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Mi Rayo De Luz por AMMU TEIKOKU YUDAINA

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Notas del capitulo:

Hola mis terrones de azúcar, ya tenemos los últimos dos fic's que serán actualizados en este mes, y son...

Sirviendo A Un Dios con cuatro votos y Complicados Sentimientos con tres votos. 

Sin mas, los fic's ganadores quedaron así:

Un Novio Para Kiki

Atla

Mi Y Sol

Amor Entre Pasillos

Sirviendo A un Dios

Complicados sentimientos.

Los fic's los voy a actualizar en este mes, puede que lo haga de repente, pero sera todo sorpresa ajaaj sin mas continuemos.

Las votaciones quedan oficialmente cerradas, hasta la próxima vez que subamos a mas terrones, los 450 es la nueva meta.

-¡¡¡¿ESTAS BIEN?!!!- Primero asegurarse que el rubio este sano y salvo.

-Si…- Asmita sorprendido por esta rápida reacción del peli azul, teniendo los brazos estirados, su primera reacción al sentir que el equilibrio se había alejado de su cuerpo, meter las manos, para no irse de bruces por completó al suelo, pero quien lo invito al cine, impidió que eso sucediera.

Lo único que se lamentarán después, es que los lentes del rubio, cayeron directamente al suelo y puede que se estrellaran un poco.

-Vaya, vaya, pero que sorpresa- Esa voz familiar, que sin duda solo provoca enojo con tan solo escucharla, ya que tenerla cerca significa problemas, principalmente para Deuteros.

-¡¡¡ASPROS!!!- Aprieta su puño, lo primero es asegurarse que quien ama está a salvo, lo siguiente es enfrentarse al imbécil que provoco esto.

-Hola hermanito- Esa sonrisa sínica, sin duda disfruta hacerle la vida de cuadritos al de piel morena, si lo hace quedar mal, es lo mejor y si, su mera existencia significa problemas.

-¿Por qué siempre estas fastidiando?- El castaño de inmediato también interviniendo a favor de su mejor amigo, le desagradan estas injusticias que le provocan a Deuteros.

Con cuidado Deuteros ayuda a levantarse al rubio, aunque rápidamente también el peliverde ayudo, es una de sus preocupaciones, que Asmita este a salvo, por una promesa hecha a los padres de este.

-Ja, ja, ja, ¿Fastidiando?- Frunce el ceño, sonriente, cruzado de brazos –El cine es un espacio público, y solo venía a saludar a mi hermanito, pero no es mi culpa que sea tan descuidado, que tropezara solo y casi lastima a…- Mira detenidamente a ambos donceles, dedicándoles una sínica sonrisa –Vaya, son realmente bonitos, tienen buenos gustos, pero… ¿Por qué ellos se rebajarían a salir con personas como ustedes?- Señala a ambos jóvenes, sin duda para su bajarlos.

No solo Deuteros y Dohko están enojados con esta presencia tan molesta de solo mirar, si no el par de cuarzos rosas reflejan el desprecio que siente para este hombre, obviamente mal intencionado.

Si de por si no le agrada que le digan cumplidos, que provenga de Aspros es simplemente inconcebible.

-¡¡¡¿CÓMO TE ATREVES A EMPUJAR A ASMITA?!!!- Aprieta sus puños, dedicándole una mirada de ira, sin duda desea enseñarle a los golpes a respetar a los demás, no le importa su condición de doncel, sabe defenderse perfectamente, a no dejarse de nadie y odia las injusticias.

-Shion… Por favor, cálmate- Para el rubio, la violencia no soluciona nada, después de todo sus creencias Budistas le han enseñado que el dialogo es la mejor opción o la indiferencia para no hacer algo más grande de lo que ya es.

El rostro de preocupación de Asmita, porque esto no se volviera una confrontación física, es obviamente admirada por Deuteros.

Como sentía el odio invadirle, habían molestado a su Ángel… Casi él mismo pudo haberlo lastimado.

-Esto no se quedara así, siempre molestas, hace lo que quieres Aspros, déjame en paz y no molestes a quienes quiero- Usualmente se quedaría callado, ignoraría las burlas, pero en esta ocasión no lo hará, pues se está metiendo con alguien importante –¡¡¡SI QUIERES FASTIDIARME, HAZLO, PERO DEJA A LOS DEMÁS FUERA DE ESTO!!!- Se le encara de forma desafiante, pero debe ser cauteloso, ya que esto le podrá costar muy caro a futuro con sus padres.

-¿Te crees muy valiente?- Para el mayor, esta actitud no la aceptara, que el moreno se crea capaz de desafiarlo, le enseñara el lugar que pertenece –Claro, demuestra lo que eres, un imbécil como siempre- Palabras sin sentido, llenas de burla para sobajarlo y un empujón directamente para provocarlo.

No hacía falta mucho, ni palabras de otras personas, siempre que Aspros molesta a Deuteros, es para que este último salga con pésima reputación, castigado, total ya tiene una mala fama, que todos creerán que el inicio.

Le molestó, claro que debió enfadarlo, los insultos, la forma de desafiarlo, el empujón, todo es para provocarlo, y que quede mal enfrente del rubio.

Aspros, tiene la oportunidad de fastidiar a Deuteros y la tomara de inmediato.

El ceño fruncido nuevamente, los ojos azul oscuro, demuestran su gran desprecio hacia el mayor, siempre por su causa ha sido tachado de una mala persona, lo había aceptado, pues no tenía de otra, pero… No permitirá que dañe a Asmita, con él no se meterá jamás.

-Me quieres provocar… Pero…- Estaba por contestarle el empujón, y esto ocasionaría una pelea física, noticas pésimas para las condiciones en que esta Deuteros.

-¡¡¡OYE!!! Te crees muy valiente, sabiendo que tu hermano se puede meter en problemas y por eso piensa muy bien al contestarte el golpe, pero sabes- Sonríe triunfante, después de todo el castaño, sabe perfectamente pelear y si su mejor amigo necesita ayuda, no lo dudara en brindársela –Yo no tendría dificultades en luchar contra ti-

-Ja, ¿Por qué te metes en esto enano?- Conoce bien por donde atacar para fastidiar y hacer sacar el odio en las personas –No es contigo, es con el idiota mala copia mía- Señala despectivamente a Dohko –Además, alguien que debe cuidar una beca, ya que no puedes pagar por completó la colegiatura, no debería estar gastando dinero en una ida al cine o ¿Sí?-

Ante los ojos azul cielo y los rosas, esta disputa verbal entre estos tres, sí que está tocando temas que deberían mantenerse en discreción, son cosas que pertenecen a sus respectivos dueños.

Asmita se sentía realmente preocupado, podía notar el semblante en el moreno, poco tiempo lo ha conocido y siente un cariño especial por el momento hacia él, le molesta que alguien esté intentando hacerlo caer en una pelea, quería hacer algo… Solo que no sabe si sus palabras sean suficientes.

-Ja, ja, ja, ¿No te sabes otro insulto?- Lejos de hacerlo enojar, el de ojos verdes brillante, contesta de manera opuesta –Si, tengo una beca, me esfuerzo para estar en esa escuela, pero sabes que… Intento salir a delante por mis propios medios, no solo ser un parasito como tú, que solo estira la mano y tiene el dinero de sus padres, y para acabarla, solo eres un patético imbécil, que goza de molestar a los demás, que no se pueden defender y no eres capaz de asumir tus responsabilidades, echándole la culpa a Deuteros- Cruzado de brazos, sabe que esto es suficiente para molestar a Aspros -¿Quién es el verdaderamente patético aquí?-

-¿Te crees mucho idiota?- Los insultos no los puede tolerar, acostumbrado a salirse con la suya en todo momento, pero… Aquí esta, quedando muy mal, sus intentos parecen fallar –Te enseñare a no estar metiéndote en donde nadie te llama- Alza su puño, listo para conectar con el castaño.

-¡¡¡NO TE ATREVAS ASPROS!!!- Deuteros, detiene rápidamente a su gemelo, sujetándolo con fuerza -¡¡¡CON NINGUNO DE ELLOS TE METERÁS, SI QUIERES PELEAR CON ALGUIEN, AQUÍ ESTOY!!!- No permitirá que nadie que quiere se meta en problemas por su culpa.

-¡¡¡SI ASÍ LO QUIERES!!!- Se zafa de aquel agarre, para de nuevo lanzar un puñetazo en dirección al moreno.

-¡¡¡DETÉNGANSE POR FAVOR!!!- Por alguna razón, el siempre tranquilo y pacifico rubio, alza la voz, no quiere ver que hirieran a Deuteros, no lo permitirá.

Si no estuviera siendo sostenido de los hombros por Shion para protegerlo, se habría interpuesto entre el moreno y el puño de Aspros.

Su corazón late angustiado, por el miedo de que este tuviera un ojo morado, mas habiendo escuchado que esto metería en problemas al joven del cual parece haber desarrollado un cálido sentimiento que aún no le puede dar un nombre en especificó.

-¡¡¡ALTO USTEDES DOS!!!- El escándalo en la puerta de salida llego hasta los que están dentro, el gerente del cine obviamente no quiere una pelea de jóvenes, que de mala fama, por lo cual llamo a un guardia, para que los detenga y saque si es necesario –¡¡¡YA FUE SUFICIENTE!!!- Haciendo uso de presencia y autoridad, es como los intenta detener.

Unos segundos más y Deuteros habría recibido ese puñetazo en su rostro y obviamente hubiera contestado de igual forma, ya había aguatado mucho, esta ocasión no lo haría más.

En cierta forma Asmita se sentía aliviado, aunque Shion y Dohko para nada, sí que hubieran deseado romperle la cara al estúpido gemelo mayor del moreno, por haberles fastidiado.

Además que las cosas se pudieran manipular en contra de Deuteros, pero en esta ocasión no está solo.

-Qué bueno que llego- Haciendo uso de sus mejores tácticas de manipulación, sonriente para su gemelo –Mi propio hermano esta tan molesto, por solo un simple accidente, tanto que comenzó a gritar e insultarme, obviamente debía defenderme- Hacerse la victima sería perfecto, además que no había llegado solo al cine, si no con un grupo de sus amigos que desde una distancia estaban apreciando la escena que se pensaba terminaría en una pelea física, en donde intervendrían para divertirse.

-¿Qué?- Deuteros reacciono, con una fuerte interrogante, pero no le sorprende en lo más mínimo, ya estaba acostumbrado a siempre ser tachado como él malo de la historia.

-Oye Aspros, eso no es verdad- Podrá ser menor que ambos gemelos por un año, pero tiene suficiente valentía para enfrentarse a quien sea, por su mejor amigo y de paso impresionar a él peliverde –Tú los empujaste, para que se lastimaran tu hermano y Asmita- Enojado ante la gran mentira que comienza a utilizar el peli azul.

Y es allí que otros se acercan, para hacer que el triunfo se lo lleve Aspros, aun en contra de la verdad por los cuatro jóvenes.

-No es verdad, oficial- Uno del sequito del mayor comienza a hacerse el bueno –Mi amigo solo fue a saludar a su hermano menor, pero este reacciono mal, además que ese- Señalando al castaño –Comenzó también a insultarlo, ¿Quién no contestaría? Hasta lo amenazó con los puños- Los inocentes, para que la gente les crea, esa es su táctica.

-¡¡¡¿QUÉ?!!!- Shion no se tomaría en gracia estas blasfemias, incluso dando unos pasos firmes hacia donde ese hablador esta -¡¡¡DOHKO Y DEUTEROS SOLO SE DEFENDIERON DEL IMBÉCIL, QUE CASI PROVOCA QUE ASMITA CAYERA AL SUELO!!!- Muestra los lentes del rubio -¡¡¡SE ROMPIERON POR SU CULPA, DEBERÁN PAGARLOS!!!- Es un doncel bastante fuera de lo común, demostrando autoridad, con los brazos cruzados.

Puede que el peliverde haga esto, porque es de las personas que odian las injusticias y calumnias, pero también… Sintió algo de coraje al ver que le comienzan a echar la culpa al castaño, que aunque le molesté sus atenciones, no dejara que lo insulten de esta forma.

Un suspiro por parte del guardia del cine, no está de humor para lidiar con discusiones de adolescentes, así que haciendo uso de lo más sensato que cree posible.

-A ver, no hubo heridos, solo unos lentes rotos- Frunce el ceño, para todos –No me interesa quien tuvo la culpa o quien no, solo lárguense o entren al cine y nada de estar peleando aquí, si quieren arreglar lo que sea esto, vayan a otra parte- Es lo más lógico que se le ocurre al oficial de seguridad, de uniforme azul con toques grises, algo pasado de peso, y con una cachiporra como única arma, para acto seguido, después de esa “Advertencia” o “Concejo” irse, dejándolos solos.

Sin duda bastante “Sabio” de su parte.

Un sonido de molestia sale de la boca del peliverde, le desagrada por completó la falta de compromiso en la profesión de este sujeto, ya que en uno de sus familiares, desea tanto convertirse en un oficial de policía, guardia o lo que se supone que fuera, capaz de mantener la seguridad y tranquila de los ciudadanos, algo que este hombre jamás sería capaz de hacer.

-Tsk, como sea…- Frunce el ceño hacia los sujetos, que los mira burlescos –Mejor vámonos- Es lo que cree más prudente, está dándose cuenta que en esta ocasión les están ganando en número, si bien podría enfrentarse a unos cuantos, no saben de qué sean capaces y debe ser listo.

-¿Qué pasa, bonito?- Uno de los amigos de Aspros hace uso de palabra –No tenías ganas de darnos una lección?- La mirada que le dedica a Shion es una que sin duda provocaría asco a quien fuera.

La sangre hirviéndole al peliverde, dispuesto a girarse para que en esta ocasión darle igual todo y partirle la boca al sujeto de cabellos negros, atados en una larga coleta baja.

Pero alguien se le adelanto, tal vez no en golpearlo, pero ganas no le faltan, al sujetar al tipo por el cuello de la ropa.

-¡¡¡NO TE VUELVES A REFERIR DE ESA MANERA A SHION!!!- Para Dohko, que alguien le digiera “Bonito” al peliverde, no se lo permitirá, puede que no se su novio, pero lo va a defender, aunque este le diga mil y una vez que no necesité hacer esto, ya que solo se puede defender.

-Entonces, ambos idiotas están enamorados de estos dos donceles- Descubre la situación, que si bien parecía haberse tardado en descifrar.

-Deberían conseguirse a alguien mejor, estos dos solo son unos imbéciles, que los meterán en problemas-

-¿Alguien mejor? ¿Cómo ustedes?- Las interrogantes de Asmita, esta vez dirigidas con intención de fastidiar –Deuteros demuestra ser mucho mejor, al no rebajarse a su nivel- Su rostro enojado, mirándolos atento, cerrando sus puños y parándose firmemente, para dejar en claro su posición –Y sé perfectamente que Shion piensa lo mismo que Dohko-

Y de paso evidenciar a su mejor amigo.

El cual comenzó a tener las mejillas rojas, pero se calmaría, para hacer lo más sensato posible y ya se ha fastidiado de esto.

-Dohko- Toca el brazo con cuidado del castaño –Déjalo, un idiota como este, jamás aprenderá y los puños es lo único que lo haría, pero… Ni merece la pena- Acto seguido, toma con fuerza a su “Cita” para acto seguido alejarlo.

-Pero…- No sabe que sentir, si sentirse afortunado porque su hermoso borreguito este tocando su muñeca, aunque lo jale es un tacto hermoso o intentar mejor romperle la cara al que se atrevió a lanzar halagos al de cabellos verdes.

-Ya se hizo tarde y debemos volver antes del anochecer a mi casa- Sentencia con cierta molestia esta verdad, más que nada por que como deseaba volver con ese maldito grupo de supuestos matones cobardes, que todos juntos si son capaces de hacer algo, pero solos, lo único que pueden hacer es provocar para armar un alborotó, les quería romper las piernas y costillas.

-Deuteros- Llamando con un tono gentil y sujetándolo de la mano, un acto atrevido por parte del rubio, pero lo siente necesario para calmarlo –Por favor, vámonos, no merecen que te bajes a su nivel- La mirada azul cielo, suplicándole que se tranquilicé.

-Asmita- Suspira, cerrando sus ojos, la calidez de la delicada mano que ha ganado el derecho de sostener, lo hace calmar su cólera, esos preciosos zafiros que le ruegan, dejar esto por la paz, obviamente quien no querría irse a los golpes con estos imbéciles, pero… Es mejor retirarse de manera sensata y no darles el gusto de haber ganado haciéndolo quedar mal –Esta bien…-

Unas últimas miradas de desprecio le dedican a Aspros y su séquito de idiotas.

Mas los otros solo lanzan insultos y burlas a los cuatro que se retiran, principalmente al peli azul y castaño

-Vaya, ¿Tan rápido los hacen hacer lo que quieren?-

-Ja, ja, ja, que patéticos-

-Oigan preciosos donceles, cuando se aburran de esos imbéciles, pueden venir con nosotros-

Mantienen la calma para no regresarse, y ahora si enfrascarse en una pelea, en donde la sangre y huesos rotos no se dejaran de lado.

Mientras sus amigos pueden estar mofándose de su hermano y los otros tres, Aspros se encuentra serio, hasta pensativo, no le agrado en lo más mínimo, como Deuteros se le enfrento.

Usualmente este no diría nada, dejaría que todo pase, esta relegado a no reaccionar, ni defenderse, pues los problemas siempre son muchos cuando ambos gemelos se enfrentan y el perdedor para el favor del mayor es Deuteros.

Pero aquí… Aun estando en un espacio público, hizo lo que siempre hace, para probar al moreno y esta vez, si le respondió, incluso dispuesto a una confrontación física, solo por defender al rubio y los otros allí presentes.

Sabe que no es buena señal, si desea seguir haciendo su santa voluntad en la escuela y que todos vean a Deuteros como el malo de la historia, que miserablemente todos han creído, deberá acabar con ese pequeño rayo de luz que le está dando la valentía al menor para enfrentarlo.

No sería difícil al pensar de Aspros, después de todo es quien inflige miedo en los corazones de los demás estudiantes, cualquier rumor se puede expandir como bomba en la escuela si así lo quiere.

Logro crearle una horrible fama a su hermano y aunque él haga un caos en esta, todos le temen y no harán nada para llevarle la contra,

-Disfrútalo hermanito, hare que vuelvas a caer en la oscuridad de donde nunca debiste salir- Esa sonrisa retorcida, digna de alguien que está dispuesto a arruinar la vida de quién sea por sus propios intereses.

---De camino a casa de Shion---

-¡¡¡ESE IMBÉCIL DE ASPROS Y SUS ESTÚPIDOS AMIGOS, SIEMPRE FASTIDIANDO!!!- El castaño, sí que esta aun enfurecido por no haberle dado su merecido a los que comenzaron a fastidiar a su amigo y borreguito.

-Había escuchado del tal Aspros, ya veo que es un completó estúpido perdedor- Cruzado de brazos, caminando con paso firme, a lado de Dohko –Pero no creí que fuera tan sínico- Sus cuarzos rosas, se fijan delante.

-Es de lo peor… Fastidioso, molesto, irritante, le gusta meter siempre en problemas a Deuteros, y tanto su familia, como maestros- Irritado por la injusticia que ha vivido el moreno –¡¡¡TODA LA ESTÚPIDA GENTE LO ESCUCHA Y SIEMPRE SE SALE CON LA SUYA!!!-

-Ya veo…- Mira de reojo hacia los otros dos que van detrás, lanza un suspiro –Por lo menos no permitió que nada malo le pasara a Asmita, así que… Tal vez me equivoque sobre él-

-¿He?- Lo mira confundido, en el poco tiempo que le ha estado conociéndose, jamás había visto que el peliverde tengan un semblante tranquilo.

-También tu…- No se dignaría a verlo a los ojos, sigue con su vista delante, pero las mejillas se sonrojan repentinamente –No eres como creí- Está dejando escapar sus palabras sin precaución alguna, está revelando más de lo que debería, pero es su manera de ser un poco espontaneo y sincero.

-¿Cómo creíste que era?- Curioso en sus palabras, pero con una sonrisa, pues aún puede sentir el recuerdo del pequeño lapso donde las suaves manos del peliverde lo tocaron.

-Nada que te importe- Se cruza de brazos, para apresurar el paso, ignorando la pregunta del castaño, no está listo para hablar de más sobre sus sentimientos y claramente no lo hará, aunque su vida dependiera de ellos.

-Pero, Shion…- Alzando su mano al nivel del rostro, estirándola, como tratando de sujetar el hombro del peliverde, obviamente sin éxito pues este ya se había alejado por completó, y acto seguido se apresuró para alcanzarlo.

Mientras tanto, Deuteros y Asmita, van en un completó silencio, con cierto cuidado en su paso lento, pues aunque los lentes del rubio están en cierta forma bien, no quita que uno de los cristales está quebrado, y hace que su apreciación de la profundidad no sea buena.

Ya es suficiente de este ambiente, el suave viento indicando que la calidez se está yendo para que poco a poco de paso al invierno que se vive en esta ciudad.

Lo cual provoca que el rubio, tiemble un poco de frio, cerrando sus ojos, y deteniéndose pues es un ambiente que no le agrada mucho, más que nada porque no está vestido para esta época, que ha llegado un poco antes .

-¿Estas bien?- La preocupación de inmediata, para acercarse al más pequeño, y con cuidado tomar sus hombros.

-Sí, es solo que el frio está llegando muy pronto- Una delicada sonrisa se dibuja en sus labios, al notar la dulzura que obviamente lo haces diferente a su gemelo –No te debes preocupar por nada, lo que paso en el cine no es tu culpa- Se gira para el lado donde el moreno lo toca, acto seguido posar su pálida mano sobre la del contrario.

Es obvio que el joven con el Bindi rojo en su frente, nota el rostro de angustia del que es presa Deuteros, se podría admirar la culpa en sus facciones, unos ojos tristes por no haber podido hacer más.

No quería que esta primera salda que se realizó, aunque fuera de personas que se están conociendo, saliera perfecta, pero su hermano debió haber intervenido para fastidiarlo.

-Te pudiste haber hecho daño- Baja su vista, es incapaz de verlo a los ojos, la impotencia de no poder protegerlo de todo mal, por poco se ocasiona que lo hubiera lastimado por su propio peso.

-Solo fueron mis lentes los que sufrieron algún daño- Resta importancia al suceso, después de todo el peli azul no es el culpable, y frente a los ojos del rubio es el único inocente del enfrentamiento –Además… Tú me sujetaste, impediste que me cayera- Las mejillas denotan su rubor, la sonrisa más delicada posible y los ojos azul cielo brillan, como las hermosas estrellas de un firmamento divino.

Cada vez se repite una y otra vez lo mismo…

Asmita, debe ser un ángel… Uno que esta iluminando su vida de a poco.

No sabe que fue lo que ha hecho para merecer una sola mirada de este hermoso rubio, con un corazón tan puro que se refleja en su rostro.

Ahora… Le sonríe, solo para él, adema que tiene su pequeña mano sujeta entre la suya, un reflejo que cometió al sentir la ajena sobre la propia.

-No permitiría que te lastimarás…- El corazón latiendo como loco, los nervios aumentan, por la distancia tan corta entre ambos.

El fondo que tienen, es preciso… Un camino rodeado de árboles por el flanco izquierdo, que dejan caer sus hojas por el frio viento que se siente, con la ciudad por detrás de ellos y después de esta apenas si se puede distinguir el azul del cielo reflejado en el mar que tienen a una hora y media de su punto.

Un ambienten romántico, con la lejanía de sus amigos, no para darles privacidad, si no que el otro doncel está muy enojado consigo mismo por ser tan imprudente en su hablar, mientras el castaño lo sigue para aclarar su interés.

-Sé que no dejarías que eso ocurra- Alza una de sus gentiles manos, justamente la que tiene libre, para posarla en el rostro del moreno y tocar la mejilla de este –Tú tienes un hermoso corazón, uno donde la maldad no llegara jamás, así que no permitas que tu hermano, tu familia o habladurías de las personas te definan, jamás-

Sus palabras suenan tan preciosas, quieren transmitirle seguridad de que esa es la única verdad que existe en el mundo.

Las personas siempre hablaran de mala forma, para dañar y herir a aquellos que no han hecho nada malo, culpándolos por ideales crueles.

Son inocentes en varias ocasiones, por el simple hecho de no ser como los demás, por no seguir lo establecido, aunque obviamente no es la mejor opción.

Denegando su existencia, por comportarse diferente, causándole conflictos y miseria, al momento de poner a todos en contra.

Destruir con palabras y acciones un corazón puro, que jamás ha hecho todo el mal que lo acusan.

Definirte tú mismo, por tus propias acciones, por tus logros, por lo que has hecho, no por lo que los otros digan de ti o provoquen chismes de tu persona.

Eres capaz de demostrar que tú eres más de lo que esas estupideces dicen de ti.

Un suspiro cansado es lanzado de sus labios, denotando que aunque aquello suene hermoso, no es probable conseguirlo –A veces… No es fácil…-

-Deuteros… Si es fácil, porque tienes a personas que no permitirán que vuelvas a pensar eso de ti, y que no te dejara solo-

Se pregunta en su joven mente, porque está diciendo aquello, apenas lo conoce, y su corazón late con fuerza por él, solo una salida y su sonrisa se mantiene…

No ha convivido mucho con Deuteros, pero algo en su corazón le dicta… Que no se aleje de él, que de ahora en adelanté debe acompañarlo, porque a su lado, seguirá sintiendo esa calidez en su pecho, ese cosquilleo en su estómago, ese sonrojo en sus mejillas, y el deseo de ayudarlo a acabar con sus temores internos.

-Asmita…- Sorprendido, porque este joven le mencione tan preciosas palabras.

¿Acaso le está tratando de decir algo más allá de una pequeña amistad?

¿Cómo que no está solo, porque tiene más personas que lo ayudan?

Tiene solo a tres… Pero… Significa que…

¿Su ángel le está diciendo que también estará con él?

Mieles de preguntas llegan a los pensamientos del moreno rápidamente.

¿Sería muy apresurado decirle al rubio lo que siente?

No sabe por qué… Pero al momento de abrir la boca, está por decirle esas palabras, unas que posiblemente asunten a Asmita o puede que no…

-Asmita, yo quiero decirte…-

-¡¡¡OIGAN USTEDES DOS!!!- El llamado de Shion, les rompió el momento romántico -¡¡¡YA ESTAMOS CERCA, VAMOS QUE ESTÁ HACIENDO CADA VEZ MÁS FRIO!!!-

-Si quieres te prestó mi camisa y…- Sin pensarlo Dohko comenzó a desabrocharse la ropa superior que lleva.

-¡¡¡¿QUÉ?!!! ¡¡¡OYE NO HAGAS ALGO ASÍ, EN LA CALLE!!!- Las mejillas del de cejas en forma de dos puntos rosas, se vuelen rojas, posiblemente del coraje y la vergüenza de imaginar al otro sin la ropa de arriba.

-Pero… Tienes frio y yo tengo una playera abajo- Mira atento al peliverde, sonriéndole, pues las mejillas rojitas son tan lindas y lo hace lucir como un ser tan frágil.

-Tengo frio, pero ni aun así, me pondría tu ropa- Declara casi en un grito, para acto seguido, darle la espalada y ahora si casi correr, para llegar a su casa, aunque se acuerda que debe llegar con el rubio y trata de solo mantener distancia con Dohko.

-Pero… ¿Por qué? No tiene nada de malo, solo no quiero que te resfríes- Las suplicas del otro, aun con el labor de irse quitando la camisa, para ponerla sobre los hombros del doncel.

-¡¡¡YA TE DIJE QUE NO!!! ¡¡¡Y ALÉJATE DE MÍ!!!- Debería dar gracias, que los vecinos que tiene están a cierta distancia, y no escuchan, además que su casa aun esta dos cuadras por delante.

Esta escena sí que debe ser cómica, para los dos rezagados, que admiran la muestra de afecto de Dohko para con Shion y la rebeldía de este por no usar nada de lo que el castaño le quiere dar.

Sin darse cuenta aún están sujetos de sus manos, mas Asmita rompe esa unión repentinamente.

-Shion tiene razón, debemos ir- Una tierna sonrisa con el rubor en su rostro, se aprecia en Asmita, con grácil caminar y en cierta forma torpe, porque sigue sin poder ver bien, además la falta de profundidad le afecta.

-Bien, pero…- Tomando al más pequeño por los hombros, para ayudarlo a no caer con la piedra que ahí en medio camino y que posiblemente no notaria -¿Te puedo ayudar?-

Si tocara su pecho, sentiría el latir tan fuerte que proviene del menor, las manos temblando por ser protegido por el peli azul, es un contacto tan delicado, cálido y precioso, que el rubio jamás creyó sentir en su vida.

Puede que Aspros, molestara un poco al salir del cine, pero… No arruino por completó este día, ni el motivo por el cual se dio esta salida.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

Yo me encuentro super bien, andamos emocionados por el capitulo de hoy.

Neta que me gusto como quedo. 

La verdad, quedo super tierno, adorable, y es que... El toque de Aspros que llegara a fastidiar, le salio el tiro por la culata, jajajaja

Pero lo que se viene en el próximo capitulo, ufffff se viene bien chido, y con cosas adorables. pero no diré mas. 

Sin mas... Continuemos.

Terrones de azúcar, les diré una cosita.

Les agradezco mucho por estar conmigo, apoyarme con sus lindos comentarios, votos, la verdad no tengo palabras para agradecerles, es que... La verdad son los mejores, los quiero tanto. 

Kiaaaa voy a llorar. 

Pero en verdad... Siento que la familia terrón de azúcar ha crecido tanto, en este año, que no me lo creo, el hecho de que todos estemos leyendo, cuidándonos, respetándonos, es de lo mejor. 

Gracias por seguir conmigo. Los quiero mucho. 

De verdad les agradezco tanto, por estar conmigo, por permanecer a mi lado, leer mis fic's y disfrútalos tanto. 

Kiaaaaaa son de lo mejor ustedes, los mega quiero tanto. 

Cuídense mucho y hagan caso las medidas de higiene. 

Ammu se va. 


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