Era de noche cuando se despertó de nuevo.
Seo-woo estaba acostado en la cama, mirando un techo desconocido pero que ya había visto antes. Al final, involuntariamente sonrió a la mujer vestida de enfermera que estaba sentada al lado de él y se permitió frotarse los ojos un minuto.
Tan pronto como ella confirmó que Seo-woo había despertado, escribió algo en el expediente y se fue, diciendo que llamaría al doctor Park de inmediato para que pudiera hacerle una valoración. El hombre que estaba a su lado no la siguió. En cambio, habló con Seo-woo.
"¿Estás bien? ¿Cómo te sientes? ¿Puedes moverte?"
"Ah... Sí."
Seo-woo parpadeó lentamente. Su lengua todavía estaba un poco torcida, pero no pareció ser un gran problema para la comunicación. Los brazos se le movían bien y podía extender y flexionar sus cinco dedos.
"Gracias. Tú eres el que me salvó, ¿Verdad? En ese momento, no estaba de buen humor así que ni siquiera pude... Muchísimas gracias."
"No. Por el contrario. Lamento los inconvenientes que causó la empresa."
"Oh, no… Está realmente bien. Eso fue... No fue algo de la empresa."
Cuando lo miraba bien, con la mente más despierta, podía decir que no solo se veía muy guapo, sino increíblemente joven. Y si ese era el caso, entonces probablemente no iba a tener una posición muy grande dentro de la compañía. Dar las gracias estaba bien, pero no había necesidad alguna de disculparse por esto. En lugar de eso, ¿No debería mejor interesarse por sus propias cosas antes de hacerlo por la empresa y los problemas que podía tener o no tener? Seo-woo lo miró por un momento, pero a la persona en cuestión pareció no importarle. Preguntó con cuidado:
"Yo quería saber… ¿Has estado aquí desde entonces?"
"¿Perdón? Ah, sí. Me preocupaba bastante la situación así que, quería preguntarte en persona sobre lo qué pensabas hacer..."
El rostro del hombre se endureció un poco así que imaginó que lo que había pasado en la empresa lo iba a meter en problemas a él también. Sin embargo, era difícil saber lo que pensaba porque casi no había cambios en su expresión o en sus movimientos. Y mientras Seo-woo continuaba con sus observaciones a su rostro, él siguió hablando lentamente sobre la situación:
"Discúlpame si parezco muy interesado. Es solo que entiendo que algunos de ustedes, Omegas, que han pasado por esto, a menudo no quieren que el incidente crezca o se publique. Pero debido a que la droga utilizada es ilegal en el país, el director del hospital tuvo que avisarle a la policía. Por ahora, les dije que solo te tratara y no hablara del asunto con alguien más."
¿El médico podía seguir las órdenes de un sujeto que ni siquiera era su familiar? Seo-woo tuvo dudas por un momento, pero se desvanecieron tan pronto como llegaron. Supuso que un intento de violación era más importante que ponerse a pensar en si confiar en él o no.
"No pienso levantar cargos."
"¿Estás realmente bien con eso? Por supuesto, ya que trabajo en la oficina principal estoy seguro de que tomaremos nuestras propias medidas, pero…”
"Soy un Omega. No. Yo sé lo que va a pasar y no creo que sea algo bueno para mí."
"... Entiendo."
Por mucho que deseara matar a ese bastardo, sintió que todo este problema no era algo que se pudiera controlar al tratarse de un Alfa tan importante como lo era el gerente. Seo-woo apretó los dientes y apretó los puños y luego se limpió rápidamente los ojos al sentir que estaba llorando de nuevo. Aunque ahora era de pura rabia. El hombre, que lo miró por un momento, suspiró levemente y asintió con la cabeza.
"Está bien. Pero igual voy a ayudarte tanto como pueda para que no se quede sin castigo. Déjame ver si tengo una de mis tarjetas de presentación."
El hombre, que estaba hurgando en su billetera, le dio una expresión ligeramente avergonzada.
"Perdón. Parece que todas mis tarjetas se acabaron."
"Está bien. No te preocupes por eso... Am, ¿Me puede dar tu información de contacto? Te guardo."
"Sí. Está bien."
Justo antes de que rebuscara en sus bolsillos y le pasara su teléfono, Seo-woo hizo una pausa por un momento para ponerse a pensar: De hecho, ya había hecho lo suficiente para ayudarlo hasta ahora. No solo lo salvó de ese hombre, sino que lo llevó al hospital en su automóvil e incluso esperó a que Seo-woo se despertara completamente en lugar de solo marcharse. Desperdició todo su día debido a él y había una gran posibilidad de que su vida laboral tuviera problemas gracias a esto. No quería ayuda y no necesitaba notificarlo con la empresa. Sin embargo, Seo-woo recibió su información de contacto por una sola razón.
(Dios, es guapísimo.)
Se estaba sintiendo un poco culpable, pero ¿Por qué? Bueno, no había nada de malo en obtener la información de contacto de una persona hermosa de vez en cuando. Además, no lo estaba pidiendo a la fuerza. ¿Y no fue él quien iba a darle su número telefónico primero? Entonces, diciendo que no era un pecado, Seo-woo le pasó su teléfono y dejó que se registrara allí. En la pantalla de su celular había once dígitos, junto con el nombre "Joo-Won Lim", brillando en amarillo.
"Oh, eres Joo-won. Soy Han Seo Woo. No nos conocimos por cosas buenas, pero, por favor, cuídame bien en el futuro."
"Por favor, cuídame también, Seo-woo."
Cuando Seo-woo extendió su mano, Joo-won la tomó casi de inmediato entre las suyas. Eran firmes, cálidas y muy, muy hermosas. Y sintiéndose un poco aturdido por el calor, Seo-woo se estremeció rápidamente y comenzó a toser como para ocultar su rostro enrojecido.
"Por cierto, ¿No deberías estar en el trabajo? Joo Won no será despedido por mi culpa, ¿Verdad?"
"¿Qué?"
Fue un chiste, pero Joo Won preguntó sobre lo que había dicho con una mirada que gritaba no saber nada de lo que le acababa de decir. Y mucho menos sobre lo que contestar. El hombre había estado tan perdido en sus pensamientos que ni siquiera le había soltado la mano. Al final, solo le sonrió:
"Ah, sí. No te preocupes. No podía simplemente dejarte así. Además, si me despiden por faltar, da lo mismo. Estaba pensando en cambiar de trabajo lo antes posible de todos modos. No tienes que preocuparte por esto."
"Joo Won…"
¿Cómo es que alguien podía tener un rostro hermoso y un corazón tan bondadoso al mismo tiempo? En este punto, incluso comenzó a preguntarse si debería estar agradecido de haber podido conocer a una persona así gracias al gerente aunque, por supuesto, ese bastardo no merecía ni un solo pensamiento bueno en su dirección.
Desafortunadamente, el crimen terminó en un intento fallido y el juez, un hombre famoso por ser contundente en los castigos que ofrecía, no logró meterlo en prisión ni un solo día. Aún así, fue un final satisfactorio porque lo habían adjuntado en la lista de "criminales sexuales" del país, perdió su empleo y abandonó la empresa al mismo tiempo en que comenzaban a difundirse rumores terribles sobre él en todos los pasillos. Sin embargo, podía decir que lo único deprimente era que no lograba ver a Joo Won muy seguido y las pocas veces en que sí, era tan rápido como solo decir "Hola."
Ese fue el momento en que decidió aprovechar y comenzar a seducirlo en serio. Pequeñas charlas, pequeños ¿Cómo estás? Y ¿Qué tal te has sentido? Y aunque Seo-woo todavía era un estudiante, con el paso del tiempo, Joo comenzó a abrir su corazón a él y poco a poco...
"¡Encontré el amor de mi vida!"
Seo-woo terminó la historia con una cara bastante orgullosa. Incluso pensando en eso ahora, años más tarde, estaba de acuerdo en que Joo Won fue realmente genial cuando lo salvó. ¡Fue como en una escena de alguna película! Tan inevitable enamorarse de él que incluso se sonrojaba como una chica en su primer amor cuando lo recordaba. Por supuesto, no había notado que Si-young estaba fingiendo vomitar.
"Así que te aprovechaste del asunto del acosador hasta que finalmente obtuviste lo que querías."
"¡Oye! ¿¡De qué estás hablando!?" Seo-woo estaba furioso, así que se había puesto a gritar. "No importa que seas mi mejor amigo, no puedes hablar de eso como si yo quisiera que me acosaran. Cuando estaba en la escuela, realmente yo... Sabes lo mucho que sufrí por eso y de todos modos..."
"Wo, oye. Lo sé. Lo sé. Solo estaba bromeando."
"¡Aún así, hay cosas que puedes decir y cosas que no puedes!"
Lo que dijo debió haber sonado bastante injusto, incluso aunque era una broma. En realidad no lo había pensado, pero ese chico había sufrido muchísimo por culpa de los malditos acosadores que creían que un Omega era solamente un pedazo de carne que habían servido para su propia satisfacción. Algo así como un juguete. Hubo momentos en los que le metieron un ratón muerto en el casillero o un montón de pelo ensangrentado en su buzón. Era obvio que iba a enojarse si hablaba tan a la ligera de ese tema así que Si-young se disculpó con mucha honestidad.
"El parece una buena persona. Eso es suficiente para pensar en casarse".
"¿¡Verdad que sí!? ¡Eso es justo lo que estaba diciendo! Estamos hechos el uno para el otro."
Afortunadamente, Han Seo-woo era infinitamente simple así que Si-young dejó escapar un largo suspiro frente a él, quien había comenzado a reírse y a alardear sobre su novio. Sabía mejor que nadie lo mucho que había estado luchando con sus problemas de citas y aunque su boca pronunciaba muchas burlas y palabrotas en su dirección siempre que lo veía, lo quería demasiado y esperaba lo mejor para él.
(Sin embargo, incluso si ese tipo llamado Joo Won es tan bueno como dice... Un matrimonio es mucho más difícil que solo ser novios. Me pregunto si estará bien.)
Si-young dejó escapar otro suspiro.