Cuando los amigos de Rail se fueron, Geo tiró de su brazo y lo dejó sentarse de nuevo en el sofá. Rail también quería irse para volver a trabajar en la posada y sin embargo, era difícil decirlo porque el héroe giró su brazo alrededor del respaldo y se sentó muy cerca de su cuerpo.
El rostro de Geo estaba tan pegado al suyo que Rail se sintió incómodo.
"Rail, entiende, no voy a casarme con una princesa ¿De acuerdo? Y tampoco con alguien noble. Todavía estoy en espera de ser nombrado "caballero oficial" pero, voy a declinar".
"¿¡Por qué harías eso!?"
Geo miró a Rail.
"Porque nada de eso tiene sentido sin ti".
El tallo cerebral de Rail hizo corto circuito. No pudo manejar el significado de las palabras de Geo o contestarle. Solo... Sintió la seriedad de esa mirada en su piel y guardó silencio.
"Pensé que podría ayudarte más si me convertía en aristócrata, tenía un territorio y me hacía rico. Pero cuando tuve la oportunidad de protegerte de aquellos a quienes no les gustabas, no lo hice. Lamento mucho esto."
El Geo de hoy era realmente extraño. Solo estaba diciendo cosas tan inesperadas que Rail ya no sabía ni que decir. En todos los comentarios de Geo, había una sensación de incomodidad y no podía asimilarlo fácilmente. Además, ya que se estaba acariciando alrededor de las sienes una y otra vez como un loco, se dio cuenta de que Geo estaba esperando justo esta reacción. Rail miró hacia otro lado porque no podía verle la cara directamente.
"No, está bien. No hiciste nada malo."
"Se siente como si yo hubiera hecho que dejaras el orfanato. Y la verdad es que eso es muy doloroso porque siempre pensé que íbamos a terminar en un futuro cuidando a los niños juntos."
Rail no dijo nada. Estaba inquieto e incómodo con la nueva apariencia amable de Geo a su alrededor cuando siempre solía parecer más del tipo agresivo.
"Y si te vas y lo dejas todo... Un título y un territorio son solo un obstáculo. Quiero decir, yo pensaba dártelo todo completamente a ti."
Rail finalmente quedó desconcertado ¿Qué estaba diciendo ese loco?
"No, tú no puedes solo... Eres raro... ¿Por qué me darías territorios y dinero o recompensas o esos malditos dulces? ¿¡Qué pretendes conmigo!?"
"Eres muy estúpido".
Geo se rió. Era obvio que estaba enojado pero se estaba riendo así que, sí, la actitud de Geo era inusualmente vertiginosa y no podía seguirle el ritmo.
"Sé que podrías manejar cualquier cosa que te ofreciera".
La mano tosca de Geo tocó el cabello dorado y opaco de Rail. Fue una caricia sorprendentemente delicada, para ser sincero. Le tomó de las orejas con las yemas de los dedos y siguió los contornos de sus huesos hasta atraparle la barbilla.
"Si no puedes volver conmigo, está bien, pero tienes que entender que si ese es el caso... Entonces ya no quiero tener más secretos".
Rail miró los ojos azules de Geo acercándose cada vez más y más y MÁS. Sus largas pestañas negras acentuaban el azul brillante de sus ojos y el brillo que tenía en las pupilas le recordaba al mar cuando reflejaban la luz del sol por la tarde.
Pensó que la cara de este tipo era demasiado buena para ser verdad y cuando se lamentó debido a esto, de repente sus labios se tocaron. Obviamente se separó.
"... Ya sabía que ibas a hacer eso".
"No es porque quisiera. Digo... Solo pareció lo normal".
"¿Que es eso?"
Geo se rió.
Rail no se estaba entendiendo a si mismo.
En el momento en que se dio cuenta de que se trataba de un beso, su cerebro le dijo que "no era bueno", pero su cuerpo pareció aceptar.
Geo lo besó de nuevo.
"¿No lo odias entonces?"
"No, no lo odio".
"Perfecto..."
Geo lo tomó de la cara y miró a Rail directo a los ojos. Rail no quería hacer contacto tan de frente así que se alejó de nuevo. Nunca había pensado en besar a Geo pero, no lo odiaba en absoluto. ¡Y por eso no sabía qué hacer! Sus mejillas estaban calientes y su corazón muy dolorido.
"Tu cabello corto es precioso".
Le gustaba cuando estaba largo, pero le agradaba más que Geo dijera algo bonito de él. Rail pareció completamente abrumado por la dulce atmósfera de la conversación.
"... La señorita me llevó a la peluquería. Me compraron algo de ropa".
"Bueno, ¿Cómo estuvo la obra?"
"¿Eh?"
"¿Viste la obra con esa jovencita, no? ¿Te gustó?"
"Pues…"
Rail trató de recordar la puesta en escena. El tamaño del teatro era impresionante, la gente estaba disfrazada y la turbulenta historia que se desarrollaba en el escenario le quitaba la respiración al público. Había un puesto de dulces allí, pero no pudo comer nada. Los señores de la posada sintieron pena por el hecho de que estuviera tan delgado e hicieron una gran comida en su honor así que, sí.
"Fue divertido"
La pasó muy bien.
"¿Qué más quieres hacer?"
"¿Qué?"
"¿Turismo? ¿Salir a cenar? Es un pueblo colorido..."
"Estaba planeando ir al puerto..."
Después de todo, había llegado a este pueblo porque quería ver el mar. Sin embargo, Rail, que consiguió trabajo enseguida, todavía no había logrado ir a la playa ni una sola vez. El mar era azul y hermoso con solo mirarlo desde la distancia, pero también quería estar de cerca y, tocarlo.
"Entonces ve conmigo".
Dijo Geo, tocando el cabello de Rail de manera juguetona.
"Me alegro de que te veas tan feliz, pero me siento horriblemente celoso por esto. Siempre he querido llevarte a varios lugares por mi cuenta".
Pensando que ya había escuchado eso antes, Rail recordó que Geo lo había invitado previamente a ver la capital real. Estaban planeando ir por medio día con magia de teletransportación pero, después de todo, no pudieron ir porque tres niños pequeños tenían fiebre.
Hasta ahora, Rail había recibido varias cosas de Geo. Pero no solo eso, Geo pudo haber estado tratando de dar más.
"Geo... ¿De verdad no te vas a casar con la princesa?"
"No, quiero hacer eso solo contigo".
Y por supuesto, Rail tenía una cara ligeramente avergonzada debido a eso.
"¿Me... Quieres?"
"Te amo."
Rail se queda en silencio por un momento pero fue como si Geo solo esperara su reacción.
"... Ya veo. Es un desperdicio que ames a alguien como yo".
Geo comenzó a reírse.
Por eso le gustaba Rail.
Rail no dudaba en responderle con picardía, o con palabras de enojo o gentiles. No imponía sus teorías o quería cambiarlo. Aceptaba a Geo justo como era.
"¿...Geo?"
Abrazándole involuntariamente, Rail pareció rendirse ante él. Geo tuvo que tener cuidado de no exagerar para no lastimar el cuerpo delgado y huesudo del hombre que tenía entre sus manos.Y luego Rail, que pareció completamente frágil por un momento, puso sus mejillas sobre los hombros de Geo tal vez porque no tenía ganas de ponerse a pelear con él para que lo soltara.
El amor, doloroso y pesado, se arremolinó en su cuerpo. Siempre había esperado que este día llegara pero pensó que sería cuando sus sentimientos le hubieran llegado hasta a algún lugar de su corazón. Sin embargo, ahora mismo, incluso aunque no estaba seguro de si Rail respondería o no, Geo pensó que nunca más lo dejaría ir.
Fue un pensamiento de un momento en realidad.
"... Cuando te fuiste, yo... Estaba realmente impaciente. Estaba preocupado por ti, eres un estúpido".
La voz baja de Geo, murmurada alrededor de sus oídos, sacudió el cabello de Rail y corrió por su piel hasta hacerle tener cosquillas. Que se estuvieran abrazando tan de cerca estaba haciendo que su pecho hiciera ruido.
"Lo lamento."
"Te di un papel que tenía mi número para cualquier emergencia."
"… Lo lamento."
Sentía que tampoco tenía un argumento que ofrecerle, pero los sentimientos de Geo se estaban transmitiendo tan fuerte en su dirección que Rail se disculpó.
"Bueno, pero como te dejaste la piedra puesta sabía que no estabas en peligro". Cuando sus brazos fueron liberados, Geo terminó por entrecerrar los ojos en su dirección. "Que bueno que te gustara tanto."
"No sabía como quitarlo..."
"¿No?"
Geo utilizó las yemas de los dedos para acariciar la piedra del colgante que estaba en la parte superior de su camisa. Rail pareció tan avergonzado de que estuviera haciendo eso que intentó bloquearle la mano.
"Y además, me dijiste que si alguien que no era yo lo tocaba, iba a morir."
"Oh, ¿Creíste eso?"
"¿Era una mentira?"
"Bueno… No sería mentira porque yo lo hubiera matado."
¿Qué le pasaba a este tipo? En serio.
Rail no tuvo más remedio que quedarse atónito por las palabras de un Geo prometiendo matar a alguien.
"Eres un poco extraño... A veces me tratas como si te cayera mal o algo."
"Es que me gustas, pero eres tonto".
"Jaja ¿Por qué soy tonto?"
"Porque yo también siento que a veces me odias. La mujer del pueblo se porta amable y pegajosa contigo y ya comes todos los dulces que te da. ¡Pero no puedes comer los que yo te doy!"
"¡Eso es porque están hechos a mano! Si digo que está delicioso, lo harán de nuevo y traerán más ¡Geo trae dulces sin importar si me los como o no!"
"Hmm. Y eso no es todo, no utilizas la ropa que te doy pero si la ropa de la mujer".
"¡Tiene hijos de la edad de nuestros niños! Claro que voy a utilizar la suya".
"El punto es, que ese tipo de cosas me enferman".
Geo dejó caer un beso en la cara de Rail, sin importarle sonar exagerado o infantil. Y además, cada vez que eso pasaba, sentía que le gustaba un poco que pareciera actuar así de loco por él. No sabía que le emocionaría tanto que le dijera que le gustaba.
"Y pase lo que pase, no vuelvas a salir solo. Es enserio. Si tienes algún problema, házmelo saber. No me dejes atrás con solo ese papel estúpido que llamas carta".
Dijo Geo, mirando fijamente a Rail a los ojos. La voz de mando y súplica hizo que sintiera que le había hecho algo terrible a Geo.
"No te dejé atrás..."
"Esa no es una respuesta."
"Entiendo, no volveré a hacerlo".
"¿En serio? ¿Lo juras por la piedra que está sobre tu pecho?"
"…Lo juro."
Ya que estaba siendo barrido por la fuerza dulce y contundente de Geo, Rail pareció no tener más remedio que aceptarlo de buena forma.
"Rail..."
Cuando el nombre fue pronunciado por esa voz suave y su cara salió reflejada en sus ojos, las palabras y las acciones más allá de eso parecieron ya no tener sentido.
Los ojos de Geo se acercaron de nuevo así que Rail los cerró.
El beso se repitió hasta que Geo estuvo satisfecho con la forma en la que Rail estaba respirando.