee pasar un tiempo agradable con el chico que esta tan interesado en que sean más cercanos.
Shion no le puede ofrecer nada más que amistad por ahora… Incluso pensando si algún día pudiera aceptar por completo los sentimientos, que una vez deseo jamás tener.
Miedos antiguos, terror de nuevo perder a alguien que ama… No desea, ni podría soportarlo.
Sin más, los donceles se despiden de sus “Amigos”, para acto seguido, el peli azul conducir de regreso, para llevarlos al hogar del peliverde.
Obviamente yendo discutiendo los dos primos por el comportamiento del mayor y que este diga que debe tener más cuidado con quienes se junta.
No haciendo referencia de que Dohko sea becado, eso ni le importa, sino que debe tener cuidado con todos, al fin de cuenta es un doncel, y pueden jugar con él y eso sí que no.
Y obvio Shion recordándole que jamás pasaría eso, sabiendo su decisión de ante mano, algo que planea cumplir, pero lo más seguro y cosa que el peliverde no sabe, es que… Con cada día que transcurra y conviva con el castaño, sus sentimientos seguirán creciendo.
Lo asustaran, ya que no aceptará estos.
Pero… No estará solo en este camino.
Asmita también deberá enfrentar varios acontecimientos antes, mucho antes de siquiera tener una primera oportunidad de confesión.
Pero… mientras estos van hacia la casa del peliverde.
Los dos que acaban de llegar al hogar del castaño, se quedan un momento conversando en el jardín antes de entrar.
-El primo de Shion… Es algo…- Deuteros no sabe que decir, entiende que es una persona de un carácter difícil y burlón.
-Es un imbécil, pero… Entiendo por qué lo hace- Enojado por como este lo molesto todo el tiempo, pero comprendiéndolo a la vez.
-Pero... Tú jamás sería capaz de jugar con los sentimientos de Shion- Deuteros mira con cierta curiosidad al otro.
-Jamás lastimaría a mi borreguito, primero prefiero morir antes de que eso ocurra- Suspira con los puños cerrados y bastante decisión que crece de repente en su ser –La opinión que me debe importar es la de Shion y creo que el único que podría intervenir seria su padre, así que…- Pausa para efecto dramático.
-¿Así que?- Esperando la respuesta del otro con cierta duda.
-¡¡¡VOY A GANARME LA ACEPTACIÓN DE MI FUTURO SUEGRO!!!- Cruzado de brazos, con las esmeraldas brillantes y el ceño fruncido por su decisión actual.
En ese instante la puerta se abre, dejando ver a un hombre de cabellos rojizos, piel clara, y ojos verdes como esmeraldas iguales a las de Dohko.
Que mira la escena con cierta gracia –Pero creo, que primero Shion debería ser tu novio para ganarte esa aprobación ¿No crees hijo?-