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-¿Ren? - Escuchó que lo llamaban y lentamente, con pereza, abrió sus ojos dejando ver sus hermosas orbes doradas
Miró a su alrededor se encontraba en lo que parecía ser una sala de hospital, estaba en una cama, blanca al igual que las paredes, miro sus brazos con unos cuantos parches, toco su frente, la tenía vendada, luego a su lado, un sujeto sentado en una silla, mirándolo con una cara de felicidad.
-¡Ay Ren que bueno que despertaste! -Chilló mientras lo abrazaba efusivamente
-¿Qué mier...? ¡Aléjate! -Ordenó devolviendo con fuerza al sujeto a la dichosa silla. -¿Quién eres?
-¿Qué? ¿No me recuerdas? - Examinó con cierto aire de desilucion
-No...¿Debería? - Preguntó alzando elegantemente una ceja
-¡Pues claro! - Gritó y luego sonrió casi pervertidamente - Esto te hará recordar - Afirmó acercándose velozmente para besar
-¿¡Qué crees que haces?! - nuevamente lo empujó - ¡Alejáte pervertido! ¡Bason! -Llamó y su espiritud apareció pero no tenía a la mano su arma
-¿Eh...? veo que de veras no me recuerdas - bajó la cabeza
-Vete - ordenó el peliviolacio - ¡No quiero verte más cerca de mi enfermo!
-Pero...
-¡Vete! - Ese tipo sí que lo había sacado de quicio
En eso, atraviesa la puerta la hermana mayor de Ren, Jun Tao, una hermosa joven de figura esbelta, cabellos verde esmeralda al igual que sus ojos.
-No me recuerda - murmuro a la peliverde
-Oh...veré que puedo hacer - trato de clamar al otro poniendo la mano sobre su hombro - Ahora sal, hablaré con él - Dicho esto, camino a la salida cabizbaja
-¿Qué me sucedió? - Interrogó a su hermana
-Tuviste un accidente - Se sentó en la silla del lado y siguió - Te diagnosticaron amnesia
-¿Amnesia?... ¿Cómo es posible que te recuerde entonces? -Cuestionó alzando la ceja
-Esa es una parte del problema, la amnesia te borró aproximadamente unos 3 años
-¡¿3 años?!, ¡¿Y lo dices con esa calma?! - Okay el Tao ya estaba fuera de si
-Sí -suspiró- ¿Qué es lo último que recuerdas?
-Umm... veamos -suspiró cerrando los ojos, tratando de hacer memoria - Yoh... ¡sí ese bastardo!... me ganó y... - Abrió lo ojos más de lo normal - ¡¿Qué sucedió con el torneo shaman?!, ¿gané yo no? -sonrió petulantemente
-No hubo rey - negó con un gesto acompañado por la cabeza - Pero, eso no es lo importante Ren - Le tomó la mano y habló con lentitud - Ese chic, que estaba aquí...
-¿El pervertido? - Preguntó con algo de sarcasmo
-No es un pervertido - regañó y volvió a suspirar - Se llama Horokeu Usui, más conocido como Horo-horo
-Que nombre más patético - bufó y se cruzó de brazos soltando las manos de su hermana
-No interrumpas porfavor... bueno, Horo fue tu amigo, se conocieron a traves de Yoh, ¡Ah si! - sonrió - te volviste amigo de Yoh - Noto que su hermano estuvo a punto de interrumpir, pero no lo dejó - La cosa es que, un día, llegaste a china y nos presentaste a Horo como tu novio
-¡¿Qué?! - Exclamó mientras un notorio sonrojo subía por sus mejillas
-Sí - continuo como si fuera lo más natural del mundo - Tu y él han sido novios por unos 2 años y déjame confesarte que hacen una hermosa pareja
-Es verdad señorito
-¡Guárdate tus comentarios Bason no te he dado ese permiso!
-Discúlpeme señorito
-Pero...Jun... - Comenzó a balbucear al recordar lo que recién le había contado su hermana - Yo...novio - asimilaba las palabras, ¡Simplemente no podían ir en la mis frase! ¡¿Él Ren Tao con un novio?! Volvió a esa actitud de indiferencia y superioridad y afirmó - Yo no tengo "novio", no me interesa tal cosa y MENOS con ese fenómeno - dijo apuntando hacia la puerta
-Pero - suspiro por tercera vez - él es...fue tu novio y te ruego hermano - lo miro fijamente - Que no le hagas daño, puede que tu no sientas nada, pero él, él te sigue amando y si lo sigues tratando con esa frialdad acabarás por destruirlo
-No pretendo cambiar mi forma de ser por ese baka, no me interesa lo que le suceda
-Pero Ren...
-¿Y bien? -Cambio el tema - ¿No estamos en China no?
-No, en japón, que quedarás a vivir, como en estos 3 ultimos años, en la pensión Asakura
-¡¿Por qué?! ¿Por qué no puedo regresar a China contigo?
-El doctor recomendó que tengas estímulos sobre el tiempo perdido, pues de esta forma puede que recuperes tu memoria. Esto años viviste allí con tus amigos
-¿Amigos? ¡Já!
-Sí, uff...será complicado explicarte 3 años, se lo dejaré a tus amigos - Poniendo especial énfasis en la última palabra - Además yo debo regresar a China, tengo que solucionar los problemas de la boda
-¿Qué boda?
-La mía con Bruce Lee
-¡¿Te casarás con ese zombie?! - Esto parecía ya una pesadilla
-Sí, ¿tienes algún problema? - Preguntó desafiante la peliverde
-Oh no, había olvidado lo "normal" que es casarse con zombies - Bufó alzando una ceja
-En fin, debes irte a la pensión, Horo te llevará
-¿Quién es Horo? - Preguntó sabiendo perfectamente la respuesta, sólo quería molestar
-Tu novio, ¿recuerdas?
-Ah sí - Contestó lo más indiferente que pudo, mirando hacia la ventana
-Bien, vístete y luego te encuentras afuera con Horo, te debe estar esperando - Se levanto de la silla, abrazó a su hermano y susurro en su oido - Recuerdas, no lo trates mal....Adios
-...
Tardó unos 20 minutos en preparar todo y salió de la habitación, allí, en la sala de espera, de cabeza gacha se encontraba su "novio"... ¡yuck! el simple hecho de imaginarse"algo" le causaba repugnancia
-Muévete baka, llévame donde Asakura - Ordenó neutro
-S-sí - respondió y caminó a su lado, en silencio, decepcionado, triste y enfurecido
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