Ahora, en el alba creciente de este jardín, tus temblorosos párpados se abren.¨
-Que rápido se paso el tiempo... -viendo por la ventana del auto-
-Es cierto, cuando menos te lo piensas casi tres meses transcurren
Tres meses habían pasado, tres meses juntos, hyde había comenzado a sentir mucho amor por gackt, su ¨relacion¨ iba bien, aunque había veces que se incomodaban por las preguntas de la prensa, pero trataban de manejarlo...
Hacia mucho frío, pronto llegaría el invierno, los dos se dirigían en el auto de gackt a una cabaña en las montañas, decidieron pasar ahí la navidad.
-¡¿Qué grande?! -Exclamaba hyde bajando del auto-
-¿Lo crees?
-Cuando dijiste vamos a una cabaña que tengo... yo me imagine una pequeña casa en medio del bosque, no esta mansión
-Tenia que llevarte a un buen lugar
-Pero es demasiado
-Nada es demasiado para ti... -abrazándolo-
-Gacchan... espero no aya nadie
-Solo tú y yo
-Eso me gusta -Besándolo delicadamente-
Esta vez hyde había acordado hacer la cena, trato de esmerarse mucho en la cena, la comida tenía que ser perfecta para su gacchan. El siempre lo sorprendía con grandes banquetes, lugares espectaculares y el quería recompensar lo que gackt hacia por el. Mientras gackt estaba en la sala leyendo un libro, los dos vestían ropas abrigadoras y elegantes
-Gacchan, casi esta la cena
-Que bueno ya tengo hambre
15 minutos después...
-¡¡Esta listo!! -Saliendo de la cocina con un gran plato lleno de deliciosa comida-
-Se ve bien
-Espero sepa como se ve jajaja
-Se que sabrá rico hyde
Después de comer los dos estaban sentados en la sala con una taza de café, gackt seguía leyendo y hyde veía la televisión, en eso sonó el celular de hyde
-¿Quién será?
-No tengo idea
-Ahora no quiero contestar
-Pero, puede ser importante
-Tengo un presentimiento -susurro-
-¿Qué?...
-No nada... -tomo el celular-
-¿Diga?... ¿Quién es?
-Acaso tan rápido te olvidaste de mi
-¿Eh?
-Soy ken... señor hideto takarai
-Ah... lo lamento ken-chan, no reconocí tu voz
-Jajaja... si andas en las nubes por tu gacchan
-Algo así... pero dime ¿Para que me llamaste?
-Bueno, no se como tomes la noticia... para mi es buena espero para ti también
-¿Qué pasa?
-Tetsu volvió...
Tetsu, tetsu regreso... hyde se congelo, siempre había pensado que le seria fácil presentarse frente a el normalmente pero ahora que realmente eso pasaría le dio miedo, tenia miedo de verlo y saber que lo seguía amando, gackt había sido un amante maravilloso para el y no quería dejar de quererlo.
-Hyde... ¡¡Hyde!!
-Eh... si, perdón
-Yuki y yo lo fuimos a ver y lo convencimos para seguir con la banda, y yo quería saber si aun contábamos contigo
-Yo... claro...
-Genial... Entonces estamos listos para el regreso de ¡¡L´Arc~en~ciel!! Queremos reunirnos mañana ¿Te parece?
-Si esta bien
-No vemos mañana -colgando-
-Adiós... -colgando-
Hyde volteo a ver a gackt, el noto que sus ojos ya no demostraban ese brillo de estos meses, ahora parecían los de un niño, un niño asustado, inseguro, gackt sabia que algo andaba mal.
-La banda, ha decidido regresar, tetsu... volvió
Cuando escucho que tetsu había vuelto, se quedo callado viendo fijamente a hyde.
-Me da gusto por su banda
-Gacchan... tenemos que reunirnos mañana
-Bueno entonces creo que es hora de que nos vayamos
Gackt se levanto y se dirigió a las escaleras, pero hyde lo detuvo
-No, el camino no es muy largo, quedémonos hoy... ¿Si?
-Pero...
-Hoy quiero estar contigo...
Hyde beso a gackt, quería estar con el esa noche no para olvidar la noticia de tetsu, sino por que pensaba que tal ves seria su ultima vez juntos, la ultima vez que se entregaría completamente a el, ahora que viera a tetsu no sabría como actuaría. Esa noche tan fría no importo, pues ellos se daban calor mutuamente, sus cuerpos juntos rítmicamente hacia cierto calor un calor agradable e inolvidable.
Un blanco manto comenzó a cubrir el lugar, cambio vendrían, cambios buenos y malos, encuentros, separaciones, confusiones, verdades, razones, sueños, alegrías, muchos sentimientos renacían como flores en primavera o como nieve que caía en noches de tormenta.
Extiendo mi mano blanca hacia ti, en la tenue luz. Mientras toco tus dedos, y te abrazo contra mi pecho, la flor se abre. Gardenia, tus ojos inocentes, toda tú, tan querida para mi.
Te llevare conmigo... suavemente... así... quiero abrazarte.
Gardenia, juntos, el aroma dulce de esta pura flor nos envuelve.Te llevare conmigo... suavemente... así, abrázame de modo que nunca nos separemos.¨