Capitulo 1: ¡¿Remus Lupin enamorado?!
- Bien, descartemos a las chicas con las cuales no tenemos posibilidades, Padfoot–Mando una voz masculina.
Se trataba de un muchacho de estatura mediana, cabello negro azabache, ojos color avellana y con gafas: James Potter, era su nombre. También respondía al apodo “Prongs” que sus amigos le habían otorgado.
- De acuerdo –Acepto otra voz.
Se trataba del otro muchacho con el cual James hablaba.
Un chico bastante alto, cabello negro azulado y ojos azul claro: Sirius Black. También llamado “Padfoot”.
Ambos muchachos estaban sentados frente a la chimenea de la sala común de Gryffindor y en medio de ellos, fotografías en movimiento de muchas y muchas chicas, todas guapas.
- Deberían empezar por el grupo de Evans, ¿no creen? –Comento otra voz.
Un chico de cabellos rubios y ojos celestes, con cara de niño se les acerco curioso para saber que hacían los otros dos: Peter Pettigrew, o también llamado por sus amigos “Wormtail”.
- Wormtail, tiene razón –Comento Sirius mirando las fotografías de las chicas, en busca del supuesto grupo. - ¡Oye!, aquí falta una –Gruño Sirius al no encontrar la fotografía de la pelirroja del grupo.
- ¿Cuál? –Pregunto James inocentemente.
- La de Evans, regrésala, Prongs. Me costo trabajo sacársela –Mando Sirius enojándose.
- Yo no tengo nada :) –Se burlo el chico y se metió a la boca la fotografía que tenia guardada. Sirius y Peter pusieron cara de asco.
- Eres tan…asqueroso, Prongs, a veces –Comento Sirius tomándose la cabeza con una de sus manos en forma de resignación.
- Entonces… ¿puedo quedármela? –Pregunto James sonriente.
- Claro que si, no quiero nada que tenga tus babas –Contesto Sirius asqueado.
- Gracias, Sirius, te quiero un montón –Exclamo James tirándose sobre Sirius para besarlo, este le agarro el rostro y lo alejo del suyo.
- Basta James, aléjate de mí…-
- Beso, beso, beso…-
- ¡Ahh! Aléjate, James, no te atrevas. ¡Ahhh! –Gritaba Sirius ante el hecho de que James lo quisiera besar.
En eso, el retrato de la señora gorda se abrió, dejando entrar a un chico de cabello castaño y a una chica pelirroja, ambos chicos eran prefectos y volvían de su ronda nocturna; y ante la escena se sorprendieron y se molestaron a la vez.
- Beso, Sirius, solo uno –Decía James sin percatarse de que los estaban mirando.
- James, Basta. ¡Ahh! –
Peter que observaba la escena riendo a carcajadas, se percato de la presencia de la pareja y se dejo de reír para empezar a preocuparse por la reacción de los chicos.
- Prongs, Padfoot…-Los llamo Peter y los otros lo miraron para darse cuenta de la presencia de la pareja. Inmediatamente se separaron y James se paro para acercarse a la chica.
- No es lo que crees, Lily, Sirius y yo solo jugábamos… ¿cierto Sirius? –Explico James a la chica, la cual se adelanto sin escucharlo.
- No me importa para nada las estupideces que haces, Potter, pero trata de hacerlas en tu habitación, no en un lugar publico –Contesto la chica y subió hacia su habitación claramente enfadada.
- Lily…-Susurro James entristecido.
Lily Evans era una chica hija de padres Muggles. Era Pelirroja de ojos verde esmeralda, muy guapa. Y James gustaba de ella desde que la había conocido.
- Eso te lo tienes merecido, Prongs –Gruño Sirius recogiendo su colección de fotografías que habían quedado todas esparcidas.
- Lily tiene razón –Gruño el muchacho castaño claramente molesto.
Remus Lupin, prefecto de la casa de Gryffindor de 6º año junto a Lily Evans.
Era un muchacho castaño y ojos marrones, que a pesar de que siempre sonriera, tenía un deje de triste en sus ojos resultado de su enfermedad, la licantropía.
Remus cada día de Luna llena se transformaba en un feroz hombre-lobo sediento por carne humana.
Pero gracias a sus amigos, James Potter, Sirius Black y Peter Pettigrew, aquellas noches llenas de dolor eran acompañadas por su sincera amistad, ya que, James, Sirius y Peter, se habían transformado en animagos para poder acompañarle.
- Prongs empezó –Acuso Sirius a su amigo que estaba en una esquina haciendo círculos con su dedo índice.
- Lily se enfado conmigo…Lily se enfado conmigo…Lily se enfado conmigo…-Decía James triste mientras Sirius se enfadaba.
- Eso te pasa por tener la maldita manía de tirarte sobre todos para besarlos –Gruño Sirius, pero no fue escuchado. - Prongs, ¿me estas escuchando? -
- Mi Lily…Mi querida Lily se enfado conmigo…Lily se enfado conmigo…Mi Lily…-
- Al parecer no –Contesto Peter a Sirius.
- Mejor me voy a la cama, estoy cansado –Comento Remus caminando hacia las escaleras.
- Moony, ¿no nos vas ayudar? –Pregunto Peter y el chico se volvió.
- ¿En que? –Pregunto Remus curioso.
- Sirius esta viendo a las chicas con las cuales tiene posibilidades –Explico Peter y Remus frunció el ceño.
- No me interesa, que lo haga con James – Contesto Remus y subió a la habitación.
- ¿Estas bien? –Pregunto Sirius a James mientras le acariciaba la espalda.
- Si, después de todo no tengo posibilidades con ella –
- Si las tienes –Sonrió Sirius. - Espera un tiempo más y Evans terminara saliendo contigo –
- Ojala, fuera así –
- Vamos, no te desanimes, Prongs –Sonrió Sirius y le mostró su colección de fotografías. - Sigamos en lo que estábamos –Añadió y James asintió con la cabeza.
~
- Despertad, despertad ya – Mandaba Remus abriendo las cortinas de las camas de sus compañeros de habitación, los cuales no parecían muy contentos por ello.
- Remus, no fastidies tan temprano –Dijo Peter desde su cama.
- Sirius, despierta –Mando Remus abriendo las cortinas de la cama del chico, pero este no se encontraba en ella. Lo que molesto al muchacho castaño.
- Sirius no durmió en la habitación, Remus, no sacas nada con despertarlo –Comunico James parándose de la cama.
- Bien, si se mete en problemas no me responsabilizare –Gruño Remus y se fue a la cama de Peter para despertarlo.
- Si, si estoy despierto Remus –Decía Peter tratando de despegarse de la almohada.
- Bien, me voy a desayunar sin vosotros –Dijo Remus enfadado y se marcho de la habitación.
“¿Por qué me preocupo tanto por él si ni siquiera duerme en nuestra habitación?, Sirius es un tonto, quizás con quien se fue a divertir en la noche, alguna chica descerebrada como le gustan a Sirius…”, pensaba Remus mientras bajaba la escalera enfadado.
“Si…alguna chica, después de todo a Sirius le gustan las chicas”, pensó tristemente mientras se apoyaba contra la pared.
Y como Remus había pensado, vio aparecer por el retrato de la señora gorda a un Sirius un tanto desordenado y a una chica rubia de 5º, con la cual venia jugueteando.
Remus se enfado aun más al verlo y paso a su lado sin dirigirle palabra alguna, aun que Sirius lo hubiese saludado, el chico lo quedo mirando un tanto molesto por la actitud de Remus.
- Me voy a dar una ducha preciosa, después te veo – Sonrió Sirius alejándose de la muchacha.
- Claro, Sirius –Sonrió la chica de 5º y subió a su habitación.
- ¿Qué le pasaba a Moony? Ni siquiera me saludo –Se quejaba Sirius mientras subía la escalera, al llegar a su habitación y abrir la puerta vio a James y a Peter correr de un lado para el otro desesperados.
- ¡¡Mis cuadernos!! –Exclamaba James corriendo con una mochila en donde estaba metiendo todas sus cosas.
- ¡¡Los libros!! –Exclamo Peter corriendo hacia su velador en busca de sus libros.
- ¿Qué les pasa? –Pregunto Sirius.
- ¡¿Qué que nos pasa?! –Exclamaron James y Peter a la vez.
- Si, ¿qué les pasa? Hoy no tenemos clases, es domingo –Explico Sirius y Peter y James se miraron, Sirius se coloco a reír ante la equivocación de sus amigos.
- Remus…-Gruñeron ambos muchachos enojados.
~
Por la espalda de Remus recorrió un cosquilleo extraño, pero no le llamo mucho la atención.
- Hola Remus, ¿qué tal estas? –Sonrió una muchacha de cabello castaño y ojos celestes mientras se sentaba frente a Remus.
Alice Diggory, que era como se llamaba la muchacha tenía la misma edad de Remus y era amiga de Lily.
- Estoy bien, gracias por preguntar –Sonrió Remus, cuando alguien lo abrazo por la espalda.
- Rem, mi querido Rem, cuando será el día en que dejes de parecer un niño y madures a todo un hombre – Dijo la voz de otra muchacha.
- A…Arabella –Exclamo Remus.
Arabella Figg, una muchacha de cabello rubio y ojos azules. La mayor del grupo de Lily, era mas madura que sus amigas y las cuidaba y sobreprotegía bastante.
- No lo pongas nervioso, Arabella –Mando Lily sentándose junto a su amiga Alice. Arabella soltó al chico y se sentó a su lado.
- ¿Estas solito, Rem querido? –Pregunto Arabella curiosa al no ver cerca, a los amigos de Remus. - ¿Y tus amigos? -
- Se quedaron en la cama –Respondió Remus nervioso ante la cercanía de la chica.
- Menos mal, son un fastidio –Exclamo otra chica mientras se sentaba al otro lado de Remus.
Susan March, también pertenecía al grupo de amigas de Lily, aunque era la mas joven de todas.
Tenía el cabello negro oscuro y los ojos negros, además de tener apariencia de niña.
- Su…Susan –Exclamo Remus.
- ¿Y? cuéntanos Rem, ¿nos haz estado engañando con alguna otra chica? –Pregunto Susan acercándose a Remus el cual se sonrojo, pues estaba siendo prácticamente acosado por las dos chicas que estaban a sus lados.
- No, yo no…-
- ¡Ahh!, eres tan tierno, Rem –Exclamo Arabella mientras abrazaba a Remus hacia su pecho, el cual se puso colorado.
- ¡Remus! –Gruñeron James y Peter. Mientras que Sirius se sentaba al lado de Susan para abrazarla, la cual se molesto claramente.
- Bien, se acabo la fiesta –Comento Arabella soltando a Remus, el cual estaba como tomate.
- Vamos nos chicas –Mando Lily y Susan soltándose de Sirius se alejo de ellos junto a Alice y Arabella.
- Son tan amargadas –Comento Sirius molesto mientras se servia desayuno.
- Remus fuiste muy cruel al hacernos creer que habían clases – Reclamo James mirándolo con fingida tristeza.
- Si, no tenias por que levantarnos temprano si era domingo –Añadió Peter.
- No fue mi culpa que ustedes creyeran que habían clases, yo solo los desperté –Gruño Remus enfadado al notar la presencia de Sirius a su lado.
- Pues al despertarnos tan temprano nos hiciste creer que teníamos que ir a clases- Reclamo Peter.
- Si, además llegamos aquí y te encontramos ligando con mi Lily y las amigas de esta –Apoyo James enfadado.
- Lily no te pertenece James, además ellas se me acercan no es mi culpa –Contesto Remus.
- Si, Remus tiene razón, Prongs. El no tiene la culpa de que sea tan lindo para esas amargadas –Dijo Sirius pasando un brazo sobre los hombros de Remus, el cual se molesto.
- No me toques –Gruño Remus y se alejo.
- ¿Qué le pasa? Ni siquiera me saludo en la mañana –Gruño Sirius enfadándose.
- Remus se despertó de mal humor, Sirius, no le molestes –Explico James, pero frunció el ceño al notar que Sirius forjaba una sonrisa maliciosa.
- Sirius no lo molestes, por favor, por lo que más quieras, si lo molestas se desquitara conmigo –Suplicaba Peter ante la sonrisa de Sirius.
- No te preocupes, Worms, yo te protegeré –Sonrió Sirius mientras le desordenaba el cabello.
~
“Soy un tonto, Sirius me estaba abrazando y reaccione de esa forma, de seguro creerá que estoy enfadado con él”, pensaba Remus apoyado contra la pared.
- Hola Rem –Sonrió Susan al chico, el cual la miro.
- Hola, ¿qué quieres, Susan? –
- ¿Me preguntaba si tenias problemas con los deberes de Pociones para mañana? –
- No…-
- ¿No? –
- ¡Ahh! ¡No los he hecho! –Grito Remus.
- ¿Qué no haz hecho, querido Rem? –Pregunto Arabella acercándose.
- No ha hecho los deberes de Pociones para mañana –Respondió Susan mirándola.
- ¡Remus Lupin no haz hecho los deberes de pociones para mañana! –Grito Lily sorprendida.
- Tranquila Lily, los haré ahora mismo –Sonrió Remus.
- Más te vale Remus Lupin no convertirte en un merodeador como Black y Potter- Lo regaño Lily.
- No te preocupes –Sonrió Remus moviendo sus manos.
Arabella se le acerco y lo tomo por la barbilla, provocando que Remus se sonrojara.
- Remus Lupin, ¿estas enamorado? –Pregunto la chica interrogante.
Remus se puso colorado.
- Di en el blanco –Susurro Arabella.
- ¡¿Qué?! –Gritaron Lily y Susan.
- No, te equívocas, como voy a estarlo –Explico Remus mirando a las chicas que fingían llorar desconsoladas apoyándose la una a la otra. - ¡Que les dije que no estoy enamorado! –Gruño Remus.
- Remus Lupin, te lo advierto ahora, no permitiré que nadie te robe tu corazón sin antes tener mi consentimiento, ¿entendiste? –Dijo Arabella y Remus asintió con la cabeza.
- Pero no lo estoy –Insistió Remus.
- Si claro, Remus Lupin, el más responsable de todos los prefectos…-
- ¡Oye!, yo también soy responsable, Arabella –Gruño Lily.
- Lo siento, Lily querida, de los prefectos hombres, que haya olvidado su tarea no puede decir otra cosas que haz caído en las redes del amor, y que estas enamorado –
- ¿Quién esta enamorado? –Pregunto Sirius acercándose a las chicas junto a James y a Peter.
Continuará…