Capítulo 3
Al día siguiente de la llegada de Draco, Harry preparaba sus cosas en su oficina cuando su rubio jefe entro.
- “Buenos días Harry”- Saludo Draco desde la puerta.
- “Buenos días señor Malfoy”- Dijo Harry sin mirar al rubio por estar guardando unos papeles en su portafolio.
- “Por favor no es necesario el “señor”, no después de… el hecho de que soy el esposo de tu prima”- Dijo Draco sonriendo de una manera que Harry no pudo descifrar.
- “Aun así prefiero cierto margen, ya sabe después de… que es el marido de una prima”- Harry por fin miro al rubio, este solo vestía con unos jeans y una chaqueta informal, lo que hacía que se viera jodidamente bien en opinión de Harry.
- “¿Iras a la entrevista del Tottenham?”-Pregunto Draco tomando una postura más profesional.
- “Si, hoy presentan a su nuevo fichaje”- Dijo Harry tomando su maletín y una chaqueta.
- “Bien, avísame que tal todo lo que vuelvas”
- “Si jefe”- Dijo Harry pasando por al lado de Draco dejándolo solo.
***
Harry salió de la sala de conferencias donde habían presentado al nuevo jugador, todo había ido de maravilla, Oliver Wood era el nuevo defensa del equipo y fue muy amable en responder las preguntas que Harry le hiso.
- “Señor Potter”- Dijo una voz detrás de Harry, este volteo y vio al joven jugador acercarse a él.
- “Harry por favor”- Cuando Oliver llego hasta él se dio cuenta de lo alto que era, y de lo guapo también.
- “Muchas gracias por venir hoy, me gustó mucho la entrevista”- Dijo Oliver- “Quizás encuentre algo extraño lo que diré, pero me encantaría si alguna vez podemos tomar algo”
A Harry le extraño que alguien a quien recién venia conociendo le invitara a beber algo, luego recordó lo que paso con Draco.
- “Me encantaría también, te dejo mi tarjeta y cuando quieras podemos salir”- Harry sonrió pícaramente al joven jugador y salió rumbo a su auto.
***
Al llegar a la oficina Harry fue directo hasta su escritorio, quería comenzar a escribir el artículo sobre Oliver ahora que tenía tiempo y todo fresco en su cabeza. Estaba en eso cuando recibió un mensaje de WhatsApp desde un nuestro desconocido.
- “Espero que la entrevista haya salido bien, Draco”- ¿Cómo se había conseguido su número? Pensó Harry, luego recordó que varias personas del periódico lo tenían así que seguramente el rubio le había preguntado a alguien. Tras responderle un “todo bien” siguió con su trabajo, estaba realmente inspirado tecleando que prácticamente el artículo se escribía solo.
Estaba revisando unas notas cuando Luna entro a su despacho.
- “Disculpa Harry, iré a almorzar ¿necesitas algo?”- Pregunto la joven. Harry miro la hora, eran pasadas las 13:00 horas, no se había dado cuenta de cómo el tiempo había volado.
- “No Luna, gracias ve tranquila”- Dijo Harry.
- “Por cierto el señor Malfoy me pidió tu número, ¿hice bien al dárselo?”- Pregunto Luna.
- “Si Luna no hay problema, ve a almorzar”
- “Gracias Harry, vuelvo en una hora”
La chica salió y Harry volvió al trabajo, en las últimas semanas se había acostumbrado a sumergirse en el trabajo, era su manera para sobrellevar los últimos meses, una manera de olvidar aquello que en fondo de su corazón y alma seguía doliendo. Una vez más fue interrumpido por una voz, esta vez por la de Draco.
- “¿Cómo te fue? ¨- pregunto el rubio sentándose frente a Harry.
- “Bastante bien, solo le faltan unos detalles y se lo envió”- Dijo Harry.
- “Por favor Harry deja el usted, no me gusta mucho la formalidad con la gente que trabajo a diario; y tú y yo tendremos que hacerlo codo a codo, así que por favor solo Draco”
- “Esta bien Draco”- Dijo finalmente Harry, debía admitir que el también prefirió llamarlo solo por tu nombre, llamarlo por su apellido le recordaba que estaba casado y por alguna razón eso le molestaba.
- “Bien ya aclarado ese punto ¿te parece si vamos a almorzar?, vi un lugar cerca y muero de hambre”
Harry iba a rechazar su invitación, pero cuando iba a responder “no gracias” algo ocurrió que su cerebro, pensó una cosa, pero su boca dijo otra.
- “Claro muero de hambre”- Harry se dio cuenta de su error, pero no le dio tiempo de corregirse, pues Draco le sonrió ampliamente y se levantó de golpe.
- “Excelente, yo invito”- A Harry no lo quedo de otra que salir detrás de su jefe.
***
Llegaron a un pequeño buffet que había a tres cuadras del edificio del periódico. El lugar era sencillo pero muy agradable y la comida era excelente, Harry no lo conocía a pesar de estar muy cerca de su lugar de trabajo.
- “Dime, ¿qué tal la entrevista?”- Dijo Draco una vez que les tomaron el pedido.
Harry le relato como había ido todo, le hablo de las preguntas de otros periodistas a Oliver, de sus propias preguntas y le dio una idea general de su artículo.
- “Bien, por lo general me gustan los articulo donde no tengo que hacer muchas correcciones y por lo que me cuentas creo que este será uno de ellos”
Una vez llegados sus pedidos, los jóvenes comieron en silencio. A Harry le sorprendió la sensación de gusto que le generaba estar ahí con Draco, se sentía cómodo e incluso devoró su plato de comida.
- “Esto estaba realmente bueno”- Comento Draco una vez termino con su Risotto.
- “Había olvidado lo que era almorzar como corresponde”- Dijo Harry más para sí mismo que como respuesta a lo dicho por Draco, comentario que no pasó desapercibido por el rubio.
- “¿No me digas que eres un obsesivo por el trabajo que apenas come? Porque si es así me veré en la obligación de arrastraré hasta aquí cada día para alimentarte”- Dijo Draco poniéndose serio.
- “No es eso, solo que últimamente solo almorzaba una ensalada o una fruta, no me daba hambre”
- “Bien, pero tampoco me molestaría venir todos los días contigo a comer”- Dijo Draco dejando a Harry atónito, el rubio sonrió mientras se levantaba y se acercaba a la caja para pagar la cuenta.
- “Gracias por la invitación”. Dijo Harry una vez que el rubio volvió junto a él –“Pero no será necesario que me arrastres, además seguro que Astoria también puede venir contigo”
- “Mmm ella es algo distinta en ese sentido, le gustan los lugares más sofisticados, a mí no me molesta comer en un carrito de comida rápida”
Harry y Draco emprendieron el camino de vuelta a la oficina, cada uno en sus pensamientos. Harry se imaginaba siendo amigo de Draco, conversando con él, saliendo a beber algo, trabajando juntos y esa idea le gusto, pero sus pensamientos tomaron un rumbo distinto, uno donde ambos estaban en una cama, comiéndose a besos, explorando hasta el último rincón de su cuerpo…
La vibración de su celular lo saco de sus lascivos pensamientos justo a tiempo antes de que su excitación fuera notoria, iban llegando al edificio cuando Harry saco su celular y vio un número que no conocía.
- “Disculpa”- Dijo Harry a Draco y se alejó un poco para hablar –“Diga…hola Oliver gusto de oírte…”
***
El rubio alcanzo a escuchar quien había llamado al morocho, decidió entrar al edificio y sentarse en la recepción a esperarlo. Miraba como Harry hablaba animadamente con este tal “Oliver” ¿sería el mismo al que entrevisto? Como fuese, no le gustaba como Harry reía a cada cosa que su interlocutor le decía, apretó los puños y trato de controlar la sensación de celos que crecía en su interior.
La primera vez que había visto a Harry en aquel bar se había deslumbrado con el joven, tenía una expresión triste mientras bebía sentado solo en la barra aun así algo llamo su atención y no dudo al momento de acercarse.
Le agrado tanto el joven que una cosa llevo a la otra y ambos terminaron en su hotel, no fue algo premeditado, algo hizo que se sintiera atraído hacia el morocho y se decepciono cuando a la mañana siguiente no lo vio en la cama. Jamás pensó que un mes después lo vería, que sería el primo de su esposa y además terminarían trabajando juntos.
Ahora estaba ahí tratando de controlar las ganas que tenia de quitarle su celular, aprisionarlo y besarlo hasta que les faltara el aliento.
- “No debiste esperarme”- Dijo Harry cuando termino su llamado y entro al edificio.
- “Quería hacerlo” - Draco se levantó y camino hacia el ascensor.
Harry lo siguió, pero sentía que el joven rubio estaba algo molesto, quizás había pasado algo mientras hablaba con Oliver Wood, pero no le dio mayor importancia, acababa de recibir una invitación a cenar aquella noche y su humor había mejorado considerablemente.
Entraron al ascensor y un segundo después de que las puertas se cerraran Draco empujo a Harry a la pared y lo beso.