Ese día estaba solo en casa, era su día libre y la mayoría había aprovechado para ir a ver a sus familiares o, como Kangin y Kibum, a emborracharse, excepto Yesung, al pobre le había tocado ir a sustituirle a Kiss the Radio, Leeteuk podría haber ido solo, pero un poco de compañía siempre viene bien.
Suspiro resignado, tirado en el sofá miraba la tele mientras cambiaba aleatoriamente de canal buscando algo con lo que entretenerse. Al cabe de un rato apago el televisor y lanzo el mando a la mesa con frustración. No entendía aun porque no había podido ir al programa de radio, ¡solo era una muñeca!
-¿Qué haces aquí?
Eunhyuk dio un brinco en el sofá, no había escuchado al mayor entrar, miro de reojo al recién llegado un poco molesto y levanto su muñeca escayolada en señal de respuesta. Heechul lanzó una de sus sonoras carcajadas al ver la cara de Eunhyuk, se le veía realmente molesto.
-A mi no me hace gracia, no estoy enfermo. ¿Y tú que haces aquí? ¿No te habías ido de compras con Hangeng? ¿Qué llevas ahí?
A Heechul no le daba tiempo a responder las preguntas del menor. Eunhyuk señalaba con su mano buena la bolsa que Heechul, inconscientemente, había intentado ocultar a la vista del menor desde que lo vio tumbado en el sofá. Al no escuchar respuesta alguna, se levanto con la clara intención de quitársela. El pelirrojo dio un paso atrás sonrojándose cuando se percato de las sonrisa picara del menor.
Aunque intento resistirse, EunHyuk logro quitarle la bolsa. Heechul notaba como sus mejillas adquirían un tono escarlata más brillante si podía, viendo a un asombrado Eunhyuk que lo miraba totalmente desconcertado después de mirar el interior de la bolsa.
-Te dije hace tiempo que quería hacerlo, tu no quieres, pues tendré que hacerlo solo.-respondió el mayor recuperando su preciada bolsa. Intentaba esquivar la mirada del menor. Aprovechó que la neurona de Eunhyuk aun no había procesado la información para marcharse del salón. Entro en su habitación y dio un portazo debido a la prisa.
Eunhyuk aun no podía creérselo, era cierto que Heechul aprovechaba cada momento que estaban a solas durante estas dos últimas semanas para pedírselo, pero nunca le tomo en serio. Realmente el mayor quería hacerlo, y, por lo visto, solo con él. En aquel momento se arrepintió de haber juzgado mal al pelirrojo.
El castaño siguió el camino que había recorrido Heechul momentos antes. Estaban solos en casa y se aburría mucho, ¿Qué había de malo en darle un gustazo al mayor? Al menos tendría algo con lo que entretenerse un rato.
-¿Hyung?- murmuro asomando la cabeza por la puerta. Heechul le miro desde la cama y respondió de manera seca.-Venia a decirte que si.-Heechul no pudo evitar mirarle sorprendido.-Vamos a hacerlo.
-¿Y ese cambio de actitud? Llevas dos semanas rechazándome.-se levanto de la cama y se acerco a EunHyuk.- ¿De verdad quieres?- el castaño asintió sonriendo- ¿Y tu muñeca?
Eunhyuk le lanzo una mirada asesina que hizo sonreír a Heechul, desde el accidente, no dejaban que Eunhyuk hiciera nada. En realidad era porque todos sabían lo torpe que era el castaño con cualquier cosa, pero con la mano así era aun peor si cabía. No obstante, todos le decían que era para que se mejorara antes. Se notaba que el pequeño estaba desquiciado por tanta inactividad.
-Vale, vale. Estas en perfectas condiciones para hacer cualquier cosa.-dijo mientras cerraba la puerta de la habitación.-Vamos a empezar ya, me daría mucha vergüenza que llegasen los demás y nos viesen.
Eunhyuk desvió la mirada sin poder evitar un leve sonrojo, a el también le daba vergüenza.
* * *
Yesung sonrió maliciosamente a Leeteuk mientras le hacia señas para que se acercase en silencio. No entendía muy bien que quería pero se acerco igualmente. Había sido un día agotador y estaba deseando tumbarse en la cama, Yesung estaba asomado a la habitación que compartían Leeteuk y Heechul. Al acercarse escucho unos gemidos de ¿Eunhyuk? Vio como Yesung sacaba su móvil y hacia un par de fotos. Cuando Leeteuk se asomo no pudo evitar soltar una risita.
Heechul, en una de sus visitas a la cocina, había dejado accidentalmente la puerta del dormitorio abierta. No se había dado cuenta y dudo que lo hiciera, pues estaba concentrado en Eunhyuk, en aquellos momentos tumbado en el suelo, y el pelirrojo sobre él. Eunhyuk dejo escapar un gemido de dolor. Heechul sabia que le estaba haciendo daño y eso le ponía aun más nervioso, le había costado mucho que el castaño accediera a eso y si le dañaba no iba a querer hacerlo nunca más con él. Suspiro intentando controlarse. Continuó masajeando el pecho del menor. Acerco sus labios a los del menor, sin poder evitarlo volvió a ser brusco. Ante una última mueca de dolor en la cara de Eunhyuk, el mayor no pudo resistir más. ¿Cómo podía estar haciéndolo tan mal?
-Lo-lo siento, no puedo seguir.-intento incorporarse pero Eunhyuk lo sujeto, la mirada perpleja del menor hizo que sus mejillas le hicieran la competencia a su cabello.-No puedo seguir así, me pones muy nervioso. Y te estoy haciendo daño.
-No se porque te pones así, es la primera vez que haces esto, es normal que seas un poco brusco. Si no continuamos no vas a aprender nunca.
-Ya… pero.
-He dicho que vamos a seguir. Ya que has empezado lo terminas.
Heechul suspiro, ese pequeñazo tenia razón.
Eunhyuk evitaba por todos los medios que ningún sonido escapase de sus labios, pues sabia que desconcentraba al mayor. Al mirarle no pudo evitar sonreír, verlo tan concentrado haciendo algo era muy raro, por lo general siempre tan alocado y bromista, verlo tan serio era pero que muy raro. El pelirrojo sudaba aun más y su respiración era entrecortada.
De repente escucharon a alguien reírse a sus espaldas, ambos se quedaron estáticos mirándose con una mueca de horror en los rostros. Ninguno de los dos se atrevía a mirar hacia la puerta, no querían saber quien los había descubierto.
Los intrusos se dieron cuenta de que habían sido descubiertos. Yesung pensó que seria más divertido adelantarse.
-No se corten, muchachos, continúen con lo que hacían.
Heechul finalmente se giró y vio a Leeteuk apoyado en el marco de la puerta con una sonrisa divertida en el rostro. Yesung se acerco hasta la cama y cogiendo el libro que había sobre ella les miro. Esa maliciosa sonrisa que mostraba no auguraba nada bueno. Iba a recordarles esa escena durante mucho tiempo.
Eunhyuk se levanto rápidamente buscando su camiseta para cubrirse, evitaba que los mayores viesen su sonrojado rostro. Por otro lado Heechul se sentó en el suelo y miraba a Yesung. Si las miradas pudiesen matar, hace buen rato habrían enterrado al moreno.
Yesung ojeaba tranquilamente el libro. Eunhyuk salio corriendo de la habitación para refugiarse, seguramente, al baño. Yesung levanto la vista del libro y, viendo las cariñosas miradas de Heechul, se marcho del dormitorio sin poder borrar aun la sonrisa de sus labios. Al pasar por el lado de Teuki, le entrego el libro. Leeteuk lo observo con curiosidad.
-¿Por qué no le pediste ayuda a Yesung? Sabes que el es muy bueno en la materia.-pregunto Leeteuk sin poder apartar la vista del libro.
-¿Qué habría conseguido con eso?
-Que no te sacase fotos mientras lo hacías, ahora mismo las estará pasando al ordenador.
La cara de Heechul era todo un poema. Ese muchacho era siempre tan expresivo, después de unos segundos mirando a Leeteuk, al fin pudo reaccionar y salio corriendo en busca de Yesung, probablemente para matarlo.
Lo ocurrido no había conseguido quitarle el sueño a Leeteuk, que se tumbo en su cama aun con el libro en las manos. A lo lejos se oían los gritos furiosos de Heechul y la risa de Yesung. Al momento se unió la voz de Kangin, seguramente el y Kibum acababan de llegar. Esta noche le dejaba el puesto de líder a Kangin. Se giró con la clara intención de dormir, después de lanzar el libro recién comprado de Heechul a la otra cama. El libro de primeros auxilios fue a parar al suelo, pero a Leeteuk ya no le importo.
FIN