-¿Estás seguro que tus amigos estaban por aquí?
-Bueno, ahora que lo mencionas... Zoro tiende a perderse mucho... Pero esta Sanji con él, Torao ya me canse de caminar...
-No te quejes y camina-miro su teléfono recibiendo un mensaje de Kid, preguntando sobre el chico y como le estaba yendo. Law decidió ignorale, viendo al chico, el cual se acerco hasta una de las banquitas de la ciudad sentándose-¿Qué haces vamos?
-Torao estoy cansado... Tengo hambre y sed.
-¿Y? Habías dicho que no eras un niño.
-No lo soy, pero llevamos caminando por un buen rato... Tengo hambre y sed, ya me canse de caminar...
El mayor suspiro al escuchar las continuas quejas.
-Ya entendí, solo quédate aquí sin causar problemas.
Se fue dejando al menor confundido. Para volver extendiéndole una bolsa, la cual Luffy tomo abriéndola encontrándose con tres paquetes de takoyaki.
-Oh...
-Rápido come, cuando termines volveremos e iremos en mi auto. Será más rápido.
-Gracias Torao-dejo la bolsa de lado, saltando en un abrazo a aquel hombre, quien se sorprendió.
-Oye... aléjate...
’
Law conducía de lo más tranquilo que se podía, preguntándose a si mismo, cuando creyó que era buena idea haberle invitado de comer a aquel niño y más importante, porque en su mente pensó que sería bueno para ambos tener a ese hiperactividad niño a su lado cantando con todas las fuerzas que sus pulmones pudieran permitirle, mientras bailaba en su asiento disfrutando la música que el solito puso sin preguntarle al dueño del auto si estaba bien o no.
Take me to your best friend's house
Marmalade we're making out, oh yeah
Take me to your best friend's house
I loved you then and I love you now
Don't take me tongue tied
Don't wave no goodbye
Don't break
Canto con todo el sentimiento Luffy, emocionado por aquella canción, comenzando a contar conforme la canción. Cuando Law al detenerse en un semáforo bajo el volumen de aquella pegajosa melodía, ganándose la mirada molesta del chico.
-Oye, yo estaba escuchando eso...
-Estabas aullando con eso, dirás-Luffy se cruzo de brazos alzando una ceja ante la actitud del hombre.
-Como que estoy sintiendo que no te agrada mi música...
-Tu música es solo ruido, niño.
-Ya te lo dije, mi nombre no es niño, mocoso, o tú. Soy Luffy.
-Así como tu me dices Torao.
-Torao eres un amargado-susurro mirando a otro lado.
-¿Qué dijiste?
-Nada... nada... amargado-volvió a susurrar.
-Hasta aquí...-freno, causando que Luffy, quien no tenía el cinturón colocado se golpeara la cabeza, quejándose.
-Auch... oye ten más cuidado, en como manejas... podrían quitarte tu licencia.
-Escucha intento ser amable contigo, te compré comida, te deje quedarte en mi casa, incluso ahora te llevo des interesadamente en busca de tus amigos. ¿Qué es lo que quieres de mi?... Solo pido que al menos puedas ser un poco considerado... Me ves desnudo, me tocas sin mi consentimiento y ahora haces ruido. ¿Qué demonios buscas?
Luffy se quedo callado al escucharle.
-Supongo que es todo... Baja.
-Pero...
-Baja.
-Torao...
-Ahora, largo.
Luffy abrió la puerta saliendo del auto, viendo al médico con una mirada triste.
-Lo siento...
-Sabes he conocido a peores personas, pero en verdad que tu eres la más desesperante.
-Lo siento... en verdad Torao, no quería ser una molestia. Gracias por la comida y el aventó.
Se fue dejando a Law, este miraba como el chico se iba con la mirada baja. Volvió a suspirar, dejando caer su cabeza en el volante y cerrar los ojos.
-Me odiaré después de esto...
Salí de su auto mirando a Luffy.
-Oye, mo... Mugiwara ya...
Al escucharle el menor se sorprendió girándose y verle.
-Sube.
-Pero, dijiste...
-Solo hazlo antes de que me arrepienta.
La sonrisa de Luffy volvió corrí hasta el auto volviendo a entrar, entre risitas colocándose el cinturón. Law lo miro volvió a suspirar cansado, para sonreír levemente. No sabia porque había cambiado de opinión tan solo ver a aquel chico reír, gritar y cantar, se le hacía entretenido.
’
-Entonces vives solo.
-Si.
-¿Y tus padres?
-Murieron cuando era muy joven, corazón se encargo de mi tiempo después.
-Oh... siento haber preguntado...
-Esta bien, hace tiempo que paso. Además es mejor recordar a las personas de buena manera que olvidarse de ellas al evitar el dolor. La vida no es todo felicidad, ni sufrimiento, si no una combinación de ambas, ya depende de cada uno que tipo si la vives de la manera dulce o amarga.
-Nunca vi la vida de esa forma. Es... muy profunda. Torao, eres muy profundo.
-No es para tanto, solo unas cuantas palabras.
-Pero son muy profundas-soltó una risita viéndole con diversión-Por cierto me gusta tu auto. Yo también quiero uno...
-Podrías tener uno.
-Lo intente... le pregunte a mi papá sobre eso y dijo que no... prefiere que ande con un chófer personal, antes de darme un auto propio.
-¿Ah si? Para decirte algo como eso, es que debes preocuparle mucho o que te consciente demasiado.
-Supongo que lo primero... No solo él, mis hermanos piensan que soy muy joven e inexperto para hacer las cosas por mi...
-Vez, no soy el único que cree que eres un niño.
-Pero no soy un niño... Por eso decidí buscar un trabajo.
-¿Y crees que tu papá le guste que trabajes?
-No tiene porque enterarse.
-Con que saliste rebelde-soltó una risa sorprendiendo al menor, quien le miro.
Luffy no quiso arruinar el momento, pero escuchar la risa del mayor hizo sentirle bien. Soltó una sonrisa vaga viendo al frente.
-Sabes Torao, tendré un cadillac 1959 convertible y será de color rojo. Cuando sea así, te invitare a dar una vuelta, ¿qué dices?
-No tengo mucho tiempo libre, niño.
-Eh~ Pero Torao...
-Demonios empezó a llover...
-¿Y?
-Odio la lluvia.
-Yo la amo. ¿Nunca has jugado debajo de ella?
-¿Y por qué debería hacer eso? Tan solo terminarás enfermandote por tu descuido.
-Torao eres muy aburrido, eres como un anciano.
-O tal vez demasiado maduro para ti.
-Aburrido. Ya se, ¿por qué no lo hacemos ahora?
-¿Hacer qué?
-Detente.
-¿Qué? ¿Para qué?
-Hazlo, hazlo, ahora, ahora. Rápidooo-comenzó a jalar el brazo del hombre, quien no tuvo más remedio que hacerle caso al chico.
Ambos quedaron en una plaza de aquella ciudad, no había gente tan solo restaurantes alrededor, la gente intentaba resguardarse de la lluvia, como otra disfrutaba dentro de dichos restaurantes. Luffy salió del auto en el momento que el mayor se detuvo, llamando la atención de este quien sorprendió vio como el chico corría como si su vida dependiera de ello, comenzando a jugar en aquella lluvia, disfrutando de aquel momento extendiendo sus brazos y alzar su rostro cerrando sus ojos, para ver al contrario con una sonrisa.
-¡¡Vamos Torao!!
-Estas loco si crees que yo...-el chico corrió de regreso al auto, pero esta vez abrió la puerta del médico, jalando de su brazo.
-Vamos.
Sin saber la razón Law se dejo guiar por aquella sonrisa traviesa, Luffy sonrío ante esto guiando al contrario por aquella lluvia, viendo como se divertía el chico a su alrededor disfrutando de aquellas gotitas de agua, solo unos minutos bastaron para que ambos se encontraran empapados. Luffy saltaba con felicidad tomando las manos del contrario, moviendo lo de un lado a otro intentando hacer que el médico disfrutara de aquel momento.
Law soltó una sonrisa al ver aquella sonrisa traviesa e infantil, junto a dicha risa. Por primera vez no sentía molestia debajo de la lluvia, tan solo esperaba que esos momentos no acabaran, sin saber la razón de porque quería ver más ese tipo de escenas en el chico.