Llego el lunes, eran las 17:00hs de la tarde, o sea una hora antes, para que entráramos a la escuela, y lo único que sabia de el, era que me había llamado a casa el domingo, y como no estaba, no había vuelto a llamar, pero si se arrepintió, al fin y al cabo me izo feliz, por un día. Aunque no me importaba nada, no se porque estoy tan nervioso, al punto, de no poder ni siquiera preparar los útiles, me tiemblan las manos, y estoy heladísimo. Salí a las 17:30hs de casa, con el corazón en un hilo, pase a buscar a Romina, y seguimos, sin antes indagar en como estuvo el fin de semana, y lo único que recibió, fue una mueca, y mis hombros encogiéndose, porque a partir de hoy iba a saber si el fin de semana, en algo me ayudo, o me jodio la vida. Voy llegando a la entrada de la escuela, y no había pronunciado palabra alguna, desde que salí de casa, es más tenia los nervios de punta, y no sabia que hacer, más que seguir fumando. Puedo ver el matiz y el reflejo de tu sombra, al acercarme al portal que nos llevaría a un día de plena tortura, tal vez para los dos, y al entrar, todo parecía normal, como un día cualquiera, me senté en un banco de los del fondo, es mas solo deje caer mi cuerpo. Y luego entro Gastón. Y también se sentó en uno de los pupitres del fondo como siempre a dos lugares a la izquierda del mió, la clase parecía ser de lo mas normal, y me encantaba tu jueguito sucio, de mirarme y morderte el labio, o pasarte la lengua por encima de los labios, y llamarme, aun sabiendo, que no podía levantarme enfrente de la clase, y destrozarte la boca de un beso. Y en eso que doy vuelta a mirar al profesor de nuevo, estaba Mariana, mirándome, y me izo una seña, como preguntando ¿que fue eso, entre tu y Gastón?, solo me reí incontrolablemente, hasta que todos se dieron vuelta a mirarme, y como no podía con la tentación, me pare y pedí permiso, para ir a los sanitarios, y luego, al llegar al baño, me empecé a reír, y me apoyo sobre la pared, prendiendo un cigarro, que una mano me saco y puso en sus labios, y al levantar la cabeza, era Gastón que me había seguido, “¿de que te reías, mi amorcito?”, “acaso no te diste cuenta que Mariana, se dio cuenta de lo que asíamos”, “y bueno, ahora se va a dar cuenta, que yo ya tengo dueño”, “que tarado que sos en cuanto se entere que el amor imposible de medio curso, me pertenece solo a mi, va ha poner el grito en el cielo”. Luego me agarro de mi remera, y me empujo dentro de uno de los cubículos, y posteriormente, cerro la puerta tras de mi, para apoyarme en la pared del fondo, y sacarme la remera, les aseguro que la excitación no podía ser mayor, y con mis manos, lo atraje asía mi boca, para que me besara, correspondiendo, a lo que me pedía en el curso, “así que te gustan los jueguitos sucios, ahora vas a ver”, esta vez era yo quien lo empujaba, contra una de las paredes, y le sacaba la chomba, que traía puesta, para luego empezar a besar su cuello, y bajar, por el mismo, hacia su pecho, y pasar por sus abdominales, terminando en su cinturón…, me subí nuevamente, hacia su boca, y empezó el descontrol de manos y bocas, hasta que yo termine subido sobre su cintura, rodeando su cuerpo con mis piernas, y el dejándome marcas por toda mi nuca, luego, quiso desprender mi pantalón, pero hay le di un alto, y le dije que parara, porque acá si que nos podían ver, y si nos descubrían, seguro que nos echaban de la escuela, levante mi chomba del suelo, me la coloque y luego salí con Gastón, tomado de mi mano, le di un beso antes de salir de los sanitarios, y caminamos hasta el curso, mientras íbamos caminando por el patio, nos encontramos con la preceptora, y nos pregunto que hacíamos, y con cualquier excusa, la mandamos a otro lado, pero sin antes decirnos que teníamos muy lindas remeras, y al mirármela, me di cuenta que traía puesta la de Gastón, y el la mía, solo atine a reírme, y cuando el se percato de eso, se saco la suya y luego yo ice lo mismo, mientras nos dirigíamos al curso. El paso primero, y luego yo, que iba arreglándome la remera dentro del cinturón, lo mismo que el se iba acomodando el pelo. Pero al entrar, todos nos miraron, y uno de los chicos tuvo que acotar algo: “Gastón tienes un chupón (se le denomina a una marca en el cuello, por efecto de un beso muy fuerte), en el mismo lugar que Gasper”, y todos se empezaron a reír, y solo agache la cabeza, para no ver a nadie y me senté en mi banco lo mismo que Gastoncito. Pero las bromas no pararon hay: “acaso se estuvieron, comiendo en el bañito, los dos”, “Gasper sos un capo, te comiste al rey del curso”, “y bueno chicas se van a tener que aguantar por que el chico de ojitos celestes, ya tiene dueño, y no es mas ni menos que su mejor amigo, Gasper”, “es cierto chicas Gasper les gano de mano”. Luego, levante la mirada y estaban todos mirándome a mi y a Gastón, y mis mejores amigas hasta hoy, me comían con la mirada, pero en cuanto las bromas se pusieron pesadas, salto Gastón: “acaso alguno tiene problemas, con eso, por que si a mi no me importa, a ustedes tampoco tiene por que”, se izo un silencio, espeluznante, en el curso, y yo solo lo mire a mi rubio, a los ojos, “Gaspii, vamos”, y me pare y salí con el del curso. Caminamos con el silencio sobre nuestras espaldas, hasta llegar, a un banquito sobre la pared donde termina la escuela, y nos sentamos, Gastón saco un cigarro, y lo prendió pero todo en silencio, y sin pronunciar palabra,
-“Gastón, ¿me podes decir que te molesto?, ya que no me gusta verte así”
-“es que no sabia lo que se sentía que te molestaran, por ser homosexual, y yo me lo puedo bancar, pero no me gusta para nada que te molesten, ni que te reprochen nada a ti”
-“viste que siempre has sido tan bueno, es lo que mas me gusta de ti, y gracias por todo lo que estas haciendo por mi”
Luego apoye mi mano, sobre la de el, y nos miramos fijamente, hasta que parece que te quebrabas, y te pusiste a llorar sobre mi hombro, y yo te abrase cruzando mis brazos, sobre tu espalda, y te acurrucaste sobre mi.
-“Solo tu, no necesito mas, te adoraría, lo que dura la eternidad”. En eso que levantamos la mirada, teníamos a todo el curso alrededor nuestro. “¿y ahora que quieren, no tuvieron bastante ya, o acaso no les alcanzaron las bromitas?”, estaba totalmente caliente, y para que el supuesto angelito se enojara, hay que hacer meritos.
-“no, no, no, solo queríamos pedirle disculpas a los dos, por que si eligieron, estar los dos juntos, no somos nadie para cambiarlo. Pero Gasper tu sabes, bien que las chicas te van a agarrar a palos”. Ja mira vos, todos disculpándose, por lo de recién, y aceptándolo, es mas que suficiente, aparte la carita de Gastón, al escuchar a sus amigos hablar se le ilumino la carita, y con eso me alcanzo, y me basto, para seguir un día más. Luego todos empezaron con el cuestionario de cuando habíamos decidido ponernos de novios, o que había pasado en el baño, pero las chicas se retiraron, hasta mi mejor amiga Romi, que hasta el final del día no me había dirigido la palabra. Luego llego la hora de irse, y salimos, y me despedí de Gastoncito, en la puerta con un abrazo, y un beso en la mejilla, y me fui caminando, ya que mis supuestas amigas, las que me acompañaban, todos los días hasta mi casa se habían borrado, y Marco se acerco, por atrás, y le ofreció a mi rubio llevarlo a su casa como siempre, y luego me saludo a mi, y me puso una mano en el hombro, “Gaspii, no te preocupes por Romi, ya se le va ha pasar, están celosas solamente”, y emprendí mi viaje caminando, sin antes sentir por atrás, un grito “Fantasmita sos un capo”, y al mirar, era uno de los pesados del curso. Luego de caminar y caminar, bajo el manto nocturno llegue a mi casa, con la cabeza, en otra cosa, y pase derecho a mi dormitorio, prendí la comp.., y me largue sobre la cama.
Sabia que me tenia que quedar despierto toda la noche para hacer una entrega en el colegio el día después, pero no tenia ni siquiera ganas de sentarme frente a un monitor durante tantas horas, y mas después del día agitado que había tenido. Mi cabeza rondaba en el mismo problema, ¿Por qué a mi mejor amiga la noticia le había molestado tanto?, se que a ella mucho no le gustaba Gastón, y si en todo caso estuviera enamorada de mi, me lo podría haber dicho en cualquier momento, ya que no teníamos problema en sentarnos y hablar cualquier tema con ella. O acaso no fue la noticia de que Gastón y yo estuviéramos saliendo, sino que no fui yo el que la dio por aviso, nunca me percate, de contarle ,yo lo que estaba pasando, se tuvo que enterar por otros, o sea que se debe estar creyendo que no la considere lo suficientemente importante tal vez para mi, que todas las veces que le decía: ¿que haría si no te tuviera, Rominita?. Debe estar creyendo, que la cambie por otra persona más importante, aunque nunca lo aria.
Apresuradamente, me fui de mi casa una hora antes, para llegar a casa de Romi, y no dejarla ir, sin hablar antes con ella, golpee la puerta, y no me atendió nadie, o sea como siempre tenia la música a todo volumen, y me decidí a tocar el timbre, y hay si salio a atender ella. Parada desde el umbral de la puerta se quedo tiesa mirándome, sin replicar palabra alguna, como esperando que yo dijera algo que la sacara de ese momento en el que no había podido mover un músculo.
-“¿acaso no te parece que tenemos que hablar?, mi Rominita”
_”esta bien, si es lo que quieres”
Pase a su casa siguiéndola hasta su comedor, y allí me senté en una silla, aunque pronto me pare porque los nervios eran mas fuertes que yo
-“primero que nada decime, ¿que te molesto?”
_”acaso nunca te diste cuenta, o no te parezco lo suficientemente importante”
Obvio que me di cuenta por donde venia la mano, estaba celosa, y se le notaba, era en una palabra lo que me había estado imaginando toda la noche, así que decidí molestarla un poco
_”perdón pero, ¿estas celosa?, o acaso tienes algún problema, porque yo siempre se que te guste”. Parecía que no entendías nada, ya que tu cara de asombro al oírme decir tantas sandeces te dejo helada, así que decidí seguir con el jueguito.”es que acaso no te parezco lindo, o nunca me lo ibas a decir”, y en la cara se me notaba la carcajada que ya no me podía bancar, y tu estabas a punto de explotar de risa, hasta que no pude mas y me empecé a reír descontroladamente, y tu me seguiste…
Luego de una charla de 30 minutos pudimos volver a ser amigos, bueno es una forma de decir. Le conté como había pasado todo, y no podías creer que Gastón, el chico al que nunca se le podía cruzar la palabra amor por los labios, ya que le causaba calosfríos, se hubiera jugado tanto por alguien como yo, o en general, que por fin se hubiera podido enamorar, sin ningún problema, y si les soy sincero a mi también en un punto me pareció algo raro, ya que como todos decían, el era el chico que nunca se iba a enamorar, que nunca duraba mas de tres días, o una semana como máximo con una persona, pero que mas da, yo por mi parte voy ha hacer lo posible por poder ser feliz lo que dure esto, y jugarme un todo por el todo, ya que nunca voy a poder ser tan libre, y disfrutar este amor, que por poco alejo de mi sin darme cuenta, y pierdo en un jirón del destino.