Me culpo...
Me culpo, no por consuelo.
Me culpo, no por ser algo tarde.
Me culpo, no porque sea él a quien eligió.
Me culpo, no por estar quieto y sin hacer algo.
Me culpo...por saber esto...y sonreír estupidamente.
Ya no hay tiempo para decir, "hubiera". Claro que había, pero nunca los hice realidad. Creía, solo yo podría tener esta clase de sentimientos; sentimientos que jamás serían descubiertos, con los que podría morir en paz, aún si apenas rozaban la fantasía.
Y me culpo, por ser lo bastante estúpido para seguir llevando este papel sobre mis hombros.
-Tezuka-lo llama. De nuevo vino. Ahí esta; esperando por él, aún si pone esa cara de incomodidad, yo se esta dichoso.
-nos vemos mañana Fuji-me despide...como a otro amigo más.
-bye bye Tezuka-le respondo alegremente (mentira) al verle ir hasta la entrada. Lo siento, no puedo quitar mi vista de ellos.
El le sonríe, le toma de la barbilla con seducción y Tezuka se sonroja tiernamente, penoso de que los vean; de que vean al gran Tezuka como un lindo cachorrito enamorado. Quisiera yo poder hacerle tener esa expresión.
Ambos entran en la elegante limousine...y yo...quedo aquí, con un doloroso hueco en la garganta y aguantando las ganas de gritar.
Jamás pensé ver fuera tan doloroso.
Y mañana se, que hablar también será doloroso.
...Soy normalmente feliz cuando no le veo.
Pero hoy, estoy almorzando con Tezuka, a pesar de que se su mera presencia, su olor y su voz están mezcladas con las de otro.
-¿ne, a dónde te llevó a pasear Atobe?-le preguntó, queriendo jugar con él.
-fuimos a su casa, es todo-
-hum, que poco informativo (...)-esta bien, tampoco quiero saber.
Tezuka, si tan solo hubieras visto antes; mucho antes lo que siento por ti. Me pregunto que estaríamos haciendo ahora. ¿Acaso me dirías "te amo"? ¿Me permitirías abrazarte? ¿Podría besarte? ¿Jamás tendría la idea de que me eres arrebatado lentamente?
Solo quiero hacerme a la idea, perdona si te uso para sentirme mejor.
-¿sabes?-perdona-jamás pensé serías el novio de Atobe, ustedes parecían tan competitivos el uno con el otro-
-Compartimos pese esa apariencia, el mismo deseo de la victoria-vaya...veo estaba equivocado-...Atobe también conoce el peso de ser capitán, y es alguien que se esfuerza sin quejarse en lo absoluto. Yo diría-te sonrojas un poco ante lo que me dirás. Te detesto-que es una estrella-
Que bueno que me lo dices.
Ahora procurare tampoco ver el cielo nocturno, que antes creía era la única conexión contigo.
-eres suertudo-rió (¿será que es lo único que se hacer?) Me miras interrogante-no dudo habrá cientos de chicas deseosas de poder ganarse el corazón completo del idol de Hyotei, y has sido tu el escogido-
-Fuji...-que lindo te vez y escuchas cuando usas ese tonito suave y dulzor para regañar-yo también lo escogí a él-pero no ahora.
-claro-
Esta es la vida que yo elegí.
No puedo culparte ni a ti, ni a tu novio perfecto por ello.
Yo calle, creyendo cientos de cosas.
Creyendo que tu algún día te darías cuenta de mis sentimientos, y tu intrigado empezarás a pensar en mi todos los días para finalmente darte cuenta me amabas también. Vendrías a mi lado y jamás me dejarías.
Tezuka...¿Por qué no pude salvarme de esto?
Tal vez si te hubiera dicho lo que sentía por igual, si hubiera peleado por ti contra ese niño rico, si hubiese sido sincero.
¿Me hubieras elegido?
Yo se que si.
-Fuji-kun-
-hola Atobe, ¿buscas a Tezuka?-obvio que si, ¿qué mas harías aquí en la salida?
-si-respondes con tu altanería de costumbre, bien, tampoco voy a pelear batallas innecesarias-ni yo tardo tanto-
-bueno-serás quien seas, pero no tienes derecho-tu tienes a Kabaji-kun que hace las cosas por ti-de quejarte de mi (no lo es) Tezuka-en cambio, Tezuka lo hace solo-
-vamos, no te enojes-tarado-eso no le va al tensai de Seigaku-tomas un respiro y miras directamente-recuerda tu Capitán no es ningún robot que trabaje en automático; el también necesita de alguien que le ayude, pero es-tus labios se relajan muy suavemente al formar una sonrisa que me deja perplejo. Podría...podría decir es de...ternura-más orgulloso que yo-
...Claro...yo (no) sabía eso.
Prosigues-¿no es tierno?-no sé...-te da la sensación de querer protegerlo de todo-de ti en especial-al lindo Kunimitsu-chan-no me creo esto por un segundo más. ¿Por qué le ha llamado por su primer nombre?
Ideas, miles, cientos de imágenes cruzan por mi mente en este instante. Todas; sucesos donde Atobe le llama así tiernamente. Todas, me aterran y me lastiman.
-Keigo..oh, Fuji-
¿Tu también?, Tezuka, ¡¿acaso tu también lo llamas por su primer nombre?! Bueno...entonces háganlo frente a otros!!, ¡¡dejen de hacerlo a escondidas entre ustedes, como si fuera un secreto intimo!! Por dios, ¡son solo nombres, es todo!
-que perezosos eres Tezuka-le digo con la fachada de buen amigo; tomándome del brazo de Atobe. ¿Lo sientes Tezuka? ¿Lo sientes? El dolor de que alguien más toque a la persona que amas-has dejado a Atobe-kun aquí esperando-
Pero no es a mi a quien respondes, es a él-te dije tenía que pasar al salón de maestros-no percibo reproches en tu voz.
-ya lo se-Atobe se suelta de mi-pero querer verte antes que ellos, es inevitable-
Tezuka sonríe como si hubiera escuchado lo más tierno en su vida mientras agacha la cabeza, dejando mechones caer sobre su rostro. Y se esta feliz de que le digan eso; asi como Atobe que de alguna manera...me hace sentir excluido de todo esto.
Justo ahora, hay algo que solo se trata de ellos. Lo veo y lo siento.
Al fin lo veo...
-vamos-
-nos vemos Fuji-
-claro, cuídense-
La limousine arranca, el sonido del motor se va desvaneciendo entre el camino, lejos, contigo, lejos.
Y yo...juro ya no quiero ver. Me duele....¡¡Maldición!! ¡¡TEZUKA, ME DUELE!!
..¿Por qué...porqué soy tan idiota?
Al fin comprendo porque pasa esto.
La agonía de lo que se jamás podría darte, de lo jamás obtendré de ti, de lo entupido que eran mis sueños y esperanzas. De que yo creía, aún ciegamente...los conocía a ambos, de creer podía predecir lo que pensaban y hacían. Jamás me puse a pensar que había más halla de sus rostros y su forma de ser ante los demás.
Atobe es todo lo que yo no soy.
El que preferiría irse, antes que serte una molestia.
El que tuvo más agallas a tu inesperada respuesta.
El que conoce tus imperfecciones, sabiendo no estas obligado a los demás...a saber lo que sienten o piensan.
El que tu...(me da miedo decirlo) desde antes, ya habías elegido.
El estomago me da vueltas dolorosamente haciendo doblegue las piernas.
Quisiera vomitar este nudo que oprimen mis manos ahora.
Comienzo a reír. Rió no por ironía; rió...por culpa, por no saber que más hacer.
Finalmente unas cuantas lágrimas caen de mis mejillas; lo se, porque siento su humedad mezclada con el aire de mis risas sin sentido.
-¿Fuji?-
-¡¡Fuji!!, ¿qué te pasa?-
-¡hey Momo, algo le pasa a Fuji, ven!-
-¡Echizen, danos una mano!-
No..por favor, no vengan chicos.
-Fuji, ¿qué te pasa?, ¿qué te duele?-Taka..san.
-Fuji-
-¡Fuji-sempai!-Momo...Eiji
-Fuji-sempai...qué...¿qué sucede?-Echizen...
Ayúdenme...
-¿qué necesitas?-
Levanto la mirada hacía el mismo camino donde ya no hay limousine. Donde ya no hay más razones para fingir me siento feliz por ellos dos. Donde perdí todo, menos...ser el mejor amigo.
-Tezuka...-lo necesito.
FINAL
-ne, Tezuka-
-¿Qué sucede?-
-el viento esta soplando-
-...-
-¿jugamos un rato?-ya se te tienes que ir-antes de que venga por ti Atobe-kun-
-esta bien-
El viento esta soplando; no se que quiera decir, pero al menos...concédeme el momento de estar a tu lado, de quererte a mi único modo que queda. Aún si este cariño se limita a una cancha verde con franjas blancas.
Soy feliz.
-bye bye Tezuka...hasta mañana-
Fin del set.