Por siempre en mi corazón
*Introducción:
Era un tormentoso lunes, la lluvia caía de lado haciendo incapaz a mi paraguas protegerme de esta y mojándome desde las caderas hacia abajo. Jamás podré olvidar ese día, el día en que se marcho sin saber que yo lo amaba profundamente. Tenía solo 11 años de edad y Sirius era mi mejor amigo, y al que amaba secretamente.
Una semana antes de iniciarse junio, Sirius me dijo que a su padre le habían ofrecido una oferta mejor en Estados Unidos y que se mudaría en menos de un mes, desde ese momento he odiado este mes y ese día, el 23 de mayo, cuando el me lo anuncio con cierta tristeza. El realmente me quería, pero yo...yo lo amaba.
Sirius se marcho el mismo 23 de junio, no se si fue coincidencia o arte de magia, como aborrecí aquellos días, pues simplemente me lo hacían recordar, recordar su mirada triste y sus labios abriéndose y serrándose mientras murmuraban un eterno Adiós.
Mis 11 años realmente fueron traumatizados por la perdida de mi mejor amigo, después nadie fue como el, nadie lo superaba, me rodee de amigos cuando ingrese al instituto masculino donde mi abuelo y mi padre habían estudiado, y también donde mi sexualidad fue definida y me di cuenta que era Gay.
No fue muy placentero el darme cuenta que me gustaban los hombres, pues venia de una familia muy conservadora y era hijo único, se lo dije a mi madre y esta me dio su apoyo y ha sido mi confidente durante todos estos años, mi padre no lo sabe, pero se perfectamente como reaccionaría si llegara a saberlo, simplemente me mataría.
Allí conocí a un muchacho que supo llenar el vacío que me había dejado Sirius, pero nunca lo pudo igualar, Sirius era único e irremplazable. Severus, mi nuevo amigo era muy agradable conmigo, a mi me gustaba, no lo negaba, me atraía y al parecer, por lo que se rumoreaba, yo también le gustaba.
Intente reemplazar a Sirius con el, salíamos juntos, lo pasábamos bien, pero Sirius era un fantasma en mi mente tanto como en mi corazón, lo que no me permitía rehacer mi vida amorosa por completo, me di cuenta que solo lo amaba a el y que no seria feliz si no estuviese con el, si no fuese Sirius solo mío, mío y de nadie mas.
Con todo esto transcurrieron 7 años, en los cuales no volví a saber nada sobre mi querido Sirius, por lo cual perdí toda esperanza de que regresara a Japón y el y yo estuviéramos por fin juntos otra vez.
Para cuando cumplí los 19, ya no quedaba ni una gota de esperanza de que Sirius volviese y ya llevaba 1 año de noviazgo con mi amigo Severus, era una relación placentera, cuando estaba con el me olvidaba de Sirius o mas bien trataba, después de todo realmente deseaba olvidarlo por completo.
Pero tal perfección y belleza humana me es difícil de olvidar, simplemente difícil, Sirius se me metió en el fondo de mi alma y no me lo puedo quitar de allí, pero no puedo seguir albergando esperanzas, me debo de hacer el animo de que el jamás estará para mi, después de todo ese adiós que murmuro, fue un eterno adiós, un adiós que perdurará por siempre.
Fin de la introducción...Susan Black.