De repente, Noah también se dio cuenta de que algo andaba realmente mal.
Al momento siguiente de que pensó que había un aroma extraño en la habitación, su cuerpo se calentó de una forma terrible y ya ni siquiera podía respirar bien.
"¿Qué...?"
Noah salió tambaleándose del taller, pensando que era similar a la reacción que tuvo cuando fue golpeado por la feromona del Omega en celo que estaba en el puerto. Actualmente, solo había un Omega en la mansión y ese era Luang. Y ya que normalmente el lugar afectado por las feromonas no era tan amplio, eso significaba que en definitiva estaba en el jardín. Sin embargo, existían diferencias individuales en la fuerza de las feromonas. Por ejemplo, las feromonas de Christian había atraído a una gama bastante amplia de alfas así que tal vez, la feromona del niño dragón era todavía más potente.
Noah estaba impaciente.
Se preguntaba por qué no se había dado cuenta de que Luang estaba a punto de entrar en celo cuando, en la época en la Christian venía a casa, había estado captando las señales durante dos días antes. Noah se arrepintió por completo al recordar la forma tan estúpida en la que vivió durante este tiempo. Ni siquiera fue lo suficientemente valiente como para verlo a la cara así que, por eso Noah no notó la feromona que había comenzado a liberar de su cuerpo.
"Maldita sea".
Luang debería estar con sus invitados justo ahora. ¿Estaba en el salón del edificio principal? ¿O en una terraza? Pero aunque pensó que debería darse prisa, Noah extrañamente ya estaba mirando el bosque que se extendía al oeste de la mansión. ¿Y por qué estaba deseando tanto ir para allá en primer lugar? ¿Por qué quería ir? Caminó hacia una pequeña puertecita que conducía directamente al bosque y pensó "¿Qué significa esto?"
Noah volvió corriendo al taller. Golpeó la esquina donde se apilaban todos sus prototipos y barreras mágicas y colocó su "espejo de agua" sobre la mesa. Esta era una herramienta mágica que inventó en el momento en que estalló la guerra con su hermano. Cuando llenaba la superficie de la bandeja con agua y colocaba en ella un montón de piedras mágicas, el escenario que deseaba ver aparecía reflejado ante sus ojos, como si fuera una especie de portal. Y tenía que apurarse porque las feromonas de Luang podían haber llegado hasta la ciudad. Leyó que una vez, un cachorro de dragón había caído en celo en pleno campo de batalla y todas las tropas enemigas reunidas en la llanura fueron intoxicadas por su feromona de tal manera que fueron destruidos sin tener tiempo de hacer nada. Por supuesto, eso solo le hizo tener más miedo. Tenía que proteger a Luang antes de que alguien comenzara a caer por sus feromonas y lo llevara hasta su cama.
Oh, pero entonces Noah recordó lo que estaba pasando ahora. Aaron, quien llegó a la mansión esta mañana, pareció ser la elección de Luang. Y si ese era el caso, tal vez hasta era mejor no intervenir. Noah de todos modos sujetó el bastón que estaba apoyado contra la pared, lo elevó en el aire y cuando golpeó el piso tres veces, comenzó entonces a escucharse un chasquido que hizo brillar un círculo mágico en el centro del espejo. Esto era muy diferente del equipo de teletransportación que utilizaban en la capital real así que podía saltar a cualquier lugar que deseara, incluso sin configurar un equipo de transferencia especial para esto. Golpeando de nuevo el suelo con el bastón, Noah dijo: "Luang" y se encontró de inmediato en los bosques del oeste.
"Lu..."
Ni siquiera tuvo que pensar en cómo encontrarlo. El instinto de su Alfa estaba gritando con fuerza dentro de su pecho.
"Por ahí."
Al final de su campo de visión, había una pequeña casita de vigilancia llena de enredaderas.
"Luang..."
Noah comenzó a correr mientras sostenía su bastón.
"Toc, toc, toc"
Alguien estaba afuera, golpeando la puerta con todas sus fuerzas como si fuera un animal salvaje. Además, cada vez que tocaba, la madera comenzaba a crujir de tal manera que hasta pensó que tiraría las bisagras. Quería alejarse aunque fuera un poco, pero su cuerpo estaba tan cansado que lo único que alcanzó a hacer fue colarse en la oscuridad debajo de las escaleras para taparse los oídos con ambas manos.
Tenía miedo. Estaba temblando.
No sabía quién estaba afuera así que si las puertas fueran destruidas, lo atacarían sin dudarlo. ¡Estaba asustado porque sabía que ninguno de ellos era realmente el tipo de persona que haría eso! Eran las feromonas emitidas por Luang las que iban a provocar una batalla. Todo era culpa de Luang. Solo él, siempre él.
"Toc, toc, toc."
Su vientre estaba caliente, sus piernas estaban goteando y el cuerpo entero le gritaba que buscara a alguien que sostener. Pero, si le mordían la nuca, entonces Luang no sería capaz de conseguir enlazarse con Noah nunca más.
Luang escapó de la realidad y deseó que su prometido estuviera detrás de esta puerta. Entonces, no tendría miedo en absoluto. Es más, estaba seguro de que se alegraría de el sonido de golpear la puerta.
Y cuando la puerta dejó de temblar, pudo escuchar un sonido débil y un tanto descuidado decir:
"¡Lu!"
Luang jadeó. Sonaba como la voz de Noah. ¿Y era posible? ¿Él podía realmente estar en un lugar así? Pero incluso si sabía que era una alucinación, su cuerpo se movió por su cuenta así que saltó a la puerta y quitó el seguro.
Luang se quedó mirando hacia afuera como si no pudiera creerlo.
Imaginó por un momento que eran Aaron o Cody, pero si era Noah. El hombre tiró el bastón que tenía en las manos y se precipitó para abrazarlo con fuerza contra su pecho. Sus labios se pegaron con los suyos en un beso encantador así que, solo apretó su túnica.