Seo-woo y Joo-won no habían tenido sexo desde que comenzaron a salir.
Por supuesto, no fue porque hubiera algo malo en su relación. No era porque hubiesen tenido una pelea, no fue por algo tonto como que estuvieran teniendo una aventura y no fue por el aburrimiento que solían tener otras parejas al enfrentarse al sexo. Toda la familia de los dos sabía sobre la relación de Seo-woo con Joo-won. Y aunque al padre de Joo-won no le gustaba que saliera con un hombre, sin importar que fuera un Omega, de todos modos no era que se opusiera a la relación entre los dos lo suficiente como para que estuvieran molestos al respecto (Al menos hasta donde Seo-woo sabía). Y entonces, podía hasta decirse que no había un obstáculo real para que Seo-woo y Joo-won mezclaran sus cuerpos y confirmaran el inmenso amor que decían tenerse. Era solo que... No se estaba dando el momento. De hecho, estaba más cerca de ser un problema solo de Seo-woo que un problema de su hermoso novio. Porque era natural que un Alfa como él, tan dominante, quisiera abrazar a un tipo como Seowoo, quien era su amante y además, un Omega. Una naturaleza biológica grabada en sus genes antes que una cuestión de gustos, posiblemente. Lo que pasaba era que, la verdad, Seo-woo siempre trataba de ir en contra de su propia naturaleza biológica insistiendo en que lo dejara hacerle el amor en lugar de ser penetrado. Esa era su condición, eso era todo lo que quería. Pero su pareja nunca lo dejó.
Han Seo-woo era un Omega dominante y en esta relación, naturalmente quería ser quien tomara la situación entre las manos. En realidad no había ninguna razón en particular, era solo que... La idea de estar bajo un Alfa le hacía sentir fisiológicamente asqueado. La explicación que daba Seo-woo al respecto siempre era que él también había nacido con un pene perfectamente saludable así que ¿Por qué debería dejar que se le muriera solo porque era un maldito omega? ¿Por qué tenía que ser el pasivo siempre? ¿Dónde decía eso? Además, tampoco le servía mucho que digamos que siempre eligiera hombres Alfa como pareja sentimental. Especialmente a los fuertes, con una alta autoestima y cero ganas de tener una verga en el trasero. Debido a esto, Seo-woo podía tener un trabajo bastante estable y atractivo con cuatro garantías de seguro de gastos mayores y prestaciones sociales y, a pesar de que incluso también era lindo, amable y tenía una personalidad bastante placentera, fracasaba constantemente en cuanto a tener relaciones que duraran más de un mes. Al principio, los hombres que estaban cautivados por el hermoso rostro y el comportamiento amistoso de Seo-woo decían que realmente lo amaban o que harían cualquier cosa por él, pero también eran propensos a mostrar una cara temblorosa después de escuchar sobre lo que quería Seo-woo en el sexo.
En ese sentido, Joo Won era un caballero.
Incluso después de enterarse del gusto inusual de su joven novio, no estaba aterrorizado, no se despidió y no trató de forzar a Seo-woo, a quien no le gustaba ser el de abajo, a dejarse penetrar por él (Por cierto, los ex novios de Seowoo solían ser muy musculosos por lo que normalmente dos o más de ellos intentaron violarlo). Incluso lo animó, diciendo que no rompería con él por esa razón tan estúpida porque realmente lo amaba mucho. Sin embargo, el problema fue que no cumplió específicamente con la solicitud de Seo-woo para empezar. De hecho, Joo Won no era mucho de tener sexo. Era muy tranquilo y ascético desde su nacimiento y pensaba en las relaciones sexuales como una especie de deber para la reproducción más que como un acto para obtener placer. Tal vez incluso si no tenía una relación física con Seo-woo por el resto de su vida, podría vivir feliz, sin ninguna queja, y tan tranquilo como siempre. Él era un hombre así. Esa fue una de las muchas razones por las que le gustaba muchísimo para empezar.
"Pero... Se está volviendo difícil."
Seo-woo suspiró, hundiendose un poco más entre los los brazos de un Joo-won que estaba bien dormido en la cama. Joo Won no tendría ningún problema incluso si no tuvieran sexo jamás pero, desafortunadamente, Seo Woo no era tan fuerte como él. No era como si estuviera realmente loco por follar, o como si deseara sexo para mantener la llama encendida. Era solo que, para ser honestos, Seo-woo quería abrazar a su bonito novio y hacerle el amor. Todos estos deseos eran precisamente porque la otra persona era Joo Won y podía asegurarlo porque nunca en la vida había conocido a una persona que se ajustara tanto a sus gustos como lo hacía él. Porque amaba a Joo Won mucho más que a cualquiera con quien hubiese salido antes. Más que a si mismo.
La cara de Joo-won, que por lo general era roma y dura, apenas se relajaba un poquito cuando era hora de dormir. Seo-woo siempre pensó que era adorable así que, lentamente, levantaba la mano y comenzaba a trazar el cuerpo de Joo Won con la punta de los dedos. Tenía un pecho firme que se movía ligeramente con cada inhalación y exhalación, un puente nasal alto, mejillas suaves, hombros anchos y labios preciosos. Pero cada toque que le daba hacía que la cabeza de Seo-woo se mareara y que sintiera una sensación en la parte inferior del abdomen que era terriblemente peligrosa como para no atenderla. Cerró los ojos con fuerza, y exhaló.
Aunque fuera suyo, no podía tocarlo en absoluto. Y eso apestaba. Se preguntaba si así era como se sentía llegar al infierno al morir.
"¿Debería simplemente atacarlo?"
No era la primera vez que sentía tal tentación sin darse cuenta de que lo estaba pensando pero, como siempre, Seo-woo negó con la cabeza apresuradamente para deshacerse de esos pensamientos y dijo que no. Por supuesto que sabía que si lloraba y se ponía a suplicar, con ambas manos en posición de rezo, y le rogaba que lo dejara hacerlo solo una vez, entonces incluso Joo-won tendría que aceptar a Seo-woo durante la noche y abrirle las piernas. Pero... ¿En serio iba a mostrarle un lado tan lamentable solo para poder coger? Más bien, podría ser capaz de renunciar a esto por el resto de su vida porque Seo-woo no quería cargar el corazón de Joo-won con algo tan estúpido como esto.
Si le daba su cuerpo, entonces debía ser voluntario. Debía ser por amor.
"Que horror. No puedo más con esto..."
Seo-woo suspiró y abrazó a Joo-won un poco más fuerte antes de cerrar también los ojos. De todos modos, esto no se iba a resolver sufriendo en silencio en la madrugada e incluso pensó que si las cosas no funcionaban entre ellos en el ámbito sexual, entonces iba a tener que masturbarse por el resto de su vida hasta que ya no sintiera la mano porque en definitivamente eso iba a ser muchísimo mejor que perderlo.
Pero luego, la oportunidad de superar la situación le llegó de un lugar inesperado.