Mello se levantó verdaderamente fastidiado hacia la puerta, me levante rápidamente y me coloque enfrente de la puerta mirándolo algo nervioso
-Es Linda, saldré a ver qué sucede
-idiota, acaba de interrumpirnos y me dices que prefieres salir a correrla? En serio? – se escuchaba verdaderamente molesto pero no podía darme el lujo de que descubriera su regalo tan rápido
-no tardare tanto- Salí de manera casi instantánea de la habitación agarrando la perilla fuertemente para evitar que Mello pudiese tirar de ella
-ábreme idiota! No pienso joderte a ti ya tu noviecita!
Mire a Linda algo apenado y ella solo me miraba de manera sorprendida pero no parecía ser por los gritos del rubio al otro lado de la puerta
-¿Qué le paso a tu..-señalo mi cuello y mi hombro a lo que solo tape mi cuello más rojo que antes.-olvídalo, aquí tienes tu obsequio, ten cuidado con las prendas que utilizas en los pasillo, cualquiera puede verlo
-Gr- Gracias!- Linda se dio media vuelta perdiéndose en el pasillo a lo que tome la cajita y la metí en mi pantalón- Mello porque no me dijiste que dejaste marcas tan notorias?!
-Ahora resulta que te molesta, tu novia los vio- mi miraba retador, creo que esa era su mirada común pero sabía que disfrutaba demasiado la situación incómoda en la que me vi envuelto.- no me interesa que ella u otros vean que eres mío.-se dio media vuelta y se dejó caer en su cama- ya no quiero nada, se me quito la inspiración así que apaga la luz ya.
Camine algo inquieto hasta el interruptor apagándole y caminando hasta mi cama
-¿Qué te dio ella?
-¿Qué?
-Te ves tan idiota contestando a una pregunta con otra.- La oscuridad no me permitía ver al rubio pero podía sentir esa gran incomodidad y pesadez cuando alguien te está mirando- Algo te dio ella, acaso se te declaro?
-Qué cosas dices?
-Otra vez contestas a mis preguntas con otra, que fastidio- escuche su colchón rechinar seguido de unos pasos, algo que me genero demasiado temor, tome el regalo y lo avente entre el hueco de mi cama y la pared, sentí mi cama sumirse y luego nuevamente tenía el cuerpo de Mello en la oscuridad encima de mí.
No podía ver nada más que la silueta del rubio por las luces de los faroles del jardín que se colaban por la ventana que daba frente a mi cama, esta vez no se movía, parecía esperar algo y no sabía que era sinceramente. Sentí su mano fría meterse en mi polera causando un escalofrió que recorrió toda mi espalda, sus manos juguetonas pasaban por mi abdomen hasta mi torso y de un movimiento bajaron mi pantalón de pijama y mi bóxer. Me intente incorporar algo sorprendido pero fue inútil, una de sus manos me regreso de nuevo a la cama, vi su cabello bajar hasta mi pelvis y sentía su aliento caliente cerca de mi miembro, era algo tan húmedo que pude sentir mi vista nublarse al sentir la humedad de su boca cubrir mi miembro, era una sensación tan excitante que me sentía extasiado.
-Mhh…Mello…- sus movimientos eran rápidos y su lengua se movía tan juguetona en mi miembro que sentía que en cualquier momento podría estallar. Su boca se detuvo y le vi retirarse de mi miembro algo que me extraño bastante y sentí algo de fastidio por la interrupción.-Mello?- Sentí nuevamente una humedad pero esta vez era su miembro rozando el mío, tomo ambos en sus manos frotándolos rápidamente. Sus jadeos y los míos inundaban la habitación hasta sentir como me venía y su semen gotear en mi abdomen, era tan caliente.
Empecé a intentar controlar mi respiración, nunca íbamos más allá de eso, era una regla de Mello, no enredarnos más allá porque solo era una necesidad que satisfacíamos juntos sin más.- Mello….es hora de dorm..-Sentí sus dedos juguetear con el semen en mi abdomen.
-Matt, piensas dejarme, cierto?- su voz era seria pero casi inaudible
-¿Qué?- escuche una risa burlona tras mi pregunta a su pregunta. De un movimiento ya se encontraba entre mis piernas y ahora jugueteaba con el semen en mi parte trasera, moviendo sus dedos dibujando un círculo alrededor de mi zona. Me ponía nervioso pero la situación me calentaba demasiado, además si interrumpía a Mello seguro me soltaría un golpe.- Qu-Que hac…AHH!- sus dedos entraron en mi ano y se movían en forma de tijeras- Me-Mggh es incómodo…se sentía raro.-Parecía no hacer caso a mis palabras y envestía fuertemente sus dedos en mi entrada.
-Ahgg Me-Mello..- sus dedos iban aumentando después de cada envestida hasta que se detuvo nuevamente
-Matt, es tan rico escucharte…-su voz se escuchaba ronca, jadeante. Era demasiado sexy, sentí como volvía a tomar semen y meter su dedo lubricando mi entrada –eres mío…-sentí esta vez entrar algo más duro y grande. Solté un grito el cual fue callado con los labios de Mello, se sentía tan caliente su miembro dentro de mí que sentía que me desmayaría de placer.
Sus movimientos iban tomando más fuerza y era más rápidos, yo solo me sentía extasiado y no podía más que cubrir mi boca para no hacer tanto ruido. Hasta una última estocada en la que sentí su semen caliente dentro de mí, intente mirar más allá pero me sentía algo mareado. Mello simplemente respiraba de manera lenta y a continuación se incorporó de la cama, buscando su pijama.
-Necesitas ayuda para vestirte?- escuche su voz esta vez nuevamente burlona.
-Ten-tengo sueño…- sentí mis ojos pesados y de la nada ya me había perdido de cansancio.